Fue en 1917 cuando nació en la ciudad el primer

Anuncio
12 : Tijuana
Martes
27 de mayo del 2008
Tijuana, Baja California, México
PARA SABER MÁS... Visite la Biblioteca Alberto Limón Padilla, calle Revolución entre Octava y Novena
LAS PRIMERAS
PANADERÍAS
> 5 de Mayo
de Enrique Aldrete Palacio
> Fernández
de Ángel Fernández
> La Mexicana
de José Cuén Villaescusa
y Gerardo Gómez Arellano
> Álvarez
de Leovigildo Álvarez Tostado
> Nacho Gómez
de Ignacio Gómez
> La Victoria
de Vidal Pinto Estrada
> El Fénix
de Fructuoso Ferrel Esqueda
> El Nopal
de Juan Cárdenas
> Bethel
de Francisco Pacheco
> La Tapatía
de Avelino Rigo
> La Luz del Día
de Juan Treviño
> La Aurora
de Ángel Becerra
> La Adelita
de Simón Rendón
> El Buen Gusto
de José Gómez
> La Reyna
y la Princesa
de Francisco Bejarano
> La Ensenada
de la Familia Llamas
> La Leonesa
origen de los Supermercados
Limón
> Morelos
de Moisés Lomelí
> La Moreliana
de Baltazar Ábrego
olor
‘EL SANTO
de la panadería’
Fue en 1917 cuando nació en la ciudad el primer
expendio de pan en el edificio denominado 5 de mayo,
propiedad de Enrique Aldrete Palacio
POR SILVIA CHIA
schia@frontera.info
E
l pan es por tradición un alimento imprescindible en la dieta del mexicano, y por consiguiente la presencia de una panadería en
cada comunidad resulta fundamental.
Tijuana no fue la excepción y aquí se creó una historia
particular en torno a las panaderías, y a pesar de que la
fecha de fundación establecida es el 11 de julio de 1889,
no es hasta aproximadamente 20 años después cuando
nace el primer establecimiento de este ramo.
Para Aurelio Plascencia, aficionado de la historia de
Tijuana y quien por su trabajo durante 30 años en el
Molino El Rosal estuvo fuertemente ligado a la industria
del pan, indicó que de acuerdo a sus investigaciones
hay evidencias de que en las rancherías había hornos
de adobe en donde se cocinaba este alimento.
Estas rancherías en un inicio eran Misiones, propiedad de soldados y ellos conocían estos hornos como
calabaceros.
El también encargado de la biblioteca “Alberto Limón
Padilla” dijo que fue difícil encontrar en bibliografía la
fecha en que surgió la primera panadería en la ciudad,
y lo que él evidencia en un modesto trabajo es con base
en testimoniales.
“Los libros hablan de la primera iglesia, tienda
de curiosidades, compañía eléctrica, pero no había
ninguna panadería y era lógico porque el poblado
era muy chico y tenías la posibilidad de ir a comprar
todos los víveres en Estados Unidos, pues ni siquiera
se necesitaba pasaporte para cruzar”, detalló.
Así pues, encontró que la primera panadería
se estableció en Tijuana un poco después de 1917,
cuando el señor Enrique Aldrete Palacio trajo de
Estados Unidos un edificio denominado 5 de Mayo
que todavía se mantiene en pie en la calle Segunda,
entre Niños Héroes y Constitución.
Aurelio Plascencia, dijo que en ese edificio se
fundó la primera tienda de abarrotes, la botica y
después la panadería bautizada como 5 de Mayo que
en 1935 le cambió el nombre a La Moderna.
Agregó que esta panadería fue punta de lanza
para el nacimiento de más panaderías en la ciudad,
crecimiento que iba a la par con el desarrollo poblacional y urbanístico de la joven Tijuana.
“Los trabajadores de don Enrique se fueron independizando y haciendo sus propias panaderías”,
apuntó.
Originario de Jalisco pero adoptado tijuanense, el
señor Plascencia informó que la segunda panadería
fue la Fernández, fundada en 1928 por el español
Ángel Fernández, quien trabajó en la panadería 5
de Mayo como panadero y vendedor.
Recordó que la tercera panadería fue La Mexicana, creada en 1930 por José Cuén Villaescusa, quien
también colaboró en el negocio del señor Aldrete
Palacio, en sociedad con Gerardo Gómez Arellano.
De acuerdo a sus charlas y entrevistas con personalidades tijuanenses, Aurelio Plascencia encontró
que también por la década de los 30 la familia Carrillo cocinaba pan en un horno instalado en el patio
de su casa y después uno de los hijos lo vendía en
canastas por el vecindario.
Para él otra de las panaderías importantes fue la
Nacho Gómez y la Álvarez; de igual manera obtuvo
información que en la colonia Libertad, una de las
más antiguas de Tijuana, había unas personas de
origen chino que vendían pan de casa en casa.
Agregó que fue en esa misma colonia en donde nació la panadería La espiga de oro y también
la llamada La Mexicana, propiedad de José Cuén
Villaescusa.
Otra panadería establecida en 1939 fue La Victoria, propiedad de Vidal Pinto Estrada, quien también
trabajó en la panadería 5 de Mayo.
TRABAJADORES DESTACADOS
El señor Plascencia comentó que platicando con
el hijo de Pinto Estrada descubrió que entre los
trabajadores de la primera panadería en Tijuana
estuvieron personalidades tijuanenses como Sirák
Baloyán y Alejandro Hodoyán.
Manifestó que era tal el éxito de la panadería La
Victoria, establecida en la avenida C y calle Quinta,
que en los años de la Segunda Guerra Mundial los
clientes principalmente provenientes de la Unión
Americana hacían filas de más de 100 metros para
comprar pan.
Y fue a mediados de los años 40 cuando el mismo
Pinto Estrada construyó una panadería en la esquina
de la calle Allende y Galeana de la colonia Independencia, que hoy tiene por nombre Holanda.
Otra panadería importante es La Moreliana,
propiedad del señor Baltazar Ábrego, ubicada en
la colonia Libertad y que en este 2008 cumple su
50 aniversario.
Descargar