33 transformadas (sépalos) y destinado a proteger a los demás

GENIALIDADES
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transformadas (sépalos) y destinado a proteger a los demás órganos florales y
aun algunas veces al fruto hasta su total desarrollo. Generalmente está formado por un solo verticilo d e hojas de estructura muy análoga a la d e las
hojas normales; si están libres se llama el cáliz dialisépalo, y si soldadas, gamosépalo. Hay casos en que el cáliz apenas se desarrolla (vid) o sólo lo hace
en la parte adherida al ovario, faltando casi e n t e r a m e n t e el limbo (Umbelíferas, Araliáceas), casos en que se desarrolla tanto o más q u e la corola (Neguilla), casos en q u e es coloreado d e igual o análogo color que los pétalos
(Acónitos, Capuchina, Clérigos, Espuelas) o de color diferente (Granado,
Fucfisia). Los cálices gamosépalos son los que presentan mayor variedad d e
formas y pueden ser cilindricos (Primavera, Clavel), aorzados (Beleño), inflados o vejigosos (Colleja, Primavera de China, Alkekenge), labiados (Salvia),
espolonados (Capuchina), apeonzados (Eucalipto); también pueden ser regulares (Malva, Clavel, Belladona) o irregulares (Acónito, Polígala, Salvia,Rosa).
El cáliz p u e d e estar libre, soldado con los pétalos (Pasionaria), con los
pétalos y estambres (Alaterno, Almendro) o con los pétalos, estambres y
pistilo, en cuyo caso resulta el ovario infero. E n e s t e último caso continúa
creciendo con el ovario fecundado y q u e d a formando la primera cubierta del
fruto (Granada). Cuando está libre, generalmente se marchita y cae al terminar la antesis y aun alguna vez al comenzarla (papaveráceas), pero otras
veces persiste y acompaña al fruto, ya su p a r t e inferior (Estramonio), ya todo
él (Fresa, Tomate, Hierba mora), y aun p u e d e suceder q u e su tamaño se
aumente considerablemente después de la floración, en cuyo caso se dice
q u e es acrescente (Alkekenge, Nicandro).
Corola. - L l á m a s e así el segundo d e los dos verticilos e x t e r n o s cuando el
periantio es doble. En este caso se halla rodeada p o r el cáliz y rodeando a su
vez a los estambres, o al pistilo si la flor es femenina. Las piezas d e que
consta se llaman pétalos, y éstos rara vez son verdosos (Vid, ramnáceas, juncales); generalmente son coloreados, y p o r su forma y consistencia se diferencian bastante de las hojas. La corola es en unas flores un medio protector de los órganos sexuales (Vid, Boca de dragón); p e r o en otras tiene escasa
influencia en este concepto; p e r o siempre p o r sus colores vivos y, con frecuencia, p o r sus aromas característicos indican a distancia la existencia de
flores abiertas, y advirtiendo así a los insectos que gustan de sus jugos, y
solicitando de este modo las visitas de estos animales, que inconscientement e contribuyen a la fecundación. En muchas flores se advierten disposiciones
especiales que tienden a favorecer esta intervención, útil s i e m p r e e imprescindible en bastantes casos. La corola p u e d e tener, como el cáliz, sus piezas
libres (dialipélala) o soldadas (gamopétala), pudiendo la forma p r e s e n t a r muchas variaciones en uno y otro caso.
Los pétalos pueden ofrecer en sus márgenes las mismas modificaciones
que los limbos de las hojas, y en muchos casos presenta dos p a r t e s marcadamente diversas, una estrecha {uña) y otra ancha {limbo o lámina), que no
falta nunca; la uña es larga en las flores cuyo cáliz es gamosépalo y tubuloso
(Clavel, Colleja, Saponaria), y generalmente corta o rudimentaria cuando el
cáliz es dialisépalo (Amapola, .Malva, Geranio, Zarza, Almendro, Rosa).
. _ En las corolas gamopétalas p u e d e e x t e n d e r s e la soldadura a toda la longitud de los pétalos, no reconociéndose su número sino en los dientes o lóbulos del limbo (Madroñera, Estramonio, Campanillas), o sólo la mitad inferior de los pétalos, en cuyo caso existe un tubo y un limbo estrellado (Adelfa, Buglosa) o limitarse a unirlos en la base en un tubo muy corto o un anillo (Geniianalútea,
Periploca).
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T. II.