FORMATIVO EN LA CUENCA DEL TITICACA , ALTIPLANO CENTRAL Y VALLES. Juan Villanueva Criales. Licenciado en Arqueología – UMSA. Programa de Postgrado en Antropología UCN – UTA Arica, Chile. 13 de mayo de 2011 Cuenca del lago Titicaca Cuenca del lago Titicaca CONSIDERACIONES CRONOLÓGICAS • Es Bennett el primero en identificar varias etapas de desarrollo del fenómeno Tiwanaku, y una cerámica más temprana denominada Chiripa. • Ponce asignará a Chiripa, junto a Wankarani, un rol de culturas previas al desarrollo Tiwanaku. Según Ponce, en determinado momento durante el desarrollo aldeano y urbano de Tiwanaku, estas culturas coexisten. Posteriormente, Tiwanaku se impone de manera bélica sobre ellas. • La noción de la coexistencia de Chiripa y Tiwanaku es tan fuerte que permea visiones posteriores. Para 1996, Albarracín sugiere en base a las prospecciones del valle de Tiwanaku la coexistencia de los momentos finales de Chiripa con Tiwanaku en sus fases tempranas. • Posteriormente, durante finales de la década de 1990 e inicios de la década de 2000, mayor refinamiento en términos de excavación da más definición al período formativo en el Titicaca, un período muy largo (casi dos milenios de duración, del 1500AC al 500 DC), que se observa ahora en sus diferentes etapas. • Corresponde a Hastorf y Bandy, desde la península de Taraco, subdividir el desarrollo Chiripa en inferior, medio y superior. • Desde la cuenca este del Titicaca, Stanish realizará la primera subdivisión general del formativo en Inferior, Medio y Superior. Así, se acerca más la cronología del Titicaca a esquemas cronológicos clásicos como el de Rowe, determinando la existencia de un período contemporáneo al Período Intermedio Temprano entre los horizontes Temprano (Formativo) y Medio (Tiwanaku). • Desde la cuenca sudeste, Janusek utilizará la división de Stanish (rebautizada como Temprano, Medio y Tardío). Realizará asimismo un refinamiento del Formativo tardío, dividiéndolo en dos etapas: Formativo Tardío 1 y Formativo Tardío 2. Cronología área Circuntiticaca (Hastorf 2011) Información paleoclimatológica: glaciar Quelcaya, datos paleolimonológicas, perforación de pantanos. Cuenca del lago Titicaca • Zona de altura por sobre 3.000 msnm • Área “aislada” de Andes Centrales hasta el Formativo tardío o superior. • A partir de 500 a.c. evidencias que apuntan hacia constitución de estados. • Zona con múltiples recursos: agricultura de altura (quinoa, tuberculos), áreas de pastizales (camélidos), recursos lacustres (peces, totoras, vegetales), cercania con áreas tropicales y deserticas. • Sistemas políticos equivalentes caracterizados por comeptencia de recursos y seguidores (conflictos, alianzas; formación y disolución de elites) No hay jerarquias altamente estructuradas. CAMBIOS ENTRE ARCAICO A FORMATIVO • Cambios climáticos • Cambios sociales • Movilización del trabajo por parte de una elite ¿cómo lo logran? → Teorías coactivas: fuerza bruta, rendición involuntaria y no intencional x factores exógenos (presiones sociales, degradación medioambiental). → Teorías persuasivas: reconoce papel proactivo de elites nacientes con variedades de estrategias: afirmación de poder ideológico, redistribución estratégica de bienes, creación de economía de escala. Se sustentan en supuesta competitividad de liderazgo que se sobrepone a comunitarismo basado en sistemas de parentesco. → PRODUCCIÓN DE EXCEDENTES Y ACUMULACIÓN POR SOBRE NIVEL QUE REQUIERE LA SIMPLE SUBSITENCIA ESTRATEGIAS DE LA ELITE → Uso de trabajo para construir centros civico- ceremoniales y arquitectura monumental → Intensificación de producción económica para generar excedentes: concentración poblacional entorno a áreas mas productivas; innovaciones tecnológicas. → Competencia exitosa entre elites competitivas vecinas: territorialidad; expansión territorial. → Intensificación de redes de intercambio a corta y larga distancia: homogeneización material y obtención de “bienes de prestigio”. → Supuesto poder ideológico: homogeneidad iconográfica y material; memoria ancestral; festividades, rituales. FORMATIVO TEMPRANO (1500 – 800 AC) • Es la etapa menos comprendida del formativo, por cuanto no se han encontrado significativos rastros del mismo en superficie. Los componentes cerámicos del Formativo Temprano, reportados por ahora solo en la península de Taraco, son el Chiripa Temprano (datado en 1500 – 1000 AC) y el Chiripa Medio (1000 – 800 AC). • A nivel de excavación, el Chiripa temprano está representado por la estructura de Santiago, en Chiripa, el contexto ritual más temprano de la cuenca, de índole funeraria y de ofrenda. • Posteriormente, para el Chiripa Medio, se construyen en el sitio nuevas estructuras, incluyendo un primer templete semisubterráneo en un montículo artificial. • El Formativo Temprano es la etapa de transición del Arcaico al Formativo. Según Janusek, tres factores son importantes en este tránsito: – el sedentarismo (que no implica necesariamente una dependencia completa sobre recursos domesticados), – la aparición de una ideología religiosa asociada íntimamente al espacio y a los entes sagrados del mismo. – el establecimiento pleno de redes de interacción (seguramente nacidas de previos circuitos trashumantes). FORMATIVO MEDIO (800 – 200 AC) • El Formativo Medio esta mejor documentado, y ha sido tradicionalmente asociado con el sitio de Chiripa, en la península de Taraco. • Es en esta época (asociada a la cerámica Chiripa Tardío) que este sitio alcanza su mayor extensión, con una estructura central, y otras estructuras, todas ceremoniales, asociadas (Choquehuanca, Quispe, Alejo, Llusco). • Las características de Chiripa han sido bien conocidas desde tiempos de Ponce: cerámica con antiplástico de fibra vegetal (decorada en rojo y beige), templos hundidos, estelas líticas, trompetas cerámicas. Una economía basada en la agricultura, el pastoreo y la explotación de recursos lacustres. Chiripa • Sin embargo, crece la idea de que Chiripa no fue un “proto estado” homogéneo preTiwanaku, con su capital en el sitio tipo. Las prospecciones del proyecto arqueológico Taraco (realizadas por Bandy) han determinado que aún en su máximo esplendor, Chiripa compartía la península con otros tres sitios igual de grandes, entre ellos principalmente Kala Uyuni. Los asentamientos menores se concentran en torno a estos sitios, formando una jerarquía de dos escalones, sin que Chiripa sea preponderante. • Aún más, por toda la cuenca del lago menor, como en el valle de Katari (Janusek y Stanish), el valle de Tiwanaku (Albarracín, Matthews, Lémuz y Paz), y la península de Santiago de Huata (Lémuz), se han encontrado sitios asociados a Chiripa. • La asociación se percibe por la presencia de patios hundidos, estelas de estilo Paajanu (Potugal) o Yaya-Mama temprano (Chávez), trompetas y cerámica Chiripa tardío. Sin embargo, se hace claro que hay significativa variabilidad local en las manifestaciones cerámicas y arquitectónicas, y que aún la estatuaria muestra tendencia a la variación. Aún dentro de ciertos cánones, lo Chiripa es heterogéneo, apuntando a la existencia de entidades locales políticamente independientes. • Es muy posible que varios sitios Chiripa hayan tenido interacción con el altiplano central y ambas vertientes vallunas. En muchos de ellos se encuentran productos procedentes de dichas zonas, principalmente de índole suntuaria (cuentas de sodalita, conchas marinas, obsidianas y basaltos). • Algunos autores (Browman) han propuesto además cierta afinidad cerámica entre Chiripa, y, por ejemplo, el norte de Chile (con Faldas del Morro, Stanish) o el sur del Perú (con la fase Huaracane, Feldman). Sin embargo, se necesitan mayores estudios al respecto. • La presencia Chiripa también ha sido documentada en valles orientales cercanos al Titicaca hacia el oeste, como Corralpata (Paz), y sugerida para el valle de Cochabamba (Gabelmann). • De manera contemporánea a Chiripa en la cuenca sudoeste, la cuenca noreste era la región donde se manifiestan con más fuerza los elementos de la tradición Qaluyu, antecesor de Pukara. Qaluyu y Pukara comparten ciertas similitudes, en el uso de templetes hundidos y estelas líticas. • También parecen ser formaciones sociopolíticas similares, estando los grupos afiliados a Qaluyu expandidos por la cuenca norte del Titicaca, donde están sus sitios más importantes, como Qakuyu, Pucara, Asiruni, o Huatacoa. Sus manifestaciones llegan al norte, hasta Marcavalle (Cuzco), y se internan en la yunga oriental. Lo Qaluyo, al igual que lo Chiripa, manifiesta fuerte variabilidad local. • Al mismo tempo en la cuenca sudeste del Titicaca se manifiestan dos tradiciones enmarcadas en la misma dinámica de independencia local dentro de determinados cánones comunes: Sillumocco. En el área de Juli-Pomata, y Ckackachipata, en el área de Ccapia (Stanish). Los asentamientos de estas áreas, al igual que los de muhcas otras en la cuenca, pueden haber estado ya asociados a incipientes campos elevados de cultivo. • Así, dentro de ciertos cánones comunes a toda la cuenca (lo que Chávez denomina tradición religiosa Yaya – Mama), el Formativo Medio del Titicaca es heterogéneo, reconociéndose dos tradiciones principales a nivel cerámico: Qaluyu en el norte y Chiripa en el sur. Algunos autores (Janusek) han querido ver esta división también en la estatuaria lítica, dividiendo el estilo Pa-ajanu en Asiruni (al norte) y Mocachi (al sur). • A lo largo del formativo medio, los asentamientos previos del formativo temprano muestran una tendencia a la concentración en torno a sitios rituales, posiblemente dedicados al culto a los ancestros y a las fuerzas naturales. FORMATIVO TARDÍO 1 (200 AC–200 DC) • La transición hacia el formativo tardío parece estar antecedida por un ascenso marcado de las aguas del Titicaca (Abbott, Binford et al), que habría vuelto a llenar de agua el lago menor, aparentemente inutilizando rutas de interacción hacia el este de los antiguos centros Chiripa, beneficiando a otros centros ubicados en los contornos del lago menor del Titicaca. • Al mismo tiempo, en la cuenca norte, surge Pucara como heredera de Qaluyu, y su influencia caracterizará el Formativo Tardío 1. • Pucara se remodela como un centro ceremonial sin precedentes en el Titicaca: una plataforma terraceada que alberga tres patios hundidos en la cima y varios otros en los alrededores, con nichos para albergar fardos funerarios. Todo denota una concentración de poder que hace pensar que es tal vez Pucara la primera entidad centralizada del Titicaca. • Pucara no solo influye la cuenca norte y este del Titicaca, sino asimismo su estilo decorativo cerámico (uso de policromía en rojo, beige y negro, delineado inciso de motivos decorativos, frecuente uso del felino de perfil, con cabeza de frente) influye en estilos contemporáneos de la cuenca sudoeste, como Kalasasaya (Tiwanaku I) o Kallamarka, en el valle alto de Tiwanaku. • La iconografía cerámica de Pukara incorpora novedades, como el ícono del “decapitador” con la cabeza trofeo (probable influencia Chavín), o la “mujer del camélido”, personaje frontal que según ciertos autores (Chávez), antecede al Dios de los Báculos de Tiwanaku. • Todos estos elementos serán de influencia decisiva, no solo estilística sino probablemente ideológica, en el desarrollo posterior de Tiwanaku. Representan, en relación al período anterior, una mayor representación de fuerzas humanas, por encima de aquellas que recuerdan a la naturaleza. • Pucara es además la primera formación del circun-Titicaca con probadas relaciones de interacción con otras regiones, entre ellas Cuzco (a partir de los estudios de fuente de obsidiana de Burger et al.), la yunga peruana, y los valles occidentales. • Se ha documentado cerámica Pucara en Moquegua (Goldstein) y textiles Pucara en los túmulos funerarios de Azapa (Muñoz). Según Browman gran parte de las redes de interacción extraregional se deben a Pucara, y son “heredadas” posteriormente por Tiwanaku. • En el sur del Titicaca, si bien es clara la influencia Pucara, se reconocen varios grupos locales autónomos con características propias, que se centran en sitios nuevos o que previamente habían tenido poca importancia. • Las manifestaciones cerámicas locales son distintas, y la presencia de patios hundidos con nuevas características constructivas (presencia de cabezas clava) y de una nueva estatuaria derivada de la anterior (lo que Janusek denomina “estilo Khonkho”), denota la existencia de nuevos grupos de poder, insertos (según las interpretaciones de Stanish) en una dinámica de interacción entre pólites pares, basada en la competencia a través del comensalismo y el festejo. • El sitio de Tiwanaku, en esta época, tiene construido el templete semisubterráneo, y tiene zonas ritualesresidenciales en los contornos. A cerámica emblemática es la Kalasasaya (Tiwanaku I según Ponce). Sin embargo, en el valle se reconocen nucleamientos independientes de Tiwanaku, como Iwawe y Tilata en el valle bajo (Albarracín), o Kallamarka en el valle alto (Lémuz y Paz). • En la cercana cuenca del Katari crece la importancia de Lukrumata y otros sitios como Kirawi y Qeya Kontu. La cerámica es local (Lorokea Fiber, según Bermann), aunque existe presencia del Kalasasaya