Poda para aumentar la p

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TierraAdentro
septiembre-octubre 2006
NUEVO ENFOQUE TECNOLÓGICO
Poda para aumentar la p
Brote principal de la rama siléptica
L
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a baja productividad del palto es
uno de los principales problemas
del cultivo. Se estima que el rendimiento promedio en Chile sólo alcanzó
a poco más de seis toneladas por hectárea
(t/ha) en el año 2005, mientras que, según
la literatura internacional, en climas subtropicales áridos puede producir hasta
15 t/ha y en climas subtropicales húmedos hasta 25 t/ha. Así, el palto Hass
tiene en Chile un rendimiento promedio
inferior a su potencial.
La productividad del palto está directamente relacionada con el comportamiento fisiológico de sus brotes. Dicho funcionamiento se expresa correctamente en la
obtención de un número específico de
flores y en la formación de una cantidad
adecuada de hojas activas, en que las
hojas posibilitan una adecuada regulación
térmica mediante la transpiración de agua
y permitén la asimilación fotosintética de
anhídrido carbónico (CO2) para ser usado
en el proceso de producción de carbohidratos. Por lo tanto, las expectativas del
agricultor en un huerto de buen funcionamiento son que las flores sean polinizadas,
que cuajen en frutos y que éstos permanezcan en el árbol hasta la cosecha.
No obstante, el crecimiento de la
parte aérea del palto no es uniforme. Los
árboles presentan centros de producción
no definidos, distribuidos al azar, y el
aumento de la productividad queda restringido por la falta de una apropiada
combinación de brotes de diferentes tipos,
Brote lateral
Foto 1. La rama siléptica desarrolla
en forma simultánea un brote principal y uno o más brotes laterales.
que permitan cumplir, simultáneamente,
las funciones de crecimiento vegetativo
y las funciones reproductivas. Los brotes
que principalmente influyen en estas
funciones son dos: brotes silépticos y
brotes prolépticos. Los brotes silépticos
corresponden a aquellos que aparecen
en forma lateral desde otro brote en
crecimiento (foto 1). Los brotes prolépticos,
por su parte, son generados desde yemas
dormidas. Aun cuando es difícil reconocer
las diferencias entre ambos a través de
fotos, la correcta identificación del brote
proléptico se hace cuando el evaluador es
capaz de reconocer un grupo de yemas
rodeando la base del brote (foto 2, página
16). Este anillo de yemas se forma como
resultado de una detención en el crecimiento del brote principal desde el cual
nace el brote en evaluación. Cuando no
se encuentra dicho anillo de yemas, se
reconoce que el brote se desarrolló en
forma simultánea con el brote principal,
denominándose siléptico. Las ramas del
palto presentan combinaciones de ambos
tipos de brotes.
Manejo de los brotes
En esta perspectiva, investigaciones
hechas en Chile y en el extranjero demuestran la importancia de considerar
un adecuado manejo de los brotes, los
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roductividad del palto Hass
La productividad de los paltos en Chile tiene la posibilidad de aumentar considerablemente. Para ello es
necesario manejar los brotes que cumplen las funciones
de crecimiento y las funciones reproductivas. Prácticas
de poda y ortopedia de los árboles destacan como
herramientas preferentes para lograrlo en forma coherente con las buenas prácticas agrícolas. Con ese fin,
INIA desarrolla el proyecto “Aumento de la producción
de paltas mediante el diseño de un nuevo sistema de
poda basado en el estudio arquitectónico y fisiológico
de dos tipos de brotes”.
la planta como consecuencia de una
menor distribución de carbohidratos hacia
la raíz.
