Capítulo II ¿POR QUÉ LA COMUNICACIÓN ES RELEVANTE A LA EMPRESA? Abraham Nosnik Ostrowiak* Presentación Es casi un lugar común hablar de los cambios que ha traído consigo, y traerá en un futuro, la globalización. Sin embargo, creo que aún es necesario incluir una reflexión en este sentido para entender cabalmente el trabajo que se está haciendo en el área de comunicación en general, y en la especialidad de organizacional en particular. El presente trabajo es una breve reflexión acerca de qué pueden esperar los empresarios y sus organizaciones en cuanto a la comunicación en estos tiempos caracterizados por dos procesos en paralelo. Por un lado, sigue la preocupación acerca de la incertidumbre sobre cómo nos afectará como país (México) y como región o subcontinente (América Latina) la apertura de nuestras economías y el incipiente recorrido de nuestras jóvenes democracias. Algunos se plantean la pregunta acerca de si estos dos elementos de apertura, una económica y la otra política, es lo que se requiere para modernizar a nuestros países, evitar su progresivo deterioro. Por otro lado, también está la discusión tecnológica, que toca le cerca la problemática de comunicación, la cual acelera ciertos aspectos de crecimiento y desarrollo de América Latina, pe'0 además implica el riesgo de acrecentar el abismo entre la pobreza informacional de grandes sectores de la población en México y América Latina y el poder acrecentado de quienes tienen acceso a tecnologías de punta para múltiples quehaceres :producción industrial, automatización de oficinas, creación de nuevos nichos de productos y servicios, una mayor gama de opiniones de información y entretenimiento, etcétera). En medio de este controvertido y complejo escenario surge el concepto de comunicación productiva, el cual quiere ser una respuesta para aminorar los abismos entre diferentes sectores de nuestra población y también una conjetura acerca de la naturaleza del proceso de comunicación en esta época de apertura económica y política, y la consecuente competencia enfrentada en los mercados por las empresas y la competitividad que deben desarrollar para enfrentar y adaptarse a este nuevo ambiente de negocios. En las siguientes secciones del presente ensayo procuraré vincular los elementos que mencioné en esta breve introducción. • Imparte la materia de Análisis y Planeación de la Comunicación 11 en el Programa de Comunicación en la UIA-Santa Fe. Es director del Departamento de Administración y Contaduría Pública en esta universidad 1 a) Acerca del concepto de globalización Antes de que el término "Aldea Global" adquiriera carta de naturalización en nuestra lengua, "global" era aquello que se refería a una característica de "general". Después de que la apertura económica llegara a nuestro país sobre todo en el inicio de 1994 (aunque el Acuerdo (ahora Tratado) de Complementación con Chile marcara ya antes el primer esfuerzo en este sentido en México), "lo global" se refiere a una condición de apertura y por lo tanto, de incertidumbre y complejidad de las cosas. ¿Qué cosas? Bueno, prácticamente todos los aspectos productivos y de convivencia entre nosotros y con el orbe: la economía, la política, lo social, la cultura, lo tecnológico, lo educativo, etcétera. En el caso de México, lo global en lo económico implica cuando menos dos situaciones el hecho de que empresas de diferentes giros, experiencia y nacionalidad(es) (pues algunas de ellas son empresas de capital y tecnología bi o multinacionales) lleguen a competir con nosotros, y la posibilidad de exportar y salir a competir a los mercados internacionales. Lo global en lo político se refleja por nuestros primeros pasos como democracia. Asegurar transparencia en las votaciones federales estatales y municipales; la autonomía del Instituto Federal Electoral del Gobierno y del Poder Ejecutivo específicamente; la alternancia en el poder por medio del acceso al mismo por parte de los partidos de la oposición; etcétera. Lo global en lo laboral, que implica una nueva cultura productiva. En este punto me quisiera detener un poco y desde esta nueva cultura de trabajo, que aún está por hacerse, reflexionar acerca de lo que la comunicación puede ofrecer a los empresarios y sus