P i e l ( B a r c . , E d . i m p r. ) ] ] ] ] ; ] ( ] ) : ] ] ] – ] ] ] PIEL FORMACION CONTINUADA EN DERMATOLOGIA www.elsevier.es/piel Claves para el diagnóstico dermatológico Aspectos histopatológicos de la lepra Histopathological features of leprosy , Josep Palou y Juan Ferrando Antoni Bennassar Servicio de Dermatologı́a, Hospital Clı́nic, Barcelona, España La lepra es la infección crónica causada por Mycobacterium leprae, un parásito intracelular obligado de macrófagos y células de Schwann. Afecta principalmente aquellos tejidos que se encuentran a menor temperatura como la piel y los nervios periféricos y, aunque no suele ser mortal por sı́ misma, es todavı́a una causa importante de morbilidad, estigmatización social y un grave problema de salud pública en algunos paı́ses en vı́as de desarrollo. Aunque la lepra afecta a hombres y mujeres de todas las edades y razas, la forma lepromatosa (LL) afecta el doble al sexo masculino que al femenino. Además existen dos grupos de edad en los que se observan sendos picos de incidencia: 10–15 años y 30–60 años5. Se supone que el contagio se produce a partir de los bacilos presentes en las microgotas del aliento de un paciente bacilı́fero al contactar con la mucosa nasal de un paciente susceptible de ser infectado. El periodo de incubación es muy variable pero en general oscila entre 2 y 10 años5. Epidemiologı́a Aunque de distribución mundial, la lepra es especialmente prevalente en paı́ses tropicales y subtropicales de Asia, África y Sudamérica. Esta distribución geográfica está probablemente en relación a las peores condiciones higiénicas de estos paı́ses más que al clima cálido. Se calcula que a principios de la década de 1980 entre 12 y 15 millones de personas se encontraban infectadas por M. leprae1. Con el inicio de la terapia combinada2 en esos años, la prevalencia de la lepra disminuyó drásticamente hasta alcanzar los 224.000 casos registrados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 20073. La OMS considera un paı́s como endémico cuando la prevalencia es 41 caso por 10.000 habitantes3. Existen 9 paı́ses en los que la lepra es endémica en la actualidad: Angola, República Centroafricana, República Democrática del Congo, Mozambique, Tanzania y Madagascar en África e India y Nepal en Asia. Brasil es el único paı́s de América, siendo la lepra hiperendémica en zonas del interior del estado de Amazonas4. Patogenia M. leprae es un pequeño bacilo ligeramente curvado, ácidoalcohol-resistente e intracelular obligado, pues se encuentra parasitando macrófagos y células de Schwann. Puesto que M. leprae necesita una temperatura de unos 35 1C para crecer, su infección afecta primariamente las partes del organismo que se encuentran a menor temperatura. La piel, especialmente la nariz y los lóbulos de las orejas se afectan de manera casi constante. Los nervios periféricos y los testı́culos también se afectan con frecuencia sin embargo las vı́sceras internas tan solo se afectan de forma excepcional6. Dado que no todos las personas en contacto ı́ntimo con un paciente bacilı́fero desarrollan finalmente la infección, se piensa que existe una cierta susceptibilidad/resistencia individual de base genética. Ası́, se sabe que algunos tipos de HLA especı́fico parecen correlacionarse con la susceptibilidad a desarrollar las formas tuberculoide (HLA-DR2/3) o lepromatosa (HLA-DQ-1)1. Autor para correspondencia. Correo electrónico: tbennassar@gmail.com (A. Bennassar) 0213-9251/$ - see front matter & 2010 Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados. doi:10.1016/j.piel.2010.09.012 Cómo citar este artı́culo: Bennassar A, et al. Aspectos histopatológicos de la lepra. Piel (Barc., Ed. impr.). 