Nota Médica ALIMENTACIÓN EN ÉPOCA ESTIVAL La llegada del verano supone condiciones climáticas que exigen modificar ligeramente nuestra alimentación. Debido a la presencia de altas temperaturas se prefieren comidas frescas y livianas, además de que en general no es apetecible comer en grandes cantidades. Pero a su vez, se asocia esta época del año a tiempo de vacaciones, disfrute y reunión con amigos por lo que es necesario no perder de vista ni la cantidad ni la calidad de las comidas. En este sentido, los puntos claves tienen que ver con la hidratación, mantener regularidad en las comidas y una alimentación balanceada que incluya una variedad adecuada para asegurar el aporte de los nutrientes necesarios. Además, se debe poner especial atención en la higiene de alimentos que se consumen en crudo (vegetales y frutas) para evitar el riesgo potencial de enfermedades transmitidas por alimentos, que conllevan en general a problemas gastrointestinales. Debido a la acción del calor los alimentos sufren deterioro microbiano, por lo tanto los alimentos perecederos como lácteos, carnes, huevos, vegetales y frutas deben conservarse adecuadamente en refrigeración. En relación a la hidratación, si bien las necesidades hídricas son individuales, se estima un consumo recomendado en adultos de aproximadamente 2 litros diarios, en donde la bebida ideal es el agua. El agua puede ingerirse como tal o formando parte de los alimentos. Los vegetales y las frutas son especialmente ricas en ella, cuyo contenido acuoso puede llegar hasta el 95% de su peso. Por esto y por su composición en fibra, vitaminas y minerales es que estos grupos de alimentos naturales se transforman en nuestros aliados en esta época del año. ALGUNAS SUGERENCIAS A TENER EN CUENTA ü Lograr regularidad en las comidas, procurando mantener al menos los cuatro tiempos de comidas principales (desayuno, almuerzo, merienda y cena) y evitando largos períodos de tiempo sin comer. ü Seleccionar una alimentación fresca y liviana que contenga vegetales y frutas variadas para obtener un adecuado aporte de fibra y agua. ü Aprovechar la gran variedad de estos productos de estación que nos ofrece la naturaleza para combinar en distintas preparaciones. ü Transformar a las ensaladas en nuestras mejores aliadas, incluyendo un plato de vegetales tanto en almuerzos como en cenas. ü Optar por postres ó colaciones entre horas frescas y nutritivas, resaltando a las frutas como vedette para consumir en estos tiempos de comida. 1 Nota Médica Elaborar nuestros platos combinando alimentos de fácil digestión como vegetales y ü cereales (arroz, pasta), evitando el consumo de alimentos con alto contenido graso. Mantener especial atención en cuanto a la higiene de alimentos que se consumen crudos ü (vegetales y frutas) para evitar problemas gastrointestinales. Conservar correctamente en refrigeración los alimentos perecederos (lácteos, carnes, ü huevos, vegetales y frutas). Para llevar a la playa seleccionar alimentos fáciles de transportar y consumir, ü debidamente acondicionados y/o refrigerados, como frutas ya lavadas, ensaladas de frutas y licuados, entre otros. Si va a la playa en la mañana dejar en lo posible el almuerzo ya elaborado, para evitar ü que el apetito del regreso nos lleve a optar por alimentos no ideales. Considere seleccionar para las típicas reuniones con amigos carnes rojas magras, pollo ü sin piel y pescados, y agregue a las parrillas vegetales variados. Asegurar una correcta hidratación diaria para evitar deshidrataciones y colaborar con un ü adecuado cuidado de nuestra piel. Seleccionar al agua como bebida ideal. Cuidar el consumo de bebidas con alcohol. ü ALGUNOS DATOS DE INTERÉS Sabía usted que... La fruta pelada y cortada es ideal comerla de inmediato y los jugos exprimirlos en el ü momento que se vayan a beber. Porque la vitamina C se oxida con mucha facilidad en presencia del oxígeno y del calor. La cáscara de los frutos y la cubierta externa de los vegetales actúan como protección, por lo tanto una vez eliminadas se acelera el deterioro de esos alimentos. En verano aumenta en general el consumo de bebidas alcohólicas en adultos, y que ü estas no aportan nutrientes, solo aportan calorías vacías que favorecen el aumento de peso corporal. Por lo que la moderación es un punto clave en este aspecto, si es que el consumo de estas bebidas no está en usted contraindicado por algún motivo en particular. Lic. Alejandra Amestoy 2