Felipe en Samaria y Simón el Hechicero Nuestra historia hoy es acerca de un hombre de mucho valor. Es posible que hasta sea difícil para nosotros comprender la magnitud del valor que tuvo Felipe al hablar acerca de Jesús a los Samaritanos. Los judíos y los samaritanos habían tenido una mala relación por aproximadamente mil años. La mala relación entre ellos comenzó cuando se dividió la monarquía. Habían doce tribus y diez de ellas hicieron a Samaria su capital y las otras dos mantuvieron su lealtad a Jerusalén como su capital en el siglo diez. La relación se empeoró aún más a través de los años y a través de diferentes eventos históricos. Boletín Infantil Los samaritanos también estaban esperando a un Mesías, un Salvador. Felipe les habló acerca de Jesús mientras hacía milagros. Al ver todos sus milagros, pusieron atención a las palabras de Felipe de salvación y sanidad. ¡La Biblia nos dice que se alegraron mucho! Ellos estaban alegres tanto por la sanidad de los enfermos cómo también por las palabras que proclamaba acerca del Mesías, Jesús. Por algún tiempo antes que Felipe llegara a Samaria, la ciudad estaba bajo una influencia muy diferente. Había un hombre llamado Simón que practicaba hechicería. Hechicería es un tipo de magia que no agrada a Dios. Simón se sentía amenazado. Con el poder de Dios, Felipe estaba haciendo milagros, sanando a los enfermos, y también hablando del Mesías. Simón también escuchó acerca de Jesús y fue bautizado. El que antes el pueblo admiraba ahora estaba admirado del poder de Dios. Los apóstoles en Jerusalén escucharon acerca de lo que estaba sucediendo en Samaria. Escucharon que el pueblo de Samaria estaba aceptando la palabra de Dios. Ellos enviaron a dos de los apóstoles, Pedro y Juan, a investigar. Ellos oraban por los samaritanos. Recuerden que la relación era muy mala entre los judíos y los samaritanos. Cuando llegaron Pedro y Juan pusieron sus manos sobre ellos y recibieron al Espíritu Santo. Estudiamos que al recibir a Jesús en su corazón uno recibe al Espíritu Santo. En este caso sucedió un poco diferente porque el evangelio apenas estaba empezando a dispersarse fuera de Jerusalén. Simón miró que al poner las manos sobre ellos, los demás recibían al Espíritu Santo. Por lo mismo, quiso comprar el poder del Espíritu Santo. Pedro lo regañó porque el poder de Dios no se puede comprar. La respuesta de Simón es un poco triste. En lugar de orar a Dios y hablarle directamente, él pide que los apóstoles oren por él. No buscaba el perdón de Dios sino que simplemente buscaba escaparse del juicio de Dios. Una vez que Samaria, la capital, aceptó la palabra de Dios, ellos tuvieron la libertad de seguir predicando el evangelio por otros pueblos. Ellos predicaban a personas que no conocían acerca de Jesús y también enseñaban a los que ya habían aceptado a Jesús como su Salvador y querían aprender más acerca de sus enseñanzas. A través de esta historia de Felipe en Samaria el evangelio empezó a salirse de Jerusalén a Samaria y luego alrededor del mundo. ¡Felipe fue un hombre muy valiente! Aunque él sabía que los judíos y los samaritanos no tenían una relación muy buena, él también sabía que los samaritanos también necesitaban a Jesús. Nosotros también tenemos amiguitos o familia que talvez no quieran mucho a los cristianos, pero aunque ellos reaccionen de esta forma, también necesitan a Jesús. ¿Tienes valor para hablarles acerca de Jesús cómo hizo Felipe? ¿Puedes pensar en alguien de tu escuela, familia, o barrio que necesita escuchar acerca de nuestro Mesías, Jesús? ¿Compartirás su historia? Tu Iglesia Dirección Número Telefónico Dirección de la Página Electrónica …Frase Secreta… En Camino de Jerusalén a Samaria Ponga las letras en la caja correcta vertical correcta y encontrarás un frase secreta. Orando a Dios C A P A Confesión de Pecados Adoración Petición Agradecimiento Texto de Memoria Simón mismo creyó y, después de bautizarse, seguía a Felipe por todas partes, asombrado de los grandes milagros y señales que veía. Hechos 8:13 (Nueva Versión Internacional)