2010. doi:10.1016/ j.piel.2010.09.012 2 P i e l ( B a r c . , E d . i m p r. ) ] ] ] ] ; ] ( ] ) : ] ] ] – ] ] ] Dependiendo del nivel de inmunidad celular de cada individuo (reflejado en la prueba de la lepronina), la enfermedad podrá progresar indefinidamente si esta es casi nula, autolimitarse o resolverse espontáneamente si es buena. Ası́, en los pacientes con la forma polar de lepra tuberculoide (TT) se ha demostrado una respuesta celular predominantemente de tipo Th1, en la que los linfocitos T-CD4þ reaccionarı́an frente a M. leprae produciendo citocinas como la interlucina 2 (IL-2), el TNF-a o el interferón g (INF-g). Estas a su vez activarı́an y perpetuarı́an una eficiente respuesta inmunitaria celular mediada por macrófagos en la que se eliminarı́an o se controları́a el crecimiento indefinido del bacilo. Por el contrario, en los pacientes que clı́nicamente se manifiestan como forma polar lepromatosa (LL), predomina una respuesta de tipo Th2 en la que se liberan citocinas (IL-4, IL-5, IL1-10, IL-13) que promueven una respuesta inmunitaria principalmente humoral con supresión de la actividad de los macrófagos. Además, la pared de M. leprae contiene el glicolı́pido PGL-1 que suprime la activación de linfocitos T ası́ como la producción de INF-g7. La figura 1 ilustra el espectro clı́nicoinmunológico de la lepra8. Clasificación clı́nico-patológica de la lepra Clı́nicamente, las manifestaciones de la lepra afectan primariamente la piel y los nervios periféricos. Se pueden observar un amplio espectro de lesiones primarias cutáneas desde máculas, pápulas, placas o nódulos hasta erosiones, úlceras o deformidades articulares causadas por la afectación nerviosa. Basándose en el concepto de formas polares de la lepra descrita por Rabello y teniendo en cuenta criterios clı́nicopatológico-inmunológicos, Ridley y Jopling propusieron en 1966 una nueva clasificación vigente hasta la fecha. Dicha clasificación mantenı́a las formas polares lepromatosa (LL) y tuberculoide (TT) en los extremos de la inmunodeficiencia e inmunocompetencia celular contra M. leprae respectivamente. Los pacientes con estos tipos polares de lepra o se curan o mantienen el patrón clı́nicopatológico pero nunca cambiarán a otras formas. Además, se añadieron 3 formas intermedias de lepra: lepra dimorfa o borderline tuberculoide (BT), borderline-borderline (BB) y borderline lepromatosa (BL) en el centro del espectro inmunológico ası́ como el concepto de lepra indeterminada (LI) como forma inicial inestable de toda infección por M. leprae9. A continuación se procede a la descripción de los principales hallazgos histopatológicos ası́ como un breve repaso de las lesiones cutáneas de cada una de los subtipos de lepra basándonos en la clasificación de Ridley y Jopling. Histopatologı́a de la lepra Lepra indeterminada (LI) Se postula que la LI es la fase inespecı́fica inicial de toda lepra en la que el organismo aún no ha determinado el tipo y grado de inmunidad frente al bacilo. Es una etapa, nunca muy larga, en la que se constituye y modula la respuesta inmunológica. Desde este punto inicial y sin tratamiento la enfermedad evolucionará hacia la forma TT si existe una efectiva inmunidad celular, hacia LL si el individuo posee una anergia selectiva frente al bacilo o bien a la curación espontánea. Clı́nicamente se caracteriza por una o pocas (5) máculas hipocromas bien delimitadas. La sensibilidad suele ser normal aunque si esta se altera suele afectarse la térmica antes que la algésica. No existe engrosamiento de nervios periféricos y la baciloscopia es siempre negativa. Histológicamente la LI se caracteriza por un infiltrado linfohistiocitario perivascular, perineural y perianexial superficial y profundo inespecı́fico10 por lo que el diagnóstico debe basarse en la correlación clı́nico-patológica. No se observan granulomas ni histiocitos vacuolizados (células de Virchow) y no suelen visualizarse bacilos en las tinciones especiales (Wade, Fite o Ziehl-Neelsen) (fig. 2). En las zonas no endémicas nos podremos ayudar de la detección del DNA de M. leprae por PCR en muestras de piel o de mucosa nasal11 o en la tinción inmunohistoquı́mica del antı́geno PGL-1 en las biopsias de piel. Lepra tuberculoide (TT) Figura 1 – Espectro clı́nico-inmunológico de la lepra. En esta tabla se representan los subtipos clı́nicos de lepra en relación con la respuesta inmune desarrollada por el huésped, factores genéticos, la expresión de citocinas en piel y la carga baciloscópica. IL: interleucina; IFN: interferón; BAAR: carga bacilar en baciloscopia; þ: activación; : inhibición. En aquellos pacientes con lesiones de LI sin tratamiento y con buena resistencia a M. leprae estas evolucionan hacia TT. Clı́nicamente son tı́picas de la TT las placas eritematosas infiltradas de bordes sobreelevados con disminución clara de los anejos cutáneos y anestesia objetivable. Suelen aparecer