Monografía Curso de Inteligencias múltiples, Inteligencia reflexiva y de autorregulación. Alumna: Myrna Uslenghi; Angela Ridao; Maricruz Roselló. www.asociacioneducar.com Mail: informacion@asociacioneducar.com MSN: asociacioneducar@hotmail.com Seguinos en: Monografía “Contactos culturales, inteligencias y creatividad” Introducción Según Karl Jasper “La filosofía comienza con el asombro ante la infinidad, la inmensidad y la belleza. Después comienza a dudar, y por último tienen las experiencias límites que nos obligan a reflexionar” Esta frase la tomamos como punto de partida para el desarrollo de la presente monografía. Si bien este pensamiento desde el punto de vista científico es cuestionable porque no consigue un buen control del mundo exterior, desde el punto vista filosófico tiene cabida, porque cuando un ser humano comienza el transito de la vida encuentra en el asombro, la duda y las situaciones límites las claves para el desarrollo de la inteligencia, pensamiento, comunicación y aprendizaje. Para ahondar en lo expuesto es que a continuación vamos a mostrar una experiencia que nos invita a la reflexión de cómo conocemos, cómo desarrollamos la inteligencia social y trascendemos el mundo de lo cotidiano por medio del aprendizaje. Según la teoría de la “Inteligencia Cultural” desarrollada por Christopher Earley, el desarrollo de nuestras habilidades sociales es lo que nos hace inteligentes, este transito y perfeccionamiento comienza en etapas tempranas y siendo el cimiento de la inteligencia humana. La inteligencia emocional necesaria para el desarrollo de la anteriormente nombrada se divide en dos ramas, la intrapersonal dirigida al autoconocimiento; y la inteligencia interpersonal que se enfoca a conocer el resto de las personas e interactuar poniendo en juego la empatía, las habilidades sociales. Según C. Earley expone las facetas esenciales para el desarrollo de la inteligencia cultural, ellas son: cognición, capacidad de desarrollar patrones de las señales culturales, motivación, capacidad de involucrar a otros, capacidad de actuar de acuerdo con la cognición y al motivación y su relación con otros marcos de la inteligencia. A continuación presentamos una experiencia a la cual analizaremos partiendo de estas premisas. Trabajaremos sobre el video “Primer contacto de una tribu con el hombre blanco” para ver cliquear: http://youtu.be/HzqvvZbY_fQ La experiencia En 1976 un equipo de investigadores desde la vertiente antropología se aproxima al territorio de los Toulambis en Papua, Nueva Guinea. Se trata de una comunidad de nativos que viven en estado primitivo, en la consideración de los antropólogos en la “Edad de Bronce”. El etnógrafo belga Jean Pierre Dutillensc es el que va a tener los primeros contactos, que por cierto son los primeros encuentros con otra raza, la blanca. Este grupo se destaca por ser recolectores, cazadores, ya que de esta forma logran su subsistencia, poseen herramientas muy simples las cuales construyen del material que les provee la naturaleza como por ejemplo la caña de bambú. A continuación relatamos lo que vemos en el vídeo, se trata de apreciaciones subjetivas la cuales analizaremos a la luz de la teoría leída en el curso, dicha relación la señalamos con letra cursiva. Un grupo de Toulambis cruza un río a través de un puente rudimentario elaborado con troncos. Van al encuentro de un hombre que se encuentra del otro lado del río, éste esta quieto mirándolos con equipos de fotografía, mientras el hombre blanco les toma fotos, ellos se detienen y observan. El hombre blanco le extiende la mano, pero es en vano, se acerca a una distancia prudencial el que parece ser el jefe del grupo, o el cabecilla, observa con detenimiento, el resto del grupo lo acompaña, todos cargan varios palos y algunas herramientas como por ejemplo lo que parece ser una azada. El hombre blanco extiende continuamente su mano con el fin de realizar un encuentro. El jefe continuamente mira alrededor y al hombre blanco, sus ojos se agrandan, está muy atento, pero en su lenguaje corporal se observa desconfianza. Camina hacia donde esta el camarógrafo, que en ese momento esta registrando la información de lo que sucede, éste parece extender la mano (no se puede observar con nitidez) y el toulambis ante la duda se aleja repentinamente, y siempre mira hacia atrás, a su grupo. Mientras que el toulambis sigue con gran atención al camarógrafo, el resto del grupo se acerca al hombre blanco quien insiste en mostrar sus manos, ellos caminan alrededor mirándolo. La desconfianza por parte de los toulambis esta presente en toda la escena. La atención y la concentración forman parte del estado de alerta en que se manifiestan en todo momento. M. Posner expresa que existen 3 funciones: alerta (ayuda a mantener un estado de avizor) orientación (los sentidos se centran en la información) y atención ejecutiva (permite regular una variedad de redes, como las