La embriaguez del Verbo Sant Darshan Singh Ji Maharaj El Maestro nos habla sobre la sabiduría de aquellos que están embriagados de amor por Dios. a Verdad es inmutable. Conocer la Verdad y experimentarla nos da un éxtasis que nunca disminuye, nunca termina. Así como la Verdad es invariable, el camino hacia la Verdad es de igual forma inalterable. Los vinos de este mundo nos embriagan por una hora o dos, o quizás por una noche, pero entonces el efecto pasa. La exaltación del Verbo de Dios nunca acaba. Aquellos que han sido bendecidos con él se enloquecen para siempre. En realidad, no están locos, sino que son los más sabios entre los sabios. Saben lo que al final importa. Si parecen dementes, es porque son olvidadizos de sí mismos. Si queremos vencer todos los problemas del mundo, hay tan sólo un remedio: perder toda la conciencia de uno mismo. Y esto se hace posible sólo a través de la gracia de un Maestro perfecto. Dando su propio impulso divino nos trae la conciencia de algo más allá de nosotros mismos, y nos perdemos en L ese hechizo. Una vez que estamos en esa condición, todos los problemas y todas las contrariedades de este mundo nos pasan por encima sin afectarnos de ningún modo. Hay así tan sólo una respuesta al problema del sufrimiento en este mundo: estar perdidos en el encanto que nos hace olvidadizos al sufrimiento mismo. Los Sufies hablan de este estado como Alam - e - Bekhabri o Alam - e - Bekhudi (Conocimiento del Olvido). Pero en realidad no es olvido; es conocimiento de la más alta Verdad. Es por esto que en Sant Mat se nos exhorta a que encontremos un Maestro viviente, por que él es un árbol cuya sombra se esparce por todas partes. *** La Verdad de la cual los Maestros hablan, las regiones y reinos de los cuales hablan, están más allá de tiempo y espacio. Podemos conocer esta Verdad sólo cuando ascendemos más allá de los tres mundos físico, astral y causal. Dadu Sahib está diciéndonos que al llegar donde el Maestro, el cáliz del corazón que está invertido, es enderezado y colmado con el Néctar de Naam. Al beber este Néctar, el espíritu es poseído de una embriaguez que no conoce fin. § C uando los santos y los místicos hablan de la experiencia del amor divino, describen a menudo esta experiencia como una de embriaguez. Ellos comparan al Maestro espiritual con una copa que distribuye el vino de Dios a través de sus ojos. Hablan de este vino como viniendo de la eternidad, como un néctar que calma y eleva al alma. Sant Kirpal Singh Ji escribe, "Cuando este néctar llega, cualquier otro vino parece insípido. Habiendo saboreado el néctar verdadero de la vida, uno dejará mil tareas por sentarse y disfrutarlo. Cada minuto libre será dedicado a su uso; uno reajustará su vida para sacar más y más tiempo para la meditación." Recibir la embriaguez interna con la meditación o en la compañía de un Maestro espiritual viviente es una experiencia diferente de la embriaguez mundana que entorpece la conciencia de uno. Sobre esta diferencia Sant Darshan Singh Ji Maharaj ha escrito: "Cualquier cosa que forme habito, que debilite tu conciencia, se interpone en el www.sos.org/spanish Satsang Semanal, Semana #41 camino de la meta final de tu vida que es liberar tu alma ––tu entidad consciente, de las amarras de la mente y la materia. Y una vez que el alma se sacude de estos grilletes, sólo entonces puede cruzar a las regiones superiores y comulgar con Dios quien es absoluta conciencia”. El néctar embriagante La embriaguez de la cual los santos y los místicos hablan es eterna. No es otra que la del amor de Dios con el cual el alma entra en contacto en la meditación. En esta lectura, Sant Rajinder Singh Ji habla de esta dicha y explica cómo podemos gozar de ella siempre. a razón por la que sentimos tristeza y dolor es porque vivimos en el reino de los sentidos. Es como vivir en un sueño. Todo parece real. Mientras no despertemos del sueño, nuestra existencia física parece ser real. Es como si fuéramos la Bella Durmiente. Mientras no venga el Príncipe Encantador y la despierte