Células fetales en sangre materna para diagnóstico genético prenatal Fetal cells in maternal blood for prenatal genetic diagnosis Peter Chedraui Alvarez * Gisella Saltos Fuentes * Mónica Maquilón ** Resumen Summary Con el advenimiento de técnicas de separación celular y avances en biología molecular, se ha logrado el diagnóstico genético de células que se hallan en la circulación materna. Aunque el diagnóstico prenatal citogenético basado en amniocentesis o biopsia de vellosidades coriónicas (BVC ) son altamente confiables, sin embargo acarrean a un riesgo bajo pero significativo de pérdidas. Los métodos invasivos con riesgos en relación al producto deben ser recomendados a un pequeño subgrupo de embarazadas que podrían estar en el más alto riesgo de anomalías cromosómicas. Hay muchas interrogantes con respecto a este método pero es de una importancia primordial debido a su no invasividad, quedará por contestarse en el futuro las muchas interrogantes y su utilidad para los diversos grupos necesitados de este método. El propósito de este trabajo es hacer una revisión objetiva de este nuevo pero significativo método diagnóstico, ver sus aplicaciones prácticas e implicaciones ético y clínico-prácticas. With the coming of free cell sorting techniques and advances in molecular biology , it has been possible to genetically diagnose cells found in maternal circulation. Although the cytogenetic prenatal diagnosis that relies on amniocentesis or chorionic villous sampling (CVS) are highly reliable, they do bring a small but significant risk of losses. The invasive methods with risk in relation to the embryo should be recommended to a small subset of pregnant women that could be at higher risk of chromosomic anomalies. There are many questions concerning this method but it is of great importance due to its non invasiveness , many questions in the future will be answered and its use for the diverse groups needing this method. The purpose of this work is to review this new but significant diagnostic method, study its practical applications and ethical and clinical-practical implications. Palabras Claves: Células Fetales, Citogenética, Vellosidades Coriónicas, Amniocentesis. Introducción Aunque el diagnóstico prenatal citogenético basado en amniocentesis o biopsia de vellosidades coriónicas BVC son altamente confiables, sin embargo conllevan a un riesgo bajo pero significativo de pérdidas. La unión de técnicas de separación celular y avances en biología molecular, han permitido el diagnóstico genético de células halladas en la circulación materna. Los métodos invasivos con riesgos en relación al producto deben ser recomendados a un pequeño subgrupo de embarazadas que podrían estar en el más alto riesgo de anomalías cromosómicas (por ej: mujeres mayores de 35 años) (4). La búsqueda de trisomías fetales 21 basadas en la edad es relativamente ineficaz debido a que mujeres de 35 años o menos aportan con el 80% de las trisomías 21, además no hablan del costo de estas pruebas. En pacientes de bajo riesgo hay maneras de identificar fetos con anormalidades cromosómicas y estas incluyen marcadores séricos maternos de proteínas fetales o placentarias como: estrioles conjugados, alfa feto proteínas y gonadotropina coriónica humana, todas las cuales detectan aproximadamente el 60% de las trisomías 21 con una tasa de falsos positivos del 5%. Tenemos también Ultrasonográficos: engrosamiento nucal, defectos cardíacos, acortamiento de los huesos largos, identificando estos el 40-60% de fetos afectados. La pregunta es como acercarnos a pacientes de bajo riesgo sin aumentar la tasa de pérdidas. Podría estar la respuesta en el estudio de células fetales halladas en sangre materna??. * MD Gineco - Obstetra. Médico de la Maternidad “Enrique C. Sotomayor”. Guayaquil - Ecuador ** Obstetriz Co-autora y colaboradora 125 Revista “Medicina” Vol. 5 N° 2. Año 1999 El propósito de este trabajo es hacer una revisión objetiva de este nuevo pero significativo método diagnóstico. correlación entre detección de cuerpos Y quinacrina positivos y productos masculinos al nacer. Inmunobiología A pesar de esto, el uso de estas células se ve complicado por dos hechos; primero: que las superficies celulares fetales de linfocitos no son hereditariamente diferentes de su contraparte materna, por lo tanto se requiere no solo paternidad conocida sino también una pareja polimórfica. Segundo: la persistencia de células fetales en sangre materna hasta 5 años posparto trae consigo problemas diagnósticos en una mujer multípara. Aunque Schmorl hace 100 años demostró trofoblastos en la circulación pulmonar de una paciente que murió de las complicaciones de eclampsia, las células fetales en sangre materna no fueron consideradas material de estudio prenatal hasta que Walknowska en 1969 observó células con cariotipo XY en linfocitos cultivados de 21 embarazadas, 19 de las cuales