en los lugares de lesiones previas de LI y su número nunca es superior a 5. Puede existir engrosamiento de un tronco nervioso y la baciloscopia siempre es negativa. La intensa reacción inmunológica celular (tipo IV) activa los macráfagos en células epitelioides con alto poder de fagocitosis y destrucción de bacilos intracelulares. Por ello el dato histológico que caracteriza la TT es la presencia de granulomas tuberculoides que contactan con la capa basal de la epidermis y que en dermis se disponen alrededor de los nervios y vasos Cómo citar este artı́culo: Bennassar A, et al. Aspectos histopatológicos de la lepra. Piel (Barc., Ed. impr.). 2010. doi:10.1016/ j.piel.2010.09.012 P i e l ( B a r c . , E d . i m p r. ) ] ] ] ] ; ] ( ] ) : ] ] ] – ] ] ] 3 Figura 2 – Lepra indeterminada. Infiltrado linfohistiocitario inespecı́fico perivascular superficial y profundo, perineural (a) y perianexial (b). No suelen observarse bacilos en la LI (c). Figura 3 – Lepra tuberculoide. Granulomas tuberculoides en contacto con la capa basal de la epidermis que en profundidad se disponen alrededor de los filetes nerviosos dando un aspecto digitiforme muy caracterı́stico de la TT (a). A mayor aumento podemos observar que los granulomas de la TT están formados por células epitelioides con abundantes células gigantes multinucleadas tipo Langhans (flecha) en su interior y corona linfocitaria a su alrededor (asterisco) (b). dando un aspecto digitiforme o serpiginoso (fig. 3a). Los granulomas de la TT están formados por celulas epitelioides (macrófagos activados con alto poder de fagocitar y eliminar bacilos) con una caracterı́stica y constante corona de linfocitos. Las células gigantes multinucleadas tipo Langhans son tı́picas y suelen estar presentes en gran número (fig. 3b) puesto que representan un esfuerzo adicional por mejorar la fagocitosis de bacilos12. En el diagnóstico diferencial de la TT deberı́amos tener en cuenta que los hallazgos histológicos pueden ser muy similares a los observados en la sarcoidosis. Sin embargo, en la sarcoidosis los infiltrados granulomatosos no tendrı́an tanta apetencia por las estructuras neurales. Lepra lepromatosa (LL) La LL aparece como evolución de la LI en pacientes no tratados con anergia selectiva ante M. leprae. Se trata de pacientes bacilı́feros con altı́sima carga baciloscópica por lo que se aconseja siempre examinar a todos los convivientes. Clı́nicamente se caracteriza por múltiples lesiones Cómo citar este artı́culo: Bennassar A, et al. Aspectos histopatológicos de la lepra. Piel (Barc., Ed. impr.). 2010. doi:10.1016/ j.piel.2010.09.012 4 P i e l ( B a r c . , E d . i m p r. ) ] ] ] ] ; ] ( ] ) : ] ] ] – ] ] ] diseminadas, mal delimitadas y tendencia a la simetrı́a. Ası́, se pueden observar máculas, pápulas, placas o nódulos (hansenomas) o lepromaseritematosos localizados preferentemente en cara, tronco y extremidades. La infiltración difusa de la cara da lugar a la caracterı́stica fascies leonina, la madarosis de las cejas o la infiltración de los pabellones auriculares. Además también son tı́picos de la LL la nariz en silla de montar por destrucción de cartı́lago nasal, la epistaxis y la apariencia xerótica e indurada de las piernas o brazos10. Aunque en las lesiones cutáneas la sensibilidad está conservada, la afectación de múltiples troncos neurales es frecuente dejando graves secuelas permanentes. En el estudio histológico de las lesiones de LL destaca un denso infiltrado difuso dérmico constituido por macrófagos grandes multivacuolados (células espumosas o de Virchow). Dicho infiltrado se encuentra separado de la epidermis por una banda de tejido respetado (zona Grenz o banda de Unna) y suele estar acompañado de linfocitos y células plasmáticas (fig. 4a). En el interior de dichas células de Virchow se encuentran múltiples bacilos, muchos de los cuales suelen agruparse en estructuras llamadas globis (fig. 4b). Esto traduce la imposibilidad de estos macrófagos para destruir los bacilos intracelulares con progresiva carga bacilar. Cuando el paciente se encuentra con tratamiento adecuado estos bacilos aparecen fragmentados con apariencia granular. Es poco frecuente observar células gigantes multinucleadas en la LL, y si existen, pueden contener vacuolas lipı́dicas en el citoplasma13. En la variedad