ZAGROS SPORTS Club de Salud y Deporte La importancia del estiramiento El estiramiento es una técnica englobada dentro de la cinesiterapia que pretende “alargar” estructuras musculares o tejido conjuntivo para mantener o mejorar las propiedades de extensibilidad y elasticidad del músculo. Antes de comenzar a realizar los estiramientos es conveniente, que para obtener un óptimo resultado, comience a hacerse bajo la supervisión y dirección de un especialista durante al menos tres sesiones para que nos haga sentir mejor el estiramiento y aprendamos a escuchar a nuestro cuerpo. Consideramos el estiramiento como técnica de tratamiento de contracturas musculares y prevención de futuras lesiones. Entre otros beneficios del estiramiento podemos señalar: • Antiálgico y antiespasmódico en contracturas, agujetas, calambres y dolores postcompetición. • Aumenta la amplitud articular. • Aumenta la temperatura del tejido. • Mejora de la musculatura atrofiada. • Aumenta el flujo y retorno sanguíneo en edemas locales y en la recuperación postesfuerzo. • Mejora la extensibilidad y elasticidad. • Mejora la concentración mental. • Mejora de la velocidad y coordinación en los movimientos, y por tanto la fuerza y potencia. • Relajación de la musculatura. ¿Cómo me tengo que estirar? Antes del estiramiento es conveniente realizar un calentamiento general. No es conveniente estirar sin que los músculos estén calientes. Hay una manera correcta y otra incorrecta de estirar. La ZAGROS SPORTS Club de Salud y Deporte manera correcta es un estiramiento relajado y sostenido, con la atención concentrada en los músculos que se están estirando. La manera incorrecta (por desgracia practicada por mucha gente), es hacer movimientos de rebote o estirarse hasta el dolor. Si te estiras correcta y regularmente notarás que cada movimiento que realices se hace más fácil. Llevara tiempo soltar un músculo "apretado" o un grupo de músculos, pero el tiempo que empleas se te olvidara pronto cuando empieces a sentirte mejor. El estiramiento fácil Cuando comiences un estiramiento, dedica de 10 a 30 segundos al estiramiento fácil. ¡¡no hagas rebotes!!. Llega hasta el punto donde sientas una tensión moderada y relájate mientras mantienes el estiramiento. La sensación de tensión debería disminuir a medida que vas manteniendo la posición correspondiente, si no ocurre así, suéltate un poco hasta que encuentres el grado de tensión que te sea cómodo. El estiramiento fácil reduce la tirantez muscular y prepara a los tejidos para el estiramiento evolucionado. El estiramiento evolucionado Después del estiramiento fácil, avanza lentamente y sin brusquedades hacia el estiramiento evolucionado. Alarga el estiramiento fácil de 2 a 3 cm, hasta que notes otra vez una moderada tensión. Mantén la posición de 10 a 30 segundos y controla la situación. Al repetir el ejercicio la tensión debería disminuir; si no ocurre así, suéltate ligeramente. El estiramiento evolucionado tonifica los músculos y aumenta la flexibilidad. La respiración La respiración debería ser lenta, rítmica y controlada. Si estas inclinándote hacia delante para realizar un estiramiento, espira al hacerlo y luego respira lentamente mientras lo mantienes. No contengas nunca la respiración mientras estiras, estarías limitando ZAGROS SPORTS Club de Salud y Deporte el aporte de oxígeno a tus músculos. Si una posición de estiramiento inhibe tu manera natural de respirar, entonces es obvio que no estás relajado. En ese caso suéltate un poco hasta que puedas respirar naturalmente. El estiramiento asistido con entrenador personal El estiramiento realizado con la ayuda de un entrenador personal puede ser mucho más eficaz que el hecho en solitario. Esto resulta evidente en los estiramientos isométricos y en los realizados mediante el sistema FNP, y es palpable desde la primera sesión de estiramientos. Además el entrenador evaluará su posición y sabrá exactamente sobre que cadenas musculares trabajar, multiplicando así sus beneficios. Si tiene la oportunidad, no dude en probar sus beneficios. Contraindicaciones A continuación se exponen algunas situaciones ante las cuales no realizar los ejercicios: • Fracturas no consolidadas. • Proceso inflamatorio agudo. • Rotura (tendinosa, muscular, aponeurótica, ligamentosa) en fase aguda. • Hematoma reciente. • Lesiones de nervios periféricos. • Enfermedad muscular (miopatía). • Heridas y cicatrices recientes.