PROYECTO DE DECLARACIÓN INICIATIVA: Senador David Rolando Dos Santos. TEMA: 30 de noviembre. Día Internacional De Lucha Contra Trastornos Alimenticios FUNDAMENTOS Honorable Cámara: Elevo a consideración el presente proyecto, mediante el que se propone declarar de interés de esta Honorable Cámara, El Día Internacional de Lucha Contra Trastornos Alimenticios (30 De Noviembre), aspirando a acrecentar la conciencia en torno a la trascendental temática. Los trastornos alimenticios son enfermedades que tienen mucho que ver con la imagen y percepción de uno mismo. Las más conocidas son la anorexia y bulimia, pero en la actualidad se han encontrado muchas más enfermedades derivadas de estas. Los trastornos de alimentación han existido siempre y hay descripciones de ellos en muchos relatos de la Historia. El origen del síndrome en estos trastornos del comportamiento alimentario está relacionado con la biografía personal, el contexto familiar, los acontecimientos vitales y las presiones socioculturales. La bulimia y la anorexia son trastornos cuya base se encuentra en alteraciones psicológicas que puede llegar a tener graves repercusiones biológicas y fisiológicas. Desde la ausencia de menstruación, caída del pelo, sequedad en la piel, alteraciones gastrointestinales o complicaciones endocrinológicas, hasta serios problemas cardiovasculares y renales. En la actualidad muchos medios de comunicación y la cultura hace que nosotros obedezcamos un mensaje, el de estar delgados/as, la imagen como sinónimo de éxito, auto control y eso lleva a que muchos lleven a cabo dietas, que si no se controlan sin un profesional al lado lleven a un trastorno en la alimentación. La anorexia y la bulimia son patologías psiquiátricamente muy graves que pueden llevar hasta la muerte. La anorexia es el producto de la no ingesta de alimentos por el miedo a engordar a pesar de que el peso este por debajo de los índices normales. En la bulimia es un sentimiento de culpa o vergüenza, con atracones, vómitos, actividad física en exceso. Esto lleva a una depresión, rechazo, la persona se auto exige, es crítica con ella misma, busca la aprobación, el reconociendo de los demás, la culpa, la baja autoestima. En la ortorexia, lo que importa es la calidad del alimento, no tanto la cantidad. Así que una persona con este trastorno, no comerá no por no subir de peso, sino porque es de dudosa procedencia el alimento, no es sano o simplemente es considerado un alimento que no favorece la salud de la persona. Los comedores compulsivos coinciden con los síntomas de la bulimia, en el sentido de que existen atracones, pero se diferencia de la bulimia porque, ellos no vomitan, ni hacen nada por contrarrestar todo lo que ingirieron en un atracón. Sienten culpa por comer mucho, pero no hacen nada al respecto. También se caracterizan porque son hostiles al relacionarse con su medio. Existen ciertas características familiares en las personas que presentan estos trastornos: - Familias que conceden una importancia extrema al cuidado de la imagen externa. - Madres y padres que tienen expectativas demasiado altas para sus hijas e hijos. - Miembros familiares con problemas de alcoholismo o depresión. - Malos tratos, abuso sexual o abandono. - Antecedentes de anorexia o bulimia en hermanas o hermanos. Los factores precipitantes hacen referencia a aquellas circunstancias estresantes que hacen que se desencadene la enfermedad. Uno de los conceptos fundamentales que hay que tener claros para entender este tipo de trastornos, es que se trata de una enfermedad y no de una simple manía o capricho de quienes la padecen. El gran error que se comete es creer que las personas caen en esta enfermedad por gusto y quienes están a su alrededor no logran entender cómo pudo pasar. El punto entonces es entender que el tema pasa por el cómo desde niños, las mujeres, los hombres y adolescentes, van manejando las distintas experiencias de la vida. Para prevenir o tratar a tiempo esta enfermedad, es importante que la sociedad tenga claro los aspectos y conductas que delatan a las personas que la padecen, así como también tomar conciencia de que con prohibiciones o retos no se cura, y que requiere de un tratamiento integral que consta de nutricionista, psicólogo o psiquiatra y equipo médico, para que pueda existir un buen diagnóstico. La familia no es culpable del trastorno, pero debe implicarse en la detección del problema, en el tratamiento y, por supuesto, es el fundamental agente preventivo. No sólo se trata de estar pendiente de los comportamientos de las personas con la comida, sino saber qué aspectos en su vida pueden estar resultando difíciles. Es importante no apresurarse a quitar importancia a sus comentarios y entender que sus preocupaciones son muy importantes para ellos. Es conveniente facilitar la expresión de los sentimientos, incluidos los negativos. Si no se hace, se favorece a que se expresen de manera indirecta, por ejemplo, a través de la comida. Para algunas personas comer de forma compulsiva o no comer llega a convertirse en la única forma de expresar emociones totalmente normales como el enfado o la ira. También las madres y los padres deben preguntarse si no tienen una actitud muy crítica que pueda estar afectando la autoestima de los hijos, o si se establecen límites y normas adecuados a la edad de sus hijas e hijos, o si estos son escasos o bien excesivos, impidiendo su autonomía y maduración. Los trastornos alimenticios se pueden tratar exitosamente y se puede restablecer un peso saludable. Mientras más pronto se diagnostique y se trate la enfermedad, es más probable que haya mejores resultados. Por todo ello, es que solicito el acompañamiento de mis pares para la aprobación de este proyecto en los siguientes términos: POR ELLO LA HONORABLE CAMARA DE SENADORES DE LA PROVINCIA DE CORRIENTES DECLARA: Artículo 1°: De interés de esta Honorable Cámara, el 30 de Noviembre, Día Internacional De Lucha Contra Trastornos Alimenticios. Artículo 2°: De forma DADA en la Sala de Sesiones de la Honorable Cámara de Senadores de la Provincia de Corrientes, a los………………..….. del mes de…….…………… de dos mil trece.