LA TRIBULACION Y EL MILENIO El Señor Jesús aclaró a sus seguidores que la vida en este mundo tendrá siempre la característica de tribulación y aun de persecución (Marcos 13:7–13; Juan 16:33; 2 Timoteo 3:12). Pero Él dio a entender que en los últimos días habrá también un período de tribulación aun más intenso (Marcos 13:19–20). Muchos creen que Apocalipsis 6–16 explica acerca de aquel período, y comúnmente se llama «la Gran Tribulación». Al final de la «Gran Tribulación» Apocalipsis 19 y 20 relatan la venida de Cristo, la «primera» resurrección, y un período de mil años durante los cuales el diablo estará encarcelado y Cristo reinará con los santos sobre la tierra. Después de los mil años, Apocalipsis 20:11–15 describe el juicio final de los que no tienen sus nombres escritos en el «libro de la vida», y Apocalipsis 21 y 22 describen la nueva creación. Hay mucho debate entre los creyentes acerca de cómo interpretar estos eventos y cómo ubicarlos en el cuadro cronológico de la historia del mundo. Los tres puntos de vista sobre este asunto son: i. el posmilenialismo, ii. el amilenialismo, y iii. el premilenialismo. En términos sencillos, los posmilenialistas esperan que Cristo venga después del milenio y que estamos actualmente en el período milenial, los amilenialistas no esperan un milenio literal, sino consideran que el milenio es un símbolo de la situación actual, y los premilenialistas creen que Cristo viene antes del milenio y que el milenio es un período literal en el futuro. i. Posmilenialismo El posmilenialismo afirma que Dios usará la predicación del evangelio y la obra misionera para efectuar la conversión de la gran mayoría de las personas, y así cambiar también los gobiernos y la cultura del mundo. En sí, es un sistema optimista que propone que las condiciones del mundo mejorarán hasta cuando Cristo venga para tomar control de su reino. Esta posición fue propuesta primeramente por Agustín en el cuarto siglo. Él pensó que la Gran Tribulación ya había sucedido en los tiempos de persecución bajo los emperadores Nerón y Domiciano al final del primer siglo. Afirmó que la Iglesia ya estaba en el tiempo milenial, y que Cristo vendría al final del milenio. Los posmilenialistas del medioevo comúnmente pensaban que Cristo vendría cerca al año 1000, pero cuando no resultó, afirmaban que la cifra de mil años no es literal, sino que representa un período de tiempo relativamente largo. Todavía los posmilenialistas insisten que estamos en el milenio, y ellos interpretan pasajes proféticos y especialmente Apocalipsis como refiriéndose mayormente a eventos que ya han sucedido (el punto de vista preterista). Esta manera de pensar tiende a disfrutar de bastante popularidad cuando las cosas mundiales marchan bien. Por ejemplo, en el tiempo de Agustín, el cristianismo fue la religión oficial del Imperio Romano, y había crecimiento rápido de la iglesia. También en el siglo 19, hubo una expansión rápida de la obra misionera, y había muchos posmilenialistas. Pero después de varios desastres naturales, y dos guerras mundiales, este punto de vista ha menguado en popularidad entre los creyentes. Sin embargo, no hay que decidir sobre la verdad de una opinión teológica por voto popular sino por medio de un estudio Escrituras. ii. Amilenialismo La palabra amilenialismo significa literalmente no-milenio. Sin embargo, los que defienden esta posición solamente afirman que el pasaje «milenial» en Apocalipsis 20:1–10 se refiere simbólicamente a la época presente. Ellos interpretan el libro de Apocalipsis como una serie de recapitulaciones del tiempo entre las dos venidas de Cristo. Así que cuando Apocalipsis 20:1–10 habla de encarcelar a Satanás por mil años, ellos lo toman como otra recapitulación del mismo tiempo (entre las dos venidas de Cristo) desde una perspectiva diferente. Dicen que actualmente, el poder del diablo fue neutralizado por la muerte de Cristo, por lo menos en cuanto a creyentes, e indican que antes de Cristo, hubo pocos creyentes gentiles («de las naciones»), mientras ahora hay muchos. Los amilenialistas creen que Dios está obrando a través de la iglesia para mejorar la situación en el mundo, pero también afirman que hay oposición del diablo y de los incrédulos en contra de la Iglesia. Ellos esperan un tiempo de mucha tribulación al final de este tiempo inmediatamente antes de la venida de Cristo, pero no esperan un reino literal de mil años sobre esta tierra. Ellos enfatizan el hecho que todo el libro de Apocalipsis es muy simbólico y difícil de interpretar, y que no hay ningún otro pasaje en toda la Biblia que hable de un reino de mil años sino solamente los diez versículos en Apocalipsis 20 (son idealistas o historicistas). Esta manera de pensar tiene mucho en común con el posmilenialismo. Es probable que las diferencias entre los dos sistemas no se hicieron evidentes hasta cuando la popularidad del posmilenialismo empezó a menguar y la popularidad del premilenialismo comenzó a aumentar durante el siglo veinte. iii. Premilenialismo Los premilenialistas interpretan los mil años en