NUEVOS Y CURIOSOS DATOS SACADOS D E L ARCHIVO DE LA CASA L O N A , QUE ACERCA Df. D. ANTONIO DE CAPMANY Y DE MONTPALAU Y DE SUS 1lOS OBRAS TYPULADAS , BIE!lOKIiIS HISTÓRICAS SOURE LA BARINA, INDUSTRIA, EOMEBCIO Y ARTES DE LA ANTIGUA C1UI)AD DE BARCELONA DIO POR VEZ PRIMEHA A CONOCER h LB REAL ACADEMiA D E BUENAS LETRAS D E ESTA CIUDAD BN !.A SIGUIENTE LEIDA ANTE LA MISMA EN 5 DE FEBRERO'DE ?U Sócio DE NUMERO D. JOAQUIN RUBIÓ Y ORS. isee, NUEVOS Y CURIOSOS DATOS ACERCA D E D. ANTONIO DE CAPNAl4Y Y 1)E b1ONTPALBU. COMOse complace la mente y se deleita la fautasia del que investiga 6 lee las Iiumanas historias cuando tropieza' con ignorados pormenores de sucesos 6 rle costumbres, gracias á los cuales, sobre todo si está11 con habilidad descritos, parece que cobra movimiento y vida el acontecimiento á que aquellos pormenores se reiieren, por igual manera parece que se recrea nuestro ánimo y se dilata nuestro corazoii, (al cual, segun dijo el gran cómico latino, nada es indiferente de cuanto al hombre se refiere), cuando, teniendo puesto iiuestro carifio en un personage emiiiente en virtudes, armas ó letras por lo que d e él ya sabemos, nos eiicontramos de repente con riuevos datos, que aunque seaii en. si mismos.de importaxicia escasa, sirvon no obstante para - . que, cori aumentar el c a ~ ~ dde a l noticias que acerca de 6l disfrutábamos, crezca poi,decirlo así, la especie de amistad. que coi1 él teníamos y, al pav d e esta, el afecto que le profesábamos. ,108 DATOS ACERCA D C Y esto es lo que me aconteció, y lo que siicederá, no lo dudo, á vosotros., mis ilustrados compaiieros , cn cuanto os dé á conocer los iiuevos datos, que quiso mi buena suerte que descubriera , relativos á nuestro ilustre compatricio , el. afamado filólogo, el paciente y concienzudo investigador y narrador discreto de ntiestras antiguas costumbres y d e nuestras más preciadas glorias, e k más entusiasta -amador y citltivador esmerado de nuestro hermoso idioma castellan o , D.. Antonio de Capmany y de Moritpalau; y á sus obras, por ventura. de él más estimadas y de los sabios, asi d e dentro como cle fuera' de España, más conocidas, Mem o r i a s históricas sobre l a Mivincc, Co.nzercio y Artes de l a a n t i g u a c i u d a d d e Barcelona, y Libro del const¿lad» del mar, impresas, como sabeis, á expcnsas do nuestra Muy Ilustre Junta de Comercio, y que son, junto con el Teatro de l a elocmeizciu española, las que 1138s contribuyeron á darle el renamhre de ,que justarnerite goza entre propios y extraríos. Yo ya sé que las noticias en que voy i ocupar porbreves rnornentos vuestra benévola atencion , si bien nuevas, 110 son. de aquellas que por s u importancia 6 por su trascerrdencia bastan a' caracterizar un personage, ó á darle á coiiocer bajo un nuevo asyccto, 6 i explicar acaso una parte no' bien coriocida aun de su existencia ; pero s é Cambien, y al afirmarlo, rio .creo qiie me ciegue el amor propib; ni mérros la alegría del hallazgo, ( q u e por lo mismo que fué casual quita todo pretexto al e~ivanecimiento), que los datos que voy á leer han de servir, no ya tan solo para dar á coilocer algotios detalles de la vida privada de nuestro ' h é ~ o i si , que tambieii y principalii~ente para revelarnos algunos rasgos de su carácter, 6 sea varias de esas cualidades, que no por ser n16iios aparentes ó relevat~tcs, dejarán de completar, ii la manera do los iiltitnos rcloques que d i uir piirbor ii tin rotiato, el coticei)to qt~e'tleél tcníamos fornintio. D. AI\'TO~\'IODE C A P ~ I ~ I ' . 109 Por otra parte, no son tan copiosos los datos que acerca de nuestro ilustre paisano y de sus - obras poseemos, que no dcbamos estimar- los qiie la suerte por un lado, á iiuevas y más afortunadas investigaciones por otro, nos deparen. Capmany que tanto trabajó en sacar del 'olvido á tantos eminentes varones qiie con sus escritos ó sus hechos habian ilustrado nuestra patria (1); a cuya pluma deben tantos ingenios y sus obras el respeto y veneracion en que, despues. d e u11 injusto y crirriinal abaodono, hoy se l o s tiene por los que al cultivo de las letras se consagran, si bien tia encontrado quienes con paciente estudio y sano criterio se hanócupad0,-tarea Korirosisima y altamente provechosa-, 'en analizar y juzgar 'sus 'escritos (2), ó e n dar Q conocer los más importantes sucesos de su tan laboriosa y agitada como bien aprovechada y íitil existcilcia (3), no ha tenido aun la suerte, cual otros personages tal vez de mélios valia, de quienes rio ha recibido tantos servicios su pitria , ni tan estimables frutos la literatura, de que u11 ingenio espafiol, no ménos que él valioso y diestro en el manejo de la plunyt, nos diera ti conocer á la vez-y en un solo y bien acabado trabajo al hombre y al escritor.; i aquel en los diferentes assectos bajo. que puede ser considerado; Q cstc eii' los. variados asuntos en que ejercitó su flexible y poderoso talento. . .. .. ( 1 ) Eii ski Tcnt,w de In Eloeuetreia y en siEii(tome clc los varones ilirrtirs da EspnRn. (3) Lo l~irieron,q:ic scpamos, el jórcii escrita? malloryuiii D. (irrilleprno Fortezv o i i uiirt memoria titukida, J~cieipcritico de las obras de D. Altloaia de Ca~npr~?~?, 1~ de hfontpirlnu, que fu6 premiada jiur la Aeade~niade Buenas Letras di. Biircelonn: y m i s d e pesii B. a y e t a i i o Vidnl g D. biitonio dc Boflirnll, y &"les que ellos 11. Alaiiiiel Miiá y Foiitaiinls cri dos ilrticirlos piiblicadoj en el Diario de l3nreclona on 1854. (3) 1," biro D. 1':ihlo Vallc g Bonet 'o,la biografiade rriiestroili$st;,e pntrzeio q v c escvil>iOpor cncnr6o del Excino. i\yi~iitamieiito8s iinrcclnii;~,con oeasion do 1:iEuneioii cii,ieo-i.clióiosn cclebirt4n ciicsta eilidsd en ,Ir> dc Jtklio <la1857 con motivo dc la tlasl;rcioii de slis eeniz:ls. . . 110 ?ATO% ACEHCA DE Para lo que puedan servir á facilitar esta tarea al que con aunlento de su propio renombre. y para mayor gloria literaria de uuestra .patria la emprenda; para que con más copia de noticias logre con mayor exactitud caracterizar la fisonornia moral de su héroe, y valorar la constancia y el ardor con que se ocupaba en.sus trabajos literarios, y el iiiteres y cuidado con que atendia á cuanto podia realzar su importancia, hasta en la parte material de los tnismos, me atrevo á dar á luz y ofreceros esos nuevos datos, que sobre ser de todos ignorados y de autenticidacl irrecusable, como que están sacados de cartas ocigirlales del mismo Cat)'nany y decopias auténticas de cornunicaciones dirigidas B 6ste por la Real Junta d e Comercio de esta ciudad, han de pareceros. interesantes eil cuanto sirven no poco, si no me engaño, para dar á conocer algunos rasgas (le1 carccter de nuestro sabio .. comr~atricio,corno hombre y hasta como escritor, y por-que se refieren al periodo por ventura más fecundo y bien aprovechado de su vida literaria, 6 sea al que vá desde-la publicacion de los dos. primeros tomos d e las Memorias, esto es desile 1779, á la de sus dos volkmenes últimos, en k92,. en eP cual di6 á la estampa, entre otras obras, los ya mencionados Libro del Consulado y Teatro histórico-critico de l a e l o c ~ ~ e n c española ia ;y e n suma y principalmente porque más que unos apuntes para escribir la historia, son la historia detallada de la rodaccion, impresion y. publicacion de dichas il!lemor.ias. Invitado por la WI. 1. Juiitü de hgvicultura, Industiia y Comercio,' sucesora cle la Real ~iiritade Comercio -de esta. ciudad, que lo habia sido del histhrico consejo de veinte (Consell d e v i n t ) , que me hiciera cargo tlel archivode estas dos últimas corporacioites, que se hallaba hacia tiempo abandonádo y en el k,aybr gesórde?, habin pil&to 9 a n q Ax~osroDE CAPMANS. 