empresas. b) ¿Una nueva cultura de trabajo? No creo muy aventurado afirmar que lo global también ha impactado, o por lo menos empieza a hacerlo, a la forma en que trabajamos los mexicanos. Consideremos por ejemplo el hecho de la convergencia tecnológica como tendencia en nuestro medio. La convergencia tecnológica es el hecho de que tres industrias, hace algunos años Independientes, están conformando un ambiente rico en tecno-logía y en información: las telecomunicaciones, la informática y los medios masivos de comunicación social (para algunos "la industria del entretenimiento "). En la cultura de trabajo que está en ciernes ya vemos las primeras señales o evidencias de cambio: las tarjetas de presentación, varias de ellas cuando menos, especifican el correo electrónico del interesado; muchas empresas han descubierto la importancia de una página corporativa en la red (world wide web, "www") que informe acerca de sus productos y servicios a posibles interesados; las computadoras personales de todos tamaños y modalidades, son parte del escenario de las oficinas de cualquier empresa (inclusive las muy pequeñas) y del equipaje de los ejecutivos que viajan a algún lugar por razones de trabajo; las compañías aéreas deben pedir a los pasajeros abstenerse de 2 utilizar sus celulares y otros artefactos de telecomunicaciones para no entorpecer el funcionamiento de los aparatos de aeronavegación de las naves, etcétera. El ambiente laboral de casi cualquier empresa, pues, es un ambiente con mayor presencia tecnológica y riqueza informa-cional. Inclusive, de entre las habilidades que hoy se piden para poder trabajar en este tipo de atmósferas laborales están las de manejo de computadoras y aparatos afines, así como programas de cómputo ya sea de procesamiento de palabras, de control administrativo, telecomunicaciones, bases de datos, etc. Es un hecho innegable que el ambiente físico del trabajo, tanto admi-nistrativo como en las plantas de manufactura, ha cambiado notablemente. Los estándares y metodologías de trabajo también han evolucionado. Para empezar, en los últimos diez o quince años ha habido (literalmente) una explosión de literatura acerca de nue-vos modos y modas gerencia les, administrativas, de liderazgo y productividad en equipo, etc.; hay más gente pensando en innovaciones en el lugar de trabajo y más gente consumiendo dicha información. Todo ello como consecuencia de lo global en lo laboral: la apertura de las organizaciones para poder servir mejor a sus clientes y así, permanecer y prosperar en mercados muy competidos gracias a la apertura económica y la internacionalización de las economías nacionales. La calidad mundial se ha vuelto requerimiento para sobrevivir en cualquier mercado, no sólo los más dinámicos. De hecho, la calidad mundial tiene un creciente número de sinónimos, dependiendo de su ámbito de aplicación: calidad adecuada; bien hecho desde el principio; "benchmarking" o estudios de referencia acerca de quién lo hace de forma sobresaliente en su industria; mejora continua; visión de largo plazo; competencias fundamentales o "core competencies", reingeniería, etcétera. Quizá todas estas metodologías tienen en común aquello que Peter F. Drucker señalaba hace algún tiempo como la clave para conectarse a las frecuencias de este tipo de proceso: "Escuchar atentamente a los clientes más exigentes". Drucker agregaba que dondequiera que está un cliente podemos aprender de su exigencia, la gran diferencia es aprender a escucharlos atenta-mente y aprender de dicha exigencia en términos de innovación en nuestras empresas, ya sea a nivel de productos o servicios técnicos de giro comercial, así como de procesos productivos de apoyo a las actividades comerciales o a otras áreas de la em-presa que también contribuyen al objetivo principal de la misma. Hasta ahora nuestra descripción de la nueva cultura de trabajo en realidad ha sido una descripción de un nuevo ambiente laboral con mayor presencia tecnológica y, por tanto, de una necesidad de entrenamiento para manejar dichos artefactos de forma efectiva. Es cierto que también hemos mencionado la mayor presión que ahora tienen las empresas de volcarse a servir a sus clientes y mercados en busca de formas productivas para