Opinión: Embarazos no deseados

Tesis:
¿Ha disminuido la discriminación en Chile hacia las madres y padres adolescentes durante estos últimos
años. Es posible lograr una reinserción, ya sea escolar y cultural, para estos jóvenes?
Embarazo adolescente:
UNA REALIDAD POCO ACEPTADA
Cada año 40.000 adolescentes menores de 18 años quedan embarazadas, el 55% de éstas son solteras. El
85% de los jóvenes varones rechaza a sus hijos anualmente, según informes del INE.
La maternidad, sin duda, es una de las experiencias más hermosas y satisfactorias para una mujer. Pero esto
deja de ser una alegría cuando se trata de una concepción no deseada y más aún cuando se está en edad
escolar.
Cada año 40.000 adolescentes menores de 18 años quedan embarazadas, el 55% de éstas son solteras.
Mientras la fecundidad promedio de las mujeres chilenas entre 25 y 29 años ha disminuido sostenidamente en
las últimas décadas, la de las jóvenes menores de 19 años ha aumentado, según un informe del INE elaborado
en el 2000
Cabe señalar que las cifras estadísticas si bien son un buen referente, no revelan el problema del embarazo
juvenil en toda su magnitud puesto que al ser ilegal el aborto en Chile, no hay registro respecto de la
interrupción voluntaria de embarazos.
La Postura de los Colegios
Las menores que quedan embarazadas muchas veces son rechazadas por el entorno social, ya sea por sus
padres, sus amigos e inclusive en sus colegio, llegando al extremo, algunas veces, de expulsar a la alumna en
cuestión. Con los años esta práctica es cada vez más denunciada por los familiares de las niñas afectadas y es
por esto que ahora algunas instituciones permiten que sus estudiantes terminen su enseñanza aun estando
embarazadas. Pero claramente que también existe la otra cara de la moneda. Generalmente son colegios de
inspiración católica los que no toleran esta condición entre su alumnado. El Colegio Argentino del Sagrado
Corazón el año pasado expulsó a dos escolares a mitad de año cuando se enteraron que éstas estaban
embarazadas, a este respecto la orientadora de la casa de estudios, Patricia Ramírez, señaló que el colegio no
pretende dar un mal ejemplo a las demás alumnas, además fueron muchos los padres que se opusieron a que
estas niñas siguieran estudiando aquí, razón que me parece justa ya que ellos pagan por mantener a sus hijas
en este colegio y lo mínimo que nosotras podemos hacer es entregarles los valores fundamentales para su
desarrollo como futuras mujeres. Además hay que entender que este es un colegio católico y rechaza
tajantemente las relaciones prematrimoniales.
Para la sicóloga Paula Serrano discutir el tema del embarazo en los cursos es fundamental porque moralmente
el tema de la vida es algo muy importante. Además agrega que no tendría porque haber un colegio especial
para estas niñas ya que el embarazo no es algo escandaloso.
Poco a poco han ido surgiendo en Santiago casas de acogidas y colegios especiales que reciben a jóvenes
embarazadas junto a sus hijos con el fin de que no pierdan la oportunidad de educarse. También en regiones
este asunto se ha tomado con mucha seriedad. El año 98 el alcalde de Temuco, René Saffirio, presentó un
proyecto para que las jóvenes madres de la provincia no se vieran obligadas a interrumpir sus estudios. De
esta manera se creó una sala cuna con especialista que se encargarían de los recién nacidos, de su
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alimentación, cuidados, etc. Pero muchas veces la decisión de abandonar los estudios parte de las mismas
adolescentes, quienes por vergüenza o miedo optan por dejar el colegio. Eliana tiene 19 años, a los 18 quedó
embarazada y llegó sólo hasta segundo medio, ella no quiso volver al colegio cuando se enteró que estaba
embarazada porque prefirió cuidar del hijo que venía en camino y además porque en un principio sintió que
podría ser rechazada por sus profesores. De todas maneras el liceo al que asistía nunca se ha opuesto a que sus
alumnas estudien embarazadas, más bien fue una decisión personal señala Eliana.
Los Estudios Acerca del Tema
Cada vez son más los estudios que analizan este fenómeno, el cual se hace más reiterativo en nuestro país. La
maduración sexual es cada vez más temprana, mientras que la madurez psicológica y social es cada vez más
tardía lo que convierte el embarazo en un hecho negativo para la madre adolescente.
Según un informe del INE realizado el año 1990, 292.146 de los niños vivos que nacían 13.784 correspondían
a menores de 20 años.
Para la escritora Patricia Hamel este fenómeno le ocurre generalmente a niñas de escasos recursos. Según
describe Hamel las condiciones sociales afectan mucho para que se produzcan embarazos en los sectores
populares , un ejemplo de esto es el hacinamiento que se observa en las viviendas donde pueden llegar,
incluso a morar más de 8 personas en escasos metros cuadrados y donde todos deben dormir con todos. Esto
además trae como consecuencia crisis propias del embarazo, como por ejemplo el vivir en pareja, alejamiento
del hogar o adaptación a nuevas y diferentes relaciones familiares, asumir el rechazo social, abandono de
Escuela y amigos, etc. Muchas veces las jóvenes se sienten presionadas a contraer matrimonio para no ser
vista como madres solteras lo que provoca muchas veces el fracaso de sus relaciones. Para Paula Serrano el
tema de fondo es que muchas de las jóvenes se quieren embarazar porque no tienen nada propio. Se sienten
solas, le tienen terror al futuro, incluso teniendo una gran información. Es un tema de afecto, señala.