441 en el arreglo y clasificacion d e sus pergaminos y papeles, con mejor voluntad que habilidad y conocimientos necesarios para llevarlos á cabo, cuando tuve la suerte d e tropezar coi1 iin voluminoso legajo qrie llevaba en una de sus carpetas el rótulo d e : Espediente de caprnany. Aguijoneado por la curiosidad de saber lo que contenia, desatendí casi por completo, lo confieso, mi principal tarea, para ocuparme en el eximen de los documentos en el legajo conteiiidos. Con sentimieitto eché de ver en cuanto comencé á hojear los papeles que lo formaban, que el tal expediente estaba incompleto; y aun que por de pronto abrigué la esperanza de que más ó ménos tarde daria con lo que en 1.1 faltaba, que debia ser bastante y do no escaso interes; despues que hube visto y clasificado muchisimos de los documentos, sueltos los nlis y sin ordenar, que existen en el mencionado archivo, desconfiando ya d e ver realizados rnis deseos, resolví dar á conocer á esta respetable corporacion, como en este momento vengo á hacerlo, lo hasta aliora descubierto, sin perjuicio, y ántes bien con el firme propósito de aumentar los datos con que voy á tener el gusto de ocupar vuestra benévola atencion, con los nuevos que recogiese, si por ventura la tuviese de dar con ellos (1). Ábrese el expodiente con dos comunicaciones llenas de plácemes y parabienes en gran manera honrosos para nuestro antiguo compañero de Academia. Capmany acababa de JJ. ($1 Ciiarido lcis esta memona ila Academia podia abrigar todavii alguna esperanza de encontrar, reiweltos con otros, los docirmentos que para completar el menciaiiuio erpcdicrit&fsltnb:~n;pero la hrbia.per<lido'ca<icompleta&ente euando rnis adelante, y desprios de Iiaber examaado de paso casi todos 'los papéles y legajos del aicliiua, reni~neié,por motivas de delicadeza, e n 11 de Jimio de 1872 aqUel cargo qi;e liabio desempeñado a i n retribueion desde el <ti de Marzode 1868y que Iiabianceptado por ~lcfeienciailosseñoiesquecompo~ianpor entónees la Jarika , , de In<f~ictria, i\griciiltiirn y Comenio, eri su rnnjor parto conocidos ó amigos mios, $1 2 DATOS ACEIICA DE dar á l ~ t zel tomo primero cle s ~ i siMe~woriashistóricas, y la Real Junta y Consulado de Comercio, en contestacion á dos cartas de aquel de fechas d e 12 de Mayo y de 4' d e Junio de 1.781, que IIO estan en el expediente (l), le felicitaba, y felicitáhase á si misma por ~ L Iacierto ' en haber confiado á persona de tan graiide ingenio la empresa á que con tan feliz resultado acababa aquel de dar cima; por la hoiirosa acogida que 'liabian dispensado á su obra S. M. Carlos 111 y la real familia, á quienes fueron presentados algunos ejemplares de la inisina por mano del Conde de Floridablanca, á la sazon ministro; quien, habiendola leido toda, segun debia escribir en una de sus cartas Capmany,, habia expresado á é s t e e l gusto que tuvo en ello y le asegnraba que iba á hacer gran seilsacion en Espaita y fuera.de ella; 'por los -elogios que con motivo 'de aquella su obra l e bahian prodigado los demás ministros, « á quienes,-sigue escribiendo en una de sus comunicaciones la Junta, copiando siii duda; para más halagar á Capmany, las palabras mismas qite éste, en son de triiitifo acaso escribiría, en una de sns cartas,-habia aquel en las entrevistas que con ellos tuvo, logrado interesar en favor del l->riocipado,hasta el puntb de hacer concebir á la Junta f u n d a d a s esperanzas de ver restaucaclo S? comercio, prolegicaa y puesta la provilzcia fuera d e los tiros de'la $ ) El priatler tomo delas citsdic Hmnorias empaiaria á imprimirse en 1179; pues este cs 1s fdeha que so lee en dicho tamo, crnpleándosc por lo tanto en su inipresion y en la de lii CoZeccdo$zd$plomdtico, que formo. el tomo segundo de la ohia g que & la portada Ilcva estArnpada aquella; misma fecha, unos dos años. Siendo los primeros docomentos que en el legajo de1 Espediente de Capmany se olleuentraii de Mayo y Junio de 1783, se echa de ver desde luego que faltan las nu. inerosac coinuBicaioires que dehieron,pediar entre nquella co;poraeion y iivestro sabio historiador, pLr8 encargarle ñqoellil y aceptar dste el honroso comotiilo de trarnr el eraaúro liistóriio d e nuestras antisuas marina, comercio y artes, y de realizar iiiia abra que 110 menas Iionrn al escritor que con tan feliz acierto la llevó cabo, quc á la coipnracion bajo cttya generosa proteceion se escribió y dió á la estnmpn. D. .\STOXIO DE C ~ P I I ~ \ X S . 113 flauliynidud y d e Ea calumnia;>^ y el! suma por la buena acogida que liailó las dos veces que estuvo en el Real Sitio, doncle, en el segundo viaje, ((tuvo la satisfaccion de oir de boca de los Sres. D. Ataiiuel de Roda y D.José de Galvez, que no le quedaba ya más que Iiacei- A la Junta sino publicar las leyes antiguas del Consulado de mar con el texto original en una coluna y la version castella~iaen. otra)) etc. Mas ¡ay! habian transcurrido apenas dos 'inesás, cuando el que á la edad de 39 años ( l ) ,honrado por el muiiarca, festejado y colmado de elogios por los ministros y personas más notables de la corte, y rico todavía en iliisioiies, dormiase al arrullo de los aplaiisos para soaar con la gloria, dispertaba á las desentonadas voces de la fria realidad que le recordaba la angustiosa sitilacion ccoiiómica en que á la saaon se hallaba, para él más dura y difícil de sobrellevar, en cuanto por lo ilustre de su aboleligo , por la abiindaticia de bienes de fortuna (2) de que disfrutaron sus venerables progenitores, y por el elevado puesto que estaba destinado .á ocupar en la república de las letras, parecia que debia hallar á la fortuna más propicia á dispensarle sus favores : y l o que debia serle ni& seilsible, ya que le heria crttelmente en sti amor propio, le: ponia de maniriesto la iridiferencia del público, asi en Madrid como en arcel lona , hacia el que consideraba, él que con tanto amor lo habia levantado, ser uii m.onumento erigido, más que á .su propia gloria, á la de su patria á quien sobre todo eilcarecimiento estimaba. . ( I ) Capinaiiy iiació en Bnrcelona, á donde hnbia veiiido iestablecerse su Eltmilin, oriunda de Gerons, el 2 a d e Noviembre de (742. (2) .El abuelo de nuestro sabio paisaiio , D: Guillermo de Capmany, que Iiabia abrazado la causa del Arehiduque, en la guerra de sucesion, prefirió perder todos sus bienes, que le fueron confiscadas porel gobierno de Felipe 7 , ifaltar a la fidelidad que habia jurada al prineipc austriaco,y >i suscribir In capitulacionq~~e ánombredesqttel monarca oireeiú el Duque de Nosilles i 1s ciudad de Gerona, dc la cual era á la sazon primer jurado y comandante de la milicia urbana. 111. 1 ,114 DATOS I C E n C A DE La ~ e a lJunta de Comercio Iiabia se5alatlo á Capniany en recompeiisa de sil trabajo, tina pension vitalicia de tres tnil reales anuales, cantidad para aquellos tiempos 110 tan exigua como en la actualidad lo seria; más el autor d e las Memorias, si bien por una parte alcanzaba alguna suma d e la Junta, tal vez por pensiones no cobradas, tenia por otra con~promisospendieittespara cuyo pago se le apuraba; y si en satisfaccion de las primeras le libraba aquella, atendiendo en parte á sus justas reclamaciones, la pequefia cantidad d e 658 rs., no le ofrecia p a r j ateiidcr á , los segundos, ccinteritr se i,esolvia defiriitivamente como se le habia de satisfacer la gratirtcacion acorclada», mds que 6470 rs. , producto de los 95 ejemplares vendidos hasta aquella fecha ( 2 de Agosto) e11 la corte, -«cantidad que, segun escribia. Capmany , no llegaba de mucho a cubrir-el clescubierto en que se hallaba, »- y 400 ejemplares de su obra para que los vendiese por su cueiita. X estas proposiciotres que le hizo la Jiii~taen dos comunicaciones, de l a s ci~ales no existe. en el legajo más que una, contestó Caprnariy con dos cartas fechadas i 27 de Octubre la u n a , y 6 26 de Noviembre la otra, sumamente lacóirica la primera, y escrita en un tono que, al par que el cruel dolor (le quien vé fallidas sus esperanzas, revela el amargo despecho del amor propio ofendido. Aci~saen ella el recibo de los 6467 rs., valor do 1 ~ ejemplares s vendidos en Madrid hasta el 1 de Agosto: dice que desde aquella fecha se habian <(despachado únicamente diez ejemplares, «habiéndose parado despues la venta de tal manera que en «el discurso de un mes no se habia vendido ni un juego; «que segun los cdlculos mercantiles de los libreros se re«pitaba por invendible en el transcurso de un siglo el resto <(delos 305 ejemplares que quedaban, y que ni aun el mis- . «n?oSartchn , -editor, como saheis , de las Mem.orius, - D. A N T ~ X I DE O C=\PU~\XY. 11% «quei.ia eiitrar eri ajoste en Orden á comprar la obra, aun-' «que fiiese con la condicion de jin 90 p. O / , de rebaja.?) La segunda carta escrita en so11 mucho más acentuado d e queja, y en cada iiiia de cuyas lineas se manifiesta claramente el despecho que movia lil pluma del que las trazaba, e.s notable, ya como revelacioit del carácter alguii tanto agrie de iiuestro Capmany, ya por las noticiasque encierra. Insistiendo en lo de la. cesion d e los 400 ejemplares .de lis. Memorias l~istóricas,escribe con ruda franqueza al Secretario