Palabras de Bienvenida. Francisco Lara Muy buenos días tengan todos y todas. Es para mí motivo de enorme satisfacción aperturar el IV Taller Centroamericano de armonización de componentes y criterios de calidad, para las agencias de acreditación de la educación superior regionales, sobre factores de Gestión Integral del Riesgo de Desastres (GIRD) y la Adaptación al Cambio Climático (ACC). El Salvador se viste de gala al celebrar tan magno evento, donde se tiene como propósito armonizar aspectos de los modelos y manuales de acreditación en los temas citados. Quiero subrayar que este evento solo pudo ser posible gracias a la incansable labor del (CCA) con el auspicio del Programa Universitario para la Gestión Integral del Riesgo de Desastres y Adaptación al Cambio Climático en Centroamérica (PRIDCA), financiado por la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE), y con el apoyo del Consejo Superior Universitario Centroamericano (CSUCA), quienes han dispuesto a reunir tan distinguidas 1 personas, versados en temas tan importantes para la vida académica como son el aseguramiento de la calidad, evaluación, acreditación y gestión de calidad. En este escenario, se han dado cita representantes de agencias, a quienes les agradezco en nombre del CCA, quien por mi conducto y por acción expresa de la Señora presidenta Mtra. Lea Azucena Cruz, les expreso un profundo y efusivo saludo, deseando, desde ya, los mejores éxitos. El CCA está seguro que con sus aportes y reflexiones nos darán una visión más profunda acerca de los temas centrales que serán abordados y que se verán reflejados a través de la participación e inclusión en las diversas herramientas e instrumentos de cada una de las agencias. Seguramente este evento sentará un precedente en la historia académica regional y nosotros, todos los aquí presentes, somos los autores centrales y no solo espectadores para el diseño de modelos de calidad que servirán de base para la construcción de sociedades más justas, menos peligrosas –en el sentido amplio de la palabra-­‐ que reclaman hoy por hoy la sociedad salvadoreña y centroamericana. Según la Oficina Regional de Educación de la UNESCO. América Latina y el Caribe, es un espacio diverso tanto social, cultural como geográficamente, donde se manifiestan fenómenos naturales y socio-­‐naturales, 2 potencialmente destructivos como sismos, tormentas, tsunamis, huracanes, erupciones volcánicas, etc. Estas características asociadas a condiciones de vulnerabilidad, como altas tasas de pobreza, ocupación de territorios inseguros como lugares de vivienda, deficientes servicios de educación y salud e insuficientes espacios de articulación y participación social en los procesos de desarrollo, generan altas condiciones de riesgo. En tal sentido, la integración del enfoque de la gestión del riesgo en la educación superior, es determinante para incrementar la concientización sobre el efecto y causa de los desastres, tomando en consideración el modelo de desarrollo en el que no se valore únicamente el crecimiento económico y los patrones de consumo actuales. Las Universidades que incluyan acciones de gestión del riesgo contribuirán a una cultura para la prevención, esencial en el proceso de desarrollo sostenible de los países, reduciendo los riesgos de desastres y fortaleciendo las capacidades de las comunidades más vulnerables y respondiendo a las emergencias; por lo que la inclusión de estas temáticas en aquellas herramientas o instrumentos 3 que utilizan las agencias acreditadoras es de vital importancia. A manera de reflexión: Según estudios de agencias ministeriales salvadoreñas citan que para el año 2020, El Salvador podría estar bajo un clima aún más caluroso y con lluvias de intensidad irregular; recibiendo mayor incidencia de eventos extremos como "El Niño", huracanes, sequías e inundaciones; y con una zona costera afectada por un aumento del nivel del mar. La razón: El Cambio Climático a nivel Mundial. Por lo tanto, la presencia y participación de cada uno, sus aportes desde la lógica académica, es de incalculable valor. Otros afirman, que el cambio climático, aunado a los efectos globales, traerá impactos sociales, económicos y ambientales negativos para el país, su población y la geografía salvadoreña. Entre otros problemas se espera: • Más población en riesgo por inundaciones, deslizamientos y olas de calor o frio. • Mayores dificultades de acceso a agua potable y energía eléctrica. 4 • Disminución de la producción de alimentos y aumento de la inseguridad alimentaria. • Severas repercusiones en la salud humana, aumento de enfermedades infecciosas, desnutrición, estrés por calor excesivo, y una tasa de mortalidad más alta. • Pérdida de terrenos de la zona costera por el aumento del nivel del mar, debido al deshielo de los polos y de Groenlandia, provocando daños a la infraestructura productiva y turística. • Pérdida de hábitat, ecosistemas, especies de flora y fauna. • Mayor erosión del suelo. • Concentración de sal en aguas subterráneas. Nada más oportuno entonces, la consolidación de este taller, donde se busca Desarrollar de forma participativa una propuesta de dimensiones y pautas evaluativas sobre factores del GIRD y ACC como propuesta para armonizar en los modelos de acreditación de agencias nacionales y centroamericanas; promover la incorporación de dichos temas en la vida universitaria, aprender sobre las buenas prácticas que sobre ellas se hagan. 5 Ello requiere y demanda la participación, dinamizar redes de trabajo, coordinación y comunicación para consolidar este esfuerzo. En tal sentido, como representante del CCA en El Salvador y miembro de la Comisión Nacional de Enlace capítulo El Salvador, creyente de los procesos de aseguramiento y gestión de la calidad en la educación superior, les damos cordial bienvenida, esperando que sus expectativas sean alcanzadas. Muchísimas gracias. 6