Maracaibo, lunes, 1 de febrero de 2010 SUCESOS VERSIÓN FINAL 21 fotos: iván lugo/archivo El año más sangriento fue 2007. Al año siguiente 13 muertos llenaron de sangre la cárcel de Sabaneta. En total se cuentan más de 16 mil afectados. Juan José Faría (Unica 2006) jfaria@versionfinal.com.ve N o la dejaron llevar a su nieto, pero ahora espera con entusiasmo el cambio para la cárcel de Sabaneta para que lo pueda ver. El día que se lo planteó, su hijo estaba con unos amigos del pabellón C. “Dicen que es uno de los más peligrosos, pero yo estoy de lo mejor. Hasta me dieron café”. Le habría gustado tomar una cerveza, pero no tenía 20 bolívares para pagar. Un compañero de su hijo, vestido con franelilla blanca, bigotes sin afeitar y una pistola en la cintura, le ofreció a pagarle, pero a ella le dio pena. A Mireya se le han acabado las calamidades. Su hijo ya tiene teléfono y él mismo paga los 100 bolívares semanales para “estar bien cuidado”. No morirá aquí, gracias a Dios. En 2009 se registraron 366 muertes violentas en las cárceles del país. En el primer lugar está el internado judicial de Valencia, y luego la cárcel de Maracaibo, pero otros centros erizan la piel de sus visitantes: en Uribana mataron a 28 y en Aragua a 26. En Yare I cayeron 24, en Barinas 18 y en Ciudad Bolívar 17. Para la tranquilidad de Mireya, en todos los retenes policiales nacional sólo murieron 13 reclusos. “En Sabaneta hay que pagarle al pran más de 100 bolívares. Pero como ahí siempre se andan matando, uno no puede confiar en nadie. Además, si a los militares no le dan lo suyo, llegan en la noche a destrozar todo”. En 2008 estallaron dos granadas Las cárceles de Venezuela semejan un infierno (II) Cuatro mil muertos en 10 años dentro de la cárcel de Maracaibo. Un poco después se pactó un convenio entre la Defensoría del pueblo y el jefe de los reclusos para que no exista más violencia. Se habría legalizado así el estatus de “pran”. Ya el jefe tenía más poder que los militares. La defensoría del pueblo no habría cumplido con su parte y el 26 de septiembre la defensora Eva Moreno Barrios vivió los momentos más peligrosos de su vida, al verse rodeada de condenados por homicidios y sintiendo el frío afilado de un cuchillo de carnicería en el cuello. Ese día, en medio del sol, de las protestas y de los grito, Mercedes se tranquilizó al saber que su marido, indígena, estaba tranquilo. Había hablado con él por teléfono y le dijo que el problema se registró en las áreas de máxima seguridad y en penal. “Mi esposo mató a alguien hace mucho tiempo. Él no tiene problemas ahí, pero paga un dinero y se encierra en el cuarto que construyó con algunos bloques y tapa con sábanas. Él tiene un televisor que yo le llevé y también sus cosas de aseo. A veces lee, me dice él, porque tiene un vecino que le pasa el periódico”. A Mercedes le parece estúpido que la hagan desnudarse cada domingo y cada jueves. “El televisor no me lo metí entre las pantaletas y ellos me lo dejaron pasar. Ganas de molestar”. El Observatorio Venezolano de Prisiones estima que el total de muertos en diez años, equivale a la población total de cinco penales nacionales, incluyendo en hacinamiento. Políticas Una investigación de la Universidad Católica Andrés Bello reveló que desde el 2002, el presupuesto nacional para los centros penitenciarios se ubicó siempre en el 0,82 por ciento. El presupuesto de este año para las necesidades del ejecutivo sobrepasó en 200 por ciento con respecto al año pasado. Mientras tanto, el hacinamiento sigue acaparando las áreas de las cárceles. “Ellos son seres humanos. No merecen ser tratados así”, fue lo que dijo Mercedes mirando la pared del área de reeducación. Del otro lado del sector Sabaneta, los familiares de los recluidos en máxima bailaban de emoción porque uno de los internos salió hasta el techo, mostró una ametralladora y señaló con el cañón una corneta que gritaba un vallenato. “Me lo dedicó a mí”, dijo orgullosa una mujer mientras se cerraba así los conflictos que había generado un motín el año pasado. “Mi esposo es muy buena gente. Me tiró desde el techo 100 mil bolívares para dárselos al chichero. Nos está brindado a todos”. No se identificó. continuará Nuevo año Los conflictos penitenciarios son atribuidos a un motín por el control del penal. El primero a gran escala que se registró en el país lo protagonizaron los reos de La Planta. Murieron diez internos y unos 18 quedaron heridos. Los familiares, que arremetían contra los oficiales de seguridad en las afueras del recinto, denunciaron que la Guardia Nacional provocó la masacre. Se desmintió la denuncia horas después y las guerras de poder siguen siendo los motivos. Año Muertos Heridos Total 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 390 338 300 244 250 402 408 412 498 422 366 1.695 1.255 1.285 1.249 903 1.428 727 982 1.023 854 635 2.085 1.593 1.585 1.493 1.153 1.830 1.135 1.394 1.521 1.276 1001 Total 4.030 12.036 16.069