http://laduda.net/sindicatos-ue-juncker-demanda-barroso/ Los sindicatos europeos piden a Juncker que lleve a Barroso ante el Tribunal de Justicia de la UE LD / La Unión Sindical Federal (USF), que agrupa a 22 sindicatos y asociaciones profesionales implantados en las diversas instituciones de la Unión Europea, ha enviado una carta al presidente de la Comisión, el luxemburgués Jean Claude Juncker, en la que le exige que demande a su antecesor, José Manuel Durâo Barroso, ante el Tribunal de Justicia de la UE. Durâo Barroso fue nombrado a principios de este mes presidente no ejecutivo de Goldman Sachs International, filial europea de Goldman Sachs, compañía a la que se atribuye buena parte de la responsabilidad del crack financiero de finales de la pasada década, y de la crisis global en la que derivó que la UE y sus miembros todavía arrastran. El presidente de la USF, Bernd Loescher, firmante de la carta, recuerda a Juncker las obligaciones que el Tratado de Funcionamiento de la UE (TFUE) impone a los miembros de la Comisión Europea una vez que abandonan sus cargos, y que existe un mecanismo legal para elevar al Tribunal de Justicia de la UE las violaciones de esas normas y defender los intereses de los ciudadanos europeos. En concreto, Loescher se refiere al artículo 245 del Tratado, que permitiría retirar a Durâo Barroso los beneficios a los que tiene derecho como ex presidente de la Comisión, entre ellos una pensión que asciende a más de 50.000 euros anuales compatible con cualquier otro subsidio que pueda recibir en su país, donde fue primer ministro, tras su jubilación. Este es el contenido de la carta. Si deseas leerla en su original en francés, pincha en ella para ampliarla. “El reclutamiento de [José Manuel Durâo] Barroso por el banco de inversión Goldman Sachs ha producido un infame de shock para la opinión pública europea. Como varios medios de comunicación han señalado, esta decisión despreciable amplía la brecha entre dos mundos, el de las élites y el de los ciudadanos, y podría reforzar y consolidar los constantes y persistentes reproches –puestos de manifiesto recientemente por el Brexit– que se hacen a las instituciones de la UE: la de su connivencia con las finanzas globales, independientemente de los intereses de los ciudadanos europeos. El artículo 245 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE) establece que los miembros de la Comisión se comprometen solemnemente a “a respetar, mientras dure su mandato y aún después de finalizar éste (…) los deberes de honestidad y discreción, en cuanto a la aceptación, una vez terminado su mandato, de determinadas funciones o beneficios”. En el caso del señor Barroso es evidente que ningún documento interno, como el Código de Conducta que se aprobó durante su propio mandato, puede ser invocado para derrotar una disposición tan clara e incondicional del Tratado. La Unión Sindical Federal exige al presidente Juncker que su Comisión –”En su última oportunidad”, según sus propias palabras– proceda sin demora a llevar a cabo los actos preliminares necesarios para remitir [el caso] al Tribunal de Justicia de la UE. Será el Tribunal Europeo el que decida si el señor Barroso, aceptando un puesto de responsabilidad en Goldman Sachs, viola o no la “delicadeza del deber” impuesta por el Tratado, y determine las posibles consecuencias (incluida la pérdida del derecho a pensión)“.