Prolapso de los órganos pélvicos Información complementaria para pacientes ¿Qué es el prolapso de los órganos pélvicos? El prolapso de los órganos pélvicos se produce cuando el tejido que sostiene los órganos pélvicos se debilita o se desgarra y ocasiona la caída (prolapso) de los órganos pélvicos de su posición normal. Existen varios tipos diferentes de prolapso y muchas mujeres pueden presentar más de un tipo. Cistocele El cistocele se produce cuando la vejiga protruye o ejerce presión hacia el interior de la vagina. Cuando el tejido de sostén de la pared delantera de la vagina se deteriora, su fijación a la pelvis se vuelve débil, lo que hace que la vejiga caiga hacia dentro de la pared vaginal. Rectocele El rectocele se produce cuando el recto protruye o ejerce presión hacia el interior de la vagina. De modo similar al cistocele, cuando el tejido de sostén de la pared trasera de la vagina se deteriora, el recto puede caer hacia dentro de la pared vaginal. Anatomía Normal de la Pelvis Útero Vejiga Recto Enterocele El enterocele se forma cuando el intestino delgado protruye o ejerce presión hacia el interior de la vagina. Comúnmente, esta afección se presenta junto con otra forma de prolapso y se repara durante el mismo procedimiento. Prolapso de la cúpula vaginal El prolapso de la cúpula vaginal se produce cuando la parte superior de la vagina cae hacia el interior de la cavidad vaginal. Esta afección puede presentarse en mujeres que se han sometido a una histerectomía, dado que ya no existen las estructuras de sostén natural de la vagina que proporcionaba el útero. Prolapso uterino El prolapso uterino se produce cuando el útero cae hacia dentro de la vagina. Esto puede ocurrir cuando se debilitan las estructuras de sostén que mantienen el útero en su lugar. ¿Cuáles son mis opciones de tratamiento? Existen diversas opciones de tratamiento para el prolapso de los órganos pélvicos, que pueden variar entre pacientes en función de dónde se encuentre el prolapso y cuál sea su gravedad. Opciones no quirúrgicas Ejercicios de Kegel: Contracciones repetidas de los músculos del suelo pélvico para fortalecer la zona. Pesario: Dispositivo que se puede introducir en la vagina para sostener las estructuras adyacentes y aliviar los síntomas. Opciones quirúrgicas La práctica tradicional entre los cirujanos es coser el tejido debilitado con puntos de sutura para recomponerlo. En algunos casos, esto no es suficiente. Otra opción implica colocar una malla o injerto (material sintético o material a base de tejido) además de usar puntos de sutura para reparar el suelo pélvico. Estos productos pueden servir de sostén de la zona reparada y los órganos afectados y ayudar a aliviar los síntomas. Malla sintética: Consiste de hojas sintéticas de materiales plásticos que quedan de forma permanente en el cuerpo. Injertos a base de tejido: Se obtienen a partir de tejido humano o animal. Comúnmente, los injertos a base de tejido permiten que las células proliferen y se incorporen al producto, lo que conduce a la integración del injerto en los tejidos adyacentes o el reemplazo del injerto por el propio tejido de la paciente. Su médico podrá proporcionarle más información acerca de los tipos de cirugía que se emplean para el prolapso y los distintos tipos de materiales que existen para la reparación. Matriz del suelo pélvico ¿Qué es MatriStem? MatriStem es un producto exclusivo, a base de tejido, que se usa durante la cirugía de reparación del suelo pélvico y en varios otros procedimientos quirúrgicos. MatriStem proporciona al cuerpo un armazón que contiene un conjunto de proteínas y colágenos que permite que las células corporales se integren naturalmente en el lugar de la reparación. Con el tiempo, MatriStem se reemplaza completamente por tejido similar al de la pared vaginal normal, sin que quede material extraño permanentemente en el cuerpo. ¿De