LA IGNORANCIA ES ATREVIDA Escrito por CAMILO GONZÁLEZ POSSO El Director de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, acaba de confesar en la Cumbre de Viena que en el mundo no se sabe en realidad cual es la situación del consumo de drogas psicotrópicas ilícitas o licitas, que no se tienen cifras de más del 70 % de los países y que los que han entregado algún informe en su mayoría se basan en encuestas viejas o que no son comparables con ninguna línea a de base. En pocas palabras han dicho en la cumbre de los sabios y todo poderosos de la guerra antidrogas que lo que no saben se lo inventan. Increíble. Y cierto. Quien quiera ver en detalle el Informe de la UNOCD sobre consumo en el mundo puede encontrarlo en la web con afirmaciones del siguiente tenor: sólo el 31% de los países miembros han entregado la información sobre consumo. No se cuenta con información sobre consumo y menos sobre adictos o atendidos en los sistemas de salud. Los informes sobre drogodependientes infectados de VIH/SIDA por inyección son pocos. En realidad todas las cifras son extrapolaciones de lo que se registra en Estados Unidos, Canadá y Europa (excluyendo Europa oriental y algunos países mediterráneos que tampoco tienen seguimiento en toda la década). Y si por allá llueve por acá no escampa. Acaban de publicar el Estudio Nacional sobre consumo de drogas en Colombia (ENCD, febrero 2009), que no se puede comparar por diferencias de método, objeto o preguntas con los realizados en 1998 y 2003, pero ya los medios sensacionalistas y los amigos del prohibicionismo y de la solución militar a todo, están falsificando los datos. “540 mil drogaditos”, “aumenta la droga en la juventud”, “el narcotráfico se toma el mercado interno”, y con noticias de ese estilo crean la sensación de una invasión de cocaína y marihuana sin antecedentes. Pero una lectura honesta del ENCDC/2009, muestra un panorama distinto al de los tremebundos: los graves problemas de consumo de drogas son por alcohol y tabaco, es decir por adicción con drogas licitas; 86% de la población dice haber consumido alcohol alguna vez en su vida, 35% en el último mes y 12% está en situación riesgosa; en tabaco los porcentajes son 45%, 17% y 8% respectivamente. Frente a esas cifras la Encuesta dice que 9.1% ha consumido alguna vez en la vida una droga ilícita y “2,7% lo ha hecho en el último año”, la mayoría de ellos marihuana y 0,7% cocaína. (el porcentaje mensual no es superior a 1,5% ). Algunos comentaristas superficiales confunden “prevalencía” con drogo adicción y de allí sacan la cifra de 540.000 consumidores de drogas ilícitas y de 30 millones de alcohólicos, cuando esa cifra se refiere a haber probado al menos una vez en toda la vida. En materia de drogo adictos no hay cifras en Colombia pero es verdad sabida que los enfermos alcohólicos o los pacientes por abuso de nicotina representan por lo menos el 98% del problema de salud asociado al consumo de drogas y una proporción similar en costos hospitalarios. También está documentado que los accidentes de tránsito, homicidios y traumas violentos asociados al exceso de consumo de alcohol superan mil a uno a los asociados a drogas ilícitas. Es en medio de semejante confusión que el gobierno vuelve a desempolvar el proyecto de ley para criminalizar la “dosis personal” y sacan una que otra cifra del sobrero. ¿Van a prohibir también la dosis personal de alcohol y tabaco? Si pretenden proteger a la sociedad frente al vicio ¿Por qué no montan tribunales psiquiátricos para los que toman whiskey, cerveza y aguardiente? O ante la dosis de alcohol ¿todos a la cárcel como en tiempos de Alcapone? Nota: Saldré el 26 de marzo, detrás de Hector Abbad, con mi mate de té de coca suministrado por la distribuidora Fabiola Piñacué del Cabildo Nasa de Calderas, Tierradentro. Comisión de Estupefacientes 52º período de sesiones Viena, 11 a 20 de marzo de 2009 Situación mundial con respecto al uso indebido de drogas Informe del Director Ejecutivo 4. … Faltan datos recientes de muchos países, incluso de aquellos que disponen de capacidad para reunirlos con regularidad…. Existen grandes lagunas con respecto a lo siguiente: a) prevalencia del consumo de drogas entre la población en general y los jóvenes; b) demanda de tratamiento contra drogas; y c) prevalencia del consumo de drogas por inyección y de la infección por VIH entre los jóvenes que se inyectan. En algunos casos regiones enteras descuidan cumplir sus obligaciones de presentación de informes. 5. Cincuenta y nueve Estados Miembros (el 31%) facilitaron estimaciones nacionales anuales de la prevalencia del consumo de drogas en sus respuestas al cuestionario para los informes anuales, con relación a 1998. El hecho de que la UNODC recibiera respuestas al cuestionario para los informes anuales no significa que fueran completas o se enviasen a tiempo ni que la información que contenían fuera exacta. 8. … Falta información procedente de varios Estados de diversas subregiones de África así como del Oriente Cercano y Medio, Europa oriental y sudoriental, Asia oriental y sudoriental, partes de América Latina y casi todos los Estados y territorios insulares de Oceanía. __________________ 17. Pero es raro que se efectúen encuestas sobre el consumo basadas en la población y las estimaciones de la amplitud de la drogodependencia en la población son aún menos corrientes. 19. La inexistencia de tales datos significa que, en muchos casos, se dispone de escasa información objetiva en que basar las estimaciones de la magnitud de la población consumidora de estupefacientes o seguir las variaciones a lo largo del tiempo. Lamentablemente, así sucede en el caso de países de gran población como China y la India, lo que afecta a la capacidad de hacer estimaciones exactas y actualizadas de la prevalencia a nivel regional y mundial. Asimismo, la falta de información forense sistemática hace también imposible formarse una imagen precisa de las sustancias que se consumen y de cómo varía con el tiempo la demanda de las diferentes sustancias. 29. El Grupo de Referencia de las Naciones Unidas sobre el VIH y el consumo de drogas por inyección ha señalado la escasez de los datos sobre este tipo de consumo, conducta ilícita que incita a los involucrados a devenir una población clandestina, lo que hace difícil determinar la amplitud del número de personas que lo practican.