Pag 42-43 Dic (Convertido)-4

lagas y enfermedades
TierraAdentro
noviembre-diciembre 2004
Termitas de importancia eco
L
42
as termitas pertenecen al orden
Isoptera (iso = igual; ptera = ala).
Son insectos sociales que se
caracterizan por trabajar como un grupo
con el fin de enfrentar situaciones
biológicas y ecológicas que muchos
organismos no sociales deben sobrellevar
por sí solos. Los niveles de organización,
cohesión, cooperación interna, eficiencia
y éxito biológico de los insectos sociales
–de las termitas en particular– son
fascinantes, y su estudio, un desafío.
Viven en colonias cuyo número puede
llegar, en algunas especies, sobre el millón
de individuos. Cada miembro cumple una
tarea coordinada al interior de la colonia,
que contribuye al desarrollo de una
sociedad vigorosa, adaptable, eficiente y
productiva (Thorne, 1998). Todas las
especies del Orden constituyen sociedades
estructuradas en castas, con la presencia
permanente de machos y hembras, que
podrán o no reproducirse, dependiendo a
cuál casta, por presión de la sociedad,
hayan sido derivados durante su desarrollo
(Camousseight, 1999).
Renato Ripa S.
Ingeniero Agrónomo, Ph.D.
rripa@lacruz.inia.cl
Paola Luppichini B.
Ingeniera Agrónoma
INIA La Cruz
Obreras de Porotermes quadricollis.
Un mundo de castas
En general, en las colonias de termitas
hay tres castas principales que tienen
claras diferencias morfológicas y de
labores que realizan dentro de la colonia.
Las castas se dividen en:
Alados: es la casta de los reproductores,
macho y reina. Se caracterizan por tener
la cabeza esférica, ojos compuestos
laterales acompañados de un ojo simple
u ocelo, antenas moniliformes (con forma
de cuentas de collar) y armadura bucal
de tipo masticador, con mandíbulas
fuertemente esclerosadas (endurecidas).
Los tres segmentos del tórax son casi
iguales, con patas típicamente andadoras,
de igual tamaño; alas generalmente el
doble del largo del cuerpo, translúcidas,
todas con una zona de quiebre en la base
por donde se desprenden después del
vuelo (enjambrazón) previo al encuentro
sexual.
Obreras: individuos no reproductivos,
que conservan durante toda su vida el
aspecto de las primeras etapas de
desarrollo juvenil. De color blancoamarillento, con sólo las mandíbulas
pigmentadas y esclerosadas, que les dan
la dureza necesaria para triturar la madera.
Son ciegas, sin vestigios de alas (ápteras)
y sin diferenciación sexual.
Soldados: casta formada por individuos
que alcanzan los primeros estadios del
desarrollo juvenil pero, a diferencia de las
obreras, la cabeza y las mandíbulas se
hipertrofian y además presentan una
llamativa coloración oscura, consecuencia
del depósito de esclerotina. Son ciegos,
ápteros y prácticamente sin diferenciación
sexual. Esta casta es característica del
Orden. Su proporción en la colonia es
menor a la de las obreras. Sus funciones
son básicamente defensivas.
Reproductores neoténicos: se refiere
a termitas reproductoras que se desarrollan a partir de obreras, presentan
vestigios de alas y no se dispersan. Su
fecundidad es menor que la de los alados,
pero pueden ser cientos por colonia, de
modo que el impacto total en número de
huevos puede ser mayor que el de la reina,
derivada de un alado.
TierraAdentro
noviembre-diciembre 2004
onómica en Chile
Soldado de termita subterránea,
Reticulitermes flavipes.
Adulto alado de Neotermes chilensis.
Su relación con la
madera
Desde el punto de vista alimentario, las
termitas son absolutamente dependientes
de la celulosa, principal componente de
la madera, la que degradan con enzimas
o con organismos simbiontes específicos.
Por ello las termitas no sólo atacan madera
sino que también sus derivados, como
papel, cartón, libros y, en general, todo
elemento que tenga entre sus
componentes este polisacárido (Thorne
1998). Además, desempeñan un
importante rol en la descomposición de
la celulosa y, en algunas zonas, en la
descomposición de la materia orgánica
(Artigas 1994).
En el mundo existen alrededor de 2.600
especies de termitas. De ellas 183 se
encuentran asociadas al daño en
construcciones y 83 producen daño
significativo. El 80% de las especies
económicamente importantes (147)
corresponde a termitas subterráneas (Su
et al. 2000).
Las familias
Hasta hace unos años en Chile existían
sólo dos familias de termitas:
Kalotermitidae y Termopsidae. Con la
introducción de la termita subterránea,
se agregó la familia Rhinotermitidae.
La familia Kalotermitidae representa
uno de los grupos más primitivos de
termitas. Las colonias típicamente viven
en madera sólida y seca. Ésta es su
habitáculo y fuente de alimento, por lo
que se las denomina “termitas de la
madera seca”. En Chile se encuentran
presentes las siguientes especies que
pertenecen a este grupo:
Cryptotermes brevis o termita de los
muebles, especie cosmopolita introducida
a Chile, presente desde la 1ª hasta la 5ª
Región, incluyendo el archipiélago Juan
Fernández e Isla de Pascua.
Kalotermes gracilignathus o “termita
de Juan Fernández”, especie endémica
restringida al archipiélago de Juan
Fernández.
Neotermes chilensis, especie nativa
(Camousseight 1999) que preferentemente
Durmientes de ferrocarril atacados
por termita subterránea.
lagas y enfermedades
desarrolla sus colonias en raíces de
árboles, pudiendo extenderse hacia la
parte alta del árbol si éste tiene partes
secas (Artigas 1994).
La familia Termopsidae está
representada en Chile por Porotermes
quadricollis o “termes de la madera
húmeda”, especie característica de la
zona sur del país.
La familia Rhinotermitidae incluye las
termitas subterráneas. Con la llegada al
país de Reticulitermes flavipes, detectada
en 1986, el escenario ha cambiado
drásticamente ya que esta especie
mantiene gran parte de su colonia bajo
el suelo, característica de donde deriva
su nombre común de “termita
subterránea” (INFOR 1997). Tal hábito
hace que sea de muy difícil control pues
en las colonias se encuentran los machos
y hembras responsables de la
reproducción y diseminación de la especie, además de los huevos y estados
inmaduros.
De las especies presentes en Chile
actualmente, cuatro son de importancia
económica, relacionada con el daño que
causan en viviendas, muebles y árboles
(ornamentales, forestales y frutales):
Reticulitermes flavipes, Cryptotermes
brevis, Porotermes quadricollis y Neotermes chilensis.
43