Foto: Archivo Siglo Nuevo GASTRONOMÍA Un manjar dulce de los dioses La fruta del monte Ida De todas las mermeladas que voy alternando en mi desayuno, la que más alegrías me da es la de frambuesa; me gusta sin excesivo dulzor, con un puntito de acidez que me recuerda el sabor natural de la fruta; también me gusta su aspecto, su color. Es importante, insisto, que no resulte empalagosamente dulce. POR: Caius Apicius 26 • SIGLO NUE V O