Oficio 220-105525 Octubre 14 de 2008 ASUNTO: Los honorarios que provienen del ejercicio de una función profesional como mandatario de un ente deudor gozan de prelación. Me refiero a su escrito radicado en esta Superintendencia con el número 2008-01-187965, mediante el cual, luego de exponer que “ Si de acuerdo con el artículo 1277 del Código de Comercio, los honorarios de las profesiones liberales derivados de la ejecución del mandato se asimila a los salarios, sueldos y todas las prestaciones provenientes del contrato de trabajo, y por tanto, concede el privilegio que las leyes otorgan a los salarios, sueldos, etc., “ , consulta si para efectos de una liquidación obligatoria de una sociedad, los créditos por honorarios de abogados presentados dentro de dicho trámite deben graduarse como de primera clase. Sobre el particular, me permito transcribir apartes del Oficio 220-26018 del 14 de diciembre de 1993, según el cual, siempre que los honorarios provengan del ejercicio de una función profesional como mandatario de una compañía, éstos deben cancelarse con la misma preferencia otorgada por la ley a los créditos de la primera clase: “ … Es indudable que la actuación de una persona frente a una sociedad mercantil, que en ejercicio de la función profesional ha obrado como mandatario de la misma, está enmarcada dentro de la figura del mandato consagrada en los artículos 1262 a 1268 de nuestra legislación mercantil ya que si bien, la prestación de los servicios inherentes a las profesiones liberales es una actividad típicamente civil, según lo pregona el numeral 5 Del artículo 23 del Código de Comercio, lo cierto es que cuando éstos se prestan a una persona dedicada profesionalmente a la actividad mercantil en razón precisamente de tales actividades o del ejercicio de los derechos propios de las mismas, el acto respectivo debe sujetarse a las disposiciones de la ley comercial como claramente lo establece el artículo 22 ibídem. Ahora bien, dentro de las disposiciones señaladas de la legislación comercial, debemos indiscutiblemente hacer referencia al artículo 1277, el cual establece que “ el mandatario tendrá derecho a pagarse sus créditos, derivados del mandato que ha ejecutado, con las sumas que tenga en su poder por cuenta del mandante, y, en todo caso, con la preferencia concedida en las leyes a los salarios, sueldos y demás prestaciones provenientes de relaciones laborales” . En este orden de ideas debemos afirmar, que si bien es cierto los honorarios que adeuda una sociedad antes de ser disuelta y entrar en estado de liquidación, no son prestaciones derivadas de un contrato de trabajo ni bajo ninguna circunstancia constituyen salario por provenir de una actividad independiente, no menos cierto es que el último artículo mencionado asimila los honorarios, para efectos de realizar el pago respectivo, a los salarios, sueldos y todas las prestaciones provenientes del contrato de trabajo; es decir que así dicha persona no tenga la condición de comerciante, deben cancelarse con la misma preferencia otorgada por la ley a los créditos de la primera clase (artículo 2495, numeral 4 del Código Civil)… ” . En los anteriores términos se ha dado respuesta a su consulta, no sin antes observarle que el alcance de los mismos es aquel al que alude el artículo 25 del Código Contencioso Administrativo.