respuestas emocionales u la información sensorial). Además hace hincapié en que los seres humanos podemos regular nuestros pensamientos, emociones y acciones a través de la atención ejecutiva. Podemos planificar el futuro, orientarnos a nuevas metas que permiten la autorregulación y así se va desarrollando la madurez cerebral por medio de la educación. El hombre blanco les ofrece una pequeña caja de fósforos, el toulambis la toma, y esa caja se convierte en un dispositivo que hace de nexo para el acercamiento, porque se dan la mano. El hombre blanco actúa cautelosamente para no asustarlos, ellos toman su mano, y otros del grupo entablan un encuentro corporal, mientras el hombre blanco es dócil y deja que lo exploren por medio del tacto (tocar, frotar, palpar, golpetear, apretar), además él los toca e indica las partes de su cara para que ellos entren en confianza y para que vean que es igual a ellos, un ser humano. Ellos lo tocan explorando y se tocan, por ejemplo exploran su cabeza y la de ellos, constatando similitudes. Así se van tranquilizando porque entran en confianza, al comienzo de la relación aparece la desconfianza con mucha fuerza, esto se manifiesta en un estado de alerta constante, el cual lentamente va decreciendo hasta llegar a la confianza. El cerebro emocional lee más rápido las buenas emociones que las malas, la percepción posee componentes esenciales como la motivación, las emociones y la cognición. El vínculo con la realidad depende de cada uno. Además para conocer se necesita tiempo y paciencia, como un artesano la UCCM va modelando lo que llega desde afuera. La proxemia se ve claramente como va transformándose, en el vídeo se observa el paso de un lenguaje corporal gestual a distancia hasta la apropiación gradual del espacio, cuando los toulambis acercan sus cuerpos al del hombre blanco. El hombre blanco vuelve a mostrar la caja de fósforos y enciende uno, ellos lo miran y tratando ejecutar la misma acción pero con problemas ya que no logran encenderlo. El hombre blanco con paciencia vuelve a mostrar, y ya en este momento hay intercambio de manos y acciones compartidas. A mayor intensidad de estímulos sensoriales y emocionales más duraderos y fuertes mayor será la experiencia de aprendizaje. En la memoria se activa la: retención, adquisición, conexión de redes neuronales y persistencia. Los neurotransmisores como la dopamina (relacionado con el deseo e interés) y la adrenalina (tensión, excitación, obstáculos, desafíos, estrés circunstancial) enriquecen el proceso de aprendizaje. Luego el hombre blanco ingresa en la comunidad, todos miran siempre oscilando entre desconfianza-confianza, aunque a la distancia el estado de alerta y la atención es constante. La atención consciente se encuentra en el área singular anterior, de los lóbulos prefrontales y para que ella pueda cumplir con esta función, no, puede estar ocupada con distractores que la desvíen del objetivo (Michael Posner) El hombre blanco les muestra un espejo, miran el objeto con atención pero desde la lejanía. Uno los toulambis lo toma, le coloca encima una hoja tapando su reflejo, juega a destaparlo y taparlo, acercarlo y alejarlo, en cada acción surge el asombro, el temor y el alejamiento. El hombre blanco con otro espejo y desde un lenguaje no verbal le muestra que no tiene miedo y juega tranquilo con el objeto. El toulambis mira, se da cuenta de su imagen reflejada por las plumas que lleva en la cabeza las cuales aparecen en el espejo y además que aparece en imagen el hombre blanco refractado, el lo da vuelta explora su imagen y se da cuenta que es la misma que aparece en el espejo. Seguidamente el hombre blanco le muestra una herramienta, un machete para cortar ramas, nuevamente con el movimiento que realiza para cortar el toulambis se asusta. Les muestra como se puede cortar las ramas y se las ofrece para que ellos hagan lo mismo. No la toman y él insiste en las cosas que se pueden cortar, en ese momento el toulambis trae una herramienta propia, similar a una azada muy rudimentaria y comienza la acción de corte. Todos miran desde lejos, nadie se acerca demasiado. Los niños y las mujeres están juntos, los niños cubiertos con una capa hecha de hojas enormes, los hombres son los que se acercan al hombre blanco. El hombre blanco les presenta una comida, arroz blanco, el jefe primero toma un poco con la mano y la olfatea, con un instrumento propio se la lleva a la boca, en ese momento el hombre blanco le presenta una cuchara con la cual puede comer pero este no la toma, prefiere comer con la mano (como están acostumbrados). Se lleva el alimento a la boca, lo mastica y lo escupe, luego con el sabor que le queda vuelve a tomar con la mano arroz lo traga y se golpea la cabeza en señal de que es rico, que le gusta. Luego el toulambis introduce la cuchara para comer y realiza expresiones de placer, el resto comienza a probarlo y se golpean la cabeza a cada cucharada. Luego