LA A13EJA 489 Fuó tan terrible esta noticia para Celinda, que cayó graveraente enferma y como su salud estaba ya muy quebrantada por la auscncia de su hermano à los siete días bajó al sepulcre Imposible es describir cual fué el sufrimiento que embavgaba el corazón del desgraciado tío con la pérdida de sus dos seres mas queridos. Todas las tardes, después de terminados los trabajos del jardín, se sentaba junto à un cuadro lleno de arbustos de jeringui11a, por ser la planta favorita de Celinda, y por haberla plantado y cuidado ella misma, y allí el pobre tío les hablaba como si eonversase con ella misma. A todos los que visitaban el jardín, fuesen ó no à comprar flores, lo pritnero que haeía era ensenarles aquellos arbustos que empezó à Uamarlos Celindas y decía que era el constante recuerdo de su sobrina. De este modo se fué extendiendo el nombre de Celinda y perdiendo el de Jeringuilla. La planta que nos ocupa, à los dos aüos de haber hecho la siembra ya por hijuelos ó por estacas, que es cuando han arraigado, se trasplanta à otro tiesto mayor. En el invierno necesita que se cubra la tierra con estiercol y es conveniente durante las heladas fuertes resguardaria. El riego debe ser escaso en el invierno, lo contrario que en el verano que con frecuencia necesita este elemento importante. * Diputació de Girona — Servei de Biblioteques