LA NACIONALIDAD SHUAR DE LA COSTA HISTORIADOR SR. JUAN LÓPEZ TIWIRAM “EL HOMBRE MÁS ANCIANO DEL SIGLO 21” ESCRITO POR AIJ JULIO WAJAI MASHU INSPECTOR DE HISTORIA MARCO ANTONIO LEQUI DÁVILA PRESENTACION Esta historia está facultada por la Asociación Interprovincial De Los Centros Shuar De La Costa (Prov. Del Guayas), para rescatar una historia que estaba mutilándose sin ser escrita en los libros de vida de las comunidades y nacionalidades Shuar en la Provincia del Guayas. Más que una historia sobre los Shuar de la costa, destinada al deleite de estudiosos y curiosos, es ante todo, una obra para las comunidades de nuestra etnia, asentadas en litoral ecuatoriano: los realizadores de esta obra consideran haber alcanzado su objetivo en la medida en que estas páginas ayuden al pueblo Shuar a sentirse más orgullosos de su tradición y a rescatar valores que van desapareciendo con la aculturización. JULIO WAJAI MASH Año 2000 CAPITULO UNO MIGRACIÓN DE LOS TRES SHUAR DE LA AMAZONIA Durante la época de la Presidencia del Gral. Juan José Flores en el año de 1830, existió un Shuar llamado Yakum y sus dos hijos Nase y Etsa, quienes partieron desde sitios remotos en la amazonia ecuatoriana como Kusuim, Makum y Chiwiash, continuando en dirección a Limón Indanza, Plan de Milagro, (territorios amazónicos en la provincia de Morona Santiago), rumbo hacia la cordillera de los Andes. Durante su travesía a través de la cordillera austral, divisaron un lugar en el que se hallaba un hombre pastoreando ganado vacuno, los tres visitantes se acercaron curiosos del extraño, quien estaba muy asustado al verlos con vestimentas, atuendos y dialectos diferentes que no se podía entender en ninguna manera, solo utilizaron señales con las manos y sonidos. El hombre del rebaño le ofreció hospitalidad en su hogar, conduciéndolos a la población de Gualaceo (prov. Del Azuay), hacia la casa parroquia. Al acercarse a este caserío se percataron que eran personas de diferentes lenguas, por lo que no se entendieron en sus conversaciones al principio. Pero Yakum y sus hijos tomaron una actitud amigable y lograron hacerse comprender de alguna forma. Yakum era jefe de una tribu pacífica y buscaba un lugar para fundar un nuevo territorio con toda su familia, alejándose de las guerras declaradas con otras tribus. Esta cualidad pacifica hizo que Yakum entablara un lazo de amistad con los mestizos, quienes les brindaron hospitalidad a los tres viajeros, los cuales permanecieron por un tiempo compartiendo todas las vivencias de los nuevos amigos. Los Shuar aprendieron algunas palabras de la lengua española, con la ayuda del párroco del sector. Yakum procedió su viaje con rumbo hacia a la costa, incursionando a las poblaciones de Cuenca, Biblián, Azogues, Cañar, Chunchi, Alausí hasta llegar a la parte baja de los ríos Chanchan y Chimbo, el cual fue bautizado con el nombre de Wampukai (termino Shuar que refiere la existencia de muchos anfibios comestibles como la rana) Así decidieron permanecer en este lugar por algún largo tiempo porque era el sitio adecuado que tanto habían anhelado; con montañas exuberantes, ríos limpios de aguas cristalinas y diversidad de vida silvestres. Continuando con su trayectoria Yakum llegó hasta Durán donde divisó el inmenso rió Guayas y cruzándolo llegó a la población de Guayaquil, donde fue recibido por un sacerdote, con quien habló el motivo de su viaje y su orígen. El cura admirado de esta gran hazaña, les dio hospitalidad, hasta que los tres Shuaras decidieron regresar al sitio de “Wampukai”, conocido hoy como “Bucay”, Yakum retornó a su tierra natal, para traer su familia y formar su propio pueblo shuar. La valentía de Yakum en descubrir y conquistar nuevas tierras fue inspiración ejemplo para otras etnias amazónicas años más tarde. La etnia Shuar a través de plantas medicinales como Maikiua Y Natem; utilizadas en los ritos sagrados ante las “Tunas” (cascadas), les han permitido revelaciones del “DIOS ARUTAM” (dios de la naturaleza), sobre la existencia de nuevas tierras que serían encontradas atravesando la cordillera de los andes, así también que la pureza de su etnia duraría hasta la quinta generación y que luego surgirían muchas dificultades para la vida del shuar por la influencia de la nueva civilización, mezclándose