El reto de la información sobre la calidad de la atención en salud

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El reto de la información sobre la calidad de la atención
en salud
Por: Dr. Carlos Édgar Rodríguez,
Director de Acreditación en Salud – ICONTEC
Uno de los temas de mayor controversia en el sistema de salud en Colombia es la
pregunta por la calidad de los servicios ofrecidos a la población. Con la expedición de la
Ley 100 se introdujeron en el sistema, diferentes mecanismos legales para promover la
calidad. Los conceptos más importantes se pueden resumir en el Sistema Obligatorio de
Garantía de Calidad establecido en decretos sucesivos: 1918 de 1994; 2174 de 1996;
2309 de 2002 y decreto 1011 de 2006 (vigente) en los cuales se establecen los conceptos
de Habilitación (requisitos legales para prestar los servicios, reglamentados en la
resolución 1043 de 2006); auditoría (PAMEC: programa de auditoría de mejoramiento
continuo); Acreditación en Salud (resolución 1445 de 2006) y Sistema de información para
la calidad (resolución 1446 de 2006).
El Sistema Obligatorio de Garantía de Calidad (SOGC) se complementa con normas
adicionales referidas a la calidad en la prestación o el aseguramiento de los servicios y
que abordan un número importante de temas específicos. Se relacionan a continuación
algunas de las más relevantes de esas normas (se omiten los reglamentos adicionales):
*Resolución 13437 de 1991: Derechos de los pacientes
*Resolución 8430 de 1993: Comités de ética de la investigación
*Decreto 1757 de 1994: Sistema de información y atención al usuario
Frente a esta situación, el sistema de acreditación constituye en últimas una herramienta
clave en la información a los usuarios, de hecho la propia Ley 100 expresa al respecto:
Del sistema de acreditación: “El Gobierno Nacional propiciará la conformación de un sistema de acreditación de las instituciones prestadoras de servicios de salud, para brindar
información a los usuarios sobre sus calidad y promover su mejoramiento” Artículo 186 de
la Ley 100.
La acreditación en salud debe contribuir a que la sociedad pueda tener mayor confianza
en las instituciones de salud. Dicha confianza proviene del significado de un sello de
calidad y del reconocimiento de que se aplica un método de evaluación a las instituciones
idóneo, independiente y neutral. Las instituciones son acreditadas entre otras exigencias,
por contar con indicadores de calidad y mostrar tendencias y desempeños positivos en
sus resultados. De hecho, la acreditación en salud plantea la gestión de indicadores de
calidad, como un requisito de entrada.
Aparte del impulso dado a la construcción de indicadores de calidad por la acreditación en
salud, es importante resaltar los esfuerzos en materia de investigación sobre la calidad de
los servicios de salud o sobre atributos específicos de la misma, realizados en el país en
los últimos años y que apuntan a brindar información general o específica, de diferente
grado de complejidad técnica, sobre la calidad de la atención en salud en Colombia. Se
destacan los intentos de elaboración de ranking de IPS y de EPS por parte del Ministerio
en 2005; el desarrollo del estudio IBEAS (Estudio Iberoamericano de Seguridad de
Paciente) y especialmente el INCAS 2009 (Informe Nacional de la Calidad del la Atención
en Salud).
En el IBEAS se hizo un estudio de incidencia y prevalencia de eventos adversos con
instituciones hospitalarias de cinco países de América Latina, siendo uno de los estudios
más importantes en relación con el tema, realizados en el mundo hasta ahora e
insertando al continente en el estudio de este aspecto clave de la calidad. ICONTEC
formó parte del grupo de coordinación nacional de este proyecto en el que participaron
siete instituciones acreditadas.
En el estudio INCAS, se identificaron 249 indicadores para medir la calidad de la atención
en salud, de los cuales se logró coleccionar información válida para 65 indicadores. El
estudio constituye un importante punto de partida para la construcción de futuros informes
nacionales de calidad, pues se realizó un análisis de la literatura disponible para la
realización de estudios de este tipo y de la experiencia internacional. En el INCAS se
muestran datos comparativos de calidad ofrecida en instituciones acreditadas, en
contraste con las no acreditadas. Aunque dichas comparaciones requieren ajustes por
riesgo y complejidad de los casos tratados, así como de los recursos disponibles, es
evidente que las instituciones acreditadas pueden mostrar mejores resultados en
diferentes aspectos de la prestación de los servicios de salud.