de LL histoide (LLH) las lesiones cutáneas se describen como queloidiformes, moluscoides o parecidas a dermatofibromas y en la histologı́a destaca un infiltrado dérmico bien delimitado de histiocitos fusocelulares en el interior de los cuales se encuentran numerosos bacilos alineados a lo largo de su eje mayor. Lepra dimorfa o borderline Como su propio nombre indica, la lepra borderline posee caracterı́sticas clı́nicas e histológicas intermedias entre los dos tipos polares de lepra traduciendo un equilibrio entre las respuestas Th1 y Th2. La gravedad del cuadro clı́nico cutáneo ası́ como la afectación de nervios periféricos dependerá de si el paciente se encuentra más cercano al polo lepromatoso o al tuberculoide8. A diferencia de las formas polares de lepra, un paciente con lepra borderline podrá pasar de un subtipo a otro dependiendo de su estado inmunológico o de la existencia de tratamiento con la frecuente aparición de leprorreacciones tipo 1. Lepra borderline tuberculoide (BT) Clı́nicamente la BT se caracteriza por múltiples (5–25) placas semejantes a TT o bien por una o pocas placas de gran tamaño, con bordes irregulares y lesiones satélite. Es tı́pica y frecuente la afectación de múltiples troncos nerviosos. La baciloscopia suele ser negativa mas, en los casos en que es positiva, la carga es siempre baja. En la biopsia de dichas lesiones se observan infiltrados granulomatosos en toda la dermis y se disponen caracterı́sticamente perivascular, perianexial y perineural. Dichos granulomas se encuentran separados de la epidermis suprayacente por la banda de Unna y están constituidos por macrófagos con marcada activación epitelioide acompañados por un infiltrado de linfocitos tanto intra como extragranuloma sin formar corona definida como en la TT (fig. 5a,b). La células gigantes multinucleadas son menos numerosas y de menor tamaño que el la TT. Sin embargo, a pesar del intenso infiltrado perineural y anexial, el perineuro se encuentra conservado y los anejos reconocibles14. Lepra borderline borderline (BB) La BB es una forma clı́nica inestable que, dependiendo de la inmunidad del paciente, en pocos meses evoluciona hacia BT o BL con leprorreacciones tipo 1 o reversas. Las lesiones cutáneas de la BB suelen ser numerosas placas eritematosas con borde externo mal definido y centro hipocromo bien definido aparentemente no afectado (en )queso suizo*). Los troncos nerviosos suelen estar intensamente afectados con Figura 4 – Lepra lepromatosa. Infiltrado inflamatorio dérmico denso compuesto por macrófagos multivacuolados (células de Virchow) separado de la epidermis por la banda de Unna (a). En la tinción de Wade se observan múltiples bacilos intracelulares, muchos de los cuales se agrupan en Globis (b). Cómo citar este artı́culo: Bennassar A, et al. Aspectos histopatológicos de la lepra. Piel (Barc., Ed. impr.). 2010. doi:10.1016/ j.piel.2010.09.012 P i e l ( B a r c . , E d . i m p r. ) ] ] ] ] ; ] ( ] ) : ] ] ] – ] ] ] Figura 5 – Lepra borderline tuberculoide. Infiltrados granulomatosos dérmicos perivasculares, perianexiales y perineurales separados de la epidermis suprayacente por la banda de Unna (a) y están constituidos por macrófagos con marcada activación epitelioide acompañados por un infiltrado de linfocitos tanto intra como extragranuloma sin formar una corona (b). graves episodios de neuritis como leprorreacciones tipo 1 más frecuentes. La baciloscopia suele ser positiva10. El aspecto histológico de la BB es similar a la BT. Existen infiltrados granulomatosos dérmicos de macrófagos epitelioides con poca tendencia a la cohesión y edema pericelular junto con algunos linfocitos dispersos. Las células gigantes multinucleadas están ausentes y los anejos ası́ como los filetes nerviosos suelen estar respetados13,14. 