con otras culturas y como resultado final la extinción de su raza. CAPITULO DOS CONSECUENCIAS La descendencia de Yakum, permaneció 70 años en paz, es decir hasta el año 1900, trabajando en tierras descubiertas bajo la planicie del Cerro Cutuguay, donde hoy es la hacienda “Pilar”. Yakum con su sabia y talentosa sabiduría, distribuyó las tierras equitativamente para sus descendientes, familias y allegados que lo acompañaban. Desde el descubrimiento de las nuevas tierras; a su hijo mayor llamado Etsa lo estableció en un lugar bautizado por él mismo como Chankinentsa (hoy llamado Changuil en la Provincia de Bolívar desde 1840 después de 10 años del asentamiento). La familia Etsa, se ubicó en una planicie junto a caudales de aguas limpias y claras, con mucha biodiversidad que atraía la naturaleza del hombre Shuar. En el mismo año nace un niño de Etsa, a orillas del río a quien llamó “Antun” o Antonio en español, motivo por el cual bautizó el río con el nombre de Antunetsa, hoy llamado “Rió San Antonio”(afluente del río Cañar en la provincia del mismo nombre). Después de la muerte de Etsa, su hijo Antonio Tiwi Molina quedó como jefe de familia y dueño de aquellas tierras colonizadas. Durante la presidencia del Sr. Galo Plaza Lasso, en 1950 se dictan las leyes de tecnificación de haciendas agrícolas y ganaderas, lo que permitió que los terratenientes ocuparan grandes extensiones de tierra en la región litoral. Hecho que fue aprovechado por Edmundo Valdez, quien invadió las tierras ocupadas por los Shuar, donde Yakum dejó ubicando a sus dos hijos y a sus familias. Antun Tiwi, fue desalojado de ese sitio y desplazado hasta orillas del río Nuwentsa, o también llamado río de Barros (Nuwe es un material con el que el shuar confeccionaba ollas, platos, tasas u otro utensilio de barro), queda al otro lado del río San Antonio, hoy los mestizos lo llaman Agua Clara. El hombre Shuar ocupo más de 12 mil hectáreas en ese entonces. El segundo hijo de Yacum, llamado Nase, lo ubicó en las riveras del estero Chankintsa (lugar de bejucos para la construcción de Chankin o canasta de bejuco en castellano), como jefe de la comunidad formada por las familias de Compusieride, Santiak, Jimpikit, Najamtai y Entsakua, a este lugar hoy lo llaman “Changuil” o “El Campamento”, nombrados así por los mestizos. El tercer grupo ubicado por Yacum, fue el suegro de Nase, llamado Nanch, con sus familias, se ubicó en la riveras del rió Najementsa, que ahora se denomina río La Fortuna (Provincia de Bolívar). El cuarto grupo ubicado, estuvo liderado por el Shuar Tupikia, en las riveras del rió Kankantsa, con 4 hijos 2 yernos y un cuñado. El quinto grupo fue conformado por el Shuar Yusa, a orillas del río Ñausha, y a sus márgenes se ubicaron más de 10 familias. El sexto grupo estuvo gobernado por Katant, con siete familias a su cargo, ubicados en los valles del cerro hoy llamado Ñausha. El séptimo grupo, lo conformó Sharian, en lo que hoy se conoce como km. 47, vía a Naranjito en la provincia del Guayas, compuesto de 4 familias. El octavo grupo fue para Entsakua, compuesto de 8 familias en las riveras del estero Marunch. Entsa, colocó ese nombre, por la existencia de mucho camarón en ese río. El noveno grupo, se ubicó al otro lado del estero Marunch, compuesto por la familia Wachapa. El último grupo Shuar compuesto por Tsenkuch y Tsere, con nueve familias, se asentó en el sector AK Tikmia, hoy llamado Rió Atios. CAPITULO 3 INVASIÓN Corría el año de 1965, época en la cual la Compañía Valdez, invade el territorio Shuar, despojándolos de todas sus herramientas de trabajo, cultivos, viviendas de estructuras típicas, animales domésticos, mientras aquellos que se resistieron a salir, fueron golpeados físicamente por los policías de ese entonces. Como resultado de aquella barbarie, un 20% de habitantes de nuestra etnia, permaneció aún por algún tiempo escondido en los alrededores, hasta que después de algunos años solo el 2% se quedó en el mismo lugar hasta la actualidad. El día de hoy esos pocos grupos étnicos están asentados en cantones como la Troncal, Naranjal y Rió Limón Bucay. Se conoce que la familia de Antonio Tiwi, se enfrentó al señor empresario Edmundo Valdez (dueño de la compañía azucarera Ingenio Valdez). Antonio Tiwi, defendió a