SANGRE La sangre puede ser considerada un tipo especial de tejido conectivo, no por contribuir a la integridad estructural del organismo, pero sí en el sentido de establecer una conexión entre tejidos y órganos. La sangre es principalmente un medio de transporte (células, O2, CO2, metabolitos, residuos del metabolismo, hormonas, etc.). Tiene además un papel regulador en la distribución del calor y en el equilibrio ácido básico y osmótico. La sangre, contenida en el aparato circulatorio, está formada de una serie de elementos figurados suspendidos en una fase líquida, el plasma (sustancia intercelular fluida). PLASMA. El plasma se obtiene por centrifugación de la sangre, correspondiendo al sobrenadante; está constituido por agua, proteinas (7%), sales inorgánicas (0,9%) y compuestos orgánicos (aminoácidos, vitaminas, hormonas, etc.). La composición del plasma es un indicador de la composición media de los líquidos extracelulares en general. Proteinas del plasma: Albúmina: sintetizada en el hígado; participa en el transporte de metabolitos y juega un rol fundamental en el mantenimiento de la presión osmótica de la sangre. Fibrinógeno: también sintetizada en el hígado; participa en el proceso de la coagulación sanguínea. Globulinas: transferrina (transporta fierro), ceruloplasmina (transporta cobre), lipoproteínas (transporte de lípidos), inmunoglobulinas (anticuerpos). ELEMENTOS FIGURADOS DE LA SANGRE. Corresponden a las células sanguíneas y plaquetas; se estudian en frotis (extensión de una gota de sangre sobre un portaobjeto, teñida con colorantes especiales que contienen eosina, azul de metileno y azur de metileno. Eritrocitos, (valor normal: 5,4 x 106 eritrocitos/ml). Características estructurales: tienen forma de disco bicóncavo, aunque poseen bastante plasticidad la cual les permite adaptarse a la forma de los capilares; el mantenimiento de la forma bicóncava requiere energía, la cual proviene de la glicólisis anaerobia y de la vía de las pentosas. El diámetro varía según la especie, siendo en el hombre igual a 7,1 µm; existe anisocitosis cuando la sangre contiene un alto porcentaje de eritrocitos con dimensiones anormales (macrocitos, microcitos). Respecto de su estructura, carecen de núcleo y de organelas, contienen alrededor de un 60% agua, 36% hemoglobina y un 4% de otros compuestos (lipoproteínas, enzimas, etc.). En medios hipotónico e hipertónico, los eritrocitos sufren hemólisis y crenación respectivamente. Función de los eritrocitos: por medio de la hemoglobina, participan en el transporte de O2 y de CO2. Vida media. Debido a la ausencia de núcleo y organelas, el eritrocito no puede renovar sus sistemas enzimáticos ni proteinas estructurales. Al cabo de 120 días aproximadamente, el eritrocito "envejecido", de forma esférica y con cambios en sus antígenos de superficie, es desconocido a nivel del bazo principalmente, lugar donde es captado y digerido por macrófagos. Como consecuencia de esta digestión, la parte proteica de la hemoglobina (globina) es degradada a aminoácidos; respecto del grupo Hem, el Fe es reutilizado a nivel de la médula ósea en la formación de nuevos eritrocitos y la porfirina es transformada en bilirrubina, la cual es conducida al hígado por vía sanguínea y ahí es conjugada y eliminada a través de la bilis. Hemoglobina. Es una proteína conjugada constituida por 4 subunidades (2α y 2β); cada subunidad está formada por una cadena polipeptídica y un grupo Hem (derivado de la porfirina que contiene un radical Fe+2). Debido a cambios en la estructura primaria de las cadenas polipeptídicas, hay varios tipos de hemoglobina; tres de ellos son considerados normales: A1 (98% de la hemoglobina en el adulto), A2 (1 a 2%) y F (100% de la hemoglobina en el feto; tiene gran avidez por el O2). Otros tipos de hemoglobina producen formas anormales del eritrocito (poikilocitos), ejemplo: en sickle cell anemia. Leucocitos, (valor normal: 5000-9000/ml) Son células típicas: poseen núcleo, citoplasma y organelas; migran hacia los tejidos en donde realizan su función. Un gran número de leucocitos se adhiere temporalmente al endotelio de pequeños vasos sanguíneos constituyendo el Fig.1 pool de leucocitos marginados. El número de leucocitos varía según la especie y según las condiciones (ejercicio, edad, alimentación, estados patológicos, etc.). Los leucocitos se clasifican en granulocitos y agranulocitos. Los primeros poseen gránulos específicos y, de acuerdo a su afinidad tintorial, se clasifican en: neutrófilos, eosinófilos y basófilos. Los agranulocitos corresponden a linfocitos y monocitos (Fig. 1). Neutrófilos, (55% - 60% de los leucocitos). Características morfológicas: 10-12 µm de diámetro, núcleo lobulado, cromatina densa, presencia de cuerpo de Barr (en la mujer, la cromatina sexual aparece como un apéndice de un lóbulo del núcleo), pocas mitocondrias, escaso Golgi, filamentos en la zona periférica. Gránulos: 1) inespecíficos o azurófilos (corresponden a lisosomas primarios y contienen enzimas hidrolíticas, peroxidasa); 2) específicos (contienen fosfatasa alcalina y fagocitina, proteína antibacteriana). Función: poseen actividad fagocítica. Son considerados la primera línea de defensa del organismo. Vida media: 8 días. Durante parte importante de su vida los