61-T-2002 SALA DE LO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las catorce horas quince minutos del día veintiocho de agosto de dos mil dos. Agréguense los escritos que suscribe el señor José Noé Torres Hernández, Síndico del Concejo Municipal de la ciudad de Nueva San Salvador. Por evacuada la prevención que se le hizo mediante providencia de las catorce horas ocho minutos del día veintiséis de junio de dos mil dos. Del estudio de admisión de la demanda esta Sala considera: Se ha impugnado un acuerdo de fecha diecinueve de febrero de mil novecientos noventa y nueve, suscrito entre dos Municipios: Nuevo Cuscatlán y Nueva San Salvador. Por el citado acuerdo -tal como expone el demandante- se establecieron los límites territoriales entre dichos Municipios. La acción invocada por el demandante es la de Lesividad, regulada en la Ley de la Jurisdicción Contencioso Administrativa en los Arts. 8, 11 lit. b) y 29. Es un requisito fundamental para la conformación de dicha acción, que el acto administrativo cuya ilegalidad se demanda, además de ser lesivo al interés público, debe ser "generador de algún derecho". Art. 8 L.J.C.A. Asunto que debe examinarse. En sentido amplio, la determinación de limites territoriales puede considerarse un acto generador de derechos, por haber favorecido a los Municipios la certeza de su ejercicio en tanto precisaron sus propias extensiones geográficas. Pero el acto favorable, generador de un derecho como acto administrativo, visto en función de su contenido, es el que amplía las facultades de los administrados. Se clasifican en: actos de admisión; actos de autorización; actos de concesión y otorgamiento; y actos de exención o dispensa. (Eduardo Gamero Casado, Derecho Administrativo, El Salvador, 2002, Pág. 13). Expone García-Trevijano Fos que acto favorable es el "que amplía la esfera jurídica del administrado, crea una situación jurídica favorable, libera de una obligación, crea facultades, etc..."(Los actos Administrativos, Madrid, Editorial Civitas, S.A., 1986, Pág. 225). También Eduardo García de Enterría los clasifica como aquellos que afectan a un destinatario externo, favoreciéndole, con la ampliación de su patrimonio jurídico, otorgándole o reconociéndole un derecho, una facultad, un plus de titularidad o de actuación, liberándole de una limitación, de un deber, de un gravamen, produciendo, pues, un resultado ventajoso para el destinatario. (Curso de Derecho Admínistrativo, Tomo 1, Madrid, Editorial Civitas, S. A., 1993. Pág. 546). Así, la doctrina define unánimemente los actos favorables como aquéllos que inciden convenientemente en los derechos del administrado, incrementando efectivamente sus facultades y prerrogativas. En consecuencia de esos efectos favorables producidos por el acto, surge la figura de la Irrevocabilídad de los actos favorables",y se impide a la Administración Pública, que oficiosamente los revoque. Quédale a la Administración Pública como forma para conseguir los efectos de la "revocación" -al percibir o palpar según su juicio- la lesión que el acto está causando al interés público, la acción y proceso de Lesividad, como un mecanismo obligatorio ante la sede jurisdiccional. El acto adversado en este caso, tiene las características de ser un acto Interinstitucional", dado que le dan existencia convencional al mismo dos instituciones municipales de naturaleza autónoma, con personalidad jurídica propia. Es la Administración Municipal la que conforme al Art. 2 del Código Municipal, debe garantizar la participación popular en la formación y conducción de la sociedad local, con autonomía para darse su propio gobierno, el cual como parte instrumental del Municipio está encargado de la rectoría y gerencia del bien común local, en coordinación con las políticas y actuaciones nacionales orientadas a ese bien común, gozando para cumplir con dichas funciones del poder, autoridad o autonomía suficiente. Miguel S. Marienhoff, respecto de los actos institucionales dice: "el acto institucional no se vincula o relaciona inmediata o directamente con los administrados o particulares; se vincula o relaciona con los propios órganos o poderes estatales, contemplando principalmente relaciones entre poderes públicos". El mismo autor agrega: "el acto institucional, "no" incide en forma directa e inmediata en la esfera jurídica del administrado, cuyo "status" de tal no se altera ante la emisión del acto institucional. El derecho subjetivo del administrado, considerado éste en particular, no se afecta ante la emisión del tal acto, pues éste no se vincula o relaciona directa e inmediatamente con los administrados o particulares, sino con los propios órganos o poderes estatales". (Tratado de Derecho Administrativo, Tomo ll, Editorial Abeledo Perrot, año 1992, Buenos Aires, 3a. Edición, Págs. 758, 764).Nótese entonces, en los actos favorables, la necesaria relación que debe haber entre el acto administrativo y los derechos del administrado: el primero amplía al segundo. Para el caso, ningún administrado es "parte" interesada en el acto que se impugna, de tal forma que, de acuerdo a todas las consideraciones antedichas, el objeto de conocimiento de la controversia planteada no es materia de competencia de este Tribunal. En consecuencia, con base en las consideraciones expuestas y normas legales citadas esta Sala RESUELVE: Deciárase inadmisible la demanda presentada por el señor José Noé Torres Hernández, en calidad de Síndico del Concejo Municipal de Nueva San Salvador. PRONUNCIADO POR LOS SEÑORES MAGISTRADOS QUE LO SUSCRIBEN.