RAMBEAUD VALENTIN CI ESTADO NACIONAL - e.S.J.N. sI empleo público. (RECURSO EXTRAORDINARIO) S.e. R. 1037, L. XLIII. Ministerio Público Procuración General de la Nación Suprema Corte: -1- A fs. 689, la Sala IV de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal confirmó la sentencia de la instancia anterior y, en consecuencia, dispuso que resulta extemporáneo el planteo formulado por el Estado Nacional-<lemandado en autos- a fin de que quede consolidado el crédito que debe cancelar en concepto de intereses complementarios, pues no recurrió la providencia de fs. 580, mediante la cual se hizo saber a la actora que el crédito liquidado, por su origen, no se encuentra alcanzado por la consolidación del arto 13 de la ley 25.344. -11Disconforme con este pronunciamiento, la demandada interpuso el recurso extraordinario de fs. 692/697, que fue concedido a fs. 709 en lo atinente,a la aplicación de normas federales. Sostiene, en lo sustancial, que resultan aplicables al caso las leyes 25.344 y 25.565 (art. 46), como así también el decreto reglamentario 1116/00, en tanto se trata de un crédito de causa o título posterior al 10 de abril de 1991 y anterior a131 de diciembre de 1999, derivado de un beneticio previsional obtenido al amparo de la ley de jubilaciones del personal del Poder Judicial de la Nación. Por otra parte, aduce que la providencia de fs. 580, que ordenó hacer saber a la actora que su crédito no se encuentra alcanzado por la ley 25.344, no dispuso su notificación a la demandada, motivo por el cual no puede afinnarse que consintió la no aplicación de dicha ley ni la existencia de cosa juzgada al respecto, a lo que añade que el régimen de consolidación de deudas reviste carácter de orden público y, por lo tanto, no es posible apartarse de sus disposiciones. Finalmente, destaca que las sumas que fueron abonadas en efectivo corresponden a una porción del capital que no quedaba comprendido en las previ- siones de la ley 23.982 y que fueron canceladas en 1997, cuando aún no había sido sancionada la ley 25.344. . -III- Considero que el recurso extraordinario es fonnalmente admisible pues, si bien es un principio asentado que las decisiones adoptadas en la etapa de ejecución no configuran la sentencia definitiva requerida por el arto 14 de la ley 48, ello admite excepciones cuando lo decidido pone fin a la discusión y causa un gravamen de imposible reparación ulterior (Fallos: 323:3909 y sus citas), extremo que, en mi concepto, se verifica en autos toda vez que el apelante no tiene otra oportunidad de replantear sus agravios (cfr. argo Fallos: 319: 110 1; 324:826). Por otra parte, también debe tenerse presente que se encuentra en juego la interpretación y aplicación de nonnas de carácter federal y la decisión recaída ha sido contraria al derecho que el apelante funda en ellas (art. 14, inc. 3°, de la ley 48).. -IVA mi modo de ver, las cuestiones que se debaten en el sub lite son sustancialmente análogas a las que se examinaron en la sentencia del 17 de julio de 2007, in re E. 297, L. XLI, "Esteguy, Amelia Adela cl Estado Nacional (Poder Judicial de la Nación)", que remite a los fundamentos y conclusiones del dictamen de este Ministerio Público. En dicho precedente se recordó que la ley 25.344, capítulo V, consolida las obligaciones previsionales originadas en el régimen general vencidas o de causa o título posterior al 31 de agosto de 1992 y anterior al 1° de enero de 2000, fecha prorrogada hasta el 31 de diciembre de 2001 por el arto 46 de la ley 25.565 (Fallos: 325:3000). Por su parte, el arto 4°, anexo IV, del decreto reglamentario 1116/00, al definir en su inc. o) a esta categoría de créditos, señala que son las obligaciones previsionales derivadas de prestaciones acordadas bajo regímenes previsionales anteriores a la vigencia de la ley 24.241. Asimismo, se señaló que si bien el arto 13 de la ley 25.344 pudo haber generado alguna duda c{>n respecto a lo que debe entenderse por "obligaciones originadas en el régimen 2 • s.e. R. 1037, L. XLIII. --""o.' Ministerio Público Procuración