no ser sustituidas por su competencia, ya sea nacional o internacional. Quedan por ver cuestiones más fundamentales como creencias, convicciones y actitudes las cuales veremos en la sección que sigue. c) El concepto de comunicación productiva 3 Así como existe modernidad en las prácticas económicas, políticas y laborales hasta ahora descritas, podemos hablar de usos modernos de la información en la empresa. Una creencia muy arraigada, y cierta, acerca de la información que fluye en la empresa, es que ésta es poder. "La información es poder" se ha traducido en más de una ocasión en la frase que justifica el centralizar la toma de decisiones y manejar de forma autoritaria la difusión de la información por parte del/os líder/es. A este primer paso en el uso de la infonnación le llamamos "lineal". Por ser lineal este flujo de información es unidireccional, causal, privilegiado y restringido. Es unidireccional porque quien transmite la información, emisor o fuente, es el protagonista principal del proceso. Es causal porque es el emisor o fuente quien causa un efecto sobre quien recibe dicha información, y no al revés. Es privilegiado porque el emisor o fuente siendo más poderoso que quien recibe dicha información, es el que transmite y es propietario de la misma. También el hecho de tener acceso a la infol1nación redobla dicho poder del que de hecho ya goza en la empresa. Y es restringido el flujo de información porque no todos tienen acceso al mismo tipo y cantidad de información. En un uso lineal de la misma, la fuente o emisor tiene acceso a más y mejor información que los demás. Como se puede observar, el uso lineal de información beneficia mayormente, incluso casi exclusivamente, a la fuente o emisor. Existe un segundo nivel de uso de información llamado dinámico. El uso dinámico de la información se centra, por contra del lineal, en quien recibe la acción de comunicar de la fuente o el emisor: el receptor. Es característico de este modo de usar la información que: el receptor sea considerado, desde el punto de vista humano, tan capaz y dinámico como los posibles emisores; se debe destacar la forma o estilo de procesar la información del receptor; es importante tomar en cuenta la situación en que el receptor recibe la información de su emisor o fuente. En cuanto al estilo de procesar información, los modelos dinámicos que explican la comunicación establecen los aspectos de exposición selectiva a fuentes de información y selectividad en la percepción y almacenamiento (memoria) de la misma (la información) entre de las personas. En cuanto a la situación de recepción de la persona que recibe la infon11ación de una fuente o emisor, los modelos dinámicos explican que algunos elementos que deben tomarse en cuenta son, por ejemplo: los grupos de referencia al que el receptor pertenece; las actividades y conductas "ancladas'; o determinadas por la pertenencia de dicha persona a dichos grupos (un receptor puede ser al mismo tiempo padre, hijo, maestro, consultor, articulista, autor, colega, etc., y cada uno de estos papeles o "roles" y funciones sociales, a su vez, derivan en una interpretación y uso diferente de la información). Sin embargo, el punto central del uso dinámico de la información es la capacidad del receptor de retroalimentar a su fuente. Este es quizá el mayor descubrimiento de los modos dinámicos de usar infol1nación: el receptor puede convertirse en emisor. Por implicación, el emisor se convierte en receptor, cuando su receptor lo retroalimenta. 4 Hasta aquí lo que sabíamos del proceso de comunicación hasta antes de que el mundo se volviera global. Sin embargo, la apertura que significa lo global también demanda que sigamos explorando las posibilidades de seguir/avanzando en el tema del uso de la información. ¿Cuál, entonces, es la concepción de comunicación que corresponde a la apertura económica, a la apertura política, a la nueva cultura de trabajo y tecnológica que estamos experimentando? Según este autor la respuesta es la comunicación productiva. ¿Qué es exactamente la comunicación productiva? En cierto sentido, la comunicación productiva es la continua concientización del receptor y sus características desde el papel del emisor o fuente: En el uso lineal