UN CENTRO VIVO QUE SE RENUEVA Un cristiano vive su ser cristiano en comunidad, y nosotros además de ser cristianos tenemos un compromiso concreto por y para los jóvenes, con una comunidad de referencia, la Asociación de SSCC con la responsabilidad de organizarnos para su buen funcionamiento que nos enriquece a todos. Y nos organizamos “para conocernos, intercambiar experiencias y proyectos apostólicos y crecer juntos”1, para “vivir nuestro PVA en espíritu de unidad, según la invitación de Don Bosco.”2 Nos organizamos para ser todos los días, en las cambiantes circunstancias personales y sociales, salesianos cooperadores respondiendo a las necesidades que la común misión concrete en cada momento. En este sentido la organización solamente se entiende si representa “un elemento vital para el sostenimiento de la propia vocación apostólica”3, de todos y cada uno de los salesianos cooperadores tanto de manera individual como de manera colectiva. Por tanto el objetivo fundamental de la organización es ayudarnos a todos los salesianos cooperadores personalmente y grupalmente (como Asociación) a vivir el PVA. Por todo esto, la organización es un medio que contamos para alcanzar nuestro objetivo común. Nuestra organización tiene que ser flexible, tiene que poder adaptarse a las distintas situaciones, los distintos momentos en los que vivimos nuestra vocación y debe responder a los requerimientos y posibilidades existentes en cada situación. También debe ser funcional, eficaz, práctica, adecuada a las funciones y preparada para las circunstancias de nuestra realidad, animada por nuestro estilo propio de sencillez, disponibilidad y atenta a las necesidades que surjan especialmente dando respuesta a los jóvenes más necesitados. Para que la organización exista y funcione es precisa la actuación de todos los salesianos cooperadores, participando activamente en la elección de los responsables y desempeñando con fidelidad y espíritu de servicio los cargos a los podamos ser llamados4. Y ello porque todos, sintiéndonos responsables de la misión común, sabemos que podemos llevarla a cabo conjuntamente de manera más eficaz solamente si estamos convenientemente organizados; lo cual lleva implícita la participación activa de todos y cada uno en función de sus capacidades y posibilidades. 1 PVA, Est. 13 PVA, Est. 33 3 PVA, Est. 28.1 4 PVA, Est. 14.1 2 UN CENTRO VIVO QUE SE RENUEVA (EXPRESS) 1 DE 1