Los cristianos sentimos vergüenza por otros católicos

NEGOCIOS
LATERCERA Domingo 11 de octubre de 2015
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NEGOCIOS
“Los cristianos
sentimos vergüenza
por otros católicos
que no hayan
actuado bien en los
negocios”
Domènec Melé, experto en Etica
Empresarial del IESE Business School,
llegará esta semana a Chile para
encontrarse con los alumnos de la
Universidad Católica.
Texto: NICOLLE PEÑA
H
Hace algunos años, los alumnos no
entendían muy bien la importancia
de la ética en la formación académica. Decían que venían a aprender de
negocios... Hoy, por lo menos, hay
más sensibilidad”, asegura Domènec
Melé, profesor del Departamento de
Etica Empresarial y titular de la Cátedra de Etica Empresarial del IESE
Business School de España, al comentar casos como el de los vehículos Volkswagen trucados para ocultar sus emisiones.
Al teléfono desde España, el sacerdote, miembro de la congregación Opus
Dei, llama a “ser tajantes” ante los casos de soborno, corrupción y tráfico de información privilegiada, recalcando que se debe dejar claro “que
son el límite inferior de lo que no se
debe hacer”.
De eso, Melé hablará el próximo 15 de
octubre en la Universidad Católica. El
sacerdote expondrá en un seminario
sobre ética empresarial organizado
por las facultades de Teología, Economía y la Pastoral de esa casa de estudios. Su conferencia, titulada: “Desafíos actuales para la ética y la responsabilidad empresarial”, estará
dirigida a los futuros hombres de negocios y forma parte de las acciones
implementadas por la UC para enfrentar los cuestionamientos a la formación ética de sus ex alumnos, entre los que figuran algunos de los
empresarios y ejecutivos indagados
por el Ministerio Público por el uso
CONTEXTO
“El mercado tiene
muchas cosas positivas
(...), pero no busca la
justicia, ni mucho menos
la justicia social”.
VALORES
“Las personas religiosas
no sólo tienen que ir a
misa los domingos;
también tienen que
actuar con justicia y seguir
los mandamientos“.
CAUSAS
“P
Puede ser que los
problemas de estos
empresarios sea falta de
formación”.
de boletas ideológicamente falsas,
entre otras irregularidades. El desafío ahora, sostiene Melé, es lograr
“pasar de esta mayor sensibilidad a
un mayor compromiso”.
¿Ha escuchado algo sobre el caso
Penta, SQM o Caval?
Sobre el caso Penta y también del que
protagonizó el hijo de la Presidenta,
que tiene relación con información
privilegiada.
Bajo su diagnóstico, ¿qué tan éticos
son los empresarios hoy?
Mi percepción personal es que hay
muchas empresas que lo están haciendo bien (...). Aunque desde el
punto de vista práctico, la ética a
veces se toma como un añadido. Nosotros defendemos que cualquier
decisión de directiva no es solamente algo económico, porque afecta a
personas y, por tanto, a la sociedad.
Tiene una dimensión ética y social
que no se puede ignorar. El proble-
ma es que a veces nos encontramos
con una mentalidad muy economicista, donde lo importante son las
cuentas, los resultados, las cuentas
que pedirán los accionistas (...). Hay
empresas que tienen códigos de ética, pero que después, en la vida,
van por otro lado.
¿Qué responsabilidad les compete
a las universidades?
La gente empieza a mirar en qué escuelas se han formado estos directivos y qué les han enseñado, entonces la crítica va para las escuelas. Por
eso, lo que hace falta es, a partir de
las universidades, formar directivos diciéndoles lo importante que es
el carácter moral (...). Cuando hay
ceguera ética y presiones competitivas, la empresa ni se da cuenta de
la falta o la racionaliza. En cambio,
cuando hay calidad moral, el riesgo
que corremos es pequeño.