General de la Nación genera}", el decreto reglamentario la disipó al definirlas con un criterio temporal que atiende exclusivamente a si son anteriores o posteriores a la vigencia de la ley 24.241 (v. Fallos: 329:5769). Concluyó, entonces, que el crédito por intereses adicionales que se reclamó en esos autos -de origen posterior al 10 de abril de 1991 y anterior al 31 de diciembre de 2001- debía quedar comprendido en el régimen aludido, toda vez que éste alcanza a los efectos no cumplidos de las sentencias si se trata de deudas pasibles de ser consolidadas (leyes 25.344 y 25.565). Pienso que tales consideraciones resultan aplicables en la especie, en atención a que, según surge de las constancias de la causa, se hizo lugar a la demanda interpuesta y se declaró la inconstitucionalidad del arto 2° de la acordada 56/91 de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y de su modificatoria 14/92, determinando el derecho del actor a que su haber de retiro se integre con el suplemento creado por aquellas normas y a que se le abonen los períodos devengados. Asimismo, se estableció que la porción del crédito devengado con aQ.terioridad al 31 de agosto de 1992 (ley 24.130) se encontraba alcanzado por la consolidación dispuesta por la ley 23.982 y que las sumas adeudadas a partir de esa fecha debían ser canceladas siguiendo el procedimiento del arto 22 de dicha ley. Sobre esa base, se confeccionó la liquidación que fue aprobada el 28 de agosto de 1997 (v. fs. 249) y se realizaron diversos trámites ante los organismos competentes a fin de obtener la suma que correspondía cancelar en efectivo, hecho que ocurrió el 25 de noviembre de 2003 (v. fs. 654). Con posterioridad, la actora practicó una nueva liquidación computando los intereses hasta esta última fecha, suma que la demandada solicitó que quedara consolidada con fundamento en las normas a las que antes se aludió, que comprenden a los accesorios de una obligación consolidable. Habida cuenta de lo expuesto, pienso que los argumentos de índole procesal en que se fundó el a quo no son válidos, pues el apelante invocó un régimen legal de orden público que establece un sistema específico y excepcional para la cancelación de la deuda que obstaría al procedimiento de ejecución 3 que se ordenó proseguir (v. Fallos: 322:87). En este sentido, cabe señalar que V.E. tiene dicho, respecto de la ley 23.982, que la sentencia que dispone la inmediata ejecución del crédito por las vías comunes no encuentra sustento alguno en las normas aplicables e importa prescindir de ellas, que resultan de inexcusable aplicación habida cuenta del carácter de orden público de la ley de consolidación (v. Fallos: 326: 1632 y su cita). Con relación a este punto, conviene recordar que la preclusión produce el efecto de tomar irrecurribles las resoluciones judiciales, mas no el de legitimar situaciones inconciliables con el orden público. Concluir lo contrario importaría desnaturalizar el proceso judicial hasta el punto de convertirlo en un medio apto para convalidar las transgresiones a las normas imperativas. Entonces, el silencio guardado por uno de los litigantes frente a la afectación de un derecho indisponible, tendría más virtualidad que un contrato para privar de efecto a las leyes en que se encuentra comprometido el interés general (v. doctrina de Fallos: 320: 1670, y 1696, sobre la aplicación de normas provinciales de consolidación). En tales condiciones, entiendo que el crédito por intereses adicionales que reclama la, actora -de origen posterior al 10 de abril de 1991 y anterior al 3 1 de diciembre de 2001- debe ser cancelado en los términos de las leyes 25.344 y 25.565, toda vez que el régimen de consolidación alcanza a los efectos no cumplidos de las sentencias si se trata de deudas pasibles de ser consolidadas, mas no comprende a los intereses devengados con posterioridad a esta última fecha. -vOpino, por tanto, que corresponde revocar la sentencia de fs. 689 en cuanto fue materia de recurso extraordinario. Buenos Aires, ES COPIA LAURA M. MONTI j t de julio de 2008. •