Mercados Libres Productores y Artesanos en Locales Municipales Artículo 1º.- Las municipalidades del país podrán establecer, en las cabeceras de cantón, un mercado libre para uso exclusivo de los productores agropecuarios y artesanos o de las cooperativas de esas actividades, con el objeto de abaratar los costos para el consumidor eliminando la intervención del intermediario. Artículo 2º.- Declárase de interés público el establecimiento de mercados libres y de utilidad pública los terrenos o edificios que sean necesarios para su ubicación, los cuales podrán ser expropiados de acuerdo con los trámites que al respecto establece el Código Municipal. Artículo 3º.- Los productores agropecuarios, los artesanos y las cooperativas de éstos, que deseen usar las instalaciones del mercado, deberán acreditar su condición de tales, presentando al Ejecutivo Municipal los siguientes documentos: Los productores agropecuarios: a) En el caso de ser propietarios de terrenos de cultivo, la escritura de propiedad; b) Cuando se trate de arrendatarios, copia del contrato respectivo con el dueño del inmueble; y c) En el caso de que, sin ser propietarios ni arrendatarios, laboren la tierra, constancia del Delegado de la Guardia de Asistencia rural de la respectiva localidad, en que acredite su condición de productor agrícola. Las cooperativas: a) Certificación del Gerente o copia del acuerdo del Consejo de Administración que acredite a la persona o personas que usarán sus instalaciones a nombre de aquellas. Los artesanos: a) Constancia de la Cámara Nacional de Artesanía y Pequeña Industria, acreditándolo como miembro de ella; y b) Los artesanos no asociados a la Cámara Nacional de Artesanía y Pequeña Industria, constancia del Delegado de la Guardia de Asistencia Rural de la respectiva localidad, que acredite su condición de artesano. Las pruebas ofrecidas, conforme a los incisos anteriores, deberán ser sometidas a comprobación antes de extenderse el permiso correspondiente. Artículo 4º.- Quien, mediante fraude que se determine posteriormente, obtuviere permiso para vender en el mercado, automáticamente lo perderá, sin responsabilidad alguna para el Consejo Municipal. Artículo 5º.- Los productores o entidades que obtengan permiso para vender mercadería, según lo dispuesto en el artículo 3º, no adquieren por ello ningún derecho sobre el espacio que se les conceda, sino que deben ocupar el que en cualquier momento se les asigne, sin que por tal motivo exista reclamo alguno contra la municipalidad. Artículo 6º.- Las ventas serán fundamentalmente al detalle y sólo en caso muy especial se permitirán ventas al por mayor. Asimismo, se prohíbe la reventa de productos. Artículo 7º.- De preferencia, la instalación de los mercados libres debe hacerse en terrenos cercanos a las terminales de autobuses de los distritos, con el objeto de proporcionar a los productores clientes para sus mercaderías y dar facilidades a los consumidores de adquirrlas, sin tener que recorrer largas distancias. Artículo 8º.- Para la construcción, organización y funcionamiento de las instalaciones, se autoriza a las municipalidades a efectuar entre ellas y con el Instituto de Fomento y Asesoría Municipal, convenios de arriendo, asesoría, préstamos, de cooperación intermunicipal, que crean necesarios, para cumplir con el artículo 1º de esta ley. Iguales procedimientos podrán establecerse entre las municipalidades, el INFOCOOP, las Federaciones de Cooperativas, UNACOOOP, así como con la Cámara Nacional de Artesanía y Pequeña Industria. Para los propósitos de esta ley, las municipalidades deberán destinar la suma necesaria, tomándola preferentemente del porcentaje que les corresponde por concepto de Impuesto Territorial. Artículo 9º.- El Poder Ejecutivo deberá emitir el reglamento correspondiente para la operación de esta ley dentro de los noventa días siguientes a su vigencia, atendiendo a las particulares condiciones de cada región y con sujeción a los siguientes principios fundamentales: a) Su establecimiento no percibe ninguna finalidad lucrativa, sino tan sólo dar facilidades para que los productores agropecuarios y artesanos vendan directamente sus productos al consumidor. Se permitirá la venta, además de los productos agrícolas, de toda clase de artículos alimenticios indispensables para el hogar, siempre que el precio de los mismos esté de acuerdo con la finalidad de abaratar el costo de la vida; b) Para participar en el mercado se requiere ser cultivador, productor, socio de cooperativas, creador o fabricante de los productos que se vendan; c) Fiscalización que garantice el estricto cumplimiento de las disposiciones legales sobre sanidad, precios, pesas y medidas, que impida la especulación o acaparamiento de los productos vendidos en el mercado; d) Sanciones severas para los que burlen las disposiciones legales o administrativas sobre los mercados libre y para quienes, en cualquier forma, traten de impedir su funcionamiento o de burlar la finalidad de bien público que con ellos se desea alcanzar; y e) Regulación sobre ventas al por mayor. Artículo 10.- Esta ley es de orden público, deja sin efecto cualquier disposición legal o reglamentaria que se le oponga y rige desde su publicación.