En la Región de Valparaíso existe un porcentaje
mayor de brotes prolépticos que silépticos. Lo
anterior plantea un desafío desde el punto de vista
del manejo de los huertos
que crecen en distintos períodos a lo
largo del año y en forma independiente
del crecimiento de raíces. Los estudios
realizados indican que el palto presenta
una floración extendida, simultánea con
frutos recién cuajados y otros maduros,
lo que genera una situación de competencia por nutrientes entre los órganos
en crecimiento. Para superar en parte
la situación descrita, dichas investigaciones han mostrado que es posible
hacer un manejo de anillado de algunas
ramas, lo que permitiría crear condiciones para una adecuada floración y cuaja,
sin embargo, al mismo tiempo se produciría un deterioro del vigor general de
En otros ensayos experimentales se
ha evaluado la aplicación al follaje, o la
inyección al tronco, de reguladores de
crecimiento, y se ha medido su efecto
sobre una reducción del crecimiento vegetativo del palto. Resultados parciales
de esos trabajos indican que es posible
reducir el largo de los brotes y aumentar
rendimiento. Sin embargo, posteriormente, un nuevo estudio mostró que, a pesar
de que estos reguladores de crecimiento
pueden reducir el crecimiento vegetativo
de primavera y de que pueden aumentar
la cuaja al incrementar la distribución de
carbohidratos al fruto recién cuajado, el
efecto en el aumento de la producción
se vería anulado en árboles de alto rendimiento debido a una fuerte caída de
los frutos en verano.
Recientemente se ha propuesto en
California que la productividad del palto
está asociada con el tipo de brotes que
desarrolla este cultivo. La proporción de
brotes silépticos y prolépticos destacan
como elementos necesarios a considerar
en la evaluación de la condición productiva de los huertos de palto. Las prácticas
de poda, ortopedia (bajada de ramas)
resaltan como alternativas agronómicas
de preferencia para la modificación de
dicha proporción (foto 3, página 17). Sin
embargo, estas prácticas no han sido
definidas en forma sistemática para el
palto, en buena parte por el desconocimiento de la arquitectura del árbol y de
su funcionamiento.
Un nuevo enfoque
El Centro Regional de INIA en la
Región de Valparaíso ejecuta un proyecto
financiado por INNOVA CHILE de CORFO,
para identificar el porcentaje de ambos
tipos de brotes en huertos de la zona y
asociar estos porcentajes con datos productivos. El proyecto plantea evaluar la
proporción y comportamiento fisiológico
de brotes silépticos y prolépticos, y diseñar una propuesta de poda acorde con la
obtención de un árbol equilibrado en su
crecimiento vegetativo y reproductivo.
Los resultados preliminares del proyecto, denominado “Aumento de la producción de paltas mediante el diseño de
un nuevo sistema de poda basado en el
estudio arquitectónico y fisiológico de
dos tipos de brotes”, permiten establecer
que en la Región de Valparaíso existe un
porcentaje mayor de brotes prolépticos
que silépticos. Lo anterior plantea un
desafío desde el punto de vista del manejo de los huertos para lograr un incremento de la brotación siléptica, la cual
en combinación con la brotación proléptica permite alcanzar mayores niveles de
productividad que la brotación proléptica
por sí sola.
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Una mirada fisiológica
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Además, el proyecto se encuentra
evaluando el comportamiento fisiológico
de los brotes del palto. Datos preliminares
indican que existen diferencias en el
comportamiento fotosintético de las hojas, dependiendo si se encuentran ubicadas en brotes silépticos o prolépticos.
Las diferencias podrían estar asociadas
a la adecuación de los brotes de tipo
proléptico a las condiciones de bosques
con sombra donde originalmente crece
el palto, y a la adaptación de brotes de
tipo siléptico para explorar el medio en
bosques con árboles de gran altura, en
busca de condiciones de mayor luminosidad. Estos aspectos son relevantes en el
diseño de un sistema de poda en el que
se considere la distinta utilidad de los
dos tipos de brotes.
Brotes prolépticos laterales
Anillo de yemas
Tecnologías de poda
La oferta tecnológica en Chile se ha
centrado preferentemente en la disponibilidad de paquetes tecnológicos desarrollados en otros países. Existen empresas exportadoras que ofrecen a sus
asociados programas de conducción y
poda basados en dichas tecnologías. Se
trata de una ventaja competitiva respecto
de otras empresas que no han realizado
un esfuerzo similar en adquisición de
nuevas tecnologías.
El proyecto de investigación que lleva
a cabo el INIA de la Región de Valparaíso
está enfocado a complementar, con experiencias nacionales, las tecnologías que
se aplican actualmente –incorporando el
conocimiento sobre los brotes productivos
del palto a las prácticas agronómicas–, y
a proyectar correcciones a las técnicas ya
empleadas.