de Tiwanaku. • En la península de Taraco, se da un fuerte abandono de los grandes sitios previos. Solo el sitio de Kala Uyuni parece concentrar población. La cerámica Chiripa desaparece y es reemplazada por Kalasasaya (Bandy). • En la región de Machaca, surge Khonkho como complejo ceremonial con un patio hundido. A diferencia de varios de los anteriores, Khonkho parece estar asociado más a la actividad pastoril que a los campos elevados de cultivo. • En Santiago de Huata la tendencia a la concentración es mayor que en el período anterior (Lémuz). La cerámica local es de estilo Pana temprano, aunque aparecen influencias de Pucara y Tiwanaku. • En Juli-Pomata, la cerámica local es de estilo Sillumocco, y los sitios principales son Tumatumani y Palermo. • Otras ocupaciones de la época se dan en Titimani, en el margen oeste (todavía no muy bien estudiado) y la Isla del Sol. También es posible que provengan de esta época otros centros de la región, como Pajchiri o Santiago de Ojje. FORMATIVO TARDÍO 2 (200 – 500 DC) • Tras una estabilización del clima, un nuevo ascenso en la humedad del Lago parece favorecer a Tiwanaku, tal vez una vez más inutilizando rutas comerciales preexistentes. Lo cierto es que no se entienden aún con claridad las razones del colapso y desaparición de la centralidad de Pucara, cuyos habitantes subsistirán como modestas comunidades agropastoriles en la fase denominada Huaña. El colapso de Pucara da inicio a este nuevo período del formativo, en el cual el balance de poder favorece, esta vez, a la cuenca sudoeste. • En esta etapa del formativo, los sitios de Tiwanaku, Lukurmata y Khonkho comienzan un acelerado crecimiento, encabezando a las tres unidades territoriales que se constituirán en el núcleo del futuro Tiwanaku (Tiwanaku, Katari y Machaca). • En el sitio de Tiwanaku, cuya zona residencial comienza a crecer, se construye en esta época la plataforma y el primer templete de Kalasasaya, denotando un creciente prestigio y rango. • La cerámica distintiva de Tiwanaku ya no es Kalasasaya sino Qeya (el Tiwanaku III de Ponce). Esta cerámica de pasta beige, con frecuente incidencia del motivo escalonado, y con motivos felínicos que son el prototipo de los posteriores ícono Tiwanaku, comienza a aparecer en un rango espacial más amplio, aunque restringida a contextos ceremoniales y de prestigio. El valle de Tiwanaku, al menos el valle bajo, es incorporado a la formación Tiwanaku. • En el cercano valle de Katari, los campos elevados son controlados por Lukurmata y sus sitios asociados. Lukurmata crece en importancia, realizando alianzas con Tiwanaku (notorias a partir de la presencia de cerámica Qeya) y estableciendo importantes lazos con los valles orientales de Cochabamba. Es posible además que la formación del valle de Katari haya incluido a la península de Taraco, cuyo centro de poder cambia de Kala Uyuni al extremo occidental, en el sitio de Santa Rosa. • Khonkho se constituye en un importante centro en el área de Desaguadero, con un imponente complejo de dos patios hundidos y una plataforma terraceada. Aun faltan estudios por realizarse en Khonkho, que curiosamente sufrirá un fuerte decrecimiento, casi un abandono, en el período Tiwanaku. • Mientras Santiago de Huata también parece “afiliarse” a Tiwanaku, en la cuenca sudeste los grupos de Sillumocco y Ckackachipata tienen escasa presencia de cerámica Qeya. Estos grupos, poseedores de extensos campos de cultivo, entrarán en la órbita de Tiwanaku en el período siguiente. • En resumen, en este período parece comenzar a delinearse la futura hegemonía de Tiwanaku. Por el momento, sin embargo, muchos otros grupos, especialmente Khonkho, son de gran importancia, y la dinámica parece seguir siendo la de la negociación horizontal entre grupos pares, para gestionar el poder y los intercambios y alianzas mutuas. • La cerámica Qeya muestra, en su iconografía, una tendencia a la representación de seres míticos. De la misma manera, es en este período que inicia el consumo de aluginógenos y el uso de incensarios en la cuenca del Titicaca, características que serán típicas de Tiwanaku posteriormente. FORMATIVO EN EL ALTIPLANO CENTRAL Y VALLES ORIENTALES • Las dinámicas del Titicaca en el formativo (con importantes relaciones con valles occidentales y yungas) no están completas sin tomar en cuenta a los desarrollos formativos bolivianos de otros dos grandes polos: Wankarani y los