UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE YUCATÁN FACULTAD DE QUÍMICA “MONOGRAFÍA DEL ADME DE LA ZIDOVUDINA (AZIDOTIMIDINA)” SALÓN 9 NOMBRE DEL ALUMNO: RUELAS LARA PRISCILA ISABEL PROFESOR: DR. ROLFFY RUBÉN ORTIZ ANDRADE FECHA DE ENTREGA: 18 DE OCTUBRE DE 2010 1 MONOGRAFÍA DE LA ZIDOVUDINA (AZIDOTIMIDINA) Introducción La zidovudina (azidotimidina) fue sintetizada originalmente como un compuesto con potencial actividad antitumoral. Zidovudina o AZT fue el primer medicamento antirretroviral (ARV), aprobado en 1987 como un medicamento para personas infectadas con el VIH. Es comercializado bajo el nombre de Retrovir y Retrovis, y es un ingrediente en el Combivir, Epzicom y Trizivir. La Zidovudina fue el primer medicamento aprobado para el tratamiento del sida y la infección del VIH. Jerome Horwitz fue el primero en sintetizar AZT in 1964. Es un análogo estructural de la timidina (3´-azido-2´3´-didesoxitimidina), es un agente antivírico muy activo in vitro frente a los retrovirus, incluido el VIH y su efectividad consiste en disminuir la carga viral y retrasar el deterioro inmunológico. La zidovudina destruye algunas bacterias gramnegativas, en particular muchas enterobacterias. Absorción Se absorbe más del 50% de dosis oral y las concentraciones en el plasma y los lípidos corporales están por encima de los 0,1 a 0,5 μg/ml necesarios para inhibir 2 al VIH in vitro. El fármaco es detectado en el liquido cefalorraquídeo después de su administración oral o IV. La zidovudina presenta una buena absorción intestinal, con una biodisponibilidad del 60-70 %. La concentración plasmática máxima se obtiene tras 0,5-1,5 horas. La semivida plasmática es muy corta, aunque la intracelular es de 3 horas. Mecanismo de acción Las fosforilación de zidovudina al derivado monofosfato es catalizada por la timidincinasa celular tanto en las células infectadas como en células sanas. El paso de monofosfato a difosfato de zidovudina está catalizada por la timidililcinasa celular y la formación del trifosfato por cinasa inespecíficas. El trifosfato de zidovudina compite como substrato con el trifosfato de timidina natural para incorporarse a la cadenas del ADN viral, que se forman por la acción de la transcriptasa inversa del retrovirus (ADN polimerasa dependiente de RNA). Una vez incorporado, el trifosfato de zidovudina interrumpe prematuramente el crecimiento de la cadena de ADN, ya que el grupo 3'-azida impide nuevas uniones fosfodiéster-5'-3' y, por lo tanto, inhibe la división del virus. La afinidad de la zidovudina con la transcriptasa inversa del retrovirus es mayor que con a-ADNpolimerasa humana y permite la inhibición selectiva de la replicación viral sin bloquear la replicación celular. El ácido acetilsalicílico (aspirina) interactua con la zidovudina quedando más difícil de ser eliminada y más tóxica entonces debe ser evitado. La zidovudina inhibe el VIH-a y el VIH-2, aunque frente a este último es menos activa. Es activa frente al viruslinfotrópico humano de células T de tipo I (HTLV-I) y frente al VEB, pero no frente a otros virus herpéticos y al VHB. 3 Distribución El fármaco original atraviesa la barrera hematoencefálica bastante bien y alcanza una razón aproximada de líquido cefalorraquídeo a plasma de 0.6. La zidovudina difunde bien en los tejidos, donde alcanza unas concentraciones superiores a las de su actividad antivírica. Metabolismo La zidovudina se somete a metabolismo hepático rápido de primer paso por medio de su conversión en 5-glucuronilzidovudina. Este paso reduce hasta 64% la biodisponibilidad general. La recuperación urinnaria total de la zidovudina y su metabolismo glucurónico son 14 y 74%, respectivamente. Se absorbe más del 50% de dosis oral y las concentraciones en el plasma y los lípidos corporales están por encima de los 0,1 a 0,5 μg/ml necesarios para inhibir al VIH in vitro. El fármaco es detectado en el liquido cefalorraquídeo después de su administración oral o IV. Excreción El 25% restante se excreta por el riñón sin metabolizar. La zidovudina no se fija a las proteínas plasmáticas. Resistencia La resistencia a la zidovudina se debe a una serie de mutaciones a nivel de los codones 41, 44, 67, 70, 118, 210, 215 y 219 de la transcripción inversa. Estas mutaciones se denominan mutaciones de análogos de timidina, por su potencial para conferir resistencia cruzada a otros análogos de la timidina, como la estavudina. 4 Efectos adversos Puede esperarse que los pacientes tratados con zidovudina durante 4 a 6 semanas desarrollen anemia severa como para requerir transfusiones de sangre intermitente. La mayoría de los efectos adversos producidos por la zidovudina se deben a una alteración en la síntesis de ADN. Los efectos adversos más frecuentes leucopenia, neutropenia, hepatotoxicidad, náuseas, diarrea, dispepsia, dolor abdominal, miopatía y acidosis láctica con esteatosis hepática. La administración prolongada de zidovudina se acompaña en ocasiones de hiperpigmentación de las uñas. La neutropenia también puede aparecer luego de cuatro semanas de iniciar la administración de zidovudina y es más frecuente (37%) durante la fase avanzada de la infección por VIH. La zidovudina es débilmente mutagénica y en la medida de lo posible no debe administrarse durante el embarazo. Interacciones farmacológicas Cualquier fármaco que tenga efectos adversos sobre la médula ósea o la función renal puede aumentar la toxicidad de la azidotimidina. Dosificación La dosis recomendada de zidovudina en adultos es de 250-300 mg cada 12 horas. En caso de insuficiencia renal grave y de dependencia de la hemodiálisis, se debe ajustar la dosis a 100 mg por vía oral cada 6-8 horas. El preparado de zidovudina para su administración por vía intravenosa se usa principalmente en el periparto, para reproducir la transmisión maternofetal del VIH-1. 5 Si se toma zidovudina con otros ARV, la carga viral puede disminuir a niveles sumamente bajos y su conteo de células CD4 puede aumentar. Esto significa que una persona podrá mantenerse saludable por más tiempo. Presentaciones comerciales Cápsulas 100 y 200 mg Comprimidos 300 mg Solución oral 10 mg/ml Vial i.v 10 mg/ml Referencias bibliográficas 1. Mandell, G. L.; Bennett, J. E. Dolin, R. Enfermedades infecciosas, principios y práctica. Sexta edición. Editorial ELSEVIER. 2006. Pp. 1656-1657. 2. Remington farmacia. 20° edición. Editorial Médica panamericana. Pp. 1864. 3. Lorenzo, P.; Moreno, A.; Lizasoain, I.; Leza, J. C.; Moro, M. A.; Portolés, A. Velázquez farmacología básica y clínica. 18ª. Edición. Editorial médica panamericana. 2009. Pp. 931-934. 4. Lehninger, A. L. bioquímica. 2ª edición. Editorial Omega, S.A. Barcelona. 1995. Pp. 489-491. 5. Smith, C. M.; Reynard, A. M. Farmacología. Editorial médica panamericana. 1997. Pp. 855. 6. Brunton, L. L.; Lazo, J. S.; Parker, K. L. Las bases farmacológicas de la terapéutica. Undécima edición. Editorial McGraw-Hill. 2007. Pp. 1280-1285. 6