toda costa su tierra hasta las últimas consecuencias, logrando conmover al terrateniente, que un solo shuar se le enfrentaba y de esa forma pacífica Antun, lograría situarse al otro lado del Rió San Antonio, ocupando los ríos Agua Clara, Rió Ñausha hasta el rió Akius y todo lo que contornaba el cerro el Mirador. Edmundo Valdez, pensó en algo muy interesante para este personaje y trató que su descendencia se desarrollare en ese lugar donde les ubicó, al mismo tiempo también les ofreció trabajo en su hacienda como guardianes del campo. En 1979, el señor Valdez, vende su hacienda al Dr. Fernando Aspiazu Seminario, en conjunto con un socio de nacionalidad peruana, Eduardo Balarezo, quienes decidieron invadir abruptamente las tierras otorgadas por el señor Valdez a la familia Tiwi, marginándolos a un área reducida de 20 cuadras. Durante los años 2000 y 2001, la AGD (Agencia De Garantía De Depósitos), incauta la hacienda de Fernando Aspiazu y su socio, apresando al señor Aspiazu Seminario y huyendo de la justicia el ciudadano peruano Eduardo Balarezo, dejando como heredero a su hijo, también ciudadano peruano, José Antonio Balarezo Rossel. Continuando con el malestar de la comunidad Shuar de Changuil, que son los únicos que se mantienen en aquel lugar ancestral hasta la actualidad. CAPITULO 4 VIDA ORGANIZATIVA Las comunidades Shuaras de la costa, en vista de que se encontraban desprotegidas por parte de los gobiernos seccional y central tomaron la decisión de organizarse. La comunidad shuar de Río Limón (Prov. Esmeraldas), se constituye como Organización del Centro Shuar Rio Limón, el 23 Septiembre de 1977, Obtienen la personería jurídica aprobado mediante Acuerdo Ministerio de Bienestar Social y Trabajo con el Nº 1400, siendo la primera comunidad asociada a la Federación Interprovincial de los Centros Shuar. De igual forma también se constituye otro Centro Shuar, el Tsuer Entsa Balao Chico (en Diciembre de 1977) con personería jurídica aprobado por el Ministerio de Bienestar Social y Trabajo, Nº 1766 del 21 de Diciembre. Esta comunidad shuar estaba guiada por un hombre anciano llamado Saand Francisco Mashu Nampir y su yerno Naranjas Daniel Wajai Awarach, estas personas fueron descubridores de muchas tierras de la costa y fallecieron en estos terruños donde actualmente permanecemos trabajando y desarrollando el Turismo. Se cree que Saand, fue el descubridor y fundador de los territorios que hoy forman parte del Centro Shuar Tsuer Entsa Balao Chico, tenía 153 años de edad, fue hermano menor de Yakum, también estuvo aquí la esposa de Yakum quien falleció ya muy anciana. El Centro Shuar Tsue Entsa, desde el descubrimiento de estas tierras donde existen aguas termales ferrosas medicinales con las que se beneficia la comunidad para su sustento, a través del turismo de salud, está conformada solo de dos familias grandes, Mashu y Wajai, en la actualidad esta familia se ha multiplicado en 22 más y habitan desde hace más de tres décadas. En 1977 este grupo se transforma en una organización Shuar con vida jurídica. En 1974 a 1977, se mantuvo con 50 hectáreas, en 1977 el Centro Shuar, se extiende por la parte alta de las montañas 607.70 has. Por el año de 1986 al Centro Shuar le reducen a 473.90 has en la parte alta de las montañas. El Centro Shuar Tsuer Entsa Balao Chico, está asentado en la Provincia del Guayas en la Jurisdicción del Cantón Naranjal, considerado en el registro Oficial Nº 544 que indica los puntos conducentes con fecha, jueves 28 de Marzo del 2002, quedando como puntos más salientes el río Jagua y el río Blanco aguas arriba. Esta Centro Shuar es el único en el Ecuador, que maneja el turismo sin intermediario alguno. Gracias señores lectores por tomarse un tiempo en leer esta Historia que no ha sido escrita antes en ninguna parte del Ecuador. LEYENDA SHUAR La Nacionalidad Shuar, en el continente sudamericano, existió ya, hace miles de años antes de Cristo. El Shuar estuvo en el fenómeno del gran diluvio. El hombre Shuar se caracteriza por mantener su tradiciones ancestrales como: idioma, arte de casa y pesca, artesanías manuales, vestimentas, su carácter fuerte expulsivo siempre guerrero sin temor alguno, las personas ancianos (as) siempre son sabios y pronostican lo que ha de suceder en el futuro.