Foto 2. A diferencia de la rama siléptica, la base del brote proléptico
presenta un anillo de yemas alrededor suyo. El anillo de yemas (ver
detalle ampliado) refleja una detención del crecimiento que genera brotes prolépticos laterales.
El proyecto de investigación que lleva a cabo el
INIA de la Región de Valparaíso está enfocado a
complementar, con experiencias nacionales, las
tecnologías que se aplican actualmente
Por ejemplo, el sistema Hedgerow,
creado en Israel e implementado en Sudáfrica, ha sido propuesto por algunas
empresas en nuestro país. Consiste en
formar una estructura piramidal, con poda
manual y uso de reguladores de crecimiento para promover una mayor floración. El diagnóstico de brotes prolépticos
y silépticos ayuda a corregir dicho sistema
si éste no produce los resultados esperados. Así, el enfoque propuesto por el
proyecto no es en sí un nuevo manejo de
poda, sino una herramienta capaz de
interpretar y manipular la arquitectura de
los paltos de acuerdo a las condiciones
de cada región.
Una mirada adelante
El nuevo enfoque persigue reemplazar
la utilización de reguladores de crecimiento
por técnicas más acordes con la implementación de buenas prácticas agrícolas. Antecedentes extranjeros señalan que una
poda efectuada a tiempo y en forma adecuada a la estructura vegetativa que se
proyecta remover, puede reemplazar la
necesidad de aplicar reguladores de crecimiento. La investigación que efectúa el
INIA busca también definir cuál es la época
que resulta más apropiada para la implementación de los programas de poda.
En una revisión de literatura realizada
por Whiley en el libro “The avocado: Bo-
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siva desde la punta del brote; como consecuencia, el árbol va ubicando sus hojas
hacia la periferia de su estructura. En otro
capítulo del mismo libro, se indica que el
palto combina el desarrollo simultáneo de
brotes prolépticos y silépticos: la proporción
poda un número limitado de brotes productivos que se reemplacen en forma
periódica. Este escenario se estima posible, pero no en un corto plazo, dado que
genes asociados al crecimiento vegetativo
en palto no han sido identificados aún,
La incorporación del uso de los términos “proléptico” y
“siléptico” en el lenguaje común entre los agrónomos,
agricultores y trabajadores permitirá aprovechar los
nuevos avances en tecnología de poda.
Foto 3. Cortes de poda permiten generar nuevos brotes silépticos.
tany, production and uses 2002”, el autor
concluye que los sistemas de plantación
en alta densidad son una opción viable
para condiciones climáticas semiáridas
como las presentes en California, pero es
importante podar en el tiempo correcto,
con el objetivo de obtener brotes con flores
que cuajen y que presenten frutos durante
el verano. Asimismo, hace ver la dificultad
del sistema Hedgerow (piramidal, tipo
pino) para podar sin remover ramas productivas, las que se localizan en la periferia
del árbol. De esa forma esta revisión hace
una referencia al hecho de que el palto
sigue un modelo de desarrollo de brotes
que se extienden en forma rítmica y suce-
de ambos definiría la forma de los árboles
sin intervención de la poda. Por ejemplo,
la variedad Fuerte, con una baja dominancia apical, produce muchos brotes silépticos, en tanto que la variedad Sharwill
produce numerosos brotes prolépticos. El
autor señala la existencia de trabajos de
investigación que muestran que esta proporción de brotes sigue también un patrón
climático.
A futuro las técnicas que se han
reseñado pueden llegar a ser reemplazadas por mejoramiento genético, en que
los árboles generen sin intervención de
ni tampoco los que pudieran conferir
enanismo para mantener las plantas de
un tamaño apropiado.
Por lo expuesto resulta altamente
conveniente familiarizarse con la identificación anatómica de brotes prolépticos y
silépticos, y capacitar a quienes trabajan
en los campos en la identificación de ambas estructuras. La incorporación del uso
de los términos “proléptico” y “siléptico”
en el lenguaje común entre los agrónomos,
agricultores y trabajadores permitirá aprovechar en mejor forma los nuevos avances
que genere el proyecto antes indicado.
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