J. Cantera, N. Campos, M.D. Espinosa, A.M. García, Diccionario económico-jurúlico, francés, español, Ediciones de la Universidad de Castilla-La Mancha, Cuenca, 1999, 525 páginas Vivimos una época en la que las cada vez más continuas y seguidas relaciones internacionales, en ámbitos diversos, demuestran la realidad del contacto entre las lenguas y la necesidad de dominar varios idiomas se hace, por tanto, ineludible. Ello es aún más acuciante si cabe, en áreas determinadas (comercio, derecho ... ) en las cuales las relaciones entre países distintos son especialmente fructíferas. Con ello se ve cuán oportuno es conocer otras lenguas, al menos en alguno de sus específicos aspectos, lo que se ha dado en llamar lenguajes específicos. El diccionario que tenemos en nuestras manos responde a esa necesidad de forma erudita clara y metódica. Se nos ofrece la traducción, la equivalencia de voces pertenecientes al campo económico-jurídico integradas en los dos sistemas en cuestión (español-francés), también se incorpora la definición del concepto según el sistema francés (cuando la palabra puede llevar a confusión, por lo que el presente diccionario facilita enormemente que el lector español se haga una idea precisa de lo que el término significa en francés). Por otra parte, se ejemplifican los usos de las palabras en contextos distintos (para comprender con exactitud la palabra en cuestión) y un cuidado sistema de llamadas permite hacerse una idea precisa y concreta de los giros lingüísticos posibles en ambas lenguas. Como afirman los autores: "la comprensión de documentos de indole jurídica y económica resulta a menudo difícil, provocando errores o equivocaciones en su interpretación, ya que una perífrasis sobre un término jurídico o económico puede desembocar en un contrasentido o un error grave de aplicación". Ello no ocurrirá al que consulte el presente diccionario. En esta obra, el profesional y el estudiante españoles de las áreas de economía y derecho -o los traductores- que consulten o trabajen documentos en francés encontrarán un apoyo garantizado y sólido. Pero también es de gran ayuda para periodistas, gente de cultura, en concreto -evidentemente- para los profesores o licenciados en filología francesa. Marta Giné J aner 345