de la Junta de Comercio que exprese á esta, «que si. «aquella resolucion se dirigiO,-son sus palabras,-no á recgalarme volúmenes, sino a procurarmq alglitia subvencion « 6 socorro, esta generosa intencion , por habérseme cornu((nicado fuera de tiempo, y con tina restriccion que jamás (( pude yo prever, no ha producido iii podrá en adelante pro. «ciucir efecto alguno eii utilidad mis.» «Esa Real Junta, continúa dicieiido, segur1 V. me expresa, «me cede la referida porcion de ejemplares de los existen«tes aquí, esto e s , de los iilvendibles, despues de haberse «desflorado la veiita primera y m i s copiosa hecha en esa «Capital, que era el único producto coi$ qiio'se debia coiitar «en materia de comercio d e libros. Como yo en virtud d e «otros avisos, ya de oficio, ya confidenciales, que habia re-' « cibido anteriormente, tenia fundamentos para creer q ~ i e «no eran Iibros, sitio el producto de los que se vendieseil, , «lo que se me rlonaba, sin determinar el lugar de su des((pacho... pasé el dia 28 de Octubre anterior á cerrar con«trato con D. Joseph Benito Gusta, vecino de esta corte, ({(este contrato fué pava 61 como pronto veremos causa (le ~irinumcrablesy gsavisimos sinsabores), eediéiidoie en vir«tud d e escritura formal de traspaso , d producto de los .<<librosque Iiasta~aqueldia s e hubiesen vciidido en es8 c~Cal>ital,y eii adelante se vendiesen hasta el iiiinisro cle 2% , , . ' DATOS ACERCA U E «doscientos veinte juegos, á cuenta d e los que percibi diez «mil rs. efectivos para subvenir ir. mis urgencias y empeños, «que tenia contraidos con los cuatro a ñ o s y medio que ha ((durado la composicion de la obra, con la esperanza de la «remuneracion que siempre debí prometerme de la inunifi(tcencia de la Real Junta.» Vuelve á insístir en lo ilusorio de. la cesion de los ejem-plares, diciendo que tos libreros no se los quieren á ningun precio, repitiendo que no se ha vendido ningun juego en cuatro 6 cinco semanas ; manifestando que no hay probabilidad. ninguna [le que se despachen dos en cada: año, y concluyendo con estas palabras que son la más amarga al par que desconsoladora queja d e quien pocos meses Antes calilicaba, y con justicia, su obra de mon~nnentolevantado á la gloria de su querida patria; «De este modo, decia, solo «se me ha11 cedido grandes fardos de papel invendible, que «no pueden servirmo sino' para embarazar mi casa: y así «desde ahora pongo á disposicioi~de esa Real Junta los 300 (<ejemplares existentes en casa del impresor d e los. 400 cedidos.» Mas como si se arrepintiese luego de haber. arrojado sobre el papel expresiones tan agrias, y comprentliese que habia andado sobrado descortés con la carporacion á quien tantos favores y clelicadas atenciones debia , añadia en seguida suavizando algo el tono: « En esta suposicion y en «la que el referido D. Josef Benito Gustá , en ,virtud de «las condiciones de la escritura de venta que le otorgué, «está dispuesto, denEro el término i~erentoriode un mes, á «proceder contra: mi persona y bienes, que tengo obligados, ((espero que esa Real Junta, Y B que V s t a aquí Ire merecido « s u cónfianza y. sus elogios, se mueva, 8 por honor del niisc<mo'cuerpo, 15 130' crSdito do la Patria, á compaclecerse de «mi triste y delicada situncion ; buscando aqitellos medios .* D. ASTOZIODE CAI)~IANY. ti7 «que hagan efectivas sus primeras intenciones, para evitar« me tan terrible sonrojo y mortificacion , que despues d e «ocasionar la ruina de mi casa, no puede dejar de escandaxlizar al público de la Corte y de esa ciudad. De lo contra' crio me ver6 obligado á sacrificar la peosi&l vitalicia, cuan« d o encuentre quien me la compre por la suma de mis em« peños. Entónces peiision y gratificacion se habrán resuelto «en humo; y yo tendré la estéril gloria de.haber consagra«do mis sudores, vigilias y talentos, por espacio de cerca «de cinco años, en obsequio de la Patria j de esa Real Junta, por mucho ménos recompensa efectiva de lo que imporctarian los provechos é intereses que en todo este tieoil>o «hubiera logrado con mucha ménos aplicacion, destinándola (cá otros objetos.)) Acompaiia 6 esta carta un estado que demuestra l o que dejó de ganar en los cuatro años y medio que le ocupó la redaccion de las Memorias históricas, y la recompensa que liubiera podido aspirar atendiendo tan solo al trabajo en, ellas empleado, ó dedicándose á otra clase de tareas, apuntando lo que dejó de percibir, por tener puesta toda . s u ateiicion en aquel trabajo, á saber: 1 . 0 Dos mil setecientos reales que le. hubiera valido el oficio de Revisor de la Real Academia de la Historia, que le fué ofrecido en 1780, qiie diira tres alios, y prodiice en cada tino 900 E. . . 2.0 Tres mil reales que le habria producido cuidar de la edicion de las Obras d e SepiLlvcda, encargo que debia desempeñar con otros cuatro académicos, y que valió á cada uno d e ellos 1000 rs. cada a60 en los tres que duró. ' 3.0 Lo que le habiera valido las reimpresiones de la E l o . sofia d e la elocuencia (1) y el A r t e d e t r a d u c i r el fra?z, (1) Vio la luz pública eii Madrid en 1117. - ces ti), para las cuales tenia preparadas varias adit:iones y correcciones (2). Estas dos 'obras produjeron á su autor cuando las di6 por vez primera á la estampa 40 doblones aquella y 30 la i~ltima. 4 . O La gratirtcacion que hubiera percibicio por la correccion y aclicion del Diccionuvio Histúrico-geogrhfico en tres tomos, que te tenia encargadas la Compañia Real de Libreros de la Córte, y que c'~lculaba en 50 dobloncs (3). 5.0 I,o que hubiera ganado en,los varios encargos y agen-. cias q i ~ ese l e eiicomendaron, y qiie no pudo aceptar por hallarse ocupado eii escribir aquella. obra. Sigue á esta exposicion de perjuicios el c,ilciilo'de lo que le hubiera valido el trabajo 'material de correccion de los 174 pliegos de que consta la 'obra, cuyo trábajo , segun el mismo indica, se pagaba á la sazon t'i 50 rs. el pliego de marqiiilla graiide, y de los tratos, cijustes y debates con pintores grabadores, estarnpadores de láminas y furididores de letras; de una correspondencia do cuatro años; de ir por más (le un año todas las tardes despues de comer á la Real Biblioteca para registrar los libros que no tenia á la mano, etS.: cle todo lo cual deduce que «aun ciiando no se «le quisiera considerar más que como un artista, habria ((nlerecido siquiera la peiisioii temporal que gozaban los mana cebos que mantenia la Jtinta en la escuela de Martincz, cuyo «importe, decia, eii el diseiirso de cuatro años ascentleria (1) Madrid, irripreritade Sanihn, 1776. ("1 Con lar adiciones 4 ilustracioiies que teriia escritas ptrn la Riosofiu de la Elocuencia, este libro, segun Úecia el-mismo Capmany eri sucatálogo do obras impresas 6 in4diias que escribió en 1812 eii Cadiz. debis ociipar en su seyunda eriieion tres i.cces inns espacio que la primera. Reimprimiosc on efecto en Lb!!dres en 1813, en u n solo tomo, poro bastante abultado. (3) Acaso piido poco tiempo despues de escrita esta especie dc Memoria oneargarse de ese trz~bajo.,ya ~ U e11 C 6" citálogo $8 da como corrector y rsfundi4oi do itqerl iJiccio>iat.io,iluc sc priblicd esi DIaJrid cii 1183. . . . ~, u. . \ i i l ' í l ~ I ~U:? Cl\l>~lr\SY. ,149 <<aldoble de l o q u e ahora percibo efectivamente d e la venta ((de los libros.)) «Como en esta cuenta, añade, no entra el trabajo iiite«lectual y el inérito inti3inseco de la abra, que no admite ~pre'cio,ni iijo, ni prudencial, debe estimarse la pension vi((talicia como una dcmostracion patriótica coti que ese Ilus« tre Cuerpo quierebonrarla memoria y talento de un autor.» Mientrzs acosatlo por sus ~iecesidadcsy celoso de su buen .nombre, á que podia atentar su acreedor exigente, acudia en d,emanda de proteccion y de mts digna recoinpensa liiiestr,o sabio co~npatricio6 esta Real Junta y Consulado; y secruzaban entre esta y la General de Comercio y Moneda, -<le la cual los consirlados d e provincia en cierta rnanera det>entliai~-, algunas con~un.icacionoscuyas fechas revelan. ménas actividad é interés que la que el asunto requeria (l), sobre seria más conveniente señalar y dar de una vez al ..hotor de las Memorias uilagratiricacion digna del mérito d e esta obra,--que e w á lo que la Junta de Madrid se inclinaba,-que cargar con una pension vitalicia los fondos del dereclio de Periage que, fuiidándose en lo escasa que andaba entói~cesde recursos, era lo que parecia d e rnás