de la información existe el emisor sin una conciencia y consideración especial por el receptor. En el nivel dinámico, no sólo existe una presencia más real y evidente del receptor sino que éste es un elemento que le da sentido y establece la calidad de transmisión del propio emisor. El propietario del proceso, por así decido, ya es el receptor. En el nivel productivo vamos un paso más allá. La comunicación es efectiva no por el poder del emisor ni por la retroalimentación del receptor. El uso de información en este tercer modo o nivel depende del sistema donde surge. La relación o función que desempeña el emisor con respecto al receptor y la relación o función que desempeña el receptor con respecto al emisor definen un sistema y ambas partes (emisor, receptor) son responsables de ese sistema. El buen desempeño de emisores y receptores se define por el buen desempeño del sistema, y viceversa. El buen desempeño del sistema implica que tanto emisores como receptores están cumpliendo su papel para el buen funcionamiento del mismo. En este tercer nivel un concepto clave es la "receptividad" del emisor al receptor, del receptor al emisor, y de ambos a las necesidades del sistema para todos ser productivos (de ahí el nombre de este nivel de comunicación). La productividad se refiere al hecho de que todas las (tres) partes puedan cumplir con sus objetivos, necesidades y expectativas y así contribuir al avance equilibrado tanto del sistema como de las partes (emisores y receptores) que lo integran. Una mentalidad y un modo de usar la información en donde todos ganan: ganar-ganar. Ganan los emisores, Ganan los receptores. Gana el sistema. La comunicación y la teoría de los tres mundos Para exponer de una forma más clara los tres niveles. de uso de la información, echaremos mano de una teoría llamada "De los Tres Mundos" del filósofo inglés de origen austriaco Sir Karl R. Popper (1902-1994). Según Popper existen tres mundos: el físico, o Mundo 1; el de la conciencia personal y las relaciones interpersonales, o Mundo 2, y el mundo de la creatividad, de las creaciones humanas (ciencia, tecnología, arte y cultura), o mundo 3. Cada uno de estos tres mundos tienen leyes o principios que los gobiernan. El Mundo 1 o mundo físico está gobernado por las leyes de la Naturaleza. El Mundo 2 o mundo personal e interpersonal de los seres humanos está gobernado por el principio de la racionalidad y su expresión es en las leyes de las ciencias sociales y de la conducta. El Mundo 3 o Mundo de la creatividad o de las creaciones humanas está gobernado por la ley de las Consecuencias Imprevistas (algunas de ellas, no deseadas). 5 La ley de las Consecuencias Imprevistas nos muestra que a pesar de que los seres humanos somos medios para crear, inventar y descubrir; lo que creamos, inventamos y descubrimos no está dentro de nuestro control sino cumple con su propia autonomía. Popper explica, esta curiosa y peculiar manera de proceder del Mundo 3 o de la Creatividad con algunos ejemplos. Pongamos por caso la educación de nuestros hijos. Popper afirma que aprendemos de ellos mucho más intentando educarlos que lo que ellos pueden aprender de nuestras enseñanzas como padres. El punto es que, en realidad, la educación que brindamos a nuestros hijos es más un aprendizaje compartido con ellos. Un segundo ejemplo es el caso del descubrimiento, para algunos la invención, de los números. Muchas culturas contribuyeron de diversas maneras a desarrollar formas para cuantificar bienes y demás objetos y realidades que para el ser humano eran importantes de cuantificar. Sin embargo, las cualidades de los números (por ejemplo, las características de los números primos) fue algo que se dio sin poderlo anticipar cuando algunas culturas (entre las primeras, los Babilonios según aclara el propio Popper), no sólo enumeraban sino ya manejaban la noción de serie numérica. Del arte, como expresión del mundo de la creatividad o Mundo 3, se pueden obtener casos similares. Los artistas en su necesidad de expresión pintan o esculpen obras cuya interpretación por parte del público suele ser novedosa, sorpresiva o imprevista. Se cuenta que un día Pablo Picasso decidió ir a una exposición de sus propios cuadros, de incógnito, aduciendo