TEXTO 8: K. R. Popper Indeterminismo y causalidad general, en el sentido propuesto por Hume, no son excluyentes. “Hume interpretaba el determinismo (que denominaba “la doctrina de la necesidad” o doctrina de la conjunción constante”) en el sentido de la doctrina según la cual “causas semejantes producen siempre efectos semejantes” y “los efectos semejantes se siguen necesariamente de causas semejantes”. Sostenía, por lo que respecta concretamente a las acciones y voliciones humanas, que “un espectador puede normalmente inferir nuestras acciones de nuestros motivos y carácter y, aún cuando él no pueda hacerlo, concluye en general que sería posible si conociese perfectamente las circunstancias de nuestra situación y temperamento y los más secretos principios de nuestra….disposición”. Ahora bien, ésta es la verdadera esencia de la necesidad…Los seguidores de Hume lo formularon del siguiente modo: nuestras acciones, voliciones, gustos o preferencias son “causadas” psicológicamente por experiencias anteriores (“motivos”) y, en última instancia, por nuestra herencia y por el medio. Mas esta doctrina que denominaré determinismo filosófico o psicológico no sólo es algo muy diferente del determinismo físico, sino que además es algo que difícilmente puede tomar en serio un determinista físico versado en la materia. La razón estriba en que la tesis del determinismo filosófico según la cual “efectos semejantes poseen causas semejantes” o “todo acontecimiento tiene una causa”, es tan vaga que resulta perfectamente compatible con el indeterminismo físico. Lo único que afirma el indeterminismo –o, más exactamente, el indeterminismo físicoes que no todos los acontecimientos del mundo físico están predeterminados con absoluta precisión en todos sus detalles infinitesimales. Al margen de esto, resulta compatible prácticamente con cualquier grado de regularidad que se desee y, por tanto, no implica la opinión de que haya “acontecimientos” sin “causas” por la sencilla razón de que las palabras “acontecimientos” y “causas” son lo suficientemente vagas como para permitir la compatibilidad del indeterminismo físico con la doctrina de que todo acontecimiento tiene una causa. Frente al determinismo físico que exige una predeterminación física completa e infinitamente precisa sin excepción alguna, el indeterminismo físico sólo afirma que el determinismo es falso y que al menos hay, aquí y allá, algunas excepciones a la determinación precisa. Por tanto, incluso la fórmula “Todo acontecimiento físico observable o medible posee una causa física observable o medible” sigue siendo compatible con el indeterminismo físico, por la sencilla razón de que ninguna medida puede ser infinitamente precisa.” K.R.Popper Conocimiento objetivo, Editorias Tecnos, Madrid, 1974, pp.205-6.