tuvieron productos varones. Durante los años 70’ se dobló esfuerzos por desarrollar métodos para enriquecer la proporción de células fetales en una muestra sanguínea materna. Estos incluyen columnas de nylon lana, técnicas de cultivo celular selectivo, sorteo celular fluorescente. Revisemos ahora que células blancos pueden ser estudiadas. Trofoblastos Por su morfología única, contacto íntimo con la sangre materna y presencia documentada en sangre materna periférica constituyen las células fetales adecuadas para estudio. Un factor confuso ha sido la inhabilidad de desarrollar anticuerpos (Ac) monoclonales específicos para antígenos de superficie de células trofoblásticas. En muchos estudios iniciales los trofoblastos fetales aislados demostraron luego ser leucocitos maternos que habían absorbido antígenos trofoblásticos. Otra desventaja del uso de estas células es su naturaleza multinuclear, complicando el análisis FISH (Hibridización in situ fluorescente) y el fenómeno de mosaicismo confinado a la placenta que ya ha sido reconocido en la Biopsia de vellosidades coriónicas. Leucocitos Durante los años 70’ se documentó metafases masculinas de cultivos sanguíneas periféricas de embarazadas con productos masculinos. Estas pruebas eran intensas debido a la necesidad de analizar cientos de células maternas para documentar pocas células fetales. El grupo de Herzenberg utilizó técnicas de sorteo-flujo para poder enriquecer la muestra y demostró alta 126 Eritrocitos nucleados Siendo mononucleares, abundantes en sangre fetal durante el primer trimestre, raro en sangre materna y con una vida media limitada constituyen un excelente blanco. La mayor parte de la madres son compatibles con sus fetos, un pequeño número de eritrocitos fetales parecen ser tolerados por la madre. Desde 1990 han sido descubiertas en sangre materna CSRN (células sanguíneas rojas nucleadas), tanto por sus características morfológicas, tinción de Hemoglobina fetal por técnica de Kleihauer-Betke, como identificadas por Ac monoclonales hacia el CD71 receptor transferrina expresada en células que incorporan hierro. Frecuencia de células fetales en sangre materna Debido a su rareza el aislamiento de estas células ha sido un reto. Su rango varía entre 1 en 105 hasta 1 en 109. Existe un incremento gestacional dependiente de 1 en 105 en el primer trimestre hasta 1 en 104 a término. Hamada (2) usando FISH (Hibridización in situ fluorescente) necesitó escrudiñar mas de 144.000 células para evidenciar 1 sola célula que hibridizar con la sonda del cromosoma Y, por lo tanto se necesita métodos para poder enriquecer la muestra antes de su análisis citogenético (5). Una interesante interrogante es el momento del pasaje de las células fetales a la circulación materna. Se podría decir que a mayor edad Células fetales en sangre materna para diagnóstico genético prenatal gestacional, mayor el pasaje de células. En el primer trimestre es mayor el número de células nucleadas y fácilmente detectable. Si se utiliza amplificación de secuencias de cromosoma Y por medio de PCR (Polymerase Chain Reaction) se puede lograr con éxito entre las semanas 6-12 pero mejor por encima de la semana 16, este dato aboga a favor de su uso como diagnóstico prenatal (1). Variabilidad embarazadas biológica entre mujeres Es sumamente variado el número de células fetales obtenidas en una muestra venosa materna de 20 ml. También es desconocido el hecho de que las células fetales estén presentes en todas las embarazadas, debido a múltiples factores que influyen la transferencia de células fetales a la circulación materna como: placentación, embarazo múltiple, incompatibilidad de grupos sanguíneos, complicaciones médicas maternas como diabetes, Preeclampsia y sangrados. Se podría decir que se detectan más células fetales en sangre materna cuando el feto es citogenéticamente anormal, los eritrocitos de algunos fetos con aneuploidías son significativamente mas grandes que aquellos normales para la misma edad gestacional. Una herramienta molecular que ha permitido el reconocimiento de estas células fetales en sangre materna es el PCR por medio del cual se amplifica secuencias de DNA del cromosoma Y para poder rescatar células fetales. Para poder sobre llevar la limitación de solo captar células masculinas y poder tener acceso células fetales femeninas se realiza determinaciones de secuencias alfa HLA DQ. Siendo muy raras las células fetales en sangre materna , se debe amplificar el DNA con métodos de PCR hacia secuencias genéticas fetales en los 20-40 ml de sangre venosa materna. Para detectar aneuploidías se necesita enriquecimiento celular fetal, ya sea de manera “positiva” aumentando el número de células fetales o de manera “ negativa” por depleción de células materna no requeridas. Al determinar por PCR secuencias del cromosoma Y en las madres portadoras de fetos masculinos se facilita el escrudiñaje