Viernes, 8 de octubre de 2004 PORTADA ÚLTIMA HORA [EDICIÓN IMPRESA] Portada Ciudadanos Política Opinión ECONOMÍA Webmail DEPORTES OCIO Alertas CLASIFICADOS Envío de titulares SERVICIOS CENTRO COMERCIAL GENERAL ALBERTO LASA, PSIQUIATRA «Si un adolescente dice que va a suicidarse, hay que tomarle en serio» El especialista en salud mental recuerda que jóvenes y ancianos son los que más se quitan la vida Mundo Economía Deportes Sociedad Cultura Televisión Gente CARLOS BENITO/BILBAO Lo ocurrido en Hondarribia ha recordado a muchos adultos algo que quizá preferían tener olvidado: que a veces la adolescencia no es un tiempo feliz de risas y juegos, sino un túnel donde acechan miedos, fracasos y crueles relaciones de poder. El psiquiatra Alberto Lasa, profesor de la Universidad de Deusto y especialista de la Unidad de Salud Mental Infanto-Juvenil de Uribe, está acostumbrado a recibir en su consulta a escolares cansados de vivir. -La mayoría de las personas mayores recuerdan su adolescencia con nostalgia. ¿Se engañan? -Hay niños y adolescentes que sufren, y le aseguro que suelen recordarlo después, aunque es verdad que hay personas a las que la memoria les embellece el pasado. [MULTIMEDIA] Fotos del día Especiales Gráficos Documentos [PARTICIPA] Foros Chat Videochats -¿Qué puede empujar a un chico de catorce años al suicidio? -Para pensar en el suicidio, hace falta un conjunto de sentimientos. Los primeros son la tristeza y la impotencia: eres desgraciado y piensas que no tiene arreglo. A eso se añade la El psicólogo aconseja buscar ayuda en el entorno. / MAITE BARTOLOMÉ convicción de que no hay nadie a quien recurrir. Es lo que llamamos desvalorización: Imprimir Enviar mi vida no vale nada, no puedo resolverlo, no puedo contarlo y, aunque lo hiciese, nadie podría ayudarme. -¿Una cadena de errores! [CANALES] Amistad Aula de cultura Bodas Bolsa directa Canal Meteo Cibernauta Ciclismo Cine Deporte XXI Ekoplaneta Empleo Evasión Formación Página de inicio -Claro, lo más dramático es que muchos adolescentes se sienten así cuando objetivamente habría soluciones. Podrían pedir ayuda a los compañeros, a los profesores, a la familia o a un profesional. -¿Y por qué no lo hacen? -Lo que quiere el adolescente es dejar de depender del adulto, sobre todo de sus padres. El problema es que la mayoría no tiene capacidad para ello. -Pero hay muchos adolescentes que dan vueltas a la idea del suicidio, ¿no? -De hecho, las edades a las que el suicidio es más común son la vejez y la adolescencia. Hay estadísticas muy serias en varios países europeos que demuestran que el suicidio está entre las causas más importantes de muerte entre los 15 y los 25 años. Es la primera o la segunda, por detrás de los accidentes. El problema de estas estadísticas es que algunas conductas no se contabilizan como suicidios propiamente dichos: por ejemplo, atiborrarse de alcohol y coger el coche no siempre encubre un suicidio, pero a menudo sí, igual que comportamientos autodestructivos como la anorexia. PORTALES BUSCAR EL CORREO DIGITAL Hoy Texto Hemeroteca INTERNET/GOOGLE Apartahoteles Categorías Fútbol Gastronomía Guggenheim Vidas «sin sentido» -¿Los padres pueden detectarlo a tiempo de alguna manera? Libros -Muchos adolescentes dicen que su vida no tiene sentido, ¿se trata de una frase típica! Y muchos padres se inquietan, aunque, afortunadamente, son minoría los adolescentes que, pensando eso, dan el paso de quitarse la vida. Pero todos los que han estudiado este problema han llegado a la conclusión de que el adolescente que va a suicidarse lo dice. Mh Mujer -¿Avisa? Hator (Nuevo) Infantil Juegos Moda Motor Seguros TVInteligente Vehículos ocasión Viajes EDICIÓN IMPRESA Suscríbete a Diario El Correo. ¡Consigue grandes ventajas! -Sí. Es falso el tópico de que quienes dicen que van a suicidarse nunca lo hacen. Ciertamente, la mayoría de los adolescentes que aseguran que van a suicidarse no dan ese paso. Pero prácticamente todos los que lo intentan lo han anunciado antes de manera más o menos clara y en más de una ocasión. -¿Y qué debe hacer la familia entonces? -Hombre, lo primero es tomárselo en serio y pedirle que explique por qué su vida no tiene sentido. Si los padres no pueden ayudarle, a lo mejor puede hacerlo alguien que se dedique a esto. En la consulta, no suele ser difícil que comuniquen los motivos de su sufrimiento. Algunos tienen razones objetivas muy reales. En otros, en cambio, hay una manera desesperada de ver las cosas, una depresión. Aunque lo más frecuente en un adolescente deprimido es luchar contra la depresión con sus propios medios. -¿Cuáles son? -La juerga, el alcohol, la droga, el movimiento continuo... A veces, la imagen del adolescente marchoso y eufórico encubre un sentimiento depresivo. Es una forma de luchar que no funciona, porque sólo dura el fin de semana. El lunes llegan la resaca y las circunstancias normales. Problemas hacia dentro -¿Cuáles son los problemas que atormentan a los chicos de instituto? -En los últimos diez años, cada vez hay más adolescentes que vienen a la consulta, y ésa es la tendencia en todos los servicios públicos de salud mental. La mayoría, además, viene porque quiere, por su propia iniciativa. Los motivos son diversos: problemas de conducta que les crean conflictos con su familia, en la escuela o en la calle -sobre todo, conductas violentas-, dificultad para adaptarse a la disciplina o el rendimiento escolar, consumo de alcohol y tóxicos... Luego están los problemas hacia dentro: la angustia, la tristeza, la depresión... -¿Por qué existe la violencia en la escuela? -Alguien que utiliza la violencia para imponerse sufre un problema psicológico. Puede tener que ver con la educación recibida, puede ser un trastorno de personalidad... Claro que también existe una incitación social, un incremento de tolerancia hacia las conductas agresivas. Basta poner la televisión para ver todos los días, en todas las cadenas, programas donde el encuentro entre adultos incluye insultos, difamaciones, descalificaciones e incluso violencia física. El niño y el adolescente interpretan que no hace falta tener pudor ni vergüenza a la hora de exhibir comportamientos así y despreciar al otro. Se está fomentando eso como expresión de fuerza, de competitividad. Subir © Copyright EL CORREO DIGITAL, S.L., Sociedad Unipersonal Domicilio c/ Pintor Losada, 7 (48004) Bilbao Inscrita en el RM de Vizcaya: Diario 229, Asiento 159, Tomo 3823, Libro 0, Folio 200, Sección 8, Hoja BI-26064 C.I.F.: B-95050357 Contactar / Mapa web / Aviso legal / Política de privacidad / Publicidad / Master El Correo