Del Biombo a la Cátedra. Igualdad de Oportunidades de Género en la Universidad de Chile prefieren no ocupar altos puestos y lo justifican con una falta de interés o desagrado por las labores directivas: “Esta jerarquía me permite hacer todas las cosas salvo ser Decano, que no está en mis aspiraciones. A mí me interesa más la investigación. Con el tiempo le he ido tomando el gusto a la docencia, pero lo que más me gusta es la investigación. Me dedicaría solo a investigar y eso es lo que menos exposición tiene y entonces también está menos ligado a la cosa de ser Director de Departamento, ser Decano” (Académica, Fac. de Derecho) “Mis proyectos son más bien académicos, más que de otro orden, además nunca me planteé tener cargos de ningún tipo. En efecto, mi idea no es hacer carrera administrativa, no tengo afán de tener direcciones, ni ser decana ni nada parecido” (Directiva, Fac. de Filosofía y Humanidades) Para los académicos, en cambio, el problema no es el ejercicio del cargo directivo en sí, sino las tareas administrativas y de gestión que requiere. En este sentido, ellos sostienen la necesidad de despejar los altos cargos de dichas funciones, para poder cumplirlos de mejor manera: “Por otro lado una dificultad fuerte está referida a no saber delegar responsabilidades técnicas y yo como Director de Postgrado estar preocupado de temas académicos” (Directivo, FAU) Por su parte, los académicos que no ocupan puestos de dirección, no manifiestan una aspiración tan clara pero sí señalan que “no se descarta como una opción”: “En cuanto al ascenso en la carrera (…) por el momento los cargos directivos no son de mi interés y estoy convencido de que es necesario forjar un equipo en el cual ser capaz de delegar funciones para ir asumiendo más y mayores responsabilidades dentro del Departamento y de la Universidad. Es algo que no descarto a futuro pero que por el momento no está presente” (Académico, Física) Sobre este mismo tema, cabe mencionar que, en la mayoría de los casos, los cargos directivos no son necesariamente asumidos por elección, sino por designación de la autoridad. Esto es enfatizado pro los varones, quienes consideran que la solicitud directa de los decanos constituye una muestra de confianza y respaldo en su gestión: “En el contexto de la comisión de reestructuración me pidieron asumir el cargo, no quise y es que era medio raro. Y cuando ganó el decano actual, ahí sí, pero yo asumí el 2011 y el decano el 2010, y es que no fue inmediato que asumí, ahí el decano me pidió que yo lo haga” (Directivo, FAU) 79 Del biombo a la cátedra Berkley.indb 79 26-02-14 19:23