celular y también se limita este método diagnóstico a madres con hijos varones. El número total de células es calculada comparando la cantidad de trifosfato de deoxiribonucleótido marcado con P32 incorporado a las muestras amplificadas (3). Persistencia de células fetales posparto Se ha reportado la presencia de linfocitos masculinos en circulación materna con un rango de 1 a 5 años luego del parto, lo que trae consigo una posibilidad de error diagnóstico del embarazo actual en estudio. Existen muchas controversias al respecto de este hecho ya que algunos autores solo han amplificado con PCR secuencias de DNA en sangre materna y otros han usado técnicas de enriquecimiento para detectar pequeñas subpoblaciones de células fetales. Mediante técnicas de sorteo de flujo de células se ha detectado linfocitos del tipo CD34 CD38 hasta 27 años posparto. El hecho que el embarazo induce un bajo grado de quimerismo ha sido una observación sorprendente, de modo que para fines de diagnóstico es mejor utilizar CSRN ya que son más diferenciadas y tienen una vida media limitada (2). Otro método utilizado es el uso de Ac monoclonales hacia la cadena Gamma de la hemoglobina fetal, lo que puede escrudiñar células fetales en muestras invadidas con células maternas. Al eliminar las células maternas contaminantes es posible cultivar las pocas células fetales utilizando eritropoyetina, este es un método que promete mucho en el futuro. Durante años pasados FISH ha alcanzado aceptación clínica como método de análisis de cromosomas en metafase e interfase. La ventaja de este método es que no requiere que las células se dividan. Se ha utilizado para diagnóstico de aneuploidías del primer trimestre en muestras de BVC y amniocentésis del 2do trimestre. El porcentaje de células fetales aneuploides tienen un rango que va desde 0%-74%. Consideraciones éticas e implicaciones clínicoprácticas Técnicas 127 Revista “Medicina” Vol. 5 N° 2. Año 1999 Su uso desde el punto de vista práctico puede circundar a mujeres mayores de 35 años con riesgo de aneuploidías. Se ha escogido esta edad debido a que es el punto en el que el riesgo de tener fetos cromosómicamente anormal iguala el riesgo de aborto relacionado al procedimiento. Como acercamiento alternativo sería recomendable que toda mujer embarazada tenga escrudiñeo fetal celular, seguido de amniocentésis o BVC (menos de 11 sem) si es que los resultados sugieren aneuploidía. Se puede utilizar este método en la incompatibilidad Rh ya que a pesar del uso mundial de Gamma globulina Rh (D) aun ocurre eritoblastosis fetal 10.6 de 10.000 nacimientos vivos. Se puede utilizar para rastrear desordenes monogénicos como fibrosis quística, retardo mental por Síndrome Frágil X, distrofia muscular de Duchene y las hemoglobinopatías Alfa y Beta. Desde el punto de vista ético hay que tomar en consideración que muchas mujeres de riesgo se niegan a métodos invasivos por el temor a pérdidas. Debido a que el rastrear células fetales en sangre materna no trae consigo riesgo, no habría razón para no realizarse; sin embargo algunas pacientes no desean saber de antemano si su producto tiene Síndrome de Down. Si esta prueba se vuelve rutinaria estarían las pacientes intimidadas a realizarla? Estarían los cuidadores de salud obligados a imponerla y de saber que el producto es anormal, rechazarían el seguro a cubrir debido a una condición preexistente?. Otra consternación sería el poder seleccionar el sexo de manera voluntaria, lo cual en conjunto con el uso del RU480 podría ser peor. Quizá una solución sería permitir esta prueba a parejas con condiciones ligadas al cromosomas X. Sumario Hay muchas interrogantes con respecto a este método pero es de una importancia primordial 128 debido a su no invasividad, quedará por contestarse en el futuro las muchas interrogantes y su utilidad para los diversos grupos necesitados de este método. Referencias 1. Bianchi DW, Shuber AP, De Maria MA: Fetal cells in maternal blood: Determination of purity and yield by quantitative polymerase chain reaction. Am J Obstet Gynecol 171: 922-926, 1994 2. Hamada H, Arinami T, Hamaguchi H; Fetal nucleated cells in maternal peripheral blood after delivery. Am J Obstet Gynecol 170: 1188-1193, 1994 3. Price JO, Elias SH, Wachtel SS, Klinger K: Prenatal diagnosis with cells isolated from maternal blood by multiparameter flow cytometry. Am J Obstet Gynecol 165: 1731-1737, 1991 4. Steele CD, Wapner RJ, Smith JB: Diagnóstico prenatal en células fetales aisladas de sangre materna: un repaso. Clinical Obstetrics and Gynecology 87: 741, 1995 5. Van Wijk IJ, Van Vught JM, Mulders MA: Enrichment of fetal trophoblast cells from the maternal peripheral blood followed by detection of fetal deoxyribonucleic acid with a nested X/Y polymerase chain reaction. Am J Obstet Gynecol 174 (3): 871-876, 1996 Dr. Peter Chedraui Alvarez Jorched@multinet-ec.net Teléfono: 321940