Salud Los Consejos de Sol Archanco, responsable de Salud Dental de Alsana ¿Es normal que me sangren las encias? Aunque los españoles vamos concienciándonos en adoptar nuevos y más adecuados hábitos de vida, es en el cuidado dental donde esa apuesta por la salud es menor. La boca es la puerta de entrada al organismo y sin ninguna duda nuestra carta de presentación ante la sociedad. Son muchos los que viven en el convencimiento de que un sangrado de encías es normal o incluso lo aceptan como algo hereditario. La realidad es que un sangrado de encías es una enfermedad llamada GINGIVITIS que, en un primer estado es fácil de curar con la ayuda y consejos de nuestro dentista e higienista. Lo más importante es que esta gingivitis no progrese a una enfermedad más compleja cómo es la Enfermedad Periodontal (EP) o PERIODONTITIS (piorrea). Sus señales son inflamación de la encía, mal aliento, separación de los dientes y movilidad hasta la posterior pérdida de los dientes por la destrucción de los tejidos de soporte del diente (hueso, ligamento, encía).A menudo este proceso es muy lento y no es doloroso, por tanto, no somos conscientes de la destrucción del hueso de soporte de los dientes. Estudios recientes nos dicen que aquellos pacientes con algún tipo de enfermedad en las encías tienen entre un 25% y un 50% más de riesgo de padecer un trastorno cardiovascular. Cardiólogos y odontólogos atribuyen esta relación a la gran cantidad de bacterias que se encuentran bajo la encía y que pueden pasar a la sangre y afectar a otras zonas del organismo. Es fundamental que en embarazadas este sangrado de encías esté absolutamente controlado ya que una GINGIVITIS es una ENFERMEDAD y en los casos de mujeres embarazadas hay evidencia clínica de mayor incidencia de partos prematuros. Para tratar la GINGIVITIS, el dentista nos va a indicar la realización de una limpieza bucal o tartrectomía a través de un aparato de ultrasonidos se elimina el sarro y la placa bacteriana. Una vez eliminados los agentes inflamatorios responsables del sangrado, es necesario ser instruidos en correctas técnicas de cepillado. Un control y supervisión de nuestra técnica de higiene por parte del dentista o higienistas junto con un cepillo de dientes, el hilo dental o los cepillos interproximales podrán reducir de manera significativa la aparición de la gingivitis y su posterior desarrollo en la enfermedad periodontal. Es de vital importancia la revisión odontológica al menos una vez al año con una limpieza bucal realizada por el dentista o higienista. Revisar y prevenir es la única medida que debemos tomar para llegar a la tercera edad con una boca útil y funcional. El Buscador 29