Otros estudios que podrían ser aportes valiosos con información directa o indirecta sobre
la calidad de la atención son el ranking de EPS que realiza anualmente la Asociación
Colombiana de Hospitales y Clínicas (ACHC), con encuestas a sus afiliados y que se
realiza desde hace más de diez años y los análisis de la Defensoría del Pueblo 2003,
2005, 2010, en los que se evalúan aspectos de accesibilidad al sistema, volumen de
tutelas y demás información sobre exigencias de los ciudadanos.
A esta información se puede agregar además la obtención de premios de calidad por
parte de algunas instituciones de salud y los reconocimientos internacionales como el
ranking de la revista América Economía en la que los hospitales de Colombia mostraron
resultados positivos en comparación con el resto del Continente, pues en efecto, entre los
45 hospitales seleccionados había 14 instituciones de Colombia, diez de ellas acreditadas
(ver recuadro).
A pesar de estos avances, la información sobre la calidad de la atención en salud plantea
múltiples inquietudes:
Problemas para definir los indicadores de reporte obligatorio, la frecuencia de
medición, los mecanismos de tabulación, las conclusiones del análisis y la toma de
decisiones, con base en los resultados de las mediciones.
Limitaciones operativas como ausencia de reporte, sub registro de datos,
articulación de herramientas y fuentes de información, filtros de calidad, etc.
Interrogantes sobre los ajustes por riesgo y los métodos empleados para
comparar, dado que los resultados deben ser comparables, pero los perfiles de los
pacientes, las patologías atendidas, entre otros, varían de una institución o de una
región a otra.
Limitaciones para establecer los parámetros de comparación y referenciación.
Ausencia de metas en los indicadores medidos.
Interrogantes sobre las estrategias de comunicación y la utilidad práctica para los
usuarios de la información que reciben.
Es importante señalar que ICONTEC en su calidad de organismo de acreditación en salud
y las propias instituciones acreditadas, han contribuido a la definición y la medición
ordenadas de diferentes indicadores de calidad que constituyen una parte substancial del
informe nacional de calidad y del denominado “observatorio de la calidad”. En este sentido
se han dado pasos importantes para la definición de indicadores de seguimiento a la
calidad de la atención en salud ofrecida en el país.
Es claro también que en el futuro inmediato deberá trabajarse en un verdadero marco de
referencia para la información sobre la calidad en salud, lo cual incluye entre otros temas,
la actualización de la resolución 1446 de 2006, marco de referencia del sistema de
información para la calidad y sobre todo la definición de herramientas que permitan hacer
ajustes por riesgo y comparar instituciones.
El reto de mejorar la información disponible y utilizable sobre la calidad de la atención en
salud será uno de los trabajos más importantes por realizar en los próximos años, en el
sector salud, su importancia no se puede soslayar: se trata de trascender los esquemas
actuales de definición y aplicación de indicadores, orientándolos cada vez más hacia la
medición de resultados de la efectividad clínica incluyendo a prestadores y aseguradores.
El reto incluye el mejoramiento de los mecanismos de reporte, la sistematización de la
información, el uso de herramientas internacionales para agrupar diagnósticos, los
mecanismos para facilitar la consolidación eficiente de datos de calidad y sobre todo el
fortalecimiento de la toma de decisiones, con base en información veraz y oportuna, retos
de marca mayor para el sistema de salud de Colombia.
No en vano el legislativo señaló como uno de los aspectos claves del Plan Nacional de
Mejoramiento de la Calidad: “El Fortalecimiento del sistema de información para la
calidad, a través de indicadores que den cuenta del desempeño y resultados de los
prestadores de servicios de salud y entidades promotoras de salud, con el fin de que los
ciudadanos puedan contar con información objetiva para garantizar al usuario su derecho
a la libre elección”. (Artículo 107. 3 Ley 1438 de 2011). A la vez la Ley establece la obligatoriedad de audiencias públicas de entidades promotoras de salud y empresas sociales
del Estado una vez al año, con el objeto de involucrar a los ciudadanos y organizaciones
de la sociedad civil en la formulación, ejecución, control y evaluación de su gestión. Para
ello deberán presentar sus indicadores en salud, gestión financiera, satisfacción de
usuarios y administración. Las instituciones privadas prestadoras de servicios de salud
deberán publicar anualmente por Internet sus indicadores de calidad y de gestión en la
forma que establezca el reglamento (Artículo109 Ley 1438 de 2011).
Referencias:
Informe IBEAS.
Informe INCAS 2009.
Ranking Revista América Economía, versión tres. 2011.
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