El desarrollo social de los adolescentes con sordera

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El desarrollo social de los adolescentes con sordera
En este artículo reflexionamos sobre la socialización del alumnado sordo en centros
educativos ordinarios en modalidad oral. Se han estudiado las relaciones familiares
y con los compañeros en dos grupos de veinte adolescentes, sordos y oyentes.
La edad del alumnado se encuentra entre los doce y los diecinueve años.
Veintiseis están en la enseñanza secundaria obligatoria y catorce en la postobligatoria.
El alumnado con sordera se distribuye, según su pérdida auditiva, en tres alumnos con
sordera severa y diecisiete con sordera profunda.
Dieciocho llevan audífonos digitales y dos se han implantado en la pubertad.
LAS RELACIONES SOCIALES CON LOS COMPAÑEROS DE EDAD
Se ha aplicado un sociograma y una entrevista individual sobre las
amistades.
En el sociograma observamos que dentro del grupo clase, los
adolescentes con sordera no ocupan posiciones de liderazgo, un
70% está integrado, un 20% está poco integrado, y un 10% no
está integrado. Este último grupo se corresponde con dos chicos
sordos que están al final de la adolescencia y cursan estudios
postobligatorios. Entre los adolescentes oyentes hay un 10% de
líderes, un 80% de alumnos integrados y un 10% de alumnos poco
Mireia Rom
y Núria Silvestre
integrados (Rom y Silvestre, 2012).
Los adolescentes con sordera que tienen mejores amistades,
también con jóvenes sordos, son un 40% al inicio de la
adolescencia, un 56% en la adolescencia media y un 50% al final
Grupo CER-GISTAL (Centro de
Investigación Psicoeducativa sobre
Sorderas y Otras Dificultades
Comunicativas). Universidad
Autónoma de Barcelona
de la adolescencia. Los adolescentes sordos que tienen mejores
amistades oyentes son el 100% al inicio y durante la adolescencia
media, pero desciende a un 33% al final de la adolescencia.
Vemos, pues, que los adolescentes con sordera mantienen en porcentajes más estables las mejores amistades cuando éstas son con
estudiantes sordos que cuando son oyentes.
Posiblemente, la diversidad de trayectorias en la postobligatoria
provoca en los adolescentes sordos la pérdida de amistades
oyentes, al no compartir un tiempo y un espacio diario con sus
mejores amistades anteriores (Rom y Silvestre, 2011).
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Otro dato importante es que en esta muestra, las chicas sordas
Entre los adolescentes con sordera, el 10% de los chicos y el 30%
tienen una mayor tendencia a tener mejores amistades sordas que
de las chicas exponen que intentan convencer a sus padres,
los chicos. El 70% de las chicas con sordera tiene mejores
mientras que esta posibilidad no la contemplan los adolescentes
amistades sordas y el 30% de los chicos sordos tienen mejores
oyentes.
amistades también sordas.
Sobre la confianza, los chicos sordos, las chicas sordas y los chicos oyentes expresan que tienen más confianza con sus padres, en
LAS RELACIONES FAMILIARES
porcentajes del 40, 45 y 40% respectivamente. Por el contrario, sólo
Hemos entrevistado a los participantes sobre la autoridad y la con-
un 10% de chicas oyentes manifiesta que tienen más confianza con
fianza respecto a los padres y a los amigos comparativamente
sus padres, mientras que el 50% expresa que tiene más confianza
(ver gráficas 1 y 2). Encontramos que los
chicos sordos, las chicas sordas y los chicos oyentes tienden a hacer más caso a la
autoridad de los padres, en porcentajes del
60, 50 y 40% respectivamente. Entre las
chicas oyentes, un 30% hace caso de la
autoridad de los padres, mientras que un
50% expone que, depende de la situación,
con sus amistades. De los cuatro grupos de
Los resultados muestran
una relación social
bastante normalizada
entre los adolescentes sordos
y sus iguales de edad
hace más caso a los padres o a los amigos.
adolescentes, las chicas oyentes son las que
menos respetan la autoridad de los padres y
muestran una menor confianza hacia ellos.