neutrófilos están como reserva en la médula ósea. Eosinófilos, (1% - 3% de los leucocitos). Características morfológicas: 9 µm de diámetro, núcleo bilobulado, cromatina densa. Gránulos específicos: (0,1-1 µm de diámetro). Número, tamaño y forma varía según la especie. Contienen cristales y enzimas lisosomales (principalmente peroxidasa; carecen de lisosima). Función: serían atraídos a áreas de reacción antígeno-anticuerpo y fagocitarían los complejos formados. Reserva: en la médula ósea existen alrededor de 200-300 eosinófilos por cada uno circulante. Basófilos, (0% - 1% de los leucocitos). Características morfológicas: 10-12 µm de diámetro; núcleo irregular, bilobulado. Gránulos: número, forma y tamaño varían según la especie. Contienen heparina e histamina. Función: al igual que los mastocitos, los basófilos poseen moléculas de IgE unidas a su superficie por medio de receptores para el grupo Fc de IgE. En presencia de un alergeno, el cual intertactúa con las moléculas de IgE, se produce desgranulación (ver Fig. en coloquio de T. Conectivo); los mediadores farmacológicos liberados tras la desgranulación causan los síntomas adversos de la alergia. Linfocitos, (25% - 33% de los leucocitos). Cantidad: altamente variable, según la especie; ejemplo: humano: 20-35%, rumiantes: 60-70%. Características morfológicas: 6-9 µm de diámetro (varía según especie); núcleo grande, indentado; cromatina densa; escasa cantidad de citoplasma (con pocos ribosomas, Golgi y mitocondrias; carecen de RER), poseen gránulos azurófilos. Linfocitos B y linfocitos T. En la médula ósea y timo, los linfocitos adquieren capacitación inmunológica diferente, diferenciándose a linfocitos B y T respectivamente. Función: 1) los linfocitos B están involucrados en la formación de anticuerpos humorales; 2) los linfocitos T son responsables de la inmunidad celular. Vida media. Los linfocitos T son parte importante del pool recirculante y tienen vida media larga (meses, años). Los linfocitos B tienen vida media corta (semanas, meses). Monocitos, (3% - 7% de los leucocitos). Características: 9-12 µm de diámetro (humano), 15-20 µm (en otros mamíferos); núcleo irregular, con nucléolos (aunque no visibles en frotis); cromatina granular fina; citoplasma más abundante que en linfocitos; gránulos azurófilos (lisosomas). Función. Los monocitos permanecen en la circulación sanguínea alrededor de 1,5 días; luego migran hacia los tejidos en donde se diferencian a macrófagos, los cuales sobreviven por meses y son capaces de división mitótica. Los macrófagos, por su actividad fagocítica, cumplen un rol defensivo, pero además son esenciales en la respuesta inmune. Los macrófagos internalizan el antígeno, lo procesan y luego, en su superficie, exponen los determinantes antigénicos a los linfocitos B para que estos inicien su transformación a célula plasmática. Plaquetas, (25 x 105 - 3 x 105 plaquetas/ml) Características. Las plaquetas corresponden a fragmentos del citoplasma del megacariocito, limitados por membrana celular; carecen de núcleo; son pequeñas (2-4 µm) y con gran tendencia a la adhesión lo que dificulta su recuento. Poseen una zona periférica (unidad de membrana y microfilamentos), una zona hialómera (microtúbulos, microfilamentos) y una región central, granulómera, ocupada por organelas, gránulos y cuerpos densos (sitios de almacenamientos de productos endógenos: ATP, ADP, ATPasa, fosfolípidos, serotonina, glicoproteínas, catecolaminas, trombostenina). Por fuera de la membrana, las plaquetas poseen una capa (15-20 nm) formada por glicoproteínas y polisacáridos ácidos, responsable de la gran adhesividad de las plaquetas. Vida media: Nueve días. Función: las plaquetas participan en la coagulación sanguínea a través de: 1) adherencia de plaquetas en la región dañada del endotelio; 2) reacciones químicas. Cuando el endotelio de un vaso es dañado, ello determina una progresiva aglutinación de las plaquetas, formándose un trombo plaquetario. Paralelamente, el endotelio dañado libera tromboplastina, iniciándose una serie de reacciones que convierten la protrombina en trombina; esta última cataliza la conversión de fibrinógeno en fibrina, la cual polimeriza como una red atrapando eritrocitos y plaquetas para formar el coágulo. Las plaquetas atrapadas, "activadas", liberan el contenido de sus gránulos y de un fosfolípido (a través de un sistema canalicular) que reacciona con otros componentes de la sangre para formar la tromboplastina plaquetaria, la que continúa con la coagulación iniciada por la tromboplastina histológica. En el curso de la coagulación, las plaquetas desarrollan propiedades contráctiles (poseen trombostenina, actina, miosina), permitiendo la retracción del coágulo. En la producción de tromboplastina (Factor 10 activado) participan más de 10 factores denominados factores de la coagulación, la mayoría de ellos presentes normalmente en la sangre. Las plaquetas fagocitan virus, bacterias y partículas inertes. En enfermedades virales, frecuentemente hay aumento del número de plaquetas (trombocitosis). CELULAS SANGUINEAS. VALORES NORMALES Glóbulos rojos: 5,4 x 106 por ml Leucocitos: 5.000 - 9000 por ml Neutrófilos: Eosinófilos: Basófilos: Linfocitos: Monocitos: Plaquetas: 2,5 - 3 x 105 por ml 55-60 % 1-3 % 0-1 % 25-33 % 3-7 %