IDENTIDADES ASESINAS Por: Omar Terrazas Recientemente, el mundo fue sorprendido por los trágicos atentados múltiples en la ciudad de Paris donde más de un centenar de personas perdieron la vida. Los medios de comunicación se abarrotaban de espectaculares cubriendo la nota. La condenación internacional contra el grupo ISIS (Porque llamarle Estado Islámico refiere una generalización de sus acciones a la población que practica el Islam) y posteriormente la decisión del presidente Hollande de cerrar las fronteras, junto con las acciones relativas a la persecución de esta amplia célula subversiva, no se hicieron esperar. Las investigaciones del surgimiento del grupo fueron más extensivas, hecho que ni la guerra en Siria, ni la persecución de personas creyentes a otras sectas en el Medio Oriente, había detonado en su totalidad. El tema del financiamiento de mercenarios por parte de una nación, así como el entrometimiento de actores internacionales en la región sobresalían como la principal causa. Sin embargo, estando aún en tela de juicio, el trasfondo de las cosas conduce a la unidad mínima involucrada: El hombre. De acuerdo a esto, no solo se intenta analizar al grupo ISIS, sino también a algunos de los diferentes grupos que surgieron durante el último siglo con características similares. Preguntar que es lo que lleva al ser humano a realizar asesinatos multitudinarios, mutilaciones o atrocidades similares es incierto. Tomar la vida de otro ser humano en nombre de una religión, una etnia o una herencia cultural arraigada, tristemente, ha sido un tema que se ve cada vez con más frecuencia. 1 Se podría tratar de explicar recordando a Hobbes, quien señala en el realismo puro que el hombre es el lobo del hombre; también se puede tomar en cuenta el estudio de Samuel Huntington, donde el choque de civilizaciones tomaría fuerza. Sin embargo, ante la disparidad existente entre ISIS y el resto de los practicantes de la religión Islámica, la condenación expuesta ante las acciones atroces de éste grupo, y la variedad de grupos que comparten algunas de estas características alrededor del mundo, parece hacer de ellos insuficiente para el estudio de la complejidad humana que aquí se presenta. Amin Maalouf, en su libro identidades asesinas, señala cuatro puntos relevantes que sugieren explicar la creación y el comportamiento de tales actores internacionales. El primero de ellos, tratando de explicar el surgimiento de tales actores, hacer referencia a la identidad. Cada persona en el mundo, perteneciente a una lengua, a un país, a una región aislada, a una religión; posee una identidad. Tal identidad le hace único e irremplazable. Según el autor “gracias a cada una de mis pertenencias, tomadas por separado, estoy unido por un cierto parentesco a muchos de mis semejantes; gracias a esos mismos criterios, pero tomados todos juntos, tengo mi identidad propia, que no se confunde con ninguna otra.” 1 De acuerdo a esto el ser humano es poseedor, no solo de una identidad legal que es compuesta y respaldada por un acta de nacimiento, licencia de conducir y demás documentos legales; sino también de una identidad única que no solo le diferencia en color, lengua, o región geográfica, sino también experiencias, procedencia, formación, creencias, etc. Partiendo de ahí, se pueden elaborar conclusiones sobre como se cae en el error de sugerir prejuicios generales dependiendo de las percepciones una vez hechas, tomando una experiencia o una enseñanza ajena como la verdad absoluta de toda la gente que comparte características determinantes con el perpetrador de la acción en cuestión. No todos los árabes practican el Islam, y no todos los que practican el Islam fomentan el uso de violencia, de hecho, los hechos que sustentan tal prejuicio podrían no representar ni el uno por ciento de la población, aunque claro, varía de acuerdo a la situación enfrentada. Así, el hombre, forjado en experiencias, redefine su identidad cada día, y no haciendo una 1 Amin Maalouf hace un análisis de las similitudesy diferencias, poniendose él mismo como ejemplo. Maalouf, Amin. Identidades Asesinas. Versión Española de Fernando Villaverde. Alienza Editorial.Pag. 13 2 jerarquía de características, o dando una importancia mayor a una u otra. Entonces, ¿Qué sugiere que hombres con identidades diferentes se unan en torno a una sola? Milton Friedman dijo una vez “Sólo una crisis - real o percibida - produce cambios reales. Cuando esa crisis ocurre las acciones que se toman dependen de las ideas que hay alrededor.”2 La crisis, representada ampliamente en la famosa teoría de Shock refiere un antes y un después, un detonante. Cuando el personaje ve amenazada alguna característica de su identidad, por