que le interesaba ver la respuesta espontánea del público. Cuando llegó al lugar donde se exponía su trabajo, notó que una persona daba evidencia de frustración y enfado al ver uno de los cuadros de Picasso. El artista se acercó y le preguntó, porqué estaba enojado, a lo que el visitante a la exposición replicó: ¡ “Cómo no voy a estar enojado si no entiendo lo que el artista quiso decir con esta pintura" ! a lo que Picasso respondió: "¿Disculpe, a usted le gusta comer ostras?", la persona contestó afirmativamente. Picasso enseguida lo volvió a interrogar: "Y, ¿Usted requiere de comprender a las ostras para disfrutar comiéndolas?". El Mundo 3 o mundo de la Creatividad o de las creaciones humanas tiene su propia lógica o dinámica. En ocasiones, comprendemos o tenemos una idea clara de cómo funciona dicha creación o invención, en la gran mayoría de los casos podemos disfrutar de dicha creatividad sin necesidad de comprenderla (como las pinturas de Picasso y por supuesto, de las ostras). El Mundo 3, pues, es un mundo caracterizado por la apertura, el aprendizaje y las contradicciones. Todo proceso humano que se somete así mismo a la apertura se conectará de inmediato al Mundo 3, al mundo de la creatividad. Cuando hablamos de una economía global hablamos de abrir nuestra economía nacional al sistema internacional de producción y consumo; cuando hablamos de democratizar la vida en nuestro país, hablamos de abrir el sistema -político a la competencia partidista y a la alternancia en el poder; cuando hablamos de apertura en la educación, hablamos (como en un ejemplo anterior en la relación padres e hijos) de abrimos a un mutuo aprendizaje. La comunicación productiva no es otra cosa, pues, que el administrar los flujos de inforn1ación de 6 un sistema formal en la apertura. Como consecuencia de dicha apertura, la comunicación productiva se caracteriza por: 1. Estudiar no sólo la intención de los emisores al transmitir información y los receptores a la recibida, sino las consecuencias para ambos de las acciones comunicativas tanto de unos como de otros, y para el sistema del cual forma parte (padres e hijos y su familia; maestros y alumnos y la institución educativa; líderes y colaboradores y la empresa; etcétera). 2. Al fijar la atención tanto en la acción comunicativa como en sus consecuencias, incluidas las imprevistas y las no deseadas, la comunicación productiva estimula el pensamiento sistémico (yo, mi contraparte y la relación y el sistema que nos une) y el aprendizaje acerca de lo que no esperábamos que ocurriera. 3. Al señalar que existen consecuencias imprevistas, algunas de ellas no deseables ni deseadas por emisores, receptores o el propio sistema, existen también dos posibles implicaciones: responsabilidad y aprendizaje. Podemos aprender aspectos novedosos tanto de la emisión de mensajes como de su recepción, y del propio sistema que se dinamiza con dichos flujos de ida y de regreso de información, cuando nos responsabilizamos por las consecuencias de nuestras acciones comunicativas. 4. La responsabilidad y el aprendizaje, a su vez, nos llevan a intentar distintos cambios, innovaciones y acciones novedosas de comunicación en los sistemas en un intento por mejorarlos. La mejora en comunicación y de los sistemas donde ocurren dichos flujos de información, son consecuencias de la creatividad (conectamos al Mundo 3) en producción, distribución y recepción de mensajes en la experiencia humana y en su aplicación a la vida organizacional que ocurre en los sistemas formales. 5. La comunicación productiva también demanda una actitud de apertura de los emisores con respecto a sus receptores, y viceversa, pues, recordemos que la comunicación en este tercer nivel no sólo son acciones sino la responsabilidad por sus consecuencias y el aprendizaje sobre todo de las consecuencias no previstas y no deseables. Al cambio de actitud que sucede en los emisores al hacerse responsables por el bienestar y efectividad de sus receptores, y al cambio de actitud de los receptores al hacerse responsables por el bienestar y efectividad de sus emisores, así como al cambio de actitud de ambos (emisores y receptores) al hacerse responsables por el bienestar y efectividad del sistema al cual