fácil realiza'cion á esta Junta, y que fué el partido que s e adoptb por ultimo; miéntras, repito, ventilabase ,con injustificable lentitud este asunto , cu.mplíase' el plazo de un mes en que clebia satisfacer Capmany los diez mil reales que Gustá le habia prestado; y éste, que z i lo que parece estaba resuelto á posponer y sacrificar al cobro d e esta cantidad los títulos de paisano y hasta de amigo con que Caprnany le honraba, acliaa en fecha d e 2 de enero de 1782 zi esta Junta y Consu.lado por medio cle su apoderado en esta ciudad, D. Cayetaiio 11) La primera eontestacion B una de esta Jiirita partic~ilarde Comercio de! 20 dejunio (?) es de (i de Sctiembro, y issegundade22 de bieiokbre de.1781. fis!tai% e11el erpedietite Iris cnm,iniezcio,ic%de esta Junta á la Geiikral de W~drid. 320 DATOS ACERCA I>L Radia, pidiendo el embargo de la pension vit~liciadevengada desde principio del año 1782, y que devengase Capmany en adelante, hasta que le satisfaciese este lo que le adeudaba. -Y h e aqui, Señores, envuelto nuestro ilustre paisano en un litigio que dur6 iiiios cinco aiíos , que le ocasionó innumerables sinsabores, y que di6 Iiigar á que se cruzaran entre Capmany y la Junta Particular, y entre esta y la General de Comercio y Moneda un gran número de comunicaciones y cartas, de bastante interés algunas de ellas, para que, siquiera en estracto, merezcan ser conocidas. Así, por ejemplo, lo tiene y no escaso, como dato para estudiar el carácter y el estilo familiar de Capmany en su correspondencia no literaria, la carta que escribió al Secretario de esta Junta, D. Juan Vidal y Mir, en contestacion á un oficio de este de 12 de enero, en que Ic participaba á la vez que la Junta General aprobaba lo de la pension vitalicia, y que el apoderado de GustA habia acudido al tribunal de Comercio pidiendo su embargo. He aqui como se expresa Capmany respecto de este último extremo. «El segundo punto, tlice, se reduce en el hecho á que ((este acreedor caritativo y moderado, para reintegrarse d e ((diez mil reales que percibí efectivos de su mano me pide «trece mil; y para conrpensarse de los riesgos de la co« branza de este capital y ganancias con una cadena de nue«vas ganancias, pretende desde el tercero dia que desem«bolsó su dinero, que le venda la pension'de los referidos «tres mil rs. anuales, con más los trece meses ya cddos; « e s decir, para iio escandalizar á los moralistas judaico~, pretende asegurarse dc contado seis mil y trescientos rs. a de premio por el dcseinbolso de diez mil eii el tkrmino de «dos meses, y despues seguir gozando diirante mi vida d e «los tres mil reales cada año. Mo promete dos mil reales «de guaiites, rnc halaga, me injiiria, me amenaza, me c,a- D. ,\x,rOuro nr: C:.ir,\rxu. 3 91 ((lumnia, me aconseja, me quiere sacrificar y me dice que «-es el verdadero amigo que tengo, etc.» ¿Si se acordaria cuando esto escribia del lindo capricho poético El MurciéZaga atevoso del ilustre salmantino el P. Mtro. Gonzalez, y se cornpararia, él, puestoen manos de sudesapiadado acreedor, á la infeliz ave noctupna condenada á ser presa y juguete de desalmados mucliachos callejeros? En esta carta, despues de manifestar que, si lo tienen a bien los Sres. de la Junta, podrá e ~ p l i c a r ~ elos s procedimientos de que contra él se vale, y las frias intenciones y cabilaciones de aquel «sublime especiilador», y su ignorancia en ((contratos hebráicos », pide á aquella Coiporacioir e que se sirva pagar <le contado á Gusta los diez mil rs. coi1 los tres mil y trescientos que tiene ya caiclos, descontáiidolos de su pension , sin perjuicio de ventilar desltiies si debia de justiciaibonar el ,30 'p. o/, que le queria aquel exigir por haber salido fallida la venta de 'los 200 ejeniplares que 1e.tenia cedidos». Esta carta es de 6 de Febrero. Como la Junta no accediese á la pretension Ge Capinang, escusándose Con la escasez de fondos, efecto sin duda de los grandes.gastos que le ocasionaban las obras del suntuos o editicio de la casa Lonja que estaba por aquellos años lavantando , y K que era tal, hecia en su comuoicacion, que sus vocales y aÚn,sus cónsules, cuyo trabajo diario es sumamente penoso, se hallaban tres años hacia sin sueldo J J , debió aquel acudir al' mismo monarca, fiado en el aprecio en que le tenia el Conde de ,Floridablanca, ya que éste. con fecha de 8 de Octubre, se dirigia por brden de Cnr-. los 111 á la Junta y Consiilado de Comercio, preguntindolc so6requé fondos se podria asignar a Capmany Ia renomeracion que su obra de las Me»lorins históricas merecia, con lo cual además se le animaria á q u e continuase ocupándose en otros asirntos de no qeiior importaiicia y lil. 45 . di32 d n.vsor: . a c e n c nr: .ritilidad para e1 país. Pero apesar de tan poclerosa recomendacion, no ~ L I Oposible á aquella, por más que desease corii1-)lacer el soberano, dar en favor de s u pensionado uiia respuesta categórica y satisfactoria i la pregunta que en su comunicacion el ministro le hacia. kiarcliaba entre taiito el litigio con viento próspero para -C;ustit, cuando e11 18 de Marzo dc 1783 se le ofreció á la Junta preguntar á Capmany en que estado tenia la Adicion ú las Menzoricis históricus d e l a s leyes y ordenunzus del a n t i g u o Consulado, qiie le habia sido encomendada en carta de 12 de Enero del año anterior. La contestacion, que es del 29 (le Marzo, de tal suerte revela el e&ado de iiiimo, sobremanera quebrantado y afligido. por tantos desengaños y contiariedacles como habia experimentado nuestro sabio escritor, que creo me habeis de agradecer que la trascriba casi entera. «Reflexionando, dice, sobre elcontenido del acuerdo <.de esa Real Junta de üomercio, solo puedo asegnrar esos ((señoresque i i a verdad en el calor de la composicioii de las -«fiIenzorias, y animado despues coi1 los aplausos que en la .u Corte mereci0.mi trabajo luego que salió i luz, habia con-. ~ c e b i d ola idea de publicar integras y originales las leyes ~<anti,gtlns ,de eso insigne Consulado con la version castella-(pila castiza y genuina; adornando esta edicion con un preí(liminar l>istórico y legal de ese tribunal y de sil Código a mercantil etc, . . . Pero como posteriormeilte IleguÓ á en«.tender que esa Real Junta con los apuros d e la guerra,«la de Espalia y. Fraiicia contra Inglaterra,-se hallaba «exhausta de caudales. . suspendi toda ciiligencia y taniea ulterior conducente al plan ideado. A este motivo so «añadió una fundada descoufi?nza de mi acierto, tanto.en « e l desempeño de la obra, corno en ltallar los medios cle n'sitber agradar i los Sr3es: Vocales de ese Ilustre Cuerpo, . icsiti'. cuya segriri/lad la pl.ctma se me ca.yera ile la mano. .. , ' . 1). l s ~ o z i oi: C:U~I~ASI-. 12% «Últimamente los trabajos, persecucioiies y me~ioscabos ((imponderables que de parte de mi charitativo paysaiio «D. Josef Gusta han sufrido n ~ persona, i casa y honor, u con escáiidalo público. de esta Corte, para asegurarme In «la pension vitalicia d e 3000 rs. y. defenderla d e la voraciadad de este buen Christiano, me han acobarctado todos mis ((antiguos brios, abatido el espiritu , deteriorado mi salud, «quebrantada ya por mis antiguas tareas, y cortado tal vez «para siempre la carrera á mi fortuna: de modo que nii? «contemplo ya un viejo de setenta años, que solo ha vivid.o, ((para los demás.» . «Sin embargo, añadia en seguida cual si aquella excitaciot-t d e la Junta, á l a manera del estremecimiento causado por un ctijspazo eléctrico, hubiera impreso unn fuerte sacudida á su ánimo aletargado por el abatimiento y entumeciclo por elfrio del desengaño; «sin embargo, no he perdido ini ((sincero amor á la Patria, ni ini eterna gratitud á esa Reat «Junta:.en cuyo concepto puede V. liacerla presente; que si. « el1 algo m e corisideritse aúti útil , y conciviese neces~iria.í. ((importante la publicacion d e la obra proyectada, se sirva «darme sus claras y prccisas instrucciones conducentes {L «este fin, para llevarlo á 14 devida concl~isio~i , manifestin«dome s u ánimo y .sus ideas., sin cuyo conocimiento prévio «jamás emprenderia &l menor trabajo. . . Sirvase V. etc.). A los sinsabores' que leocasionaba aquel malhadado litigio, añadiase la pena que le causaba verse acusado por esta Junta d e Comercio, segult los rumores que i sil oido.llegaban, de haber procedido con sobrada procipitacion en veiider á su acreedor la. peiision . de los 3000-rs., siendo asi que no existia tal venta, y el tener que sincerarse ante aquella: corporacion, cuyo aprecio eii tanto estimaba.; á cuyo fin le remitia, copiadas por SII propia mano, las más interesantes piezas del proceso, y qtie formai~.uiiüparte y no la rnénos voliimiil6sa del legajo que tengo A la vista. . ' a o:,ros . 