una burla, ataque directo o cualquier tipo acción que él perciba como atentado, figura un resultado determinante en la persona, pues según el Maalouf “la gente suele tender a reconocerse en la pertenencia que es más atacada”3, dejando de lado las demás características que le componen y ocultando de alguna forma superficial un sentimiento de temor o dolor que poco a poco se va a apoderando de la identidad total. Así es como el shock detona en ellos un arraigamiento de la identidad, como su totalidad se ve rendida ante la característica que se vio atacada. Se la quisieron quitar a través de burlas, discriminación, o señalamiento, pues el estado de shock no es solo un evento catastrófico, sino “lo que pasa cuando perdemos nuestra narrativa, cuando perdemos nuestra historia, cuando nos desorientamos.”4 En medio de esa desorientación, de ese ataque, es que cobra fuerza una parte del todo y no el todo en sí. Fortaleciendo la defensa de tal característica se fortalece la religión, la raza, la etnia, o la apariencia física. Por ello tiene sentido que etnias como los tutsis y hutus, aún compartiendo el catolicismo, fueran víctimas de la defensa de la identidad en base a otras características que les diferenciaban. Pero esto no va ligado solamente a conflictos de origen sangriento del todo aunque así parecieran apuntar sus características. Las tendencias observadas también son participes de, por ejemplo, el surgimiento del Ejercito de Liberación Zapatista Nacional (EZLN) 5 en México; la generación de movimientos similares como el Movimiento de trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) en Brasil; las guerrillas colombianas 6, o los autodefensas en Michoacán, 2 Traducción al español hecha por el autor. Milton Friedman(2002) Capitalism and freedom. The University of Chicago Press. Chicago and London. United States of America. Pág. xiv. 3 Maalouf, Amin. Ibídem, pág. 16. 4Klein, Naomi. La doctrina del Shock. Sundance Institute. Renegade Pictures Revolution Films. 5 Van der Haar, Gemma.(2005) El movimiento Zapatista de Chiapas: Dimensiones de su Lucha. 6 Saumeth Cadavid, Erich. Historia de las Guerra en Colombia. Universidad Federal de Juiz de Fora. 3 México. Todos ellos, defensores de un terreno, o población, y también como respuesta a las acciones del Estado. Conociendo del tema del EZLN será abordado posteriormente dado la importancia que recibió internacionalmente. Los grupos antes mencionados vieron lastimada su identidad al querer desprender de ella sus tierras, su seguridad, y con ello, su dignidad. Es ahí cuando la características que les unen cobran resentimiento y todos “los que la comparten se sienten solidarios, se agrupan, se movilizan, se dan ánimos entre sí, arremeten contra "los de enfrente". [Porque] para ellos, afirmar su identidad pasa a ser inevitablemente un acto de valor, un acto liberador...”7 Cabe resaltar, como menciona Friedman, una vez dada la situación de crisis, el shock, las acciones que se llevan a cabo son determinadas por las ideas en el entorno. Aunque la mayoría de los ejemplos dados surgen como método de defensa de los intereses de un grupo específico o una comunidad a la que el estado les ha negado dicho bien por una u otra causa, de una forma más racional; dependiendo de las circunstancias bajo las que es dada la crisis y posteriormente el estado de Shock, se puede exagerar tanto la amenaza como las acciones de defensa, llevando a la persona al estado donde lo racional no es visto tan fácilmente y los factores que se ocultaban bajo el miedo y la inseguridad, salen a relucir. Con esto no se trata de alentar ataques contra la seguridad ajena en busca de la propia, y mucho menos justificar las matanzas y las perdidas humanas en busca de un fin común de cierto grupo, pero es necesario atender los diferentes aspectos que involucran la creación de dichos personajes, que viendo amenazada su tierra o sus seguridad, son capaces de matar. Pues como diría Maalouf, “hay un Mr. Hyde en cada uno de nosotros; lo importante es impedir que se den las condiciones que ese monstruo necesita para salir a la superficie.”8 7Maalouf, Amin. Ibídem. Pág.17. 8Maalouf, Amin. Ibídem. Pág.18. 4 Bibliografía. Klein, Naomi. La doctrina del Shock. Sundance Institute. Renegade Pictures Revolution Films. Maalouf, Amin. Identidades Asesinas. Versión Española de Fernando Villaverde. Alienza Editorial.Pag. 13 Milton Friedman(2002) Capitalism and freedom. The University of Chicago Press. Chicago and London. United States of America. Pág. xiv. Saumeth Cadavid, Erich. Historia de las Guerra en Colombia. Universidad Federal de Juiz de Fora. Van der Haar, Gemma.(2005) El movimiento Zapatista de Chiapas: Dimensiones de su Lucha. 5