del sueño con un beso, ella permanece inconsciente. Nosotros, también, estamos durmiendo. Tenemos que despertar de este sueño y experimentar la realidad de nuestra alma. Cuando lo logramos, entonces permaneceremos en el estado de perpetua bienaventuranza. La bienaventuranza suprema se puede alcanzar cuando dejemos de identificarnos con el cuerpo, la mente y los sentidos, y en cambio vivamos la realidad del alma. Tenemos que retirar la atención del Pag. 2 El estado de bienaventuranza del que goza el alma está más allá de cualquier experiencia en este mundo. mundo externo y enfocarla internamente para conectarnos con el estado de bienaventuranza. Luego nos encontraremos libres de tristeza y de dolor. El estado de bienaventuranza del que goza el alma está más allá de cualquier experiencia en este mundo. Los santos y los místicos que han alcanzado estos estados bienaventurados, han tenido que recurrir a metáforas y analogías para describirlos. Ellos han comparado el éxtasis interno con el matrimonio, con la relación entre el amante y el amado, con el amor entre un padre y el hijo, con la bebida de un néctar embriagante, con la bebida del agua de la vida, con la absorción de la música celestial y con las visitas a los jardines beVolumen 9 tiempos modernos son la televisión y el cine. Dios está sentando dentro de cada uno de nosotros. Él quiere que demos la vuelta hacia él, pero en lugar de eso damos la vuelta hacia la televisión, las películas y numerosos otros pasatiempos. Por vidas enteras hemos estado girando en este carrusel de nacimientos y dad, a toda la creación, a la verdadera conexión con Dios. Ellos vienen a recordarnos que somos, en realidad, alma —una parte de Dios. *** La manera más rápida de encontrar al Señor es mirando en los ojos del de muertes. Dios, en su ansia Maestro. Un profundo amor pasa de sus ojos a los nuestros. El amor de por traer las almas de Dios está buscándonos a través de los nuevo a él, tuvo que toojos del Maestro. El Amado Señor traspasando su amor por nosotros mar una cierta acción para está a través del Maestro. Sus ojos vierten acelerar este proceso len- el néctar dulce. El sol puede iluminar to y doloroso. Lo que Él hizo la tierra con sus rayos de luz, pero fue enviar a sus representantes, algu- cuando el Maestro sonríe, él ilumina nas de sus almas selectas y especial- nuestras almas con una Luz mayor, mente favorecidas, para traer de nue- una que nos trae éxtasis y alegría. Su vo hacia El a las otras almas perdidas. belleza es tan encantadora y tan cautivadora, que deseamos mirarlo a toda Él envía santos y Maes- hora. Su voz tiene un encanto y un tros. Estas almas son uno dulzor que emociona nuestros corazones. con Dios. Hablan las pa- Cada alma experimenta este amor labras de Dios. Actúan se- porque es Dios quien las ha creado y ama a cada una de ellas. Así, cada gún la voluntad de Dios, e El persona que viene a él sostiene su irradian el amor de Dios. propia relación personal con él. Cada fue creada por Dios, y cada una Cuando vienen, traen la alma tiene su propia historia larga de búsfragancia de Dios con queda por El. El trabajo del Maestro traer a cada alma de nuevo a Dios. ellos. Cuando los santos es De ese modo, encontramos la sonrisa toman nacimiento en una del Maestro dándole vida a lakhs forma humana para vivir (centenares de millares) de corazones. Vemos que el prashad que él da eleva entre nosotros en este incontables almas. Y su darshan brilla mundo, vienen a despertar como el sol eterno en toda la creación. § a la humanidad, en ver- Satsang Semanal, Semana #41 Pag. 7 las almas se suponían volverían directamente a El después de una vida. Pero la complejidad de su juego llegó a ser tan intrincada que las almas terminaron siendo atrapadas por vidas y vidas en los diversos mundos. Ellas quedaron atrapadas en el ciclo de nacimientos y de muertes. En este juego magnífico, las almas fueron rodeadas por las envolturas correspondientes a cada plano. En el plano causal, usan un cuerpo causal y tienen una mente causal. En el