> ERGONOMÍA Y PSICOSOCIOLOGÍA Los tipos duros Juan Manuel Gutiérrez, Socio Director de Conducta Segura Integral. a vida real no es como aparece en la gran pantalla. Todo el mundo lo sabe. Nadie sobrevive a cuatrocientos golpes mostrando solo algún ligero rasguño, antes de besar a la chica, como broche final de la historia. Sin embargo, este tipo de momentos se asemejan a algunas situaciones laborales que, por lo menos una vez, hemos experimentado en primera persona. De eso mismo trata la obra que hoy reseñamos: “El club de los tipos duros” es un libro que habla de la vida cotidiana real en las empresas y de cómo los conflictos interpersonales pueden ser superados de forma proactiva con una serie de propuestas que los “tipos duros” de las películas nos han legado para nuestro uso y disfrute. L Debemos reconocer que muchos de nosotros guardamos en la memoria escenas de ciertas película (remembranza por similitud de alguna escena de nuestra propia vida en la que se nos quedó clavada una espinita en el corazón) porque nos hubiera gustado salir airosos con esa frase de “alto impacto lesivo” que nunca nos perteneció, y que el protagonista de la trama empleó como arma arrojadiza. Da lo mismo que fuera héroe o villano, lo único que importaba era que fuese un auténtico “tipo duro”. Por ello, muchos estamos un poco hartos de tanta literatura de management enfocada a la biempensancia (sustento de la corrección política a todo trance) y a la búsqueda de la felicidad en un mundo que, lamentablemente, no nos ofrece opciones para serlo. Y mucho menos en las empresas. La vida en el entorno laboral no es fácil, suele ser dura, ácida y llena de sinsabores que marcan la relación interpersonal. En muchos casos existe una tendencia al reconocimiento de los egos más conspicuos en detrimento de los talentos más productivos. En ese entorno tóxico, los distintos tipos de conductas de acoso que existen hacia los espíritus talentosos pero menos agresivos del equipo acaban siendo una lógica consecuencia adaptativa. 08 • 008_s_Ergonomia.indd 08 Gestión Práctica de Riesgos Laborales A los “tipos duros” de colmillo retorcido le van mejor las cosas que a los simpáticos personajillos No lo vea como un librito divertido porque no es sólo eso. Se trata de un verdadero Manual de Asertividad Comunicativa que busca el Reforzamiento Proactivo de la Autoestima del lector. Los autores utilizan el Aprendizaje Vicario (adquisición de conductas nuevas por medio de la observación) a partir de roles bien conocidos (personajes estereotipados de película) con los que nos asesoran para adquirir un estilo comunicativo exitoso mediante un entrenamiento intensivo que recuerda mucho al Coaching de Alta Dirección. Inteligencia Emocional en grado superlativo. Con otras palabras, los autores Rafael Galán y Fernando Montero, dos periodistas de luenga experiencia en el mundo de la empresa y coautores de La empresa según Homer Simpson y Kama Sutra en la empresa, nos demuestran cómo a los “tipos duros” plenos de retranca y cinismo de “colmillo retorcido” la vida les trata mejor que a nosotros, simpáticos personajillos que luchamos por caer bien a todo el mundo. Este libro un manual de endurecimiento personal, es un tratado para blindar nuestro espíritu frente a las estrategias nocivas, es un vademécum para fortalecer las características que nos administren resiliencia en dosis masivas (a este tema le dedicaremos un próximo artículo) para reaccionar y superar con éxito el maltrato psicológico, la incontinencia verbal y el estilo humillante y vejatorio Nº 78 • Enero de 2011 22/12/2010 10:35:23 © Latin Stock www.riesgos-laborales.com El tipo duro, con sus virtudes y defectos, ha vuelto a pisar el escenario laboral y como al bueno de la película, a él también le salen bien las cosas. de liderazgo de algunos jefes que la vida nos ha puesto por delante. Los personajes que se nos proponen no necesitan presentación: Don Vito Corleone (el entrañable “Padrino”), el insoportable Dr. House, Harry el Sucio, el exquisito psicópata Hannibal Lecter, John McLane (Bruce Willis en “La Jungla de Cristal), Marge Simpson, la teniente Ripley (Sigourney Weaver en “Alien”), Darth Vader de la “Guerra de las Galaxias”, Humprey Bogart en “Casablanca”, Saruman (Christopher Lee en “El Señor de los Anillos”, o la Novia (Uma Thurman) en Kill Bill”. Y muchos más. Todos recordamos sus virtudes y también sus defectos. Pero todos ellos son tipos/as duros de los que podemos aprender algo. ¿Qué? Le pongo algunos ejemplos: > Para bregar con los jefes hay que tratar de que la relación sea lo más profesional posible, fijar plazos y no dejarse intimidar por sus rutinas (quedarse hasta tarde en la oficina). > Con algunos jefes realmente tóxicos, el mejor recurso es negociar hasta las últimas consecuen- Nº 78 • Enero de 2011 008_s_Ergonomia.indd 09 cias. Para trabajar con esa gente debes asumir que cada vez que quieras algo de ellos no hay más remedio que ceder en algún punto. a no ser el tonto de turno que carga con todos los “marrones”: el arte de escaquearse es a veces recomendable y no es en todos los casos negativo. > La persona que resiste física y mentalmente acaba siempre ganando la partida. > El fracaso siempre es reversible y los errores se pueden enmendar. Aunque en ciertos momentos, uno sienta haber caído en lo más profundo de su vida profesional, el cambio para mejorar es posible. > No hay que dejar que nadie nos diga quiénes somos, ni de qué somos capaces. Cada uno es dueño de su propio destino, sólo hay que aprender a valorar nuestras habilidades y capacidades, y esforzarse en alcanzarlas. > Ante los superiores que gritan, que tienen carácter volátil y que hacen la vida imposible a los empleados, hay que tratar de no tomárselo como algo personal, no comprometer los propios valores y no intentar vengarse. La cuestión es no convertirse en una víctima. Lo que se debe hacer es pedir ayuda a los compañeros y al departamento de recursos humanos, porque ellos están tan metidos en el problema como uno mismo. > Hay que aprender cómo movernos con habilidad para participar en las tareas más apetecibles y huir de los trabajos rutinarios. Es decir, aprender Puede que en ocasiones las situaciones que se nos describen en este contexto sean un tanto extremas. Pero recordamos que se trata de ayudar a personas reales con necesidades reales en un mundo empresarial absolutamente real. Así que esas frases, con toda la caricaturización que suponen, son pedagógicamente eficaces y muchas de ellas absolutamente impagables. Resumiendo, “El club de los tipos duros” (Ed. Gestión 2000) es un libro para quienes están hartos de recetas llenas de sabiduría estratosférica y lo que buscan son lecciones que contengan mala idea “bien dosificada” para poder alcanzar su realización personal en el puesto de trabajo. Ah, y además es muy divertido. Gestión Práctica de Riesgos Laborales • 09 22/12/2010 10:35:25