Elementos constituyentes de un sistema dual de formación profesional Los ejemplos expuestos anteriormente de los Países Bajos, Dinamarca y Noruega ponen de relieve el esfuerzo por procurar una garantía de formación a los jóvenes que finalizan los estudios escolares. A diferencia de Alemania, con el sistema de transición cuantitativamente exhaustivo, los esfuerzos en aquellos países van encaminados a vincular diferentes modalidades de formación con una titulación equivalente para la formación. La formación profesional austriaca persigue esta misma finalidad. Ejemplos internacionales También en Austria la formación profesional goza de una consideración más elevada. Cerca del 40% de los jóvenes en Austria cursa, una vez terminada la escolaridad obligatoria, una profesión oficialmente reconocida. Otro 40% opta por escuelas de formación profesional medias o superiores. Así pues, en total el 80% de los estudiantes austriacos se decanta por una salida de formación profesional. La formación profesional se desarrolla aproximadamente a partes iguales en la modalidad dual o escolar. Las escuelas de formación profesional a tiempo completo se dividen en escuelas medias (por ejemplo, escuelas técnicas o empresariales, escuelas de comercio, escuelas para profesiones económicas), escuelas superiores (por ejemplo, instituciones superiores técnicas y empresariales, academias de comercio, instituciones superiores para profesiones económicas, instituciones superiores de turismo) y escuelas de ciencias sanitarias. Las escuelas superiores de formación profesional (BHS) otorgan, junto a la titulación profesional, el derecho general de acceso a estudios universitarios. Austria Junto a la yuxtaposición de modalidades de formación duales y escolares, en Austria se creó, mediante la formación profesional integradora (cf. Ministerio Federal de Economía, Familia y Juventud 2012: 32 y sig.) un modelo flexible para personas desfavorecidas en el mercado laboral. El objetivo consiste en permitir a estas personas la adquisición de una formación profesional, así como la integración en la vida profesional. Existen dos posibilidades de formación profesional integradora: en el caso del tiempo de aprendizaje prolongado, se prorroga la duración legal de aprendizaje normalmente un año, en casos excepcionales hasta dos años. En el caso de optar por una cualificación parcial (duración 1–3 años) solamente se aprende una parte de la profesión o de varias profesiones. Formación profesional integradora Desde la instauración de la formación profesional integradora en 2003 cabe detectar un número creciente continuado de jóvenes que reciben formación bien durante el aprendizaje prolongado o en forma de cualificación parcial. En total, a finales de diciembre de 2011 había cerca de 5.500 aprendices matriculados en la formación profesional integradora. Los resultados de un estudio actual (cf. Dornmayr 2012) sobre la incorporación profesional de los titulados de la formación profesional integradora (IBA) de los años 2003–2011 revelan, entre otras cosas, que la IBA «funciona» y que muestra efectos positivos en el sentido de una mejor integración en el mercado laboral. Tanto la integración al mercado laboral a corto como a largo plazo de los titulados discurre bastante más favorablemente que la de quienes finalizan prematuramente la formación. Efectos positivos 51