Apocalipsis 20:1–10 como un reino literal de Cristo sobre esta tierra después de la gran tribulación y antes del gran juicio de Dios. Algunos insisten que será un período literal de mil años, otros que será un período comparativamente largo, pero no necesariamente de mil años exactamente. El premilenialismo es básicamente un sistema pesimista que espera que las condiciones en el mundo irán de mal en peor hasta que Dios interviene súbitamente para traer el fin de todo. Tiende a interpretar pasajes proféticos y especialmente Apocalipsis como predicciones de eventos futuros literales (historicistas o futuristas). Este sistema actualmente es muy popular en la Iglesia evangélica, pero, una vez más enfatizamos que no debemos juzgar la verdad por voto popular, sino por un estudio de la Biblia. Entre los que afirman ser premilenialistas, hay dos debates fuertes: uno sobre el futuro de Israel, y el otro sobre el arrebatamiento de la Iglesia. ISRAEL El premilenialismo moderno comenzó a disfrutar de popularidad debido al movimiento conocido como premilenialismo dispensacional. Los fundadores de este movimiento insistían que el pueblo de Dios en el Antiguo Testamento es Israel, y en el Nuevo Testamento es la Iglesia. Ellos afirman que la Iglesia no es una continuación de Israel, sino una entidad distinta. Por eso las profecías y promesas del Antiguo Testamento tratan con Israel y tendrán un cumplimiento solamente para Israel. (En cambio, los posmilenialistas y amilenialistas tiendan a ver a la Iglesia como una continuación de Israel.) Así que los premilenialistas dispensacionales esperan un futuro especial para la nación de Israel como el pueblo de Dios, cuando todas las promesas y las profecías del Antiguo Testamento se cumplirán específicamente para la nación. En cambio, los premilenialistas históricos (y los posmilenialistas, y amilenialistas) esperan que las promesas y profecías del Antiguo Testamento tendrán su cumplimiento en los que ellos consideran el actual pueblo de Dios: la Iglesia. Entre ellos hay algo de diferencia de opinión en cuanto a cómo interpretar pasajes como Romanos 11:25–26, «Porque no quiero, hermanos, que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes en cuanto a vosotros mismos: que ha acontecido a Israel endurecimiento en parte, hasta que haya entrado la plenitud de los gentiles; y luego todo Israel será salvo, como está escrito: Vendrá de Sion el Libertador, Que apartará de Jacob la impiedad». EL ARREBATAMIENTO 1 Tesalonicenses 4:13–17 y 1 Corintios 15:51–54 enseñan acerca de qué pasará a los que están vivos en el momento de la resurrección de los muertos en Cristo. Tesalonicenses dice que estarán «arrebatados» y Corintios dice que estarán «transformados». Hay un debate entre los premilenialista acerca de cuando este evento sucederá. (Los posmilenialistas y amilenialistas no entran en este debate, porque los posmilenialistas consideran que ya estamos en el milenio, y los amilenialistas piensan que realmente no hay un reino milenial sino que Apocalipsis 20:1–10 trata simbólicamente del período entre las dos venidas de Cristo.) Las tres posiciones principales son que el arrebatamiento ocurrirá, (1) antes de la gran tribulación (denominada pretribulacionista), (2) durante la gran tribulación (mesotribulacionista), y (3) después de la gran tribulación juntamente con la venida de Cristo (postribulacionista). Los tres puntos de vista comparados Posmilenial Interpretación de Apocalipsis Preterista: casi todos los eventos ocurrieron en el pasado. Amilenial Premilenial Histórico y simbólico: Apocalipsis describe eventos entre las dos venidas de Cristo en forma simbólica. Histórico o futurista: casi todos los eventos ocurrirán en el futuro. Actitud hacia esta época Optimista: Dios transformará el mundo a través de la evangelización y la obra misionera. Entonces Cristo vendrá. Dios está obrando a través de la Iglesia, pero a la vez, el diablo está oponiendo la obra de Dios. Cuando Cristo venga, todo se transformará. Pesimista: el mundo irá de mal en peor hasta que Cristo venga y establezca su reino. Como puede ver, estos tres puntos de vista tienen varias diferencias, pero tienen en común la esperanza de la segunda venida de Cristo. Un concepto que une las tres ramas también es la idea de que la primera venida de Cristo inició el cumplimiento de las promesas y profecías del Antiguo Testamento, pero la segunda venida efectuará la consumación de todo. Los tres afirman también el juicio eterno de los incrédulos, y la bendición para los creyentes de estar con Dios por la eternidad. Tenemos que cuidar que las diferencias entre hermanos sobre estas posiciones no crean división. El propósito de Dios en revelar estas cosas es animar, afirmar, y consolar a la Iglesia de la esperanza firme respecto a la venida futura de Cristo. Al predicar o enseñar sobre estas cosas, deberíamos utilizar la oportunidad de impartir esperanza, animar una vida santa y activa, promover la persistencia sin importar el costo, e inspirar la evangelización y la obra misionera para alcanzar a los perdidos.