InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ EN BUSCA DEL AGUA: LOS AGUADORES DEL SIGLO XIX EN GUANAJUATO POR HENRY WILLIAM JACKSON Norma Lucía García Amador1 / Víctor Manuel González Esparza2 La aparición de una imagen confiere tantas historias posibles, contestar la necesidad de una imagen en un momento dado nos lleva por rumbos múltiples, desde la historia de un medio con sus procedimientos o los usos de la fotografía para un momento dado3. En caso de los ojos de un extranjero sobre una nación es indispensable comprender los usos, saber las motivaciones intrínsecas del disparo, Henry William Jackson vino a México a finales del siglo XIX dejó una serie de imágenes fijas de lo que él consideró importante bajo su contemplación. Jackson visitó la ciudad de Guanajuato posó su mirada sobre algunas panorámicas, calles, vendedores y un oficio en particular, el aguador. ¿Qué expresan sus encuadres en ojos de un extranjero? ¿Por qué Jackson eligió un oficio en particular? ¿Cuál es el valor estético de las fotografías de los aguadores en Guanajuato? Entender estos señalamientos de Jackson implica comprender el espacio ideológico 4 que da motivación a la efigie. 1 Maestría en Artes del Campus Guanajuato de la Universidad de Guanajuato Doctor en Historia (Universidad de Tulane), Director General de Difusión y Vinculación en la UAA, profesor invitado en el programa de Maestría y Doctorado en Artes del Campus Guanajuato de la Universidad de Guanajuato. 3 DURAN, Regis, El tiempo de la imagen, España, 1998, p. 12. 4 SONTANG, Susan, Sobre la fotografía, México, 2006, p. 35. 2 ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 1 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ Jackson dejó un legado visual muy amplio por su número, belleza y el contenido reflejado en sus placas, lo anterior hace siempre insuficiente el estudio acucioso de su obra. Newhall incluye a Jackson en la exposición fotográfica: 1839-1937 y desde ese momento se han hecho diversas indagaciones sobre la obra de este fotógrafo que han ayudado a esclarecer y comprender la producción de la imágenes, nunca se ha agotado el tema por lo que es entendible que no ha sido posible ubicar en la literatura consultada una investigación tan particular como el aguador en Guanajuato. A la lejanía las fotografías antiguas muestran detalles que en su momento no ofrecían, estos detalles son manifestaciones de una vida en su tiempo con una forma de pensamiento o ideología. La disposición y la composición de la imagen elegida por el fotógrafo también refleja una manera estética del momento, Octavio Paz lo explica de esta forma: “Todo estilo es histórico y todos los productos de una época, desde sus utensilios más simples hasta sus obras más desinteresadas, están impregnados de historia, es decir, de estilo.” 5 Hace más de cien años, Henry William Jackson tomó las placas de la ciudad de Guanajuato, estas fotografías muestran aspectos desaparecidos, cambiados o intactos. Es incuestionable el valor que encierran las fotografías pasadas como las de Jackson, pues los detalles, esos detalles que el fotógrafo decidió incluir o que de forma no consciente lograron la luz, muestran los aspectos de la vida en Guanajuato, son fuentes indudables de diferentes conocimientos como acervo documental6. En este caso las fotografías de Guanajuato nos 5 PAZ Octavio, El arco y la lira. FCE, México, 2009, p.20. Véase el comentario de la autora: MONRROY, Rebeca. “Los acervos documentales y la reconstrucción fotohistórica”. Consulta 8/05/2014, http://discursovisual.net/dvweb05/agora/agorebeca.htm 6 ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 2 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ ofrecen un discurso estético en su contexto porque frecuentemente presentan aspectos que en la actualidad ya no se pueden apreciar. Son aspectos de la realidad social, Peter Burke hace un recuento de los estudiosos que se han interesado en “utilizar los testimonios visuales como documentos históricos” 7. A través de placas como las de Jackson podemos reconocer los detalles del día a día o el acontecer cotidiano, muestran los entornos sociales con un valor documental, por esto, las imágenes generadas nos ayudan a comprender el elemento estético fotográfico en el pensamiento histórico. 