«Buscando Principalmente la Prosperidad Interior» (3 Juan 2)

«Buscando Principalmente la Prosperidad Interior»
(3 Juan 2)
«Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que
tengas salud, así como prospera tu alma»
INTRODUCCIÓN
Con estas palabras el apóstol del amor se redirige a un personaje particular llamado Gayo.
No era un símbolo, sino una persona literal a la cual Juan le presenta sus buenos deseos.
Que importante sería que en nuestros días que tan siquiera entre cristianos siempre
deseáramos buenas cosas para los demás, lo cual evitaría tanta murmuración, chisme y daría
lugar al amor, el perdón y la bondad.
Es por ello que en esta ocasión estaremos tratando el tema: «Buscando Principalmente la
Prosperidad Interior»
Considerando los buenos deseos del apóstol Juan a su amigo. Ejemplo que nos debe de
ayudar a tener esos mismos deseos hacia los demás. Pero el mensaje de esta ocasión no se
enfocando en esos deseos, sino en las diferentes clases de prosperidad. .
I. PROSPERIDAD EN TODAS LAS COSAS (v.1a)
«Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas…,»
A. Significado.
1. La palabra prosperado viene de la palabra griega εὐοδόω-euodoo, que significa: Guiar
por el buen camino, irle bien a uno, prosperar, realizar una ganancia.
2. El diccionario da el siguiente significado de la palabra prosperidad: f. Bienestar, mejora
de la situación económica o social. Éxito o desarrollo favorable de alguna cosa.
B. Muchos son los que buscan esta clase de prosperidad.
1. Desde tiempos antiguos el ser humano ha querido y buscado la prosperidad en todas las
áreas. Lo cual le ha llevado hasta la ambición y de comer actos contra el prójimo.
2. La Biblia da exhortaciones claras en contra de aquellos que desean la prosperidad y
caen en la avaricia. La palabra avaricia aparece 16 veces aproximadamente. Ejemplos:
Éxodo 18:21 «Además escoge tú de entre todo el pueblo varones de virtud, temerosos de Dios,
varones de verdad, que aborrezcan la avaricia; y ponlos sobre el pueblo por jefes de millares, de
centenas, de cincuenta y de diez»
Lucas 12:15 «Y les dijo: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la
abundancia de los bienes que posee»
Colosenses 3:5 «Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas,
malos deseos y avaricia que es idolatría»
II. PROSPERIDAD FÍSICA (v.2)
«…y que tengas salud…,»
A. Falta de Salud física es un mal común también en nuestros días.
1. Hay quienes opinan que Gayo estaba enfermo y que por eso oraba Juan por su salud. Pero,
como hace notar Stott, lo que de aquí se deduce es una «garantía bíblica para desear tanto el
bienestar físico como el espiritual de nuestros amigos cristianos»
2. Sabemos por el mensaje bíblico que las enfermedades son consecuencias del pecado
original (Gn.3, Rom.5:12)
3. También hay otras fuentes de las enfermedades que son:
a. Maldición por la desobediencia (Deut.28:58-59)
b. Satanás (Hch.10:30, Lc.13:11-17)
c. Uno mismo.
B. Todos deseamos el bienestar físico.
1. Desear estar sanos, libres de toda enfermedad no es egoísmo. Recordemos que debemos
amarnos a nosotros mismo.
2. Pero recordemos que también el amor hacia otros se demuestra cuando deseamos su
bienestar físico y oramos por ello.
C. Por el poder de Dios podemos tener prosperidad física.
1. La Santa Palabra de Dios nos garantiza sanidad a través del sacrificio de Jesús
(Mat.8:17)
2. También por medio de la oración se puede recibir la sanidad (Stg.5:14-15)
3. Son muchas las Escrituras donde se garantiza la sanidad, solamente tenemos que
desarrollar nuestra fe (Mat.17:20) y dejar que la voluntad de Dios se haga (1Juan 5:14)
III. PROSPERIDAD INTERIOR (v.3)
«…así como prospera tu alma»
A. La naturaleza del alma.
1. La palabra griega para alma es: ψυχή–psychē, que significa:
a. Ser interior, corazón, mente; facultad psicológica (Hch.4:32; Ef.6:6; He 12:3)
b. Vida, alma, el yo (con frecuencia se lo traduce por el pronombre personal); aquello
que está en alguien para dar vida y diferenciación (Ro 11:3)
c. Persona, como ser vivo (Hch.2:41; Ro 2:9)
2. En su sentido más amplio el término alma significa la vida constituida en un ser
individual, así “un ser viviente” (Ge.2:7).
a. Como tal se usa de la totalidad del ser, incluso lo material (cuerpo) y lo inmaterial
(espíritu) Relacionado con este uso es el uso para la persona (como sustituto del
pronombre personal), i.e., “mi alma” = “yo” o “yo mismo.”
b. También se usa frecuentemente para la vida del individuo (i.e., al morirse el alma parte,
Ge.35:18), o para varias expresiones de un ser viviente (i.e., deseos, apetitos, emociones).
c. Mientras que la persona como un alma (Ge.2:7) incluye tanto el cuerpo como el
espíritu, a veces se refiere al alma como distinta del cuerpo (Mt.10:28) y que puede
existir temporalmente en este estado de separación (Ap.6:9).
B. Prosperar en nuestro interior es lo mejor.
1. Cuando nuestra alma esta prosperando, significa que estamos creciendo espiritualmente.
2. Muchas de las cosas materiales las necesitamos, pero que prospere nuestra alma es
algo indispensable.
3. Recordemos las sabias palabras de nuestro Señor Jesucristo en Mateo 6:31–34:
«31 No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos? 32 Porque los
gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. 34 Así que,
no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal»
C. Los medios para que prospere nuestra alma.
1. La Palabra de Dios. Cuando somos hombre y mujeres de la Palabra de Dios.
Mateo 4:4: «El respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra
que sale de la boca de Dios»
Hebreos 4:12: «Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos
filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los
pensamientos y las intenciones del corazón»
Salmos 19:7: «La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová es fiel,
que hace sabio al sencillo»
2. La oración. Cuando oramos con fe por nosotros y por los demás
Filipenses 4:6–7: «6 Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de
Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. 7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo
entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús»
Colosenses 4:2: «Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias»
3. La alabanza y adoración. Cuando hay un espíritu de verdadera alabanza y adoracion.
Salmos 25:1: «A ti, oh Jehová, levantaré mi alma»
Salmos 34:2: «En Jehová se gloriará mi alma; Lo oirán los mansos, y se alegrarán»
Salmos 103:1-2: «1 Bendice, alma mía, a Jehová, Y bendiga todo mi ser su santo nombre. 2
Bendice, alma mía, a Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios»
4. El poder del Espíritu Santo. Dios a través de su Espíritu Santo prospera nuestra alma.
1 Tesalonicenses 5:23: «Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser,
espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo»
CONCLUSIÓN
Para concluir. Veamos los tres siguientes puntos importantes:
1. Es importante que tengamos las cosas materiales necesarias para vivir.
2. Es importante que deseamos ser sanados y que también los demás lo sean.
3. Pero lo más importante es que nuestra alma prospera.