4 ~ C E i < C»!: Al poco tiempo no obstante, vieiido que no tenia más arbitrio para entrar en el goce de la I>e~isionde los 3000 rs., de cicya renta disfrntaba interinamente D. Josef Benito Gistá, escribia Capmany á la Junta q u e le fac~iltasepara venderla a aquel á caria d e gracia, para redimirla despues e n virtud de la clUusula del pacto de retroventa que le concedia su. contrario ; único recurso , segun él creia , que en: ,k24 . . aquellas circunstancias le quedaba para salvar su pension sin esperar la clecision d e un juicio ordinario, que seguramente terminaria la disputa con crecidos dispendios. «Tennrgo sugetos y amigos generosos, añadia en su casta, qiiea me ofrecen el dinero-necesario para redimir dicha pensioil. deseosos de verla otra vez en mis nianos.». Babia transcet.rido entre taiito'más de un año desde que la, Junta por media de s u Secretario le habia manifestadosus deseos d e saber en que estado s e hallaba la redaccion de. ias Acliciones 6 l a s Memorias históricas; como en todo este tiempo y despues de su carta del 29 de ~ a r z ono bubiese Capmany hablado más de esbe asiinbo, le escribia aquella de nuevo- en 2'7 de Abril de $784, recordándole que h.i~ensionasignada, lo habia sido con la prevencion de que habia de dedicarse al trabajo de l a s antiguas iMernorias y d e la adicion á ellas &e las leyes y ordenanzas d e este antiguo Consillado, y .rogritrdole que d i j s e si.eii efecto se ocupaba en ell$ y el estado en qiie tenia dicho trabajo en atencion que «del contexto de la carta de 29 de ~ a r z del o ((año principiado,-son palabras (le la comiiiiicacion,-parece «debe inferir IaJunta que lis.; enfermedades y disgustos le « ha11 entibiado la disposicion y ánimo de emprender esta «segunda , obra.» A los pocos &as, por ventura B vuelta de correo, contestaba Captriany, diciendo al Secretario de la J ~ i n t a«que se (<sirviesehacer presente B esta, qtie asi como nadie le ex- 3 . . D. Awozro DE C A P ~ A N S . 125 «cedia en el deseo de ilustrar las cosas de la patria, como^ (110 tenia acreditado; así tampoco le atormentaba otro sen([timiento sino el de que las tareas cada vez más pesadas (<desu oficina ( l a de Contaduría general de Correos), y la «delicadeza de su complexion , algo deteriorada. le hubie<< sen privado del gusto d e dar una nueva satisfaccioit á aqiie~ l l Jau n t a , que teniaja bondad de esperar tanto de sus <<cortasluces y-talento.)) Y cómo de nuevo le escribiese por acuerdo' de la misma su Secretario, pidiéndole que le remitiese copia de la escritura de venta con pacto de retro que coi1 Gitstá habia firmado, y le dijesa para cuando creia poder dar por terminada su Adicion ú l a s Mernoiias, contestaba con carta del 12 de Octiibre con el desenfado de quien s e siente lastimado en su amor propio de escritor, coi1 estas palabras: «no puedo «fijar tiempo ni thrmioo en briien i uii trabajo intelectual, «que.ito se puede calcular por jornales, ni me di^ por varas; « y con más motivo recayeiido en un sugeto menoscabado «en su salud,.rodeado de ociipaciones diar'ias y precisas de su aobligacion, y destituiclo hoy de muchos ausilios y dociigmentos . . que l e hubiera facilitado el S r . D. Mailtiel de Ro« d a , si viviese; pero no por esto quedará defraudada mi «Patria de este nuevo honor, -cuyo objeto no pierdo de vis«ha y lo deseo tanto como la misma Junta; á cnyas órdenes. <<etc.» Por entbnces rlebieroii enfriarse las relaciones entrc (?al)inany y la Junta, R consectteilcia sin duda del disgusto con que verin esta la venta á 'Gusta, por más hue fuese á carta de gracia, de la pension con que babia querido, sino recompensar, agradecer el antigno'trabajo de'las Memorias, y estimular su celo y aplicacion para que llevara a cabo el que teiiia entre manos; Ilegnrido aquella hasta el extremo. de proponer á La General de Comercio y Morieda la suspen- . 126 DATOS ACERCA IIE sion de aquella pension , « y a que Capmany no se aprovechaba de ella)). Lo cierto es que 170 aparece ni una sola carta d e éste entre los papeles pertenecientes nl año de 1785; y si bien no es probable, y hasta hay indicios para sospechar que no se interrumpirian enteramente las comunicaciones eih-e él y su favorecedor el Consulado, debieron ser estas ménos frecuentes y no tan cordiales. Adviértese en cambio que nuestro paisano vá encontraildo, más deci- . dida proteccion eri la Junta General superior de Madrid a medida que vá flaqueando el apoyo que hasta entbnces habia tenido en la nuestra ; hasta e l p u n t o de ofrecerse aque- lla superior corporacion a cuidar del cuniplimiento d i la promesa de c a p a n y , (de qiiien dice que está pronto á ejecutarla), de publicar !a Adicion d las i ~ e ~ o r i u ys d; e proponer á esta Junta de Come~ciola extincion de la pe~isiort anual, en el caso d e hallarse en disposicio~i de hacerlo, mediante el pago de una cantidad alzada, que era á lo que se habia inclinado siempre la de Madrid, p.-qrte fué el partido qiie por fin se'adoilt6, ftjáiidola eii 40,000. rs.; bien que considerando dicha cantidad, no tan solo como recompensa por' el trabajo de las Meinorias i&istúricusya publicadas, sino tambien como estimulo para la obra qiie estaba aquel escribieiido. Este cambia eii el modo de percibir Capmauy la recompensa i sus talento, laboriosidad y,coiicieiizudas y pacientes tareas debitlo, dió tambien un nuevo giro al pleito. que entre él y su desapiadado acreedoi. aun segiiia, ocasionando incidentes que solo interesan en cuanto revelan la apurada situacioii en que s e hallaba nuestro historiador, victima de su falta de co~iocimieritoe p «contratos hebráicos)), segun (le coi~tinuorepetia, y de las malas artes de su acreedor, diestro y poco escrupuloso en usarlas, y que al fin de aquel largo litigio se habia embolsado más del doble de la cantidad ljiestada. '' D. AXTONIODE ~ ~ ~ 3 1 ~ h . t . ' . 127 Por entónces fií? cuando Capmany vino á esta ciudad provisto de una especial Urcieii del Monarca para examinar sus archivos , y principalmente el de la Corona de Aragon , y escoger los documentos que debian servir para ilustrar el tomo segundo de las fiiernorias históricas. ~ u n ~ su b epermanencia aquí fué corta, y no pasó de cien horas iitiles , segun él mismo escribe en el prólogo del Suplemento ¿I d i c h a s diemorias , que forma el cuarto tomo de su obra, e l tiempo empleado en investigar y elegir aquellos documentos ; por la variedad y abundancia de los recogidos: y que, segun propia confesionde Capmany, se le vinieron muchos de ellos á las manos sin buscarlos, se vé que si rica era la mina que beneficiaba, grande era tambien la laboriosidad, destreza y acierto en buscar, apreciar y saber elegir los tesoros del que habia acudido á ella. Capmany no hizo ~ n á ,. s como quien traia el tiempo tasado y tenia que volver pronto á SU destino, que dejar anotado lo que debia copiarse. Este delicado trabajo lo encornenclb l a Junta de Comercio al que era á la saion su archivero, D. Antonio Juglá, y de cuya laboriosidad é inteligencia para el desempeño de tan honrosa tarea podia aquella corporacion responder en vista del acierto con que á la sazon se ocupaba y de la diligencia que ponia en el arreglo de su archivo. ~ e r m i n a d oen 1786 el .pleito y cobrados de la Jutita de Cornercio 25,000 rs., que eran los que, satisfecho á s u acreedor, le quedaban d e los 40,000 rs. con que habia sido por lin redimida la pension vitalicia, Capmany pudo- consagrarse con la necesaria tranquilidad de árrimo a l c l i m p l i ~ i e n t odel ho~irosocompromiso que con las Juntas general y particliLar de Cornercio y con el público tenia contraido. De cuaribien aprovechados. fuerow los años de 1787, 88 y 89, sori i i i ~testirnoriio los tomos de las Memorias y [le su respectiva Coleecion cliplornliticn y el L i b r o del Consulnc1.0. 131 mis. ,128 ' U..