8 Parte de esa historia ha quedado en las 21 placas originales del estado de Guanajuato que resguarda La Biblioteca del Congreso de Washington D.C.9 captadas por Henry Williams Jackson con fechas de 1880 y 1891. Jackson comienza mucho antes sus actividades comerciales de fotografía cuando abre con su hermano en 1867 un estudio en Nebraska Omaha, aunque en esta ciudad el ferrocarril ocupaba un lugar importante, Jackson comenzó a tomar fotografías de indios y paisajes, después de un tiempo gana experiencia y un lugar como fotógrafo gracias a sus placas sobre las montañas rocallosas.10 Obtiene de la compañía ATSF la concesión para tomar fotografías en México por medio de la subsidiaria Ferrocarril Central Mexicano, elaboró tarjetas postales y estereoscópicas como parte de un negocio del 7 BURKE, Peter, Visto y no visto, Crítica, Barcelona, 2005, p.14. Ibid., pp. 16, 17 y 18. 9 Jackson, Willian, Collection: Detroit Publishing Company. Consulta 11/10/2013, http://www.loc.gov/search/?q=jackson+william+henry+guanajuato. 10 NEWHALL, Beaumont, Historia de la fotografía, Editorial Gustavo Gili, S.A., Barcelona, 2002, p.100 8 ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 3 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ propio Jackson pues se vendían estas imágenes en hoteles, estaciones del tren y establecimientos en Estados Unidos y luego en México. 11 El proyecto publicitario de México fue una estrategia del gobierno mexicano, porque en el tercer tercio del siglo XIX México se encontraba en estado decadente por el agotamiento de un país en constante lucha civil e intervenciones por ejércitos extranjeros. La imagen de México fuera del país era económicamente insegura, la inestabilidad política había traído un poco o escaso desarrollo del capitalismo. Para Porfirio Díaz fue importante el reconocimiento de su gobierno por parte de los Estados Unidos en 1878 y así comenzar las negociaciones sobre las inversiones americanas. La minería, la comunicación y el ferrocarril12 fueron industrias principalmente fomentada por Díaz. Como parte de esta promoción en el extranjero, México participa en 1889 en la Exposición Internacional de París. La fotografía juega un aspecto primordial, el catálogo de participación de México en París señala que nuestro país envía fotografías de vistas o panorámicas de México, entre los estados incluidos se encuentra Guanajuato con dos fotógrafos; uno de la ciudad de León, José María Pacheco y Romualdo García de Guanajuato.13 Esto contribuye a la fórmula de promoción visual que pretendía el gobierno de México. Para contrarrestar la imagen de inseguridad de México y mantener el orden, Porfirio estableció una política de seguridad, así que una imagen de guardias era habitual durante el 11 GUTIÉRREZ, Ignacio, Una Mirada estadunidense sobre México, Instituto Nacional de Antropología e Historia, México, 2012, p. 23 12 Véase el informe hecho para la Exposición de Chicago: POMBO, Luis, México 1876-1892, Imprenta Siglo Diez y Nueve, México, 1893. 13 Catalogue officiel de l ´exposition de la république mexicaine/Exposición universelle internationale de Paris, 1889. Consulta: 15/12/2014, http://gallica.bnf.fr/ark:/12148/bpt6k738021.r=Catalogue+officiel+de+l+%C2%B4exposition+de+la+r%C3% A9publique+mexicaine.langES ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 4 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ período de su gobierno, cualquier levantamiento armado o cualquier desorden público fue rápidamente aniquilado. Las políticas de Díaz fueron progreso por medio de concesiones a los extranjeros para lograr un auge económico y el orden a través de la continua vigilancia. En este sentido Flandrau hace un señalamiento con una visión norteamericana sobre la seguridad en el México bajo Porfirio Díaz: “El orden y la seguridad que parecen reinar por doquier, tanto de día como de noche, también resultan sorprendentes en un país que según suele creerse, es la fuente actual de la ilegalidad y el melodrama. Además de los policías chaparritos pero eficaces, con revólveres grandes y bien visibles que parecen estar en todas las esquinas y que se materializan como un verdadero enjambre a la menor infracción a las normas, las carreteras son patrulladas por ese pintoresco cuerpo conocido como los rurales, que suman cuatro o cinco mil hombres.”14 Es claro que Jackson