plano astral, son cubiertas por un cuerpo astral y una mente astral. Y en el plano físico, tienen un cuerpo físico y una mente física. El alma se ha identificado con el cuerpo y la mente, y se ha olvidado de lo que ella misma es y de su Creador, su verdadero Amado. Ha sido alejada por las tentaciones y las seducciones de los mundos más bajos de la creación. Dios estaba impaciente para que sus almas regresaran a El, porque él las creó para que Le amaran y ser amadas por Él. Pero el propósito para el cual ellas fueron formadas solo se lleva a cabo cuando dan la vuelta hacia Él, lo aman, y reciben su amor a plenitud. Dios es absoluta conciencia y toda sabiduría. Él está simultáneamente enterado de cada alma que Él creó, sea que habite en la forma de una persona, de un animal, de una planta, o de una minúscuPag. 6 la hoja de hierba. Él ve cada alma atrapada en el panorama de la vida. Él mira como las especies más bajas de la vida están atrapadas en su mera supervivencia. Cada criatura está intentando satisfacer sus necesidades físicas de alimento, de abrigo, de calor, y seguridad. Dios también ve que las especies más altas de la vida, los seres humanos, están atrapados tratando de abastecer sus necesidades físicas. Pero los seres humanos han recibido una capacidad que los animales no tienen. Es solamente en la forma humana que el alma puede alcanzar a Dios. De este modo, Dios le ha concedido a la humanidad un don inapreciable con la esperanza de que reconozcan que son una parte de Él. Pero en vez de utilizar ese regalo, los seres humanos están ocupados en las mismas actividades de las formas inferiores ––mera supervivencia. Dios observa como los seres humanos pasan sus vidas trabajando para comprar comida, ropa, y pagar su abrigo. Él también observa que los seres humanos tienen diversos pasatiempos que no le ayuden a realizar a Dios. Muchas personas se ocupan en amasar posesiones, riquezas, o propiedades. Otros pasan su tiempo adquiriendo nombre, fama, y poder. Incontables almas están perdidas en los juegos del mundo. Hay muchísimas variedades de entretenimiento que ocupan nuestra atención. Dos de las distracciones más grandes de los Volumen 9 llísimos de flores, fuentes y lagos. Cada persona experimenta la bienaventuranza a su propia manera. Aunque el lenguaje sea diferente, la bienaventuranza es una y la misma. *** La analogía de describir la bienaventuranza con la de beber del néctar divino, aparece en muchas tradiciones religiosas. Los sufíes y los musulmanes hablan de ella como Aab-i-hayat o “el Agua de la Vida”. Los hindúes le llaman Amrit o “el Agua de la Inmortalidad”. Los cristianos también le llaman “el Agua de la Vida”. Los sikhs le llaman Hari Ras o “la Ambrosía Divina”. En el Gurbani de los sikhs se hacen muchas referencias al Hari Ras. La gente bebe vino o toma drogas para llegar a un estado de embriaguez. Pero los santos y los místicos no necesitan beber vino ni tomar drogas para sentirse embriagados; el contacto de su alma y con Dios les produce una embriaguez que supera cualquiera de este mundo. Las escrituras sikhs dicen: Aquel que es despertado para que beba de esta Ambrosía sólo él conoce la historia indescriptible. (M 5 Gauri 13-16) y: Satsang Semanal, Semana #41 Abandona el amor del agua insípida de la maldad, Y bebe de la Ambrosía divina del Nombre del Señor. Porque por no probarla, miríadas se han ahogado, y nuestra alma nunca ha estado en paz. (M 5 Bilawal 802-819) Los embriagantes de este mundo no son duraderos. Aquellos que tratan de ahogar sus tristezas en el alcohol o en las drogas, no encuentran la bienaventuranza permanente. Puede que logren un estado temporal en el que olviden los problemas, pero cuando se acaba el efecto del vino o de las drogas, de nuevo encaran las mismas dificultades. No sólo tienen todavía que encarar los mismos retos, sino que a menudo ellos han empeorado estos problemas, porque ahora necesitan dinero para comprar drogas y alcohol, y ese comportamiento destructivo puede haberles hecho daño a su salud y a su