\TOS A C E ~ ~ S DE A rno Capmany no acierta a disimular, por más que se esfueyza eii ocultarlo bajo el velo de su natural modestia, la estimacion en que tenia su trabajo, de cuya terminacion daba parte á esta Junta en 28 de Febrero de 1789 en una carta que no os ha d e pesar que reproduzca integra. « T e n g o la satisfaccion; escribia al Sr. Baron de la Linde, rcinteiidente erttónces de esta provincia, y como tal presidente crde la Junta j e Comercio, tengo la satisfaccion de haber [c concluido ya las Adiciones, tanto tiempo ha deseadas, y «auii solicitadad por esa Real J i k a de Comercio, á las Mercmorias d e l a a n t i g u a M a r i n a , Comercio y Artes d e «esa c i u d a d , que de sil órdeii publiqub en 1781. «Yo espero que si aquella prin;era obra fué del agrado «de V. S., y de todo el Cuerpo de q.ue es V. S. Presidente, « n o lo seráii niénos las Adiciones presentes, ilustradas coi1 «nuevos apéndices y suplementos de hechos y cosas tan ig«noradas como preciosas, que acaso merecerán uiia mis (rgeneml aceptacioil del público por las materias que en sellas se tocan O iliistraii. « A fin de que V. S. quede pleriamente enterado del noe~ v trabajo o que he hecho, y la Junta tenga .una idea antiacipada de la forma, varietlad , órdeil y extension de estas «Arliciones y de los ramos diversos que abrazan ; tengo el icgiisto de acoinpafiarle u11 índice general sitniario de todas <(lasmaterias en qrfe sedividiri esta nitova obra, ytie corn«prende hoy 1800 hojas en folio de manitscrito , para qiie «vea V. S. t u o no he omitido dilige&ia ni trabajo en dejar «completamente acabado este ramo de Iíistciria política y «económica del Comercio, que tanto honor hace al Princiu pado, y a ese Corisulado y Jutita así antigua coioo moderna. ((Creo igi~alrneiiteque esta tiiieva obrn~merecerála acepatacioii da esta Jutita Getieral, á cuyos revisores, que tiene «nombrados para su examen, debo presei~tilrla,para que de ' a Jl, ASTOSI«i>r; C:.~rsrns\.. .]2$+ . «lo q u e resulte de su aprobacion so pase it esa Real Junta ((particular el aviso y noticia-, para que no sea solo mi dic«támen el que haya de responder del mérito é importaiicia «de este trabajo,. «Yo cuidaré de su impresion coi1 la misma aplicaciora «personal que la primera vez, siguiendo el misniotamaño, (ccaricter, forma, y ortografia para uniformar la impresion ((de los .dos primeros tornos con .la de estos, que no podrin «ser rnénos de dos. Solo falta que el papel de estos Últimos ,«korresponda al de los primeros. en tamaño y calidad, pos«que entónces lo mandó fabricar expreso la Junta, y seria «ahora gran disonancia que la obra siguiese con papel de «diversa S inferior calidad e n p e s o , pasta y blancura. ((Es cuanto se me ofrece participar ;I V. S. -e11cumpli«miento (te la palabra -que tengo dada á esa Reai Junta., la <iciial.espero me haga la hoiira de creer que la tengo desnempeñada hasta donde alcanzan mis fuerzas y enteodi«miento, y qiie y4 no deseo más qiie saber si habré.acertadu ((el1 servirla en sus:ideas patrióticas , de qiie hasta a h o r á ((ningilna oti;a.Provincia ha dado un exemplo de esta natur<raleza. Me ofrezco &c.» Galaiite y generosa l a Iunta con el Autor de las A,fefno.iias,*no tan solo le manifestb su satisfaccion por la concltision de su nueva obra, dándole de paso. las gracias su . por . trabajo y amor á la pátria, sinó que dejó completamente á so discrecion y voluntad todo lo relativo i la impresion de. la misma. Desde entói~cesfueron frecuezitísimas las comiinicaciones entre ella y Capmany, por las cuales se puede seguir paso á paso y casi dia por dia la historia de la impresi011 de los tomos 111 y IV de las Mernorins y de los dos . . del Consulado. Ved a h í , Señores; algunos 'de los datos, sacarlosde la. correspondencia e n t r e aqiiella Corporiicion y n~iestrosabio ' 111. $ti í30 , OATO; A C E f i C A ill?. paisano, que más l)ueileii servir para ilustrar su biografia y dar á conocer el amor ; el verdadero amor de padre con que ateiidió á dar todo el realce posible á la parte inaterial de aquellas sus obras, en que cifraba, con razon, las esperanzas del alto renornbre que debia alcanzar dentro y fúera de so . . pátria. En una carta suya dei 8 de Abril en que, contestando á ,otra del Secretario de la Junta, decia á éste que calculaba q u e , hacieiido para la impresion de los dos tomos primeios tina t,irada de 1500 ejemplares, se itecesitarian 500 resmas de papel , que dgbia ser tambieti , como el que se empleó antes, de fabricas catalanas, concluia diciendo : a El « s r . Conde de Floridablanca tiene en s1.1poder el Discurso *(prelimiiiar y la traduccion del Libro de%ConsuEudo iliis«ti.ailo, pues- ha qriorido examinar esta obra en que ha «manifestado mucho tiempo ha especial interés d e verla-con«c,luida, para informais á S. M. á fin de que acepte la deii dicatoria, como la 'aceptó su augusto Padre de los dos «primeros tomos. «Este motivo , tan satisfactorio para la Junta y para esa «Capital en las actuales circunstancias: ha retardado la «preseiitacion (le dicha obra á esta ,Iurita General, lo que «so efectuará despues , pues miro como iiiuy importante ((que al nuevo y piadoso Monarca demos este testimonio de «obsequio y homeiiaje.~~ ~~ . . Entre los detalles da la impresion de sus iibimas obras, .:e¡ que parece haber merecido la preferencia de Capmany, -y en que puso mayor atendon y esmero fue en lo relativo& :las cabeceras, Iloroiies y virletas con que ,"al igual de los ,.(los prirneros to~iios, debian los iiltimos ir adornados. En iiiia. carta de 5 de Agosto destinada casi esclusivarnente e s t e objeto, indicaba al Secretario de la Junta, designándolas n n a por una, cicales de aqiiellas podiari servir y cuales de- . -D. AXTOXIODE 1 CAP'IANY. 13u' bian ser retocadas ; y como, segun el plan que teilia concebido, era necesario inventar tan solo una viñeta nuev'a..para.el Libro del Consulado de Mar, decia acerca de esto: «Yo ((cuydaré de que se haga u11 dibujo primoroso qile abraza (cuna idea magnífica y verdadera, en la cual se figuran las ((diversas iiacioiies y Repúblicas de la edad media qiie toma«ron de fa antigua Barcelona sus leyes marítimas; Tengo ya«comunicada la idea B dos profcsores para vor cual de ellos ~ i n satisface e y copia mejor ,mi peiisamiento, d e , tres que «be propuesto &c..» Algunos meses despues , en 9 de Diciembre, ( y la causa de.'este retardo era, segun escribia él mismo el haber esta-. do ocupados los artistas d e Madrid e n los preparativos de^. las fiestas para la jura de Carlos I V ) , remitia á la Jiinta el. borrador d e la viñeta alegórica que debia figurar al frente. de la tradriccioii de las leyes del Consulado., ((cuyo dibujo crcnlificaba de muy noble, sencillo, elegante y con ayre del ((antiguo ,gusto griego.» Vosotros que lo coiloceis podreisapreciar á que altura llegaba en el juicio de las obras del arte plástico de la docta antigüedad quieii sin embargo, como su amigo. Jovellanos, no participaba acerca del llamas ~1.1s contemporáneos, do gótico de las p r e ~ c u ~ a c i o i ede y que como aqiiei, aunque menos detenidamente, Iiabia es-. crito. algunas reflexiones sobre la arquitectura ogival ( I ) . , para aquellos tiempos nuevas y para muchos de sus lectores atrevidas. y e d ahí como en la misma carta explicaba A la Junta la represeiitacion de aquel dibujo alegóricol.. . «Bajo el concepto de u11 primitivo Código d e Comercio. ((marítimo, formado e n Barcelona, y adoptado por todas « l a s nacioii&s ,del Levaiite, se ha ideado el presente grupo « en que la ~ i b s aThemis con los atributos de la Justicia y (1) V. el tomo 111 dc las ~Ilernovias,pig, 8 l i . . ,132 T).*TOSA C C l 1 C Di.: Equidad, criada y amparada por Neptuno , suprema deiudad de los mares, que ha descendido de su carro, entrega r i Mercurio el libro de las leyes para que las lleve á las «regiones del Levante, @prado por los rayos. del sol na(rciente aliuyentaiido las tinieblas, A. fin de simplificar la «idea, la misma Themis representa & la Ciudad de Barcelorcna, por medio del escudo de armas en que apoya la mano (rizquierda. Como no caben todos los atributos de su minisn terio en una misma mano, se añadirá á un lado del escu«do un genio que le tenga la espada 6 gladio. El Libro de6 (c Co~zsuladoque recibe Mercurio se figurará más volumirio«so y abierto, con hojas sueltas que le den un ayre más tc desencogido : el fondo del quadro serA un mar bonancible « y cielo co* celajes.» La alegoría de cuya iuvencion t a n satisfecho se muestra nuestro escritor, podia ser ingeniosa y en sticoncepto. de interpretacion natural y clara. Much.o clrido, sin embargo, qucla inmensa in.ayoria de los qiie se hubiesen detenido A averiguar lo que representa la viñeta, que pone al principio de nuestro antiguo Código maritimo, acertardn á descubrir en ella la idea que se propone expresar s u autor, á no haber este aclelailtado á explicarla en las primeras páginas de dicha obra. Por ventura no falten quienes se aclmiren de ver al grave autor de las M e m o ~ i u socuparse, á la edad de cuarenta y siete años, en esas que calificarán de nonadas y puerilida, des, cual si fuera tino de estos literatos noveles que cifran las esperanzas del éxito d e las primerizas producciories de su ingenio en la blancuradel papel, elegancia de lo8 tipos, p- novedad y belleza de los adornos: mas pwa vosotros que sabeis, muchos por propia experiencia, el especial cuidado, cl casi paternal amor con que atiende todo escritor, aun e L de mis levantada ilombradía , i revestir de todo el aparato cxtoricr posible los productos dc su taieilto y de sus estuK Ll. Ax\;roxro DE C.APII.