pertenecen le hemos llamado (cuando la mencionamos anteriormente, líneas arriba) "receptividad". Sin madurez de todas las partes involucradas en el proceso, no hay receptividad, y sin receptividad la comunicación productiva no es posible, no sucede. La modernidad en comunicación, pues, implica una profundización en el empleo de la información entre personas y en los sistemas formales de gestión (sector público, privado, filantropías y voluntariados). En el modo lineal, la información tal cual en tanto fluye del emisor al receptor es importante. En el modo dinámico, la retroalimentación generada del receptor a su emisor es lo relevante, y el proceso de comunicación como tal es el personaje central. En el modo productivo, todas las partes del sistema y el sistema como un todo son importantes. 7 La productividad de unos (emisores) no debe estar amenazada ni verse disminuida por aquélla de los otros (los receptores). Sin embargo, también deben buscar maneras de dinamizar la información de forma tal que el propio sistema que define la función del emisor en tanto parte del sistema (por ejemplo, padre de una familia; dueño de una industria; docente de un curso, etc.) puede cumplir con su propósito, al igual que su contraparte, el receptor del mismo sistema (por ejemplo, hija de esa familia; obrero de esa industria; alumna de ese curso, etcétera). Además, el propio sistema como tal (por ejemplo, la familia como un grupo humano; la industria como una organización empresarial; el curso como parte de un plan de estudios que un grupo humano quiere cubrir en una institución académica, etc.) debe cumplir con su cometido. d) De nuevo a la empresa La comunicación productiva podrá mostrarse como modernidad en el uso de la información en la empresa, si muestra ser funcional con la apertura económica que este tipo de organizaciones enfrenta hoy en día. Es decir, si el sistema-empresa y las acciones comunicativas que suceden dentro del mismo (subsistema-comunicación) están conectados al Mundo 3, al mundo de la apertura, el aprendizaje compartido y la responsabilidad por las consecuencias de la creatividad generada en dichos sistemas (empresa y comunicación). Para ello habrá que decir que una empresa emplea comunicación productiva desde el momento en que se interesa y practica la calidad mundial como estrategia y forma de sobrevivir y prosperar en una economía global. Es decir, otra forma de ver el Mundo 3, es conceptualizarlo como conectarse directamente con las fuerzas de la sobrevivencia y adaptación al medio ambiente, conectarse a las fuerzas de la evolución: la economía global es un sistema abierto a la participación de diversas economías nacionales y empresas de diverso origen en multitud de mercados y con pluralidad de talentos, estrategias, productos y servicios. La comunicación productiva como fuerza evolutiva en, y de las empresas, adopta dos formas principalmente: como procesos de mejora continua y como procesos del plan general de comunicación. Todo proceso de mejora continua es una forma de comunicación productiva en la medida en que tanto los emisores (la empresa como proveedora de productos y servicios) como los receptores (los mercados, nichos y clientes directos y consumidores finales, entre otros) buscan vincularse de manera productiva a través de especificar necesidades y producir bienes u ofrecer servicios con base en las especificaciones o requerimientos de los receptores (procesos de calidad); o bien, dichos emisores (la empresa) buscan que sus receptores (los proveedores de la misma) desarrollen habilidades, procesos, productos y servicios que faciliten y desarrollen tanto la productividad de la empresa como a los propios proveedores (procesos de desarrollo de proveedores); o bien, buscar la forma en que con entrenamiento y oportunidades de mutua definición y progresiva disciplina los emisores (los supervisores) logren que sus receptores (sus colaboradores en la empresa) desarrollen tal nivel de desempeño que se eviten repeticiones del trabajo y desperdicio de recursos (procesos de calidad llamados "bien desde la primera vez "); o bien, emisores (empresa) y receptores (clientes) trabajando juntos para optimizar el tiempo de atención de los primeros a los segundos (procesos de reingeniería), etcétera. 