qué está hecho MatriStem? ¿Es seguro? MatriStem es un producto natural que se fabrica a partir de tejido de la vejiga de cerdos (de origen porcino), el cual, luego de que se procesa para extraerle las células, es similar al tejido humano. El uso de tejido porcino para fines médicos es una práctica establecida desde hace más de 40 años. MatriStem se procesa y esteriliza para garantizar que en el material no haya enfermedades procedentes de los animales. ¿En qué se diferencia MatriStem de la malla sintética? Una vez implantado, MatriStem fortalece la zona debilitada, a la vez que favorece la formación de tejido nuevo que proporciona sostén a los órganos pélvicos adyacentes. A diferencia de la malla sintética, que queda permanentemente en el cuerpo, MatriStem se reabsorbe y reemplaza por tejido similar al tejido vaginal normal. ¿Cómo se usa MatriStem para reparar el prolapso de los órganos pélvicos? Reparación de un cistocele MatriStem se introduce por una pequeña incisión en la vagina y se coloca entre la vejiga y la pared vaginal. El producto se fija a las estructuras internas con puntos de sutura para regresar la vejiga a su posición correcta. Una vez colocado, MatriStem comienza el proceso de renovación para reparar el tejido debilitado. InjertoMatriStem Reparación de un rectocele MatriStem se introduce por una pequeña incisión en la vagina y se coloca entre el recto y la pared vaginal. El producto se fija a las estructuras internas con puntos de sutura para regresar el recto a su posición correcta. Una vez colocado, MatriStem comienza el proceso de renovación para reparar el tejido debilitado. InjertoMatriStem ¿Habrá efectos secundarios o posibles complicaciones con el uso de MatriStem? Cualquier cirugía, así como cualquier reparación quirúrgica de tejido, puede tener complicaciones y reacciones. Entre las posibles complicaciones y efectos secundarios que pueden presentarse se incluyen: infección, mayor inflamación crónica, reacción alérgica, fiebre o escalofríos de origen desconocido, enrojecimiento excesivo, dolor, hinchazón, cicatrices dolorosas a la palpación, adherencias, formación de seroma, dolor durante las relaciones sexuales, imposibilidad de tener relaciones sexuales (acortamiento vaginal), sangrado vaginal, flujo vaginal atípico, dolor en la ingle, las nalgas o las piernas, formación de fístula, dificultad para controlar la vejiga o imposibilidad de vaciar la vejiga, lesión en la vejiga, intestinos, vasos sanguíneos o nervios de la pelvis, retardo o falla en la integración del injerto, imposibilidad de reparar el prolapso, recidiva del prolapso (regresión al prolapso original) y erosión o extrusión de la malla o la sutura. También pueden ocurrir otros efectos secundarios y complicaciones que no se conocen. Hable con su médico para obtener más información. ¿Qué puedo esperar después de la cirugía con MatriStem? Es posible que, después de la cirugía, sienta dolor en la pelvis y tenga flujo vaginal. Esto puede estar relacionado con el hecho de que el tejido está cicatrizando y el producto está comenzando el proceso de renovación. Como con la mayoría de las cirugías de prolapso vaginal, la cicatrización tarda alrededor de tres meses. Durante ese tiempo, debe evitar toda actividad que pueda causar presión o esfuerzo sobre la zona reparada, como levantar objetos pesados, hacer esfuerzo físico, realizar ejercicio de manera enérgica, la tos, el estreñimiento y las relaciones sexuales. Consulte a su médico para que le indique detalladamente qué actividades debe limitar después de la cirugía y cuándo es seguro retomar esas actividades. Notas: ACell, Inc. 6640 Eli Whitney Drive Columbia, MD 21046 1-800-826-2926 www.acell.com Todas las imágenes © 2013 Mica Duran Rx ONLY Consulte las instrucciones de uso que acompañan cada dispositivo para conocer las indicaciones, contraindicaciones y precauciones. MK-0066.0S 09/2015