*ZY. 133 dios, tia inferior al esmero con que atiende. una madre al traje de sus hijas más queridas; cuidado y amor que aumentan en muchos con los añas, ya que con ellos parece como que crece la estimacion que á los últimos fiiitos de - la inteligencia se tiene, en, vez de extrañar la diligencia 'con que atendia Capmaty á esos y a los demásgormenores que debian, seg& él, hacer sus obras más dignas de la Junta y de sus lectores, veréis una prueba inás de la mucha estima en que las tenia; de que no habian enfriado su ardor losanteriores desengaños; y de que su corazon abriase todavía, como en sus juveniles años, á las dulcesilusioi~esd e l a gloria. Por lo que se lee e» la misma'carta se desprende que á últimos de aquel año no habia recibido todavía Capmany ninguna reinesa & papel, sin embargo de haberse dado en el mes de Abril por la Junta la órden de fabricarlo, con cuya tardaiiza, que no se halla explicada, además de &latarse el cuml~lirnientode los deseos d e i~uestroautor, que se impacientaba por ella, se ocasionaba graves. perjuicios .al impresor que tenia, segun escribe aquel, (( caxista hábil, y ecaxas prevenidas con caracteres de nueva fuiidicion para ((.estrenarlo todo.» Llego por fin á Madrid el papelpor tanto tiempo espe-. rado, j f c o n él el principio de la tan deseada irnpresion, que tuvo lugar el 20 de Enero de 1790. Esta ftié continuando sin interrupcion y bastante de prisa, ocupándose en ella dos prensas, de suerte que podia Capmaoy escribir al Secretario de la Junta en 1 . O de Mayo, que confiaba ver concluido dentro de tres semanas el tomo de la Coleccion Diplomática, cuarto de las Menzorias históricas. D e , quedar terminada la impresioii de este tomo daba parte Gaprnany á la Junta en carta de 2 de Junio del niisrio aiio. ((Pasado mañana, añadia, con el favor de Dios, se «dar6 principio al tomo de las leyes traducidas del Consu- 134 DATOS :\CERCA DE «lado, y concluidoeste al delas Adicion y suplementos, á fin «de que en este año quede todo finalizado, como espero.), La revision y censura de esta obra habian sido encomendadas á D. Gaspar de Jovellanos, que la despachó, como 110 podia'ménos de esperarse de un examinador tan docto y justiciero, con aprobacion é informe fivooble. Caprnany atendia con igual Solicitud y esmero, al que habia manifestado para la impresion de las Memol-ins , á la de aquella nueva obra, poniendo,-como Antes; especial atencion en las viñetas, dando la idea para la portada, en la cual debía11 figurar, segun decia, aquellas versos que Claudio aplicb ii la antigua Roina: hrinorum legumquc paren4 quw fundit i i i omncs Imperium , pnmiquededit ~unabiilaJiins , aludiendo á la gloria de haber sido Barcelona madre d e las primeras leyes del Comercio que adoptó Europa ; todo ello «para mayor l~iciimientode .la obra; honor de la patria y ((crédito del Iltre. Cuerpo que tan expléndidamente la cosa teaba.» Mientras riuestro sabio compatricio se ocicpaba e11 lo retativ'o á la. impresion de sus obras con asiduidad y diligencia tales, que atribiiia A ellas dos cólicos biliosos que le incomodaroii cruolmente desde fines de Julio hasta cerca de Setiembre, atendia la Junta General de Comercio g Moneda á señalar In recompensa áque se habia Iiecbo acreedor por las últimas producciorier de su incansable laboriosidad y de su ii~genio. Es curioso, aunque no estraño, ver con este motivo como aparecen trocados los papeles entre la Junta general y la particular de este Principado. Cuando Capmany daba á tu¿ los dos primeros tomos de las Memorias, aquella le regateaba en cierta iriai~erala pension que la segunda le seña- iaba, poniéndole por delante i o inconveniente -que era grav a r con cargas vitalicias el derecho de Periage; mientras que por el coittrario en vísperas de publicarse las Adiciones á las niisinas y el Libro del Conszblucio del mar, además de mandar á esta Junta que abonase á aquel 4430 pesos para ayuda .de costa del viage que habia hecho en el año 1785 ii esta ciudad, á fin cle buscar y escoger en sus archivos los docurnentos .convenientes á sil 1,ropOsito (l),disponia que sobre los misinos derechos del Periage se le señalase eo recompensa de sil trabajo una pension de 4500 cs. Contra este último acuerdo reclamaba esta Junta y Consulado de Comerció, manifestando Lo grave de la carga que se le qgeria imponer, y que habiéndoselc concedido una primera * pension para toda la o b r a , por rnhs que despues hubiera sido redirnida por una cantidad alzada, era conceder dos pensiones para un mismo objeto (2). ¿Porqué tan generosa (1) Indicibanros m&srinibrr qiio teniamos motivas para sospechar que eti el año 1785 debiaii hiaberse enfriado las reinciones entre el rabio autor do las ~ e r n o i i a s yjn Junta pakictriar de Comercio. Lo que Vjsó caii motiva de señalarse estacantidad corrobora niiestra sospecha. Cuando vino Caprnany B.Bafcelanase contentu con pedir ila Junta que ciiidase de 1; copia. de los documentos que dejaba escogidas. Cuatro años despiies; aprovechando la. buena dispasician que á favorecerlchallaba cil In General de Madrid, debió pedir y+lcanzÓ que se le diese unacantidad para indernniza~setie los gastos que con tal motivo teriin adelantados. Esta seiialó la de pisos. E l Co;sulado no pnso ningon reparo en ifirselos , contel;tkndose coi, manifestar h su'presid~nteel Intendente de estal~roviileiii,al com!~nicnrlola órden do la Justa gcrieral,c~lson de quejca, y á nuestro ver con razon, quo sci corno ilo tuvo dificultad en satisfacer e1 trabajo de las e o p i ~ sque por urden de Caprnang se sacaran, tampoco la hiibiera tenido on pagarle las gastos del viaje, si hirbiesa manifestado que lo l>abiiihecho prira risitar las archivos al,.objeto do recoger los datos necesnrios 1ini.n mayor ilustrricioli de las Xemorias. &O (9) He aqui los tCrminas, por cierto nada rijoves, coi, que eaiitestó en 29 de . Noviembre do i'il2O la Junta general do Comercio y bfonrdn 1 I<isreparos, que eoii cl debido respato oponia Inperticular <leesta ciiidad ti laiiidenncerca 1:i iiiclicada pension ritalicia, a T este Supremo Trib!innl bici, enterado de la eitnda reproeiimlacion >e V. S. j- de los arrtecedentcs del asuiito, se li&serrido ncorder que d obedezca V. S. eori ia debida pilntila$id~dla ai~uricindaórden de 18 de Agosta, I\CI:RCADE ahora la Junta general de Madrid, ella, que tan contraria se mostraba diez años áiites á que nuestro Consulado gravase con una obligacion permanente los recursos, por cjerto no abiindantes, de que disponia? Para nosotros tiene este cambio deconducta una explicacion natilral en lo mucho que la reputacion literaria de Capmany debió haber crecido en aquel dos primeros tomos de las ,Wemorias espacio de tiempo.1~0~ le habidn fra~iqueadola entrada á las regiones del poder, á la sazon de no tan fácil acceso como ahora, y conquistado el aprecio de los más eminentes repúblicas, á niuchos de los cuales, salvos sus errores como hombres de estado, no se puede con justicia negar el titulo de celosos protectores de las letras: desde entónces, y desde 2786 á 1789 habla P dado á luz cuatro tomos, los d e mayor interésy que suponen un más detenido estudio y sano criterio, de l a obra que más debia contribuir á darle duradero renombre, A sa'ber, el Teatro histdrico-critico d e l a eloct~enciaespaño-' la. Cuando la fama d e un s'ligeto raya tan alto, como debia por entónces rayar la de nuestFo paisano, aumenta el número de sus favorecedores; pues son muchos los que, y es cosa sabida, 6 por aurnentar su importancia, si algu.na tienen, ó por adquirir méritos si carecen de ellos, se engalanan con, el hoiiroso dictado de Xfecenas de los hombres de verdadero talento 6 de saber, en la esperanza de que ha de alcanzarles tambien á ellos alguna parte de la gloria que logren conquistarse sus protegidos. Iba durante ose tiempo adelantando la impresion de la . . obra, y Capmany , que siempre que tenia que pedir el envio 4 36 . ¡):\TOS .. «eiryaclai.idad y ospeeifiencion demuestran bnsta~iteel pulso y eonoeiniie8ito dc «carisa con gne la mando expedir, y que par? ello tuvo presente las razones que 4 sobre CII conteni40 manifiesta V. S. despues de mas de trece meses do haberla <<recibido,y suii otras muchas qirc ~oberiiarona esta sepe~ioridadp a n tomar 1% «<locisionque V S. ieelrima. Participolo Y . S., &.. » U. . \ s ~ o s r onr. C ~ i ~ l r a ~ v . 