Tercer Trimestre —Octavo sábado— 20 de agosto Crecimiento ilimitado Tema: Ed u cación Propósito del programa Cómo ayudar a nuestros hijos a interesarse por los estudios. Cómo los adultos pueden retomarlos. Ver el propósito de Dios de mantenernos creciendo en conocimientos. Al director Este es un programa de entradas y salidas. Para la parte central se requieren tres sobres de cartas con los textos para la lectura del presentador. Puede proyectar las respuestas a cada carta. La persona que lee la carta puede estar sentada en un asiento con una mesita lateral y un jarrón con flores. También puede poner un letrero detrás con el título del programa. Puede decorar con birretes en diferentes lugares. Sugerencias Que el programa sea dirigido por el Departamento de educación de la iglesia o maestros de Colegios Adventistas. Regalar el libro La educación a los visitantes. Que tres personas hagan la voz de quienes envían las cartas. Hacer unas tarjetas tamaño 4x6 con un signo de infinito y sobre él un birrete. Detrás el texto de la cita del aporte profético en la tercera respuesta. Elegir un testimonio para la parte del Rumbo o conclusión, de una persona que haya retomado los estudios y actualmente esté aplicando sus conocimientos. RECURSOS ESCUELA SABATICA – www.escuela-sabatica.com Crecimiento ilimitado 145 Introducción Cuando leemos el título de nuestro programa, nuestro cerebro nos trae diversas imágenes de algo que no para de crecer. En esta mañana hablaremos de un crecimiento ilimitado dentro de nosotros: es el crecimiento en conocimiento. Esperamos que este programa nos sirva de edificación. Sean bienvenidos/as a la casa de nuestro Dios. Himno ¿Cuál es nuestra motivación para crecer en conocimientos? En el desarrollo del programa veremos las respuestas a estas y otras preguntas. Cantemos el himno n° 469: «Jesús me guía», Himnario Adventista. Lectura bíblica Nosotros los cristianos tenemos la firme convicción de que la fuente de sabiduría y conocimiento es Dios. La Biblia nos presenta un texto muy revelador sobre la forma en que Dios escoge a personas y las dota de las condiciones necesarias para ser entes productivos y lograr los propósitos que él ha trazado. Leamos en Éxodo 35:30-35. Oración Saber que el Creador del cielo y la tierra ha trazado metas y propósito para cada uno de nosotros es una fuerte motivación para desarrollar capacidades y crecer cada día para glorificar su nombre y cumplir sus proyectos. Parte especial (entra sin anunciar) Informe secretarial Del tesoro de la Palabra de Dios siembre podemos sacar cosas nuevas. No importa durante cuántos años estudiemos las Escrituras, siempre el Espíritu refresca la sabiduría que nos transmite. Es como un pasto que siempre se mantiene verde. El informe del sábado pasado es el siguiente... Rumbo Misionero Contestando tu pregunta Presentador: Buenos días. En esta entrega de nuestra sección Contestando a su pregunta trataremos el tema del crecimiento en conocimiento. En este momento abriremos nuestro buzón donde están las cartas con las preguntas de nuestra audiencia. La primera carta dice: «Saludos, soy una madre interesada en saber cómo puedo hacer para que mis hijos se apliquen en los estudios. Parece que a ellos no les interesa obtener nuevos conocimientos, tienen muchas distracciones y tengo miedo de que no puedan desarrollarse y poder tener más oportunidades en la vida». Atte. Madre Desesperada Respuesta: Estimada madre, esa es una preocupación que tenemos todos los padres y madres. Siempre necesitamos sentir que estamos llevando a nuestros hijos e hijas por el buen camino para que se desarrollen y sean exitosos. Aquí vamos a darle algunos consejos prácticos para la situación que presenta: RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © 146 PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA Existen dos factores clave: la capacidad intelectual y la motivación. Nunca será una motivación decirle a su hijo que no va a tener una buena vida futura si no estudia. Los niños y las niñas perciben el futuro de una forma lejana. Su preocupación no es pagar renta ni comprar cosas. Ellos visualizan que sus padres están al frente de la situación por lo que sus preocupaciones y motivaciones van orientadas a la realidad presente. Es más conveniente explicarle cómo es necesario que aprenda lo básico para poder estar listo a aprender lo más complejo. Permita que