comprende la necesidad y la utilidad de la fotografías para los dos gobiernos, Ignacio Gutiérrez Ruvalcaba expresa: “Las placas de Jackson serán pequeños y útiles cortezas del tiempo y el espacio que, pese a su cualidad tuvieron y tienen el poder de testimoniar los cambios que se operan en México, y también expresan ideas de los estadounidenses a propósito de su nación.”15 Este fotógrafo norteamericano es parte de un grupo que llega a México bajo la óptica de progreso y actualidad, un grupo que tenía pretensiones comerciales como señala Rosa 14 15 FLANDRAU, op. cit. p. GUTIÉRREZ, op. cit. p. 34 ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 5 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ Casanova: “las fotografías que reflejan la modernización como respuesta a los anhelos oficiales y comerciales.”16 La mirada de México en sus primeras fotografías viene desde el equipo, los procesos y la visión de los extranjeros, entendemos que los encuadres tendrán funciones exógenas a México a través de tarjetas postales y estereoscópicas como las que Jackson produjo. Estas tarjetas postales fueron muy populares a fines del siglo XIX y principios del XX, también se hicieron folletos para promocionar México como explica Charles Macomb Flandrau: “Omito deliberadamente las sugerencias acerca de rutas, excursiones y “paisajes” ya que todos los ferrocarriles mexicanos publican atractivos folletos ilustrados que tratan esos temas con mucha más lucidez de la que pueda esperarse de mí.”17 Este fotógrafo americano conservó las placas sobre su trabajo en México, hecho que deja ver que tenía un fin comercial y que era Jackson el beneficiado de tal empresa. 18 Gutiérrez explica que Jackson contaba con la libertad de elección en casi todo el proceso de producción de sus imágenes, y la mayoría de ellas fueron sobre la vida rural y la vida urbana: “la diferencia no sólo queda en lo urbano, la sorpresa y el asombro son mayores ante la vida cotidiana.”19 Con esta libertad de encuadre, Jackson incide en el retrato de un personaje u oficio de la época: el aguador, un personaje muy de la vida cotidiana de ese 16 CASANOVA, CASTILLO DEL, MONROY, MORALES, Imaginarios y fotografía en México 1839-1970, Lunwerg Editores, España, 2005, P.19 17 FLANDRAU, Charles, ¡Viva México!, Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, México, 1994, p. 117. 18 GUUTIÉRREZ, op. cit. p. 62. 19 Ibid., p. 44 ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 6 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ momento y que por la naturaleza de su oficio navega sin problema entre las escenas privadas de las casas, las calles de la ciudad y sus fuentes para llevar agua potable necesaria en el quehacer, la cocinar y el aseo personal. Los aguadores de México en el XIX muestran una manera muy característica y hasta pintoresca de la distribución del agua, también es una zona de oportunidad para una posible inversión pues José Tomás de Cuellar explica el rezago de México si se compara con Estados Unidos: “Las últimas obras de este género que hemos visto, son las de los Estados Unidos de América; obras en las que las grandes máquinas de vapor, los réservés y la entubación perfecta, en el uso del agua potable, de hacerla motora de sí misma, como la sangre en el sistema arterial y venoso del cuerpo humano, recorre en infinitos tubos las partes bajas y elevadas de la ciudad, en virtud de la conveniente presión.”20 Hay tres fotografías sobre este tema en la ciudad de Guanajuato, para Jackson el aguador tiene un carácter pintoresco ya que es una imagen que se repite constantemente entre las placas de nuestro país. Dentro del acervo que se hace referencia, hay retratos de aguadores en la Ciudad de México, Zacatecas, Chihuahua, San Luis Potosí y Querétaro. El aguador fue el oficio de la persona encargada de surtir agua potable en los hogares mexicanos, no se sabe con certeza desde cuando sucedía o la antigüedad del oficio, Tomás de Cuellar lo data desde hace varios siglos: “A ti, oh resto mueble de la incuria de tres siglos, representante impávido del statu quo, acémila parlante, hongo viviente de la dignidad humana; a ti, 20 CUELLAR DE, José, La linterna Mágica, Ediciones de la Universidad Autónoma, México, 1941, p. 204 ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 7 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ vehículo vejado, ludibrio de la civilización; a ti, aguador nacional dirijo hoy mis homilías.” 