137 <le alguna iitieva partida de papel, aproveclraba la ocasion para dar cuenta al secretario de niiestro Corisulado del estado e@ que aquella se hallaba, le escribia con fecha 20 de Noviembre del mismo año. de 1790, qiie hacia ocho dias qite se babi'a acabado de imprimir el Libro del Consulado; que se estaba trabajando ya en el tomo segtindo del mismo ; y que únicnmerite faltaba dar principio á la impresion del tercero de las-ilfemorias. Por último, en una nueva carta del 4 de Febrero, le daba la noticia de que, terminados los dos tornos '(le nnestro COdigo marítimo con todos sus apéndices, se habia empezado en aqiiellos mismos dias á imprimir dicho tomo. Capmaiiy iba igozar por fin de la satisfaceiop'mas colmada qiie p~iededisfriitar i i i i autor, cnal es ver salir de las prensas el último pliego de su obra., término por lo comun de grandes afanes y ii veces de no escasos sinsabores, 7 comienzo de satisfacciones inapreciables O cuando menos de ktalagüeñas esperanzns.; y ya desde 1." cle Jiinio le vemos 'ocuparse en un iriievo órtlen de tareas, tales como tratar coti la J t ~ ~ i acerca ta del riiimero de ejemplares que coiiveiiia hacer encuadernar, designarlas personas y corporaciones á quienes debiart aqtiellos regalarse, y establecer, cal~ulailoslosgastos heclios, el precio de sik obras. (:reo escil, , sado (leciros' que entre las coyporaciones favorecidas por Capmany y esta .Iunta y Consulado de Comercio figura nuestra amada Academia. En cuanto al precio de los tomos, como que rio habin movido i aqtiella corporicion ilustre i ~ i n guna idea de Iiicro , se f?j6 el de sil coste con el peqiieiio t i m e n t o de un 5 p. 0 1 , sobre el mismo. Meiiguado interés, literariamente consideradas, tienen ya Iris cartas y iiotas contenidas en el expediente, que abraza atin todo el aiio 1792 y 1793. Por desgracia para Capinany y escasa hoiira gjara iiqestra iiacion, aquel se cierra coi1 ilf. 13 ' 2.38 . , DATOS ACERCA DE una comunicacion de nuestro docto paisano, escrita en el tono elegíaco propio del que ha visto desvanecerse las gratas ilusiones bajo cuya impresion fueron redactadgs: segun vimos, las cartas que siguieron á la publicacion de los dos primeros tomos de las Memorias. Hablando a e LOS ejemplarés que habia tenido que regalar, cuyo número resultb mucho mayor del calculado, « y a porque se atraviesan, de« cia, de un mes á otro en la Corte circunstaiicias para ob-. csequiar á nuevas personas condecoratias al tiempo de hacer «la domostracion con las prescritas.; ya porque son muy ~pedigüeñasciertas gentes, que miran 01 presente como de «tabla b etiqueta; D concluia añadierido que «á no haberse ido á la mano, 110 hahkia quedado Gentil honlbre , Ayuda de cámara de Palacio, ni Portero mayor de secretaria del despache sin su ejemplar,, segun se insinuaban. » Por lo que hace á la venta escribia en aquella ocasion estos dos desconsoladores párrafos : «Aunque he procurado y hemos discurrido Sancha, yo «y otros libreros como negociar alguii huen despacho á las. «Me.tnorias y á las Costumbres ??taritimas, para resarcir «y aliviar 6 esa Real Junta de los gastos que hasufrido en la «edicion de estas dos obras, no ha sido posible conseg~iirlo. « Porqiie, ya por ser asuntos históricos peciiliares de un;z ({Provincii, cuyos moradores, con admiracion de las gentes «de aqui , y no poca mia, no muestran gran aiicion á saber «sus propias glorias; ya por causa de las actua.les circurisxtancias de la guerra que ha entibiado bastante el deseo do ((comprar libros, y cortado la comunicacion segura con los (ipaises estrangeros, hemos halla30 casi irnposible el dar fá«cil salida á estas obras ... . « Por el mismo estado [le dichas cuentas potliá vet. 12i «Junta el corto consumo que hari tenido una y otra obra. «Desde el año ,l78¡ hasta hoy, de los cu&trocientos ejempla- D. ASTO,YIO D E C A P A I A ~ Y . 138 [(res de los tomos I y 11 de las ilfetnovias que se sirvió ceaderme para mi beneficio, no se hati vendido más que 102. «Del 111 y IV, iilti,namente piihlicatlos, solo se han venrlido «hasta ahora ,-entibndase que en Madrid ,-treinta y seis: ((10 cual ha desanimado á Sancha y á otros libreros pai.aato«marme el resto ni con un 50 p. O/,, de pérdida.» ;Cúmo le vendria entónces á la' memoria lo que acerca La venta de la ~ i s t ' o r i ad e l a Conquista d e iMdjico escribia Solis á - s u favorecedor D. ' ~ n t o n i oCardona, y que iba á dar á conocer el mismo en el tomo V del Teatro 7zistórico-critico d e l a elocuencia espaliola ( I ) , próximo á la sazon 6 ver la pública luz! Plácenos poner fin á,ustos apuntes con la revelacion de algurios'datos que, hoiirando á esta Junta d e Comercio, vienen á rerliindai- en gloria del Principado, que tanto debe 6 dicha corporacion , digna sucesora del antiguo Consejo l vint), y del escritor con quién, de 10s veinte ( l o ~ o n s e l de coi1 ji~st'ornotivo, se eirorgitllecen niiestra ciudad y la nacion entera. Todo el mundo puede vec en las portatias de Ins Memo. históricus y d e las Leyes nznvitimas, que ambas obras fiieron impresas á expensas dc dicha Junta : todo el tnuiido puede admirar el lujo editorial con qiie salieron á luz los seis tornos de que se componen; pero por fleritiira nadie 3e habrá detenido i calcular lo que pudo costar á esta corpbracion levantar aquel monumento 6 las glorias de la antigua marina ;c,omercio y artes de Barcelona, y que tanta honra da á las letras españolas. Coit las cuentas á la vista hemos podiclo hacer iiosotros este cálciilo, y de él res~tlt::t que este C.onsulado gastó en ello más de 18,000 duros, 5 sea unos 8,000 enremiioei~ar.á Capmany y Los -restantes (11 Png 311 y 312 10,000 en la impresion de aquellas sus obl-as ( l ) . Loor á los geiierasos patpicios qiie formabati en aquellos anos la Junta de Corneicio por su noble y bien gprovechado des,prendiiriieiito. A ellos les cabe la satisfaceion de haber dado una prueba de amor a las glorias de su pátria, ctial pocas veces y con tai!ta esplendidez la haya dado en favor d e las históricas y literarias de la nacion s:i gobierno y sus academias, y ninguiiw , qlie sepamos de las demas corporaciones provinciales. A.ellos debe Barcelona el que sea más cot~ocido$u 810tioso pasado, Catalufia i i r i munnmetito que lahotira y Espafia uii ingenio que la 'ilustra. (1) 114 aqrii Ins principafes particlas eii qiic iinaynti.~i:nntidnd se dcscomp,oi,cii. A Cepmany : Por Barios de peirsian R 3,000 F.. . . . . . . . . . . . . . Por la redei~eionde la inirrno. . . . . . . . . . . . . . . Por Ifiafios (desde1793 5 1808) de pcnstoii á 4,500 rs. (') Por las gastos del viaje ~~Bareelolin, . . . . . . . . . . . Par 400 ejemplares de los 4 tomos primeros ;iTi0 ~ s . u n o . . .* . . . Por atrns p&ti<lns,apivaimadamente. . . . . . . . . . . . . . . . . 15,WO rs. 40,000 B 79,000 n 8,000 >i 20,000 n* 5,000 ». 1ti0.000 rs. Por la irnpresion y otros gastos: , Por 1,408 resmns de papel ii 80 rs. ui~a.. . . . . . . . . 112,¿8U rs. Por l? impresion y encuaderiraciori de los íI tornos primeros. . . . 31,692 ii Por id. de ioc.4 tamos restantes. . . . . . . . . . . . . . 44,083 n Par los dihiijos ,grahiidos, cnibat-jeí, portes, et,:., nprorirnndarne,>te. 10,000 D ) hlas ado\ri,le g despues de reilacbda c3l.i nnh, vino b nuestras niarros ia copia do una neal úrtlen fecliaila en (?! Ocluiirc de 1806, cn la cuai se mandaba que la prnsion que fue se- iialaila i Capmany en 17931, pasase :i su hijo D. Luis, tonionlo dc wl~allcriadel regimiento d e b l o n k r ~ en , el caso de a~brerivir:i su paiire. tgnoranius si rcnlniente <lielralbde dii:lia pensioii y por cuan10 liempo. .