dejan la cuchara vuelven a comer con las manos (a 4 dedos) y se chupan los dedos. Un ser humano que por todas las cosas sienta lo que el otro siente es lo que denominamos empatía, por lo que su tendencia será la preservación de toda forma de vida. Como señala E. Thorndike a la empatía como la habilidad necesaria para vivir y sobrevivir en este mundo individualizado. Según K. Albrecht la inteligencia social sería la capacidad de llevarse bien con los demás y conseguir su cooperación. Los comportamientos nutritivos hacen que las demás personas se sientan queridas, apreciadas, valoradas, capaces y respetadas. El desarrollo de cada una de las inteligencias tanto la dirigida al mundo interior (I.M.I.) como al mundo exterior (I.M.E.) requieren del mismo tipo de proceso: recepción de información, comprensión de la información, entrenamiento con la información recibida y automatización de la información recibida. Para ello es esencial dedicar tiempo y esfuerzo a su expansión para la resolución de problemas de la vida cotidiana. Como expreso Tito Livio (historiador romano) “Cualquier esfuerzo resulta ligero con el hábito” El hombre blanco ha instalado un campamento y dejo a la vista varios objetos cotidianos (para nuestra cultura), el jefe con un niño en brazos se acerca y comienza a explorarlos, los toca, los mira con atención. Luego las mujeres y los niños exploran una especie de carpa armada, tocan la tela, la agitan. El cambio profundo requiere de la composición y recomposición de hábitos como pensar, sentir y hacer. Si pensamos en lo que sucede a nivel cerebral, inferimos que lo esencial es el funcionamiento neuronal y su actividad. La capacidad de conexión neuronal es muy importante en la vida del ser humano, ya que según el Dr. Donald Hebb dichas conexiones se multiplican y ramifican de manera considerable dando lugar a lo que el denomino redes hebbianas, estas acumuladas en la unidad cerebro-mente en el tiempo conllevan a un aprendizaje hebbiano, siendo este la base de la neuromodelación y la neuroplasticidad cerebral. Asimismo destaca que en la neuromodelación si bien se da un proceso de acumulación también acontece un sentido inverso, si una red hebbiana no se usa paulatinamente pierde sus células componentes hasta desaparecer. La neuroplasticidad positiva tiene de ampliar redes hebbianas y la negativa tiende a desarmarlas. Cuanto más activo es este proceso remodela una y otra vez el cerebro y por otro lado aumenta la capacidad de adaptación a nuevos territorios y aumenta las posibilidades de supervivencia. El jefe explora como cortar con un cuchillo las ramas, luego toma la cámara fotográfica y la observa detenidamente por todos sus lados. Lo mismo hace con un grabador. Luego comienza una especie de ritual con danza, percusión de un bambú y canto. Todos bailan, cantan y sonríen. Luego algunos se alejan, en el lugar queda el jefe algunos hombres y niños. El hombre blanco le muestra el grabador y le pide que cante, mientras lo graba. Luego le muestra su voz en el aparato, el toulambis se asombra, se aleja, sonríe y vuelve a mirar el objeto, los demás están atentos y observando lo que sucede. En esta filmación hemos podido apreciar como se pasa de una inteligencia instintiva y una inteligencia emocional propias de conductas instintivas pro-supervivencia a una inteligencia cognitiva ejecutiva que tienen que ver con conductas pro-trascendencia o pro-humanas. Desde conductas prestas a huir, atemorizada y desconfiada a conductas abiertas al medio, confiada al contacto con otros, base para un vínculo interpersonal y un aprendizaje social Analogía: el niño pequeño y el desarrollo de la inteligencia social A continuación realizaremos una analogía entre lo sucedido en esta tribu primitiva con lo que sucede cuando un niño pequeño ingresa a una institución escolar ej. Jardín maternal. El primer ingreso del niño al jardín maternal constituye un cambio muy importante en su vida, se ve inmerso en un ambiente físico desconocido, aparecen personas desconocidas, su mundo cambia y con ello sus emociones. El temor, la desconfianza se apropian de su ser, de su UCCM, por ende aparecen conductas que se expresan en llanto, actitud de huida, crispación, tensión. Sus emociones oscilan y son fluctuantes a medida que pasa el tiempo, si en el ambiente surgen situaciones de acercamiento de mostración, de voz y gestos que demuestran afectividad, paulatinamente su manifestación irá cambiando. Lo que era mirar, ver se ira transformando en observación, atención sostenida, concentración. Son muchos los aspectos que debe resolver el niño en el período inicial de institucionalización. Al comienzo de dicho proceso, surge al igual que el grupo de los toulambis, sensación de inseguridad, desconfianza, temor, con la interacción con otro/s esto se ira resolviendo paulatinamente, y la inteligencia social y cultural irá constituyéndose, enriqueciéndose y complejizándose. Dicho