Virus de la tristeza (VTC) en cítricos

FICHA TÉCNICA - CULTIVO DE CÍTRICOS
ESCUELA DE CAMPO DE AGRICULTORES
Virus de la tristeza (VTC) en cítricos
El virus de la Tristeza de los Cítricos (VTC) es una enfermedad transmitida por los insectos conocidos como áfidos
o pulgones El virus también puede propagarse por la utilización de yemas enfermas en la producción de plantas
injertadas. El VTC es circulativo o sistémico en la planta enferma, por lo que su control es difícil. El virus daña el
floema a nivel del injerto, afectando la nutrición de las plantas.
Se conocen hasta ahora tres grupos de razas o cepas del virus:
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Leve o Suave: provoca picado del tallo y amarillamiento del follaje.
Moderada: las ramas y tallo presentan acanaladuras.
Severa o grave: provoca un declinamiento rápido de la planta, que muere en unas semanas.
En El Salvador, las pérdidas en las plantaciones de cítricos no han sido graves, lo cual es atribuido a que la raza de
virus existente es la “cepa leve o suave”.
Otra forma es: asintomática.
En otros países, esta enfermedad es de suma importancia y ha causado pérdidas cuantiosas.
Pulgones o áfidos transmisores de la enfermedad
Estos insectos son pequeños y pueden ser de varios colores: negro, café, amarillo, verde. Los pulgones se reproducen
con rapidez, en los brotes tiernos. El daño característico que provocan es la deformación o enrollamiento de la hoja
hacia atrás, lo que se conoce también como “acarrujado”.
Existen 4 clases de pulgones que transmiten la enfermedad del VTC:
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Toxoptera citricida o Pulgón Negro (Apidae:Homoptera).
Toxoptera aurantii o Pulgón Café.
Aphis gossypii o Pulgón amarillo del algodón.
Aphis spiraecola o Pulgón Verde.
De éstos, el más eficiente en transmitir la enfermedad es el pulgón negro
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El pulgón puede adquirir el virus en segundos y transmitirlo también, en cuestión de segundos. Sin embargo,
pierde efectividad de transmitirlo luego de 48 horas de haberlo adquirido.
La planta presenta los síntomas de la enfermedad entre los siete a nueve meses después de haberla adquirido.
Los síntomas más graves se presentan entre uno o dos años después.
Cultivos dañados por la enfermedad
Las especies cítricas más susceptibles son: la naranja, toronja, limón pérsico y ciertos Tangelos.
En El Salvador, el cultivo de la naranja dulce es la más dañada, afectando a todas las variedades cultivadas, tales
como: Washington Navel, Valencia, Victoria, Jaffa, Piña, y variedad Criolla.
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Síntomas y daños por la enfermedad
Colapso rápido: marchitamiento repentino de las plantas, hojas color cenizo. Frutos adheridos hasta deshidratarse.
Muerte en 3 semanas.
Declinamiento lento: abundante floración y amarre del fruto, el cual colorea prematuramente. Las hojas se amarillean
y caen; Muerte de ramas y acortamiento de brotes, raíces mueren, descortezamiento y pudriciones en el sistema
radicular. Si se levanta la corteza de dos a tres centímetros, se observan punteaduras en la cara interna, conocida
como panal de abeja las punteaduras.
Manejo Integrado del VTC
El manejo integrado del VTC involucra estrategias de prevención, manejo y erradicación, tanto del virus como de
sus vectores.
En El Salvador, las cepas del virus presente, según sintomatologías observadas en los cítricos, corresponden a las
“mild strain”, es decir, cepas leves o suaves pues, la mortalidad de árboles -aún sobre patrones susceptibles- no
ha sido alarmante. A esto se le conoce como protección cruzada, pero la mejor opción es la prevención de la
enfermedad.
Las medidas cuarentenarias son básicas para manejar la enfermedad. En este sentido, los servicios de cuarentena
deben aprobar la entrada únicamente de materiales debidamente certificados y eliminar los de dudosa procedencia.
No se debe permitir la importación de material vegetal de viveros no certificados. También, es importante la
certificación de los viveros nacionales para producir y distribuir plantas libres de enfermedades.
Otra manera de prevenir daños, es la preinmunización con cepas débiles de VTC, conocida como protección
cruzada. Esta práctica se basa en la capacidad que tiene una raza débil, leve o suave de un patógeno, (o un virus,
como en este caso), para prevenir el establecimiento de otra raza severa. De manera, que la raza leve protege a la
planta de la raza severa similar a la aplicación de vacunas en el ser humano.
Control cultural
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Comprar planta sana en los viveros, injertada sobre limón Volkameriana, Mandarina Cleopatra, o Citrumelo
Swingle
En la finca, identificar el área o plantas afectadas por VTC.
Erradicar las plantas enfermas. Cortar al ras del suelo con motosierra.
Realizar control de malezas bajo la planta y en todo el terreno.
Para controlar los insectos pulgones o áfidos que transmiten la enfermedad mediante trampas amarillas y la
aplicación de insecticidas.
Control químico
El control químico de la enfermedad no es posible, ya que no hay productos que maten al virus. El control químico
va dirigido hacia los pulgones o áfidos, para lo cual existen insecticidas o insecticidas- acaricidas para controlar
con un solo plaguicida a otros ácaros que causan daños al follaje, y frutos, y que además, en el caso del cultivo de
naranja, pueden transmitir la enfermedad Leprosis.
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Insecticidas
Algunos insecticidas-acaricidas que pueden aplicarse son:
Confidor 70 WG (Imidacloprid), en dosis de 85 gramos en 200 litros de agua.
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Savon (jabón insecticida ), en dosis de 100 cc por bomba de cuatro galones.
Kabonim ( jabon insecticida y neem) en dosis de 100 cc por bomba de cuatro galones
Overon 24 SC (Spiromesifen), en dosis de una copa Bayer por bomba de cuatro galones.
Monarca 11.25 SE(Thiacloprid + Beta Cyalotrin), en dosis de 25 cc por bomba de 4 galones.
Otras consideraciones para la aplicación de insecticidas, acaricidas o insecticidas-acaricidas:
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Es recomendable realizar una aplicación de insecticida-acaricida a las plantas en el lugar de acopio, antes de
distribuirlas en el campo para la siembra.
Aplicar agroquímicos con diferente composición química, para evitar crear resistencia a los insectos o ácaros.
Efectuar aspersiones en forma de nebulización o gotas pequeñas.
Fumigar insecticidas-acaricidas a las malezas y otras plantas ornamentales y hospederas frutales asociadas con
el cultivo de cítricos.
La frecuencia de aplicación puede variar cada dos a tres semanas.
NOTA: La mención de compañías y productos y el uso de nombres de marca en esta publicación son para referencia únicamente y no implica
el apoyo o preferencia al producto mencionado o la crítica a otros productos debidamente registrados que no se encuentren listados. Referirse
a las etiquetas de los productos con respecto a restricciones, equipo de protección personal, y otras instrucciones para la aplicación y uso de
los mismos.