8 El plan general de comunicación de una empresa es el esfuerzo consciente y formal de ésta por generar información relevante y útil a sus públicos externos (clientes, consumidores, proveedores, intermediarios o asociados de negocio, bancos, agencias gubernamentales, secretarías de Estado, medios de comunicación social, cámaras industriales o del sedar, asociaciones profesionales, organismos cúpula, la comunidad, la competencia, etc.), públicos especiales (accionistas, sindicatos, jubilados, discapacitados por un accidente de trabajo en la empresa, familia de los empleados, etc.) y los públicos internos (todos sus empleados). El plan general de comunicación de una empresa con sus diferentes públicos, contiene entre otros, los siguientes puntos: (1) Una auditoría de necesidades y expectativas de información de cada público; (2) el desarrollo de acciones y medios de comunicación para brindar la información requerida por dicho público; (3) el desarrollo de acciones y medios de retroalimentación por parte de los públicos a la empresa para que ésta evalúe su efectividad con aquéllos y (4) el desarrollo de acciones y procesos de mejora continua para innovar y crear novedosas formas de vinculación de la empresa con sus públicos, generar con ello beneficios compartidos y justamente repartidos, y procurar cultivar dicha relación "ganar-ganar" permanentemente. e) Reflexión final Toda empresa está inmersa en un ambiente de apertura, complejidad y confusión (consecuencias imprevistas) en diferentes ámbitos: económico, político y laboral, entre otros. En este breve ensayo he intentado mostrar que así como existe una modernidad económica (economías abiertas a la creciente competencia), una modernidad política (sistemas abiertos a la competencia entre partidos por la alternancia en el poder) y laboral (una nueva cultura de trabajo que requiere de nuevas habilidades y actitudes fundamentales), también existe una modernidad comunicacional: el modo productivo de uso de la información. La modernidad comunicacional expuesta aquí podría resumirse de esta forma: estamos pasando de la mentalidad de "información es poder" al enfoque de "compartir inteligentemente la información entre emisores y receptores generará sistemas más justos y poderosos", La clave del éxito de esta transformación está, en parte, en nuestra capacidad de generar como emisores receptividad a los receptores; como receptores ser receptivos a los emisores, y como emisores y receptores que somos en distintos momentos del proceso de comunicación en cualquier sistema, una receptividad al objetivo superior que como totalidad buscan los diferentes sistemas a los que pertenecemos, entre ellos, por supuesto, el sistema empresarial. La apertura de la cual hablamos consiste primordialmente en reconocer la autonomía de nuestras propias creaciones (entre ellas, las empresas que administramos) y al hacerlo estar dispuestos a aprender de ellas, responsabilizarnos por las consecuencias de nuestras acciones en ellas y de las acciones comerciales, de manufactura de bienes, de oferta de servicios, de financiamiento y de comunicación social de nuestras empresas en la sociedad, En este camino de apertura, aprendizaje y responsabilización de las 9 consecuencias de nuestra propia creatividad, podremos capitalizar mucho de nuestros esfuerzos por el bien propio y por el Bien Común en nuestro país y el orbe" Bibliografía Nosnik, Abraham, "Linealidad, dinamismo y productividad: Tres concepciones de la comunicación humana y social ", en Nonotzan, Revista del Centro de Investigación de la Universidad del Tepeyac, vol. V, núm. 2, marzo, 1996. Nosnik, Abraham, "Notas del Coloquio en la Universidad Anáhuac con la Facultad de la Escuela de Comunicación", Huixquilucan, Edo. de México, 16 de mayo, 1997. Popper, Karl R, "Epistemología sin sujeto congnoscente" y "Sobre la Teoría de la Mente Objetiva ", en Conocimiento Objetivo, Madrid, Tecnos (Colección Estructura y Función), 2a. edición, 1982. Popper, Karl R., Knowledge and The Mind-Body Problem, In defence 01 interaction, London: Routledge, trabajo editado por M. A. Nottumo (edición póstuma de 1996). (Existe ya traducción al castellano publicada por Paidós, 1994.) 10