5 Figura 6 – Lepra borderline lepromatosa. Detalle de la proliferación perineural de fibroblastos dando un aspecto laminado al perineuro (fibrosis en )capas de cebolla*). Aunque el desencadenante más frecuente suele ser el inicio del tratamiento, la gestación, infecciones concomitantes como la tuberculosis, intervenciones quirúrgicas o la administración de algunas vacunas pueden desencadenarlas. Son uno de los mayores problemas, especialmente al inicio del tratamiento y que el clı́nico debe conocer y tratar enérgicamente para evitar secuelas irreversibles. Dependiendo del sustrato fisiopatológico podemos dividir las reacciones inflamatorias de la lepra en reacciones tipo 1 y 2. Leprorreacciones tipo 1 (LR1) La BL se caracteriza clı́nicamente por un gran número de lesiones de aspecto variado (pápulas, placas, nódulos mal definidos) con tendencia a la simetrı́a. Es frecuente la afectación de múltiples troncos nerviosos y en la BAAR se observan incontables bacilos sin que formen globı́as6. En el estudio histopatológico encontraremos un infiltrado dérmico difuso compuesto por macrófagos con escasa activación epitelioide algunos de los cuales muestran irregulares vacuolas intracitoplasmáticas ası́ como abundantes linfocitos dispersos. Aunque los nervios no se encuentran destruidos, es muy tı́pica la proliferación perineural de fibroblastos dando un aspecto laminado al perineuro (fibrosis en )capas de cebolla*)14 (fig. 6). Las LR1 son eventos inflamatorios causados por una reacción de hipersensibilidad tipo IV (celular) y se deben al cambio en el estado de inmunidad del paciente. Se producen tanto por mejorı́a dentro del espectro inmunopatológico por efecto del tratamiento (reversas) como por empeoramiento por evolución de la enfermedad (downgrading) y son casi exclusivas de las formas borderline de lepra7,10. Clı́nicamente podemos observar un cambio en las lesiones preexistentes (edema, eritema, ulceración) o la aparición de nuevas lesiones. Sin embargo, el evento más grave y temido son los episodios de neuritis aguda caracterizados por dolor e impotencia funcional en los principales nervios periféricos y son reversibles tan solo parcialmente. Histológicamente se observan granulomas epitelioides con células multinucleadas y necrosis central afectando el endoneuro con la consiguiente destrucción irreversible de las fibras nerviosas13. Leprorreacciones Leprorreacciones tipo 2 (LR2) Entendemos por leprorreacción cualquier evento inflamatorio agudo por causado por hipersensibilidad a antı́genos bacilares. Aunque pueden ocurrir en cualquier momento de la historia evolutiva de la enfermedad el 50% aparecen durante el tratamiento y hasta un 20–30% puede hacerlo después de finalizado el tratamiento6. Las LR2 son vasculitis de pequeño vaso causadas por el depósito de inmunocomplejos circulantes. Se producen de manera exclusiva en pacientes con LL en tratamiento en los que existe una elevada carga bacilar y altos tı́tulos de anticuerpos que facilitarán la aparición de dichos inmunocomplejos. Lepra borderline lepromatosa (BL) Cómo citar este artı́culo: Bennassar A, et al. Aspectos histopatológicos de la lepra. Piel (Barc., Ed. impr.). 2010. doi:10.1016/ j.piel.2010.09.012 6 P i e l ( B a r c . , E d . i m p r. ) ] ] ] ] ; ] ( ] ) : ] ] ] – ] ] ] El eritema nodoso leprosum es la LR2 más frecuente y caracterı́stica. Se caracteriza por la aparición de incontables nódulos subcutáneos eritematosos dolorosos distribuidos por toda la superficie corporal y suele acompañarse de sı́ntomas constitucionales. En el estudio histológico de dichas lesiones predominan los fenómenos de vasculitis sobre los datos de paniculitis septal6,13. Otros cuadros de LR2 menos frecuentes son la artritis, orquitis, hepatoesplenomegalia, glomerulonefritis o linfadenitis. Fenómeno de Lucio El fenómeno de Lucio es una LR2 aguda en la que se observa en toda la dermis una vasculitis necrotizante de vasos de pequeño calibre acompañada de trombosis. Se produce en pacientes con afectación cutánea difusa por LL y se caracteriza clı́nicamente por máculas violáceas que se necrosan y ulceran rápidamente. Conclusiones Por último, aunque la lepra se considera una enfermedad infecciosa curable, con buen pronóstico y una excelente supervivencia, puede ser todavı́a motivo de discriminación social con una alta morbilidad debido a las secuelas permanentes que puede producir. Es primordial realizar un diagnóstico precoz y estudiar a todos los contactos ası́ como sensibilizar a todos los estratos de la sociedad en aquellos paı́ses endémicos para que en un futuro no muy lejano la lepra deje de ser una carga para la salud pública. B I B L I O G R A F Í A 1. Canizares O, Harman R, Adriaans B. Leprosy. En: Canizares O, Harman B, editors. 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