Las crisis institucionales como la que vive actualmente El Salvador, son importantes para el fortalecimiento democrático y la construcción de ciudadanía. Significan un momento histórico donde se decidirá la vida o la muerte de la soberanía nacional; es decir, la senda que marcará la supervivencia de las libertades y el progreso o su ruina. Esto obliga a analizar con atención, frialdad y sensatez el origen y las posibles consecuencias que dejará la presente crisis institucional, para que la democracia salga victoriosa sobre el autoritarismo. La reacción de la sociedad civil, empresas, universidades, gremios, iglesias, organismos internacionales, países amigos, etc., en favor del cumplimiento de la Constitución de la República, es inequívoca. Se deben acatar las sentencias de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia. La situación actual se resume en los siguientes nueve puntos: 1. Alcanzar y mantener los deberes y derechos civiles que la democracia da por medio de la Constitución y mantener la armonía social a través del libre ejercicio de las libertades, son responsabilidad de los ciudadanos a través de la toma de acciones y hechos concretos. Lo peor sería no hacer nada; 2. El clima social que se vive actualmente en el país, ¿es favorable para tomar decisiones que obligue a los “políticos rebeldes”, incluyendo a la presidencia de la República, al cumplimiento de la Constitución? Este es el momento para actuar, la inclinación generalizada de las mayorías es que se cumpla con lo que manda la Constitución y el pueblo es el soberano. Hay que escuchar la voz del pueblo. 3. Entre los puntos débiles de los transgresores de la Constitución, está la emisión de decretos legislativos que irrespetan las normas vigentes y no cumplen con la mayoría calificada en la Asamblea Legislativa. Son 50 diputados perturbadores, que actúan por línea partidaria y que aparentemente lo hacen por “venganza” debido a que algunos fallos de la Sala Constitucional han afectado sus privilegios políticos. 4. Este grupo de diputados acudieron a la Corte Centroamericana de Justicia, a sabiendas que ésta no tiene jurisdicción en materia constitucional en El Salvador. 5. La vergonzosa y violenta toma de posesión (usurpación de funciones) de la CSJ, apoyados por la fuerza de un sindicato y sumadas a la pasividad de la PNC, posibilitaron que el presidente de la Asamblea Legislativa y otros diputados pasaran a la historia con la simbólica fotografía del 16 de julio, donde le levantan los brazos al supuesto nuevo presidente de la CSP. Dicho acto puso al descubierto la calidad moral del abogado que pretende la presidencia de la CSJ, particularmente al forzar –con un cerrajero- las puertas de las oficinas de los magistrados electos. 6. Ha sido evidente que el presidente de la República ejerce un liderazgo debilitado, especialmente por las decisiones controversiales que ha tomado en perjuicio de la armonía social y el Estado de derecho, ya que la vía que sigue irrespeta la división de poderes y contradice la demanda de miles de ciudadanos. Si ejerciera un liderazgo afín al derecho, la gobernabilidad democrática sería su mejor legado. Elaborado por un ciudadano que le pidió a @opinandoensv , en su calidad de miembro de dicha red social, comnpartirlo de manera anónima. Este ensayo no refleja necesariamente la posición de @opinandoensv al respecto. Julio/2012 7. La aritmética legislativa ha hecho que el FMLN haga arreglos con el CN, GANA y PES para controlar el aparato estatal, nombrando a funcionarios obedientes en la Corte de Cuentas, Tribunal Supremo Electoral, Fiscalía General y otros, garantizando de esta manera la impunidad requerida para gobernar de espalda a la ciudadanía. 8. También vale la pena destacar la Ley de Acceso a la Información Pública, la cual ha sido bloqueada por el presidente de la República al rechazar las ternas propuestas (30 candidatos) y obstaculizar la creación del Instituto que manda la ley. 9. La fortaleza mostrada por los defensores de la Constitución y la independencia del poder Judicial, merece un reconocimiento ciudadano. Ya que la democracia se fundamente en la separación e independencia de los tres poderes de Estado. No existe jerarquía, los tres son iguales dentro de sus propias competencias. Por tanto se deben nombrar funcionarios probos, éticos, conocedores de las leyes y totalmente independientes, como los cuatro actuales magistrados de la Sala de lo Constitucional. Reflexión ciudadana Los ciudadanos salvadoreños estamos conscientes que esta crisis institucional ha sido creada por los dirigentes y partidos políticos que hacen mayoría simple y que ostentan la presidencia de la Asamblea Legislativa 2012-2015. Es una crisis que afecta a todo el país y donde no habrá vencedores ni vencidos, puesto que no se trata de bandos en contienda ideológica. De lo que se trata es de defender los principios constitucionales, que se ven amenazados por intereses ajenos a la voluntad popular. Para solucionar o superar esta crisis institucional es preciso que impere el respeto a la Carta Magna y salga fortalecida la institucionalidad democrática. En este sentido, es conveniente divulgar y promover el acatamiento de las sentencias de la Sala de lo Constitucional y la permanencia del Dr. Belarmino Jaime dentro de dicha sala. Para ello hay que circular todo tipo de documentos e iniciativas a través de radio, televisión, Internet, Twister y facebook, para que la población esté informada y se involucre en defensa de las libertades y la consolidación de la democracia en El Salvador. Condiciones para resolver conflicto 1. Que la Asamblea Legislativa acate los fallos de la Sala de lo Constitucional, y proceda a la elección de magistrados con base a honorabilidad y competencia: 2006 y 2012, así como a un nuevo Fiscal General; 2. El retiro inmediato del amparo presentado a la Corte Centroamericana de Justicia, que no tiene jurisdicción en asuntos constitucionales de El Salvador; 3. Que el Presidente de la República facilite el diálogo entre los partidos para que (después de acatar las sentencias de la CSJ), procedan a nombrar a los magistrados para el período correspondiente; 4. Que los países y organismos internacionales colaboren de manera respetuosa a la soberanía del país, para que prevalezca el Estado de derecho en El Salvador. 5. Que en forma inmediata renuncien los abogados electos inconstitucionalmente en abril del 2012. 6. Que prevalezca la inamovilidad del magistrado Belarmino Jaime de la Sala de lo Constitucional (este punto no es negociable). Elaborado por un ciudadano que le pidió a @opinandoensv , en su calidad de miembro de dicha red social, comnpartirlo de manera anónima. Este ensayo no refleja necesariamente la posición de @opinandoensv al respecto. Julio/2012