21 Esta actividad a fines del siglo XIX también llegaba a su fin y fue capturado por los escritores mexicanos dentro de los cuadros de costumbres, a través de ellos sabemos aspectos más detallados de su faena. Los aguadores presentaron características peculiares de su labor como sus atavíos o vestimentas, El Manual del Viajero en Méjico hace la siguiente descripción: “El traje del aguador es característico en Méjico y este acuoso personaje vive por lo comun en un cuarto de una casa de vecindad, ó en una accesoría del barrio. A las 6 de la mañana se viste su camisa y calzon blanco de manta y unas calzoneras de pana o gamuza que solo le llegan á la rodilla. Encima de esto se pone un capelo, parecido por delante a la figura de una armadura antigua, aunque su material es de cuero, y por detrás forma un rodete que sirve para mantener un seguro equilibrio del chochocol, que tiene la figura de una grande granada de artillería, y es de un barro rojo, donde él lleva su capital, el agua. Cubre su cabeza con un casquete de cuero, de la figura del que usan los cenceños jokies ingleses, y por medio de una correa que le pasa por la frente, sostiene por las asas la voluminosa vasija, mientras de otra correa cuelga á su cabeza otra vasija mas chica que viene á ser un cántaro.”22 Tal descripción coincide con la vestimenta, las vasijas y los soportes de cuero que hacen el propio José Tomás de Cuellar y Antonio García Cubas. 23 En las fotografías de Jackson apreciamos que los aguadores no usaban el mismo tipo de vasija; no es la esférica 21 Ibid., p. 203. ARRÓNIZ, Marcos, El manual del viajero en Méjico, Consulta: 14/04/2014, http://132.248.9.32:8080/fondoantiguo2/1489974-687799/JPEG/Index.html 23 GARCIA, Antonio, El libro de mis recuerdos, Editorial Patria S. A., México, 1945, p.309 22 ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 8 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ del chochocol, sino larga y cilíndrica, la sujetan de la misma manera por medio de cuerdas y lazos de cuero a su espalda rematando en la cabeza, su ropa es de manta y un delantal de cuero. En las imágenes de Jackson notamos la ausencia del cántaro delantero de los aguadores de la ciudad de México, en Guanajuato los aguadores se ayudan inclinándose y con un bastón. Hilarión Frías y Soto explica que había algunas diferencias del transporte: “En Guanajuato tiene el aguador un cofrade, un burro sobre el cual carga sus garrafas. En Querétaro lleva cuatro cántaros en una carreta de una rueda y cuatro pies; pero sea como fuere marcha rápido a hacer sus entregas.”24 Jackson retrata aguadores a pie en la ciudad de Guanajuato con su vasija en la espalda y sobre un burro en Salamanca, como lo describe Hilarión. Casi todos los escritores de cuadros de costumbres del XIX hacen referencias a las cualidades psicológicas de los aguadores, estas descripciones dejan ver las maneras cotidianas dentro de los hogares para ganar las puertas y la confianza de sus clientes, debían conducirse sin ningún tipo de recriminación. Jackson en sus visitas a México no buscó escenas en espacios cerrados, no tenemos imágenes de aguadores entregando el vital líquido. Las fotografías en espacios abiertos de Jackson son una imagen que ya era familiar gracias a los grabados del siglo XIX, tampoco en estos grabados vemos aguadores dentro de las casas, tal vez porque muchos de estos grabados venían de fotografías con visiones compartidas con Jackson. Hay una fotografía excepcional de un aguador en Guanajuato por la concurrencia, dentro del encuadre hay más de seis individuos, en su mayoría varones, todos miran a la 24 FRIAS, ZAMACOIS DE, DIOS DE, RIVERA, TOVAR y RAMÍREZ, Mexicanos pintados por sí mismos, Librería de Manuel Porrúa S. A., México, 1974, p. 1. ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 9 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ cámara menos uno: el propio aguador que con total resignación posa ante la lente de Jackson mientras se apoya en su bastón. Sabemos que hay otro aguador porque también porta el característico delantal de cuero, dos personajes flanquean la escena, son guardias que portan uniforme, uno muestra el cañón de su arma y el otro es el único que calza zapatos. Este uniforme corresponde a los soldados del ejército federal, Francisco L. Urquizo narra parte de la vestimenta: “Sólo la pobre tropa seguía con la pelambre de siempre; la misma del tiempo del general Santa Anna, del señor Juárez y ahora de don Porfirio Díaz: chacó de cuero negro; vestido azul con vivos colorados y diez botones amarillos aplanados en el chaquetín cruzado.”25 No es un chacó de cuero negro, pero podemos leer el número de uno de los guardias, 147 dice su chacó claro, visten el chaquetín y custodian la toma de la fotografía, tal vez para abrir paso hacía la imagen del aguador entre la multitud. 25 URQUIZO, Francisco, Tropa vieja, La Prensa, México, 1974. ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 10 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ Henry William Jackson. Guanajuato, study of water carrier. Library of Congress, Prints and Photographs Division, Detroit Publishing Company Collection. ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 11 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ En esta fotografía no parece que se haya incurrido en una infracción, los guardias que también fueron llamados en la ciudad de México “padres del agua fría”26 vigilan el transcurso de los hechos para que ocurran sin incidentes y permitir una imagen de un México en la legalidad. Jackson buscaba un suceso digno de fotografiar, pero en este disparo la propia toma fotográfica se convierte en el suceso que es necesario custodiar. Las motivaciones para generar la imagen del aguador en Guanajuato son enteramente sociales y comerciales, con el paso de más de ciento treinta años en las placas, tales funciones han perdido su justificación o necesidad primera; pero han tomado una pátina significativa: la belleza. En el momento que se diluyen sus funciones sociales, liberadas de la carga pecuniaria se puede apreciar sin ruido alguno su factura, hechas de forma artesanal, de un material que ha demostrado su estoicismo ante el tiempo a través de la durabilidad y el interés en la conservación; a la lejanía aparece la belleza, Susan Sontag explica: “La distancia estética parece incorporada a la experiencia misma de mirar fotografías, si no de inmediato, sin duda con el paso del tiempo. El tiempo termina por elevar casi todas las fotografías, aun las más inexpertas, a la altura de arte.”27 Estas imágenes de Jackson descansan de su ajetreo comercial, ya no son para la mirada de las masas, tienen un carácter meramente artístico. 26 27 GARCÍA, op. cit. p. SONTAG, Susan, Sobre la fotografía, Alfaguara, México, 2006. ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 12 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ Conclusiones: Jackson llega a México pare realizar un proyecto comercial fotográfico a través de una concesión con la empresa ferroviaria Ferrocarril Central Mexicano y de la ATSF de Estados Unidos. Como el principal objetivo del fotógrafo fue la comercialización de estas imágenes, su estética obedece a las necesidades visuales que se tenía de México en ese momento por los dos gobiernos para continuar un intercambio comercial. Este fotógrafo constantemente nos dice cómo fue México, desea mostrar un país peculiar y lo hace a través de las escenas cotidianas en espacios abiertos del siglo XIX, los espacios son abiertos porque no interesa la visión individual, o fragmentada de México, quiere una panorámica general de belleza peculiar, orden y oportunidad. El asunto del consumo del agua potable por los ciudadanos decimonónicos se convierte en una escena de costumbres para propios y para Jackson, los detalles que acompañan el encuadre nos dice mucho de las circunstancias sociales y políticas de la ciudad de Guanajuato. Estas fotografías han perdido el interés primigenio que las generó, ahora contienen un carácter estético derivado de un estilo de la época y el transcurso del tiempo sobre ellas. ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 13 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 14 InCreA – Revista de investigación y creación en artes No. 2 – Abril 2015 ____________________________________________________________________________________________________ ________________________________________________________________________________________ increa.artesguanajuato.org 15