seguridad, como también a la de los demás. Por otro lado, la embriaguez que se obtiene cuando se prueba la bienaventuranza del alma, es permanente y duradera. Es segura. No daña a nadie y está siempre disponible, libre de costo en cualquier momento que uno desee disfrutarla. Gurú Arjan Dev ha dicho: Pag. 3 la embriaguez que se Los ojos del Maestro obtiene cuando se prueba Uno está siempre la bienaventuranza del embriagado alma, es permanente Cuando bebe de la y duradera. Ambrosía. Otros beben embriagantes, Pero su efecto se acaba pronto. La persona embriagada de Dios para bebe de la Ambrosía; calmar la Para ella las demás bebidas se sed, la sed vuelven insípidas. del alma (M 5 Asa 377-11) y: Pura es la Luz y el Jugo de Soma es el Verbo, Un contacto con ellos nos conceden una vida generosa de bienaventuranza eterna. (Ramkali M 5) En la Biblia, Cristo dice: Y deja que se acerque el que esté sediento, y a cualquiera que venga déjale beber el Agua de la Vida libremente. (Apocalipsis 22:7) Mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que brote para la vida eterna. (Juan 4:14) Así como necesitamos beber agua Pag. 4 se calma con el amor de Dios. Ese amor fluye como un río eterno que baña a todas las almas. El alma durmiente, sin embargo, permanece inconsciente de su estado original de bienaventuranza. El alma dotada de poder es consciente de ese amor y siente un éxtasis maravilloso todo el tiempo. *** Una vez bebemos de las aguas de la inmortalidad, nos llenamos de una embriaguez continua. Sant Darshan Singh ha escrito volúmenes sobre este tópico. Él dice: “¿Cuál es la condición de esa alma que retorna para vivir el período de vida que le queda en este mundo? ¿Cómo puede ella olvidar el éxtasis que ha experimentado, el gozo, la paz, la embriaguez que está más allá de la comprensión humana?” Sant Kirpal Singh ha dicho, “Cuando se conoce ese gozo, ese éxtasis, se olvidan todos los demás placeres.” § Volumen 9 Sant Rajinder Singh Ji nos ha contado que la manera más directa de conseguir un impulso espiritual es sentándose en la compañía de alguien que esté rebosante de amor por Dios. Sant Kirpal Singh ha escrito, L "a espiritualidad no se puede enseñar, se debe coger co- mo una infección la cuál se le pasa a otros, los que son receptivos."En esta lectura, Sant Rajinder Singh habla acerca de que es lo que nos priva de recibir la embriaguez espiritual y de cómo podemos remediar nuestra situación vislumbrando la divinidad de Dios a través de los ojos de un Maestro espiritual viviente. Satsang Semanal, Semana #41 ay volúmenes de escrituras en todas las religiones que describen diversas maneras de encontrar a Dios. Hay incontables senderos dando millares de métodos para encontrar al señor. Pero no hay manera más fácil que la de mirar en los ojos del Maestro. Si leemos las escrituras de los tres grandes Maestros, Hazur Baba Sawan Singh Ji Maharaj, Sant Kirpal Singh Ji Maharaj, y Sant Darshan Singh Ji Maharaj, encontramos que todas hablan de los ojos embriagados por Dios de sus propios Maestros. Sant Kirpal Singh Ji dicho de Hazur, "Así como un borrachito se siente agitado mirando la vendimia que salpica en una copa de vino, similarmente, mirando en las copas de los profundos ojos del Maestro, las almas de los devotos se remontan a lo alto en éxtasis divino." *** Mirando en los ojos del Maestro, podemos leer más volúmenes que los que podemos encontrar en los libros. En los ojos del Maestro encontramos la historia del amor. Encontramos el amor de Dios vertiéndose desde ellos. Descubrimos la historia de la eternidad —la historia de nuestra alma y Dios. La historia personal del amor de nuestra alma comenzó cuando Dios deseó amar, así que él separó almas de Sí mismo. Como Sant Darshan Singh Ji solía decir, "Dios estaba completamente solo. Él estaba solo y él deseó tener algunos amantes que le amaran." Así, él separó pequeñas gotas de Sí mismo, las cuales se conocen como almas. Estas almas fueron enviadas a poblar las diversas regiones que él creó. En este juego creado por Dios, Pag. 5