Los adolescentes con sordera presentan
una relación menos conflictiva en casa y,
por tanto, la familia vivirá la adolescencia de
este hijo o hija con más tranquilidad en
comparación con otras familias que tienen
Gráfica 1
Porcentaje de adolescentes que hacen más caso a la autoridad de los padres o de los amigos
chico sordo
chica sorda
chico oyente
chica oyente
decido yo
convenzo a los padres
depende de la situación
amigos
padres
0
18
10
20
30
40
50
60
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Gráfica 2
Porcentaje de adolescentes que muestran más confianza con sus padres o con sus amigos
chico sordo
chica sorda
chico oyente
chica oyente
22
igual
11
depende de la situación
22
amigos
45
padres
0
10
20
30
40
50
adolescentes oyentes. Que el adolescente con sordera sea excesi-
En la enseñanza secundaria postobligatoria aparece un cierto
vamente sumiso y obediente ante la autoridad de los padres puede
porcentaje de alumnado sordo no integrado dentro de la clase
tener también repercusiones negativas en su autonomía, en su
y con relaciones de amistad débiles. Estas dificultades se dan
toma de decisiones, en la elaboración y defensa de opiniones y sus
más entre los chicos sordos que en las chicas sordas. Uno de
criterios propios.
los factores que puede influir en estos resultados es el hecho
que las chicas sordas tienden más a tener amistades también
DISCUSIÓN E IMPLICACIONES EDUCATIVAS
sordas conjuntamente con amistades oyentes. Conocer y esta-
Los resultados del estudio muestran, en general, una relación
blecer relaciones de amistad con otros adolescentes sordos
social bastante normalizada entre los adolescentes sordos y sus iguales de edad;
aunque aparecen aspectos más débiles
que deben ser tenidos en cuenta por el
entorno educativo. Durante la enseñanza
secundaria obligatoria hay una buena
integración social del alumnado con
sordera dentro de la clase y un mayor
número de mejores amistades con
otros adolescentes, oyentes y sordos.
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puede ser especialmente importante para
La competencia
comunicativa
del alumnado con
sordera influye
significativamente
sobre la posición
social en clase
aquellos chicos y chicas con sordera que
muestran una situación social y de amistad más débil y pueden tener un mayor
riesgo de exclusión social (Antia, Stinson
y Gonter, 2002).
El estudio muestra también que la
competencia comunicativa del alumnado
con sordera influye significativamente
sobre la posición social en clase y sobre
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el número de mejores amistades que
poseen.
El profesorado de secundaria puede favorecer la socialización de dicho alumnado mediante la acción tutorial, aportando
información sobre las implicaciones de la
sordera, manifestando una actitud
empática hacia el adolescente sordo, y a
través de la metodología educativa utiliza-
El profesorado
de secundaria
puede favorecer
la socialización
de dicho alumnado
mediante
la acción tutorial
da (las actividades en pequeño grupo, la
en ellos unas buenas expectativas y
confianza en sus posibilidades.
Así mismo, la familia debe fomentar un
lenguaje emocional y mentalista, sin
reducir la complejidad cognitiva y
lingüística en las comunicaciones con el
hijo sordo. Las conversaciones familiares
que fomentan la discusión constructiva:
opinar, argumentar, discrepar, consensuar, etc. permiten al adolescente con
gestión de la conversación grupal incor-
sordera desarrollar unas habilidades
porando al compañero con sordera, etc.). Estas actuaciones in-
comunicativas y sociales, en el núcleo familiar, que podrá ge-
ciden en la competencia curricular del alumnado, pero también
neralizar y aplicar en las comunicaciones informales con igua-
en su competencia social, comunicativa y personal (Gonter
les de edad y en las comunicaciones formales en el grupo clase.
1999; Silvestre 2005).
Finalmente, cabe recordar que las nuevas generaciones de
En el ámbito familiar es importante que los padres fomenten la
adolescentes con sordera, implantados precozmente y con un
autonomía personal y social del hijo con sordera a través de la rea-
desarrollo lingüístico y comunicativo mucho más normalizado y
lización de actividades extraescolares o actividades independien-
paralelo al desarrollo lingüístico normativo de los niños oyentes,
tes, en ámbitos sociales diversos; que le ofrezcan una vida expe-
seguramente mostraran también una interacción social mucho
riencial rica y se muestren exigentes hacia sus hijos para generar
más óptima.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Antia, S.; Stinson, M. S.; Gonter, M. (2002). Developing membership in the education of deaf and hard-of-hearing students in inclusive
settings. Journal of deaf studies and deaf education, 7 (3), 214-229.
Gonter, M. (1999). Including the kids across the hall: collaborative instruction of hearing, deaf and hard of hearing students. Journal
of deaf studies and deaf education, 4 (3), 176-190.
Rom, M.; Silvestre, N. (2011). La amistad en adolescentes con sordera escolarizados en centros ordinarios, en modalidad comunicativa oral. Educar, 47 (2), 341-364.
Rom, M.; Silvestre, N. (2012). Las relaciones sociales entre adolescentes sordos y sus compañeros de clase oyentes. Infancia y
aprendizaje, 35 (1), 5-22.
Silvestre, N. (2005). La comunicación en la escuela inclusiva: la atención al alumnado sordo. En: Las respuestas a las necesidades
educativas especiales en una escuela vasca inclusiva. Actas del Congreso Guztientzako Escola (pp. 197-216). Vitoria: Servicio Central
de Publicaciones del Gobierno Vasco.
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