Sin duda, las universidades deben
fortalecer la formación. Pero es más
difícil formar virtudes que dar técnicas. No digo que los códigos de
conducta no sirvan para nada, pero
al fin de cuentas lo importante es tener gente virtuosa. Y cuando se promociona a una persona no sólo se
deben ver conocimientos técnicos,
sino que qué clase de persona es,
cómo va a liderar; en fin, su calidad
moral.
Pero las universidades llevan años
impartiendo cursos de ética, ¿qué
ha fallado?
El tema es complejo. Estamos metidos en un sistema económico en que
el mercado tiene muchas cosas positivas, es capaz de optimizar recursos, crear riqueza en forma eficiente, pero no busca la justicia, ni mucho menos la justicia social, pero
dentro de eso se puede tener un
comportamiento ético. Eso es lo que
defiendo. Para ser un buen directivo se tiene que tener moralidad.
Cuando la ética no se tiene bien cogida, con mucha facilidad se pueden
cometer barbaridades y eso termina
siendo muy malo para la empresa. Al
final, la reparación es mucho más
costosa, como en el caso de Volkswagen, donde las acciones se desplomaron.
Ese argumento cae en una lógica
economicista...
Así es. Pero la ética es algo intrínsecamente valioso, por eso, lo primero es reconocer la importancia de las
personas. Cuando se trata bien a las
personas, la tendencia natural es
que creen confianza. Por eso, hay
que actuar en distintos niveles; el
primero es el de la conciencia personal, lo correcto es lo que se debe
hacer. También un buen directorio
tiene que hacer las cosas éticamente bien; es parte de un buen management. No es sólo algo técnico. Es
manejar personas y las personas tienen siempre una dimensión ética.
En Chile, algunos de los empresarios
que se han visto involucrados en
procesos judiciales, por ejemplo por
delito tributario, son católicos, ¿la
Iglesia ha hecho alguna reflexión
al respecto?
Las personas religiosas no sólo tienen que ir a misa los domingos;
también tienen que actuar con justicia y seguir los mandamientos,
como no robar. Pero la religión y la
Iglesia no dejan de ser lo que son
porque la gente lo haga mal. Se asocia y se escandaliza, y efectivamente es vergonzoso. Porque igual que el
Papa decía que sentía vergüenza por
los sacerdotes que cometen abuso,
habría que decir que los cristianos
sentimos vergüenza por otros católicos que no hayan actuado bien en
los negocios. Hay que ser tajantes.
¿Cuáles son prácticas de las escuelas de negocios internacionales en
ese sentido?
Se puede estar presente de dos maneras: con cursos específicos o introduciendo la ética en cada materia.
Cursos específicos para reflexionar
sobre elementos conceptuales y después ética, marketing, finanzas. Para
introducir la ética en las escuelas la
respuesta son ambas, porque un curso específico va muy bien y el otro
es la aplicación práctica.N
OO El sacerdote Domènec Melé
impartiendo una clase de ética.
UC reformula la
malla curricular
de sus
ingenieros
“La formación no empieza ni
termina aquí”, recuerda José
Miguel Sánchez, decano de la
Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la UC.
Sin embargo, reconoce que los
tiempos cambiaron y que la sociedad exige cambios.
Por eso, asegura que la entidad que lidera se encuentra trabajando en modificaciones a la
malla curricular de los futuros
ingenieros, a través de un nuevo curso de ética que diseñan
actualmente con la Facultad de
Filosofía.
Mientas eso entra en vigencia, probablemente el próximo
año, comenta, han buscado
abordar el escenario actual introduciendo, en cada curso, reflexiones vinculadas a los contenidos expuestos.
“La idea es que los alumnos
deban poner en práctica la ética, aplicada a la materia que se
ve, buscando casos que se desprendan de lo que se está hablando”, afirma Sánchez.
De hecho, sostiene que el sacerdote Melé los está apoyando en el desarrollo de casos.
“Estamos trabajando en varias
líneas para que un ingeniero
comercial de la UC sepa cómo
enfrentarse a estos casos”,
concluye.