valles cochabambinos, que en este período realizan importantes desarrollos y establecen fuertes dinámicas de vinculación. WANKARANI • Wankarani es reportada por Wassen en la década de 1960 como cultura de los “mounds”, pues su característica principal es el asentamiento en montículos artificiales acumulativos de tipo tell. Wankarani, es según Ponce y otros estudiosos, uno de los primeros grupos en abrazar el sedentarismo, hacia el 2000 AC. Se ubica al sur de Chiripa, en el altiplano de Oruro y el sur de La Paz. Entre los espacios de ambos grupos existe una amplia zona que en la época estuvo virtualmente desierta. Algunos de los sitios principales de Wankarani son Wankarani, La Joya, La Barca, Uspa-Uspa y Wilaque. • Las características de Wankarani han sido bastante bien sintetizadas por Ponce: montículos de habitación, cabezas líticas de camélido, cerámica con antiplástico de mica, espatulada y sin decoración, presencia de figurillas cerámicas. Se ha propuesto que los Wankarani conocieron el trabajo del cobre desde muy temprano, y que, fueron eminentemente pastores, aunque la presencia de azadas de basalto habla asimismo de actividad agrícola. • En contraste con Chiripa, se ha observado que en Wankarani hay tendencia a la realización de rituales a nivel doméstico. Además, se ha propuesto que la dinámica de poblamiento de Wankarani se ha debido a la constante fisión de asentamientos, y no a la fusión como en el caso del circun-Titicaca. • De todos modos, aún queda estudiar en detalle lo Wankarani, pues en muchos casos da la impresión de que las tradiciones Wankarani permanecieran “estancadas” en un enorme rango temporal (ap. 2.000 AC – 1100 DC). Si bien trabajos como los de Beaule han determinado diferencias entre una fase formativa tardía (Niñalupita) y dos correspondientes a los Desarrollos Regionales Tempranos (Isahuara y Jachakala), estas consideraciones son locales y no pueden aplicarse al conjunto de lo Wankarani. • Se ha propuesto la interacción de Wankarani con el Norte Grande de Chile (Rivera 1991) a partir de la evidencia cerámica. Aparentemente, según Ayala, las similitudes cerámicas no son concluyentes, y al menos para Arica y para a zona del salar de Atacama es improbable que la cerámica sea tenga mucha influencia Wankarani. Entre Tarapacá y el Loa, en cambio, las influencias son más visibles. • De todos modos, el escenario más probable no es el de un dominio directo, sino de una interacción horizontal entre grupos más ligado al pastoralismo en el norte chileno, y a la agricultura en el altiplano central boliviano. • Algo más claros quedan los lazos de Wankarani con los valles de la vertiente oriental, en el valle de Cochabamba (Gabelmann), y sobre todo para las fases tempranas del desarrollo formativo de dicho valle, denominado Sierra Mokho. El móvil podría haber sido asimismo de complementariedad aimenticia, intercambiano sal y carne por maíz, como sucede aún hoy en día. COCHABAMBA • Se inserta en esta discusión al foco formativo de Cochabamba por su importancia para entender las dinámicas de interacción entre el altiplano y los valles occidentales. • Cochabamba tiene dos focos formativos principales: uno en el valle central, con el desarrollo Sierra Mokho en el Formativo y los llamados Tupuraya y Mojocoya durante el Intermedio Temprano (contemporáneo al Formativo Tardío del Titicaca), y otro en el valle del sudeste, con el formativo Mizque y el posterior estilo Omereque. La esfera de interacción de la zona de Mizque era más con las tierras bajas, al menos hasta el período Tiwanaku. • El valle central era la vinculación entre el altiplano del Titicaca, el altiplano central, y los valles chuquisaqueños que comunicaban con la zona del salar de Uyuni y por esa vía con San Pedro de Atacama. Se ha sustentado a partir que los textiles que la relación San Pedro – Cochabamba procede del formativo tardío (Ayala, Ayala y Uribe). Asimismo, muchos artefactos como tabletas de madera y textiles, con iconografía “tiwanakoide” de San Pedro, han sido datados en el formativo tardío. • Para la época de Tiwanaku, los valles cochabambinos, chuquisaqueños y potosinos, además del altiplano central y meridional, el norte chileno y las tierras bajas, mantenían una constante interacción, dentro de la cual Tiwanaku era solo un grupo más. Esta fuerte interacción se mantuvo tras el colapso, y posiblemente se originaron con anterioridad. Gracias.