importancia de la elección de magistrado y presidente de la corte

NÚMERO 70/ NOVIEMBRE/ 2013 IMPORTANCIA DE LA ELECCIÓN DE MAGISTRADO Y
PRESIDENTE DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA
1. ANTECEDENTES
El 14 de octubre del presente año, la Sala de lo Constitucional declaró inconstitucional (sentencia 77‐2013/97‐2013) la elección del abogado Salomón Padilla como Magistrado y Presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), porque su “afiliación partidaria y sus fuertes vínculos de confianza” con el partido FMLN vulneran los artículos 85, inc. 1º y 176, en relación con el art. 172, inc. 3º y 218, de la Constitución de El Salvador (Cn.).
La Sala de lo Constitucional estableció que la Asamblea Legislativa debe proceder a elegir un nuevo Magistrado de la CSJ para integrar la Sala de lo Constitucional hasta el 30 de junio 2021, exclusivamente de la lista que el Consejo Nacional de la Judicatura (CNJ) le envió para las elecciones de la CSJ 2012‐2021 y que además, debe designar al Presidente de la CSJ para el periodo que termina el 15 de junio de 2015. Para esta nueva elección, debe verificar fehacientemente la no afiliación partidaria de los candidatos y comprobar que los mismos cumplen con los requisitos y exigencias constitucionales y legales, de tal forma que su independencia como jueces no esté comprometida.
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El 29 de octubre, la Comisión Política de la Asamblea Legislativa acordó crear una subcomisión para estudiar la elección del nuevo Magistrado y del Presidente de la CSJ. 2. NORMATIVA
Art. 172 Cn., Inc. 3º: “Los Magistrados y Jueces, en lo referente al ejercicio de la función jurisdiccional, son independientes y están sometidos exclusivamente a la Constitución y a las leyes”.
Art. 176 Cn.: “Para ser Magistrado de la Corte Suprema de Justicia se requiere: ser salvadoreño por nacimiento, del estado seglar, mayor de cuarenta años, abogado de la República, de moralidad y competencia notorias; haber desempeñado una Magistratura de Segunda Instancia durante seis años o una Judicatura de Primera Instancia durante nueve años, o haber obtenido la autorización para ejercer la profesión de abogado por lo menos diez años antes de su elección; estar en el goce de los derechos de ciudadano y haberlo estado en los seis años anteriores al desempeño de su cargo”.
Art 186 Cn., Inc. 2º: “La elección de los Magistrados de la Corte Suprema de Justicia, se hará de una lista de candidatos, que formará el Consejo Nacional de la Judicatura en los términos que determinará la ley, la mitad de la cual provendrá
de los aportes de las entidades representativas de los Abogados de El Salvador y donde deberán estar representados las más relevantes corrientes del pensamiento jurídico”.
Art. 218 Cn.: “Los funcionarios y empleados públicos están al servicio del Estado y no de una fracción política determinada. No podrán prevalerse de sus cargos para hacer política partidista. El que lo haga será sancionado de conformidad con la ley”.
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3. ANÁLISIS
El Informe Único de la Comisión de Estudio de la Constitución de 1983 conocido como Exposición de Motivos, en el capítulo relativo al Órgano Judicial, expresa que, para preservar la independencia de este, “el cargo del Presidente de la CSJ es absolutamente incompatible con toda actividad de orden partidista”. Ocho años más tarde, las reformas realizadas a la Constitución en 1991, con el propósito de coadyuvar a lograr la paz en nuestro país, tuvieron como eje central la reforma institucional y, dentro de esta, la eliminación de la histórica vinculación de la Corte Suprema de Justicia al poder político. Considerando estos dos momentos históricos de mucha relevancia para El Salvador, queda claro que la independencia de la más alta magistratura del país es un valor central de nuestro sistema democrático y republicano, el cual se debe garantizar al momento de su elección. La Sala ha establecido que la independencia es una característica indispensable para los Magistrados y Jueces.
La reciente sentencia de la Sala de lo Constitucional que declaró inconstitucional el nombramiento del abogado Salomón Padilla como Magistrado de la CSJ y como Presidente del Órgano Judicial (Inc. 77‐2013/97‐2013), expresa con detalle las razones por las cuales la afiliación política es incompatible con el cargo que él ostentaba y con el ejercicio de la jurisdicción en general. Las personas vinculadas a partidos políticos tienen responsabilidades con estos, de modo que están inhibidas para formar parte de organismos de control institucional. El reto que enfrenta la Asamblea Legislativa y que la ciudadanía salvadoreña exige en la nueva elección de Magistrado y de Presidente de la CSJ, es que se respete la Constitución en sus arts. 176 y 186. El nuevo magistrado debe ser una persona que esté en el listado enviado por el CNJ en 2012 y, sobre todo, que reúna los requisitos de competencia y moralidad notorias exigidos para el cargo de magistrado de la CSJ. La Asamblea también debe apegarse a los procedimientos establecidos en el Reglamento Interior de la Asamblea Legislativa. Sobre la competencia y moralidad notorias requeridas por el art. 176 Cn., la Sala de lo Constitucional ya ha establecido abundante jurisprudencia, (Ej. Inc. 7‐2011, 49‐2011). Al respecto ha manifestado que los candidatos para Magistrados de la CSJ deben acreditar una carrera y aptitudes profesionales específicas que los habiliten para ejercer adecuadamente el cargo, es decir, una trayectoria profesional y personal intachables que garanticen que sus decisiones estarán sometidas únicamente a la Constitución y a las leyes. De este modo, tanto sus actividades de control de los demás órganos e instituciones del Estado como la garantía de los derechos fundamentales de la población, estarían protegidos a través del ejercicio de la judicatura de forma imparcial e independiente.
La Asamblea Legislativa debe llevar a cabo una elección transparente, libre de repartos partidarios y que cumpla con la jurisprudencia constitucional que le obliga a motivar la inclinación hacia una determinada persona. Debe fundamentar por escrito, en el dictamen de la comisión o en el Decreto Legislativo que recoge la elección, de forma clara y con detalle, las razones por las cuales el candidato elegido cumple con todos y cada uno de los requisitos que la Constitución y la jurisprudencia señalan, incluyendo las razones que lo ubican en una posición mejor que los demás candidatos.
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
™ La nueva elección de un Magistrado para la Sala de lo Constitucional y la del Presidente de la CSJ debe hacerse con base en un perfil y procedimientos que cumplan con lo que establece la Constitución, las leyes y la jurisprudencia constitucional. Esto implica que el nuevo Magistrado se escoja de la lista de candidatos de 2012 enviada por el CNJ y el nuevo Presidente, de entre los cinco miembros de la Sala de lo Constitucional. ™ El Reglamento Interior de la Asamblea Legislativa en sus arts. 98 y siguientes, ofrece pautas de procedimiento y transparencia para realizar las elecciones de segundo grado, las cuales deberían respetarse.
™ La elección del nuevo Magistrado de la CSJ y del Presidente de la CSJ debe hacerse exclusivamente con base en criterios de idoneidad para el cargo, ajena a toda dependencia política partidaria y la Asamblea Legislativa deberá motivar por escrito las razones de su decisión. El propósito de esto es que la ciudadanía conozca el fundamento de la elección y que el nuevo Magistrado pueda ejercer sus funciones con exclusivo sometimiento a la Constitución y las leyes.