Un estudio realizado por la FNUAP (Fondo de Población de las Naciones Unidas) señala que los discursos
sexuales provienen generalmente de la religión, el género y la ciencia. Al entrar a la pubertad, tanto hombres
como mujeres, reciben mensaje de estos tres tipos, ya sea en su entorno familiar, educacional, amistoso e
incluso dado las condiciones culturales.
El Rol del Padres Adolescente
Muchas veces se critica el poco interés que demuestran los jóvenes frente a un problema de embarazo. En este
sentido el estudio elaborado por la FNUAP señala que no es parte del hombre la paternidad, a diferencia de lo
que es la maternidad en la mujer. Sin un hombre no acepta su responsabilidad, jamás se va a cuestionar la
virilidad del individuo si éste no reconoce a un hijo. Claramente que trae sanciones sociales pero nunca se le
considera como que ha traicionado su naturaleza. La cultura, por lo menos la occidental, excluye al hombre
del cuidado de los hijos y más que nada lo pone como un eje de poder, legando todas las responsabilidades
propias del cuidado de los hijos a la mujer. Esto es un claro reflejo de porque se denomina nuestra sociedad
como machista.
El 85% de los jóvenes varones rechaza a sus hijos anualmente, según indica el INE. Sin duda que esta es una
cifra escandalosa y deja mucho que hablar del el rol que juegan los padres de los adolescentes. Sin embargo,
existe un 15% de jóvenes que aceptan la paternidad y deciden a apoyar a su pareja. Este es el caso de Luis
Cáceres quien a los 16 años fue padre. Él cuenta que en un principio fue muy difícil, imagínate, yo solo tenía
16 años cuando mi polola me contó que estaba embarazada. Casi me morí. Mis papás me obligaron a hacerme
cargo de mi hija y así fue como tuve que buscar trabajo. Fue muy duro porque yo tenía que ir al colegio y
después pasar al Supermercado a trabajar de empaquetador, no ganaba nada pero igual me servía para
comprarle pañales y algo de ropa. De todas maneras jamás me sentí discriminado por mi familia y amigos .
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La Necesidad de Informar
En el año 1996 el gobierno, junto con el Ministerio de Educación crearon las polémicas Jocas (Jornadas de
Conversación sobre Afectividad y Sexualidad), con el fin de difundir en los colegios más información sexual
de la que se entregaba hasta esa fecha. Lamentablemente los primeros resultados no fueron bien acogidos por
parte de algunos sectores ya que, para ellos, estas jornadas no cumplieron con su papel principal y sólo fue
una instancia para promover los métodos anticonceptivos sin recalcar que la abstinencia es la mejor forma
para prevenir embarazos y enfermedades venéreas.
La psicóloga Paula Serrano indica que la única manera de reducir la tasa de embarazos adolescentes es
formando más que informando. El objetivo de los programas escolares en materia de sexualidad debe apuntar
a retardar el inicio de la actividad sexual en los jóvenes. Para ello es necesario que los adolescentes
internalicen que las relaciones sexuales tienen una dimensión espiritual inseparable de la corporal y que la
mejor forma de vivirla es dentro de una familia.
Pese a los esfuerzos del Gobierno por querer impulsar campañas, con el fin de evitar estas situaciones, los
resultados no han sido del todo favorable ya que aun no se encuentra una formula para, por una parte educar
sexualmente al alumno y por otra entregarle los valores necesarios que le servirán para evitar tales situaciones
de embarazo.
Es de esperar que con el tiempo podamos observar una disminución de casos de embarazos precoces, pero
más que nada tratar de cambiar la mentalidad frente a estos temas ya que la maternidad y paternidad juvenil
son un hecho que no podemos dejar de esconder en nuestra sociedad, hay que enfrentarlo con la seriedad y
responsabilidad que se merece,
no discriminando sino que más bien educando e informando a los adolescentes y también a sus padres.
Entrevistados:
Patricia Ramírez fue entrevistada en el Colegio Argentino del Sagrado Corazón el día miércoles 28 de
noviembre a las 13:00 hrs.
Paula Serrano fue entrevistada en su consulta el día viernes 30 a las 12:00 hrs.
Luis Cáceres fue entrevistado en su domicilio el martes 27 de noviembre a las 16:00 hrs.
Eliana Cabello fue entrevistada el día lunes 3 de diciembre a las 18:00 en su domicilio.
Documentos extras:
Informes del Instituto Nacional de Estadísticas sacados el día 29 de noviembre a las 11:00 hrs. En el edificio
ubicado en Bulnes.
Textos del área de documentación del Servicio Nacional de la Mujer el día 28 de noviembre entre las 15 y 17
hrs en Teatinos 950.
Universidad Diego Portales
Facultad de Ciencias de la Comunicación e Información
Escuela de Periodismo
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Redacción Informativa II
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