período implica un proceso de adaptación, que puede adoptar características particulares en este comienzo de la vida escolar y depende tanto de la etapa evolutiva del niño, de sus experiencias previas, de las características institucionales, de la predisposición del grupo familiar, como de la posibilidad de construir un sistema de códigos compartidos. Su universo social se expande, se amplían y complejizan sus intercambios con los adultos y con los otros niños. Estas nuevas relaciones lo condicionarán a apropiarse de un nuevo espacio, de una organización particular del tiempo, de normas y pautas peculiares, de modos diferentes de actuar y reaccionar. Estos cambios también influyen en el grupo familiar, que son quienes acompañan y contienen al niño en este ingreso. En este período el niño, por su inteligencia instintiva tiene atracción natural por incorporar nuevos conocimientos a su UCCM (Unidad cuerpo, cerebro, mente), la curiosidad factor esencial que pone en juego al ser humano para buscar y adquirir más y nuevos conocimientos, esto tiene que ver con el principio de la inteligencia activa, que muchos investigadores consideran la madre de la sabiduría que alcanzará un individuo. Lo mismo sucedía con el grupo de los toulambis cuando se acercan a este hombre blanco desconocido y éste le muestra otras cosas acerca del mundo. Para este niño el camino de construcción de la trama vincular entre todos los protagonistas de la situación educativa es arduo y complejo; este proceso se basa en el respeto por todos y cada uno de los integrantes, y en la creación de un clima de confianza y seguridad. Es durante el desarrollo de actividades significativas que los niños van edificando un sistema de códigos compartidos; constituyendo vínculos afectivos y sentimientos de pertenencia. H. Maturana señala que aprender es la expansión de la capacidad de acción efectiva; por ello es necesario considerar que el primer aprendizaje depende de la faz emotiva (origen en la filogenia) que tiene raigambre en el sistema reptiliano. La neuroplasticidad permite que surjan nuevos comportamientos, esta en la base de todo aprendizaje, tiene que ver con la capacidad de cambiar y cambiarse. Cada nueva experiencia de vida, tanto para los niños o para los toulambis, como también para el etnógrafo o los docentes de la institución educativa formará nuevas redes hebbianas o en el caso del etnógrafo y/o docentes fortalecerá una red anterior si es que ya ha tenido experiencias similares. Esta Neuroplasticidad permitirá a las neuronas ajustes en respuesta a nuevas situaciones o a cambios en su entorno remodelando una y otra vez el cerebro. También en el video se puede apreciar esta capacidad de socializar que tienen todos los seres humanos gracias a la presencia de las neuronas de Von Economo, capaces de hacer una lectura rápida e intuitiva del entorno y analizar el tipo de respuesta a ejecutar. En ambos casos (niños y toulambis) se manifiesta la inteligencia implícita. Esta es la base de todos los tipos de inteligencia y posee un fuerte componente genético, ya que la misma no tiene o ha tenido en el caso de los toulambis, demasiado tiempo ni oportunidades de ser influenciada por un medio ambiente enriquecido; cuestión que se verá superada por los niños cuando ingresen a las instituciones educativas (en este caso) y se favorecerá el desarrollo de su inteligencia explícita. A modo de cierre… El medio ambiente permite que una UCCM alcance o no el máximo de su potencialidad determinada por los genes de cada uno de los integrantes de nuestra especie. Cada nueva generación posee la posibilidad de acceder a mayor cantidad de información siendo esta una herramienta vital para la inteligencia (en sentido amplio) pues la misma nunca funciona en vacío. Es importante que cada ser tenga la oportunidad de descubrir sus mejores talentos y pueda desarrollarlos; conjuntamente con la posibilidad de recibir una formación que permita desarrollar la inteligencia intra e interpersonal fundamentales para una vida equilibrada y feliz tanto personal como social. Los docentes y el etnógrafo debemos desarrollar ambientes seguros y contenedores a la hora de efectuar el traspaso de los conocimientos. Estimular la dopamina, noradrenalida y serotonina, tres neurotrasmisores importantes en la educación del ser humano. Aprovechar las neuronas espejo que se activan con el propio movimiento o con el ajeno y le permiten al ser humano aprender a imitar el comportamiento de los demás. También estimular las emociones positivas, ya que promueven la interacción grupal y contribuyen a desarrollar la capacidad empática. www.asociacioneducar.com Mail: informacion@asociacioneducar.com MSN: asociacioneducar@hotmail.com Seguinos en: Registros N°: 2783295-2783297-2286167 Asociación Educar para el Desarrollo Humano (000815/03) Prohibida su reproducción parcial o total- Dirección Nacional del Derecho del Autor Registro N°: 610489