ellos visualicen que es como una carrera de obstáculos donde ellos van creciendo a medida que se alcanza cada uno, pero la preparación es la base para verlos todos de un mismo tamaño. Es un error tratar de compararlos con los logros de otros, en vez de esto, procure conocer cuál es el potencial de su hijo o hija. Conversen sobre las asignaturas que les agradan y cuáles no. Juntos, planteen las estrategias para abordar estas asignaturas. Conversen sobre su día y oriéntele a hacer un calendario semanal que incluya las actividades que le gustan y el tiempo de estudio. Establezcan horarios e inclúyanse dentro de ellos en la parte de acompañamiento y revisión. La idea no es premio o castigo, sino evidenciar que está adquiriendo responsabilidad y control de sus obligaciones. Haga una lista de metas alcanzables y simples, como por ejemplo: «Aprender todo lo relacionado a las fracciones», «conocer el uso de la letra V», «mejorar la caligrafía», «aprender técnicas de concentración», etcétera. Celebren los logros que se van obteniendo e identifiquen las dificultades. No use calificativos negativos sobre su hijo o hija. Busquen juntos la solución a los problemas sin personalizarlos. Ore por sus hijos e hijas. Si a usted le preocupa su desarrollo, a Dios también. Recuerde además que él puede trabajar el querer como el hacer por su buena voluntad. La siguiente carta dice: «Hola, soy una persona que nunca ha tenido éxito en los estudios. Me dedique a hacer labores según las oportunidades y actualmente estoy estancado sin poder desarrollarme académicamente y eso me afecta económicamente. Siento que es tarde para reiniciar, además de que tengo temor de fracasar nuevamente. ¿Qué me aconseja?». Atte. Estancado. Respuesta: Estimado amigo, el éxito en los estudios se mide en la obtención de la acreditación o título, como también en la aplicación de los conocimientos adquiridos. Cuando usted dice no haber tenido éxito en los estudios, se refiere a que no logro ascender en los niveles académicos o acreditación. Le aconsejo: Iniciar con una autoevaluación de los factores que le impidieron avanzar en los estudios. Incluya determinar cuál es su potencial real y cómo se visualiza aportando a la sociedad desde el punto de vista de los nuevos conocimientos adquiridos. Esa sería su meta. Analice las oportunidades que existen para personas en su misma situación y cómo acceder a ellas. Plantee metas a corto y mediano plazo. Procure una buena alimentación que le proporcione las vitaminas y los minerales que necesita su cerebro para estar en condiciones óptimas para esta nueva actividad. Busque personas motivadoras y ejemplos de superación que puedan ser un referente para no darse por vencido. Preséntele su plan a Dios y afórrese en sus promesas. Lleve un pequeño registro o diario de cómo va superando cada uno de los obstáculos. www.escuela-sabatica.com Crecimiento ilimitado 147 La tercera y última carta nos dice: «Soy una persona muy comprometida con la iglesia. Siento culpabilidad por dedicar tanto tiempo a los estudios y hacer muy poco por la misión. ¿Me puede decir cómo puedo equilibrar esto?». Respuesta: Sentir culpabilidad es algo subjetivo y puede darse porque celebras éxitos académicos, pero seguro no has podido llevar a otros a Cristo. Recuerda a Daniel y sus amigos. Ellos fueron destacados por el grado de sabiduría que Dios les otorgó y le glorificaron a través de esto. El aporte profético nos dice: «Nuestro objeto debiera ser más bien obtener conocimiento y sabiduría para llegar a ser mejores cristianos, y estar preparados para una utilidad mayor, prestando un servicio más fiel a nuestro Creador; y por nuestro ejemplo e influencia, inducir a otros a glorificarlo también» (Educación cristiana, p. 65). Les damos las gracias por su atención al programa. No se pierdan la conclusión. En este momento quedamos divididos en clases. Conclusión En este programa hemos vistos diferentes dimensiones del crecimiento en conocimiento. Tanto los niños, los jóvenes y los adultos, no importando la edad, podemos crecer en sabiduría para ser de bendición. «No está en nuestro ánimo el poner límites a la educación que Dios ha hecho ilimitada. Pero lo que logramos de nada nos sirve si no lo aplicamos para honra de Dios y beneficio de la humanidad» (Ibíd., p. 79). Himno N° 253: «Tuyo soy, Jesús», Himnario Adventista. Oración final RECURSOS ESCUELA SABÁTICA ©