El Adventismo del Séptimo día - Iglesia Evangélica Aliancista

Adventistas del Séptimo día
¿Iglesia cristiana o una secta?
Gálatas 5:4-7
Introducción
Probablemente Ud. ha leído algunas crónicas acerca de los adventistas. Tal vez ha visitado algunos
de sus hospitales o escuelas. Quizá su vecino de al lado o alguno de la próxima calle es adventista.
Es posible que Ud. no haya podido contestar algunas preguntas que se le hayan hecho acerca de
ellos, como éstas: ¿Quién es esa gente? ¿En qué cree? ¿Qué enseña? ¿Por qué parecen tan..bien, tan
diferentes?. Aún más, algunos creyentes no saben si llamarlos hermanos o no, si considerarlos como
parte de la iglesia de Cristiana o como una secta. En otros creyentes salen a relucir frases como
¡pero si sus predicaciones son tan bíblicas!; ¡si usan nuestra misma himnología!; ¡si son una iglesia
conservadora!, en fin, muchos calificativos, que denotan entre el pueblo cristiano muchas veces un
desconocimiento respecto de quiénes son realmente los adventistas.
En razón de poder dejar claro si el adventismo se puede considerar como cristianismo verdadero o
como una secta, quiero ser preciso en los puntos a tratar y no ahondar en muchos detalles, más de
los que un creyente debe conocer, respecto de ellos, para no ser presa del engaño o no ceder antes
sutiles palabras que buscan únicamente dar cabida y aceptación a este grupo.
Para ello:
1.
2.
3.
4.
5.
Haremos un breve análisis de lo que es una secta,
Revisaremos la ficha histórica de los adventistas
Analizaremos cuáles son los mayores peligros del adventismo
Revisaremos los cinco errores más importantes
Conclusión al tema, nuestra postura y el trato con los adventistas.
1. ¿Qué es una secta?
Dave Breese, en su libro “Conozca las marcas de las sectas” define el término como: “Una
perversión religiosa. Es una creencia y práctica en el mundo de la religión que exige devoción a un
concepto o un líder religioso centrado en una doctrina falsa. Es una herejía organizada”
Como rasgos característicos podemos mencionar los siguientes:

La mayoría de las sectas son dogmáticas. Como consecuencia, son altamente
intolerantes en cuanto a desviaciones de sus enseñanzas y de su vida. Pero en
muchos casos, esto simplemente es superficial.

En muchos casos las sectas basan sus ideales y doctrinas para ejercer su autoridad,
en supuestas revelaciones especiales de Dios. Casi siempre estas revelaciones van
unidas a un líder en particular que las recibe.
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Por lo general aminoran el sentido del pecado y en otras esta totalmente ausente.
Producto de ello, la idea de Salvación, entonces, asume también diferentes
significados y diferentes métodos de poder obtenerla.
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
En la mayoría de las sectas hay una tendencia a enfatizar cosas que no son esenciales
y cuestiones relativamente secundarias, de modo que éstas asumen un lugar central.
En Resumen podemos decir que, una secta es un grupo de personas... alrededor de la
interpretación que alguien hace de la Biblia y caracterizado por grandes desviaciones con
respecto al cristianismo ortodoxo en lo que relaciona con las doctrinas cardinales del evangelio.
2. Ficha histórica del adventismo
Denominación
Iglesia Adventista del Séptimo día (Sabatistas)
Fundadores
1842
1845
Lugar de origen
Estados Unidos
Su autoridad
La Biblia y los escritos de Hellen White
Teología
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Realidad actual
William (Guillermo) Miller
Hellen Harmon White
Armazón conceptual tomado de las Iglesias de la Reforma.
Concepción trinitaria de Dios.
Afirman la divinidad de Cristo, aunque aparentemente en
algún momento lo han confundido con el Arcángel Miguel.
Niegan la inmortalidad del alma y la existencia del infierno.
La expiación en la cruz se realizó en varias fases, la última tuvo
lugar en 1844.
Su antropología y soteriología son muy semejantes a las de los
Testigos de Jehová
Celebran la santa cena 4 veces al año.
Moral rigurosa y legalista.
Observancia del descanso sabático en lugar del dominical.
Énfasis en la distinción entre puro e impuro.
Evitan toda substancia estimulante (café, tabaco, etc.).
Uso de terapias alternativas y naturistas.
Marcada preocupación por la salud corporal.
Tienen presencia en más de 190 países sumando un número superior a
los 10.000.000 de seguidores. En su programa global, los adventistas
han dividido el mundo en doce divisiones administrativas, subdivididas
a su vez en uniones y asociaciones locales, cada una con su propia
dirección.
Para suplementar sus objetivos, han desarrollado un programa sólido
que se lleva a cabo por medio de los Departamentos Médico,
Educacional, de Publicaciones, de Actividad Misionera, de Jóvenes y
de Libertad Religiosa. Además usa extensamente la radio y la
televisión. Sus programas más conocidos son: por radio, la Voz de la
Esperanza; por Televisión, Está escrito y Fe para Hoy.
Su obra de publicaciones se ha desarrollado ampliamente en los últimos
años, contando con más de 40 casas editoriales.
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Puesto que sostienen que la curación del cuerpo es un accesorio vital en
la obra de curar el alma, los adventistas sostienen más de 300
sanatorios, hospitales y clínicas en muchos países. Emplean en estas
instituciones a más de 700 médicos y más de 19.000 enfermeros y otros
ayudantes. Para proporcionar médicos que a la vez tengan la fe
adventista en el corazón, cuentan con la Universidad de Loma Linda,
California, USA.
Para preparar a sus pastores y misioneros y mantener a su juventud, han
establecido su propio sistema educacional que incluye Escuelas
primarias y secundarias, además de Colegios superiores y
Universidades.
3. Los Mayores peligros del adventismo
Por lo general lo adventistas dejan una impresión de ser buenas personas, profesan amar
sinceramente a Dios, contribuyen con sus recursos a la obra misionera, son celosos en cuanto al
pago del diezmo, llevan una vida sana absteniéndose de vicios y placeres mundanos, defienden
ardientemente sus creencias y muestran un amor cristiano práctico.
Hasta ahí, todo parece estar muy bien y acorde con lo que es el cristianismo bíblico. Entonces ¿Por
qué decir que los adventistas son un peligro? Y justamente ahí esta el mayor peligro que revisten.
Hacernos creer que son parte de la iglesia de Cristo, la cual ganó por su sangre.
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Aunque tienen muchas doctrinas ortodoxas, tienen otras que desvían al creyente del
camino verdadero.
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Mantienen un sistema legalista el cual desvía la fe de la obra expiatoria de Cristo.
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Han elaborado doctrinas erróneas sobre la muerte y el estado futuro del hombre.
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Mantienen una constante labor proselitista entre miembros de iglesias evangélicas
4. Los cinco errores más importantes
Desde el comienzo de su historia, los Adventistas del Séptimo Día fueron conocidos como "el
pueblo de la Biblia." Pero en años recientes, han estado llamando la atención a lo que ellos creen
que son contradicciones bíblicas. En su intento de justificar las reconocidas contradicciones de
Hellen Withe han afirmando que la Palabra de Dios carece de integridad. Este mismo enfoque ha
sido siempre la "solución rápida" del Adventismo cuando se ha visto confrontado con las claras
contradicciones que posen las doctrinas que sustentan.
Aún más, no conformes con eso, recurren a la vigencia de ciertos dones espirituales como el de
profecía, para avalar sus pretensiones de ser los portadores de la verdad salvadora, mediante la obra
literaria realizada por su fundadora. Extraigo a continuación, un extracto de los principios
adventistas:
“Unos de los dones del Espíritu Santo es la profecía. Este don es una marca identificadora de la
iglesia remanente y fue manifestada en el ministerio de Elena G. de White. Como la mensajera de
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Dios, sus escritos son fuente continua y autorizada de la verdad la cual provee para la iglesia
comodidad, dirección, instrucción, y corrección. También hacemos claro que la Biblia es el único
estandarte por la cual toda enseñanza y experiencia debe ser probada”
Claramente podemos ver que a pesar de decir que la Biblia es importante dentro de sus doctrinas, no
pasa de ser una frase de adorno, pues claramente manifiestan que la guía e instrucción de la iglesia
no esta plenamente en las Escrituras sino en los escritos de esta señora que ostentaba el supuesto
don de profecía; don que a la luz de las Escrituras, entendemos cesó una vez que llegó lo perfecto, y
que es La Palabra de Dios. (1 Cor. 13:8-10).
En conclusión, con esta declaración contradicen completamente lo que Pablo nos menciona en la
2da carta a Timoteo: (2 Tim. 3:16) “Toda Escritura es inspirada divinamente y útil para enseñar,
para redargüir, para corregir, para instituir en justicia,”
Partiendo de esta base, analizaremos muy brevemente los cinco errores más importantes que
develan claramente que esta organización, merece ser catalogada como secta.
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Una expiación incompleta
Los adventistas enseñan que Cristo entró en el santuario en el año 1844 y que actualmente se
encuentra cumpliendo su obra expiatoria. Por lo tanto surge la inquietud acerca del perdón de
los pecados. A lo cual ellos dicen que a contar de la fecha antes mencionada, comenzó la labor
de investigación y de perdón de los pecados, o sea, todos aquellos que invocan el nombre de
Cristo, pasan por este escrutinio, definiéndose finalmente si son perdonados o no, sólo después
del juicio final.
La Biblia nos enseña claramente que cristo entró en el santuario celestial al ascender al cielo
(Hebreos 6:1-20; 8:1,2; 9:23-26)
También La Biblia nos enseña que Cristo murió una vez y para siempre y que por su sacrificio
en la cruz del calvario son perdonados y borrados nuestros pecados. (Col. 2:13; Heb:10:14;1
Juan 1:7). Notemos que en Juan 3:36 no habla en tiempo futuro sino en tiempo presente: “El
que cree en el Hijo, Tiene la vida..”, no habla que a futuro, después de una investigación de sus
pecados se podrá saber si es salvo o no, habla claramente que, quien cree en Cristo, sus pecados
son perdonados y en hecho Hijo de Dios con la plena certeza de una vida eterna con Cristo en
los cielos.

Los pecados depositados en Satanás
En el libro “El conflicto de los siglos” escrito por Hellen White, dice que el macho cabrío para
Azazel que aparece en Levítico 16:22,26, simboliza a Satanás. Que todas nuestras iniquidades
serán cargadas sobre él. Durante el milenio, Satanás, llevando sobre sí la culpa de los pecados
que ha hecho cometer al pueblo de Dios.
Quizá esto pase desapercibido, pues los adventistas le dan un matiz distinto a esta doctrina
elaborada por la señora White, sin embargo en palabras más simples, esto quiere decir que eso
hace del diablo nuestro co-salvador junto con Cristo. Dicho de otra forma, la expiación de
nuestros pecados la haría una parte Cristo y la otra Satanás. ¿será posible que un cristiano pueda
creer semejante aberración?.
La Biblia nos enseña que nuestros pecados fueron cargados sólo en Cristo (Isaías 53:6). Por lo
tanto el macho cabrío que era enviado al desierto, es simplemente figura de Cristo cargando
nuestros pecados cuando penetró en las tinieblas para destruir por medio de la muerte al que
tenía en imperio de la muerte, es a saber Satanás el diablo (Heb:2:14).

El sueño del Alma
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Respecto de la muerte, los adventistas sostienen que al morir, las almas de los justos duermen
hasta la resurrección y el juicio final. Es un estado de silencio, inactividad y entera
inconciencia. Así explican lo que ellos denominan “el sueño del alma”. Principalmente basan
esta creencia en la expresión de Eclesiastés 9:5 que dice: “Los muertos nada saben”.
Al respecto, basta leer el contexto (vs. 4-10) para darnos cuenta que la Biblia está hablando en
dicho pasaje sobre la relación de los muertos con la vida terrenal y no sobre el estado del alma
después de la muerte. Además que los hebreos acostumbraban a usar esta figura retórica al
referirse a la muerte. Y finalmente en Apocalipsis 6:9-11 se nos habla de las almas de los
mártires, quienes claman a Dios y sus preguntas son contestadas.

La aniquilación de Satanás y los malos
Sostienen en sus enseñanzas que Satanás y todos sus seguidores (los malos), serán aniquilados,
es decir, completamente destruidos. Sin embargo Nuestro Señor allí en Mateo 25:46 no nos dice
que los malos serán destruidos, sino que irán al tormento eterno. Lo mismo nos dice Apocalipsis
14:11, respecto de los que adoran a la bestia y de igual forma lo expresa Apocalipsis 20:10
respecto del tormento eterno que sufrirán el diablo, la bestia y el falso profeta. En ningún lugar
de las Escrituras se hace mención o que tienda a sugerir la idea de una destrucción total de
Satanás y sus seguidores.
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La observancia obligatoria del sábado
Para simplificar la extensa argumentación que los adventistas presentan respecto de esta
creencia, podemos resumir lo siguiente: Sostienen que es obligatorio observar el sábado como
día de reposo, pues esto es el sello de Dios, mientras que quienes observamos el domingo
estamos recibiendo el sello del anticristo, es decir la marca de la bestia.
Esta doctrina se enfatizó, no porque tenga un gran asidero biblico, sino, porque la señora White
tuvo una revelación en la cual según dice, Jesús destapó el arca del testimonio y ella pudo ver
dentro las tablas de la ley y notó que el cuarto mandamiento se hallaba al centro rodeado de una
aureola de luz.
La Biblia muestra que los primeros cristianos santificaban el domingo y no el sábado, como el
Día del Señor, el Día de Descanso... y lo comenzaron a celebrar exactamente desde el domingo
después del domingo de Resurrección. La palabra "Sabath" de los Judíos no significa sábado,
sino "descanso"... el Sábado era el día de Descanso de la Creación (Génesis 2:1-3).
La palabra "Domingo" viene del latín "Dominus", que quiere decir "Señor", porque los primeros
cristianos lo llamaban así, el "Domingo, el día del Señor"... El Domingo es el Día de la
Resurrección de Cristo, el Día de la "Nueva Creación". Jesucristo resucitó un domingo, y no un
sábado, como nos dicen Mateo 28:1, Marcos 16:1, Lucas 24:1, Juan 20:1.
El domingo siguiente a la Resurrección, los cristianos celebraron ese gran acontecimiento, y las
apariciones de Jesús a ellos mismos, y así lo siguieron celebrando cada domingo, para recordar
la maravilla de la resurrección del Señor. Así, los primeros cristianos empezaron a celebrar el
domingo como el Día del Señor, el día de descanso, en vez del sábado, que era la costumbre
antes de Cristo. No fue ningún Papa quien cambió esta costumbre, sino los primeros cristianos
como nos lo enseña la Biblia en Hechos 20:7: El domingo, estando nosotros reunidos para partir
el pan... Aquí nos dice que el domingo es cuando se reunieron para partir el pan, para descansar,
para celebrar el día del Señor, que eso es lo que hacían cuando se reunían para partir el pan. Lo
mismo nos enseña Pablo en 1 Corintios 16:2: El domingo, cada uno ponga aparte lo que bien le
pareciere, de modo que no hagan las colectas cuando yo vaya.
Así es que bien claro nos enseña la Biblia que fueron los primeros cristianos los que cambiaron
esta costumbre de celebrar el "domingo", el día del Señor, en vez del sábado. No fue cambiado
por ningún Papa, como los Adventistas tratan de insistir.
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5. Conclusión
Nuestra actitud frente al adventismo
Después de haber analizado y visto los errores en que incurre el adventismo, ¿podríamos creer a
palabras como éstas, que han emanado de una mente que no buscaba sino, su propia gloria?
"En mis libros se afirma la verdad, reforzada por un 'Así ha dicho el Señor.' El Espíritu Santo
grabó estas verdades en mi corazón y en mi mente tan indeleblemente como la ley fue grabada por
el dedo de Dios sobre las tablas de piedra." Carta 90, 1906.
Es decir, por el sólo hecho de usar la expresión “Así ha dicho el Señor” ¿debemos creer que es
palabra inspirada y verdadera?, de ninguna manera hermanos(as).
El apóstol Pablo escribió una carta a un grupo de cristianos que sufrían una confusión en cuanto a
su fe. Resulta que habían entrado algunos que perturbaban con otras enseñanzas. Les advirtió
claramente lo siguiente: “Mas aun si nosotros ó un ángel del cielo os anunciare otro evangelio del
que os hemos anunciado, sea anatema.”(Gálatas 1:8).
Cuando leemos la carta de Pablo a los Gálatas (3:24,25; 5:4-7) parece que se estuviera refiriendo a
los adventistas, representados en aquellos que querían perturbar a los creyentes, volviéndolos a las
prácticas judaizantes.
Después de toda esta argumentación, quizá alguno(a) pudiera seguir dudando de que el adventismo
sea una secta, producto de ver el tipo de personas que son, pues claramente reflejan muchas veces
una mayor fidelidad y compromiso que los propios cristianos, sin embargo en la carta del Apóstol
Juan, se nos advierte sobre los que visitan con otras enseñanzas y sugiere no recibirles, ni
saludarles (2a. Juan 9-11).
¿Qué hacer entonces?, ¿cómo tratarlos?
En el libro de Amós encontramos un muy buen ejemplo para definir nuestra actitud frente a los
adventistas: “Jehová entonces me dijo: ¿Qué ves, Amós? Y dije: Una plomada de albañil. Y el
Señor dijo: He aquí, Yo pongo plomada de albañil en medio de mi pueblo Israel: No le pasaré más:”
(Amós 7:8). La plomada es un instrumento empleado por los albañiles para asegurarse que lo que
se está construyendo esté a nivel, recto y siendo construido de manera equilibrada y correcta.
Con esto, Amós se refirió a esta herramienta, para explicar que Dios mide a los hombres y su
devoción hacia El, mediante Sus normas y no mediante las normas del hombre. La fuerza de la
Iglesia de Cristo y de quienes la componemos está en su proclamación de aquello que falta en las
sectas, es decir, la distinción correcta entre la Ley y el Evangelio, los claros conceptos del pecado y
la gracia en las Escrituras, la necesidad del hombre debido a su separación de Dios y la satisfacción
de ésta necesidad por la gracia de Dios en Cristo Jesús.
De igual forma nosotros hoy, debemos saber aplicar esta plomada con respecto al adventismo, no
sometiendo las cosas según lo que nos parece o lo que vemos, sino según lo que indica La Palabra
de Dios. Pues Sólo La Palabra de Dios es la plomada para definir lo que es ortodoxo y lo que no lo
es; lo que es verdad y lo que son mentiras y fantasía de mentes que no buscan honrar al Dios
verdadero, sino satisfacer sus propios deseos humanos.
Veamos algunas “ayudas” para quienes tengan la oportunidad de dar testimonio a un adventista:
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Acérquese a ellos con un corazón expectante, habiendo encomendado su testimonio a la
bondadosa influencia del Espíritu Santo.
Demuestre un interés genuino en la persona a quien está dando testimonio, eso es demostrar
amor cristiano y paciencia, nunca condescendencia o “tolerancia”, ya que todas las personas
tienen igual necesidad de la gracia de Dios en Jesucristo.
Evite toda hostilidad o poner en ridículo, eso es “cerrar la puerta”
Diga en sus propias palabras lo que Jesucristo significa para usted. Recalque cómo
Jesucristo vino a buscarla(o), usted no tuvo que ganar su aprobación en ninguna forma.
Pero lo más importante en esto es, cuando nos enfrentemos a una conversación con un adventista,
no debemos titubear ni menos temer hablarle sobre lo que constituye la verdadera vida cristiana,
con autoridad debemos hablarle de la suficiencia de la redención de Jesucristo y de la certeza de la
promesa de Dios de perdón en Jesucristo.
Luis Leiva Zurita
Pastor
Bibliografía
La Santa Biblia, Versión RV 1909.
De Walter, Luisa J. ¿Cuál Camino?, Editorial Vida, 1968.
Ridenour, Fritz. ¿Cuál es la diferencia?. Editorial Clie, 1989.
Beck, Hubert F. Cómo Responder a las Sectas. Editorial Concordia, 1990
Lochhaas, Philip H. Cómo Responder a las nuevas religiones “cristianas”, Editorial Concordia, 1979.
Igl. Adventista del Séptimo Día, Quiénes somos, sitio Oficial Web, www.advetistas.org